El siguiente capítulo será el aumento de tensión con China que buscará forzar el distanciamiento de Europa y otros países respecto a China. Esta etapa ya se inició con la disputa del mar de China, el apoyo a Taiwán y recientemente con la decisión de instalar misiles de largo alcance en Japón
Por Sixto Jiménez Economista y empresario, ex directivo multinacional, autor de Cuestión de Confianza.
El gran pulso político mundial desde hace unos años, y para muchos más, es la rivalidad entre los Estados Unidos y China por liderar el mundo.
La guerra comercial, tecnológica y política entre ambos está en marcha y se acrecentará en los próximos años con riesgo de degenerar en conflicto armado.
El pulso con Rusia es un mero capítulo inicial de esta guerra multifacética contra China y está destinado a romper las relaciones Europa-Rusia dejando a Europa del lado americano en la creciente confrontación de bloques. Y a Rusia debilitada en la esfera de influencia de China.
La tensión entre Estados Unidos y Rusia por la expansión de la OTAN ha ignorado en todo momento a Europa y sus intereses. Estados Unidos atacó el proyecto de gasoducto en el Báltico desde el primer momento contra el interés estratégico de Alemania y Europa Central
Cuando la invasión de Ucrania haya terminado, sea cual fuere el resultado militar, Europa aumentará notablemente su gasto en armamento, lo que disminuirá su nivel de vida real, y habrá perdido competitividad al adquirir gas y petróleo más caros. Entretanto Estados Unidos hará un magnífico negocio como gran exportador que es de ambos productos y de armamento.
Los gastos de la OTAN en el conflicto han sido decididos por Estados Unidos y serán pagados en su mayor parte por Europa. Las sanciones a Rusia habrán tenido un gran coste para Occidente y en su mayor parte lo soportará Europa. Rusia quedará muy dañada económicamente y su falta de capacidad de compra la pagará Europa en mucha mayor medida que Estados Unidos al perder mercados. La banca europea tiene concedidas grandes sumas en crédito a Rusia que no serán recuperadas.
Los Estados Unidos nos venderán más armas, gas licuado y hasta productos agrícolas.
El siguiente capítulo será el aumento de tensión con China que buscará forzar el distanciamiento de Europa y otros países respecto a China. Esta etapa ya se inició con la disputa del mar de China, el apoyo a Taiwán y recientemente con la decisión de instalar misiles de largo alcance en Japón. El tren de la ruta de la seda será el próximo objetivo a eliminar y para ello habrá sido un logro esencial la ruptura entre Rusia y Europa.
Asia es y será cada vez en mayor medida el centro económico del mundo y en buena medida el líder tecnológico, por lo que es indispensable optimizar las relaciones con ellos.
Lástima Europa, con valores pero sin valor; con potencial pero sin unión ni liderazgo; y con gran nivel económico actual pero condenada al envejecimiento, al declive y a ser mera comparsa de Estados Unidos en el liderazgo mundial.
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/03/EUROPA-VENCIDA.jpg12442000Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-03-07 12:51:172022-03-07 12:51:1812.) Europa vencida
Todavía existe la posibilidad de llegar a un acuerdo diplomático que traiga consigo el fin de esta terrible guerra y la retirada militar rusa, y, al mismo tiempo, salvaguarde los intereses vitales de Ucrania. De hecho, si los rusos se retiran algún día, un acuerdo diplomático sobre los términos de la retirada será necesario.
La primera ronda de conversaciones entre Ucrania y Rusia ha tenido lugar en Bielorrusia. Un miembro de la delegación ucraniana ha declarado que “las partes identificaron una serie de temas prioritarios para los que se esbozaron ciertas soluciones”.
Occidente debería respaldar el acuerdo de paz y la retirada rusa ofreciendo a Rusia el levantamiento de todas las recientes sanciones que se le han impuesto. La oferta a Ucrania debería consistir en un paquete de reconstrucción de amplio alcance que, a su vez, ayude al país a acercarse a Occidente económica y políticamente, más que militarmente, tal y como Finlandia y Austria pudieron hacer durante la Guerra Fría a pesar de su neutralidad.
Las exigencias de la parte rusa son que Ucrania firme un tratado de neutralidad, que se comprometa a la “desmilitarización” y la «desnazificación”, y que reconozca la soberanía rusa sobre Crimea, de la que Rusia volvió a apoderarse tras la revolución ucraniana. Estas exigencias son una mezcla de lo aceptable, lo inaceptable y lo indefinido.
La opción de la neutralidad ucraniana a menudo ha sido llamada “finlandización”, y quizá la decidida y unificada respuesta de Ucrania a la agresión rusa durante la semana pasada haya otorgado un nuevo significado a ese término. Porque al igual que los finlandeses en la “Guerra de Invierno» de 1939-40, los ucranianos también han sido abandonados militarmente por Occidente, que ha declarado pública y repetidamente que no tiene intención de luchar para defenderlos.
Por otra parte, parece ser que el extraordinario valor y la resolución con que lucharon los finlandeses convencieron a Stalin de que gobernar Finlandia sería un reto demasiado grande. Finlandia se convirtió en la única parte del antiguo Imperio Ruso en no incorporarse a la URSS, y durante la Guerra Fría, aunque neutral por tratado, fue capaz de desarrollarse como una exitosa democracia social de mercado. De igual modo, debemos esperar que el coraje y la determinación de los ucranianos hayan convencido a Putin de que será imposible dirigir Ucrania como un Estado cliente ruso y de que la neutralidad es el mejor trato que va a conseguir.
El presidente Volodímir Zelenski ha hecho lo correcto al insinuar públicamente que podría ofrecerse un tratado de neutralidad, porque esta guerra ha dejado dos cosas absolutamente en claro: que Rusia luchará para evitar que Ucrania se convierta en un aliado militar de Occidente y que Occidente no luchará para defender a Ucrania. En vista de ello, mantener abierta la posibilidad de una oferta de adhesión a la OTAN que ésta no tiene intención de realizar jamás y pedir a los ucranianos que mueran por esta ficción es algo peor que hipócrita.
En cuanto a la “desmilitarización” y la “desnazificación”, su significado y sus términos deberán ser negociados. La desmilitarización es, obviamente, inaceptable si significa que Ucrania debe disolver unilateralmente sus fuerzas armadas. Sin embargo, la última declaración del ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, sugiere que Rusia aceptaría una prohibición de los misiles con base en Ucrania. Esto podría tomar como modelo una garantía similar: la ofrecida por Estados Unidos, que puso fin a la crisis de los misiles de Cuba.
En cuanto a la “desnazificación”, presuntamente esto significa que Ucrania debería prohibir los partidos y milicias nacionalistas de extrema derecha a instancias de Rusia. Se trata de una injerencia totalmente inaceptable en los asuntos internos de Ucrania, pero tal vez Ucrania pueda hacer una contraoferta que satisfaga las preocupaciones de Moscú sobre los derechos y el futuro de la minoría rusa en Ucrania, garantizándolos en el marco de la Constitución ucraniana ―algo que, por cierto, Occidente debería apoyar de todos modos, de acuerdo con sus propios principios―.
Queda la demanda de reconocimiento de la anexión rusa de Crimea. Aquí, el respeto al derecho internacional (ligeramente ambiguo en el caso de Crimea, que solo fue transferida de Rusia a Ucrania por decreto soviético en 1954) deberá ser atemperado por un análisis deliberado de la realidad, la prevención de futuros conflictos y los intereses de la gente común en la región, que es esencialmente lo que hemos estado pidiendo a Rusia en el caso de Kosovo.
Ucrania ya ha perdido Crimea y no puede recuperarla, así como Serbia no puede recuperar Kosovo, sin una guerra sangrienta e interminable que en este caso Ucrania perdería con casi total seguridad. Nuestro principio en todas estas disputas debe ser que el destino de los territorios en cuestión sea decidido por referendos democráticos locales bajo supervisión internacional. Esto debería aplicarse también a las repúblicas separatistas del Donbás.
Estas propuestas serán denunciadas como una “recompensa a la agresión rusa”, pero si el objetivo original de Putin era subyugar a toda Ucrania, con un acuerdo así Moscú quedaría muy lejos de sus objetivos máximos. Además, tal acuerdo no daría a Rusia nada que no haya conseguido ya en la práctica antes del lanzamiento de la invasión.
Occidente está en lo moralmente correcto al oponerse a la monstruosa e ilegal guerra rusa y al haber impuesto sanciones excepcionalmente severas a Rusia como respuesta, pero se equivocaría moralmente al oponerse a un acuerdo razonable que ponga fin a la invasión y evite al pueblo de Ucrania un sufrimiento terrible. El propio historial de Estados Unidos a lo largo de esta era no ofrece base alguna para un hiperlegalismo tan mojigato.
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/03/reunion-de-rusos-y-ucranianos.jpg495880Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-03-07 12:36:242022-03-07 12:36:2511.) The Guardian justificando un acuerdo de Paz!!?? Es hora de preguntar: ¿cómo sería un acuerdo de paz entre Ucrania y Rusia?
El director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, nos presenta esta semana en el Club de La Pluma, una columna de repudio absoluto a toda la infraestructura mediática de Occidente puesta en marcha con el conflicto en Europa del este, mientras denuncia una coordinación y una coincidencia absoluta entre los partidos neoconservadores y liberales europeos con los progresistas de izquierda, que van a la saga de las decisiones de EEUU, utilizando a Europa para desestabilizar a Rusia.
Y nos manifiesta su rechazo a los grandes medios de comunicación masivos de Occidente, que se han transformado en un gigantesco aparato publicitario y propagandístico -que NO informativo- y en un arma de disciplinar a las poblaciones y de encolumnar a una mal llamada “opinión pública”, a través de toda una serie de falsedades, mentiras, montajes, imágenes amañadas, etc. Llegando a sancionar y eliminar a científicos, personajes públicos, artistas, deportistas y hasta la estupidez de quitar de los menús a la ensalada rusa. Mientras se niegan -con su influencia- a frenar la guerra, buscando con su manipulación a que siga el conflicto. Un boicot absoluto a las negociaciones mientras no realizan un solo acto convocando a la paz, ni aceptan a ningún intermediario en las negociaciones y SI tratan por todas las maneras, de que esto se demonice, se alargue y que todo vaya a peor.
También nos señala la disciplina, la subordinación y la verticalidad de esa prensa, tanto de derechas como de izquierdas, al sostener la versión única de que es una agresión rusa por fuera del derecho internacional. Cuando justamente ha ocultado durante estos últimos 7 días los bombardeos de Arabia Saudita sobre El Yemen. Una guerra silenciada desde hace 10 años, con 300.000 muertos, muchos por hambre y consentidos por Occidente. Y también que, en la misma semana, no ha publicado nada de los bombardeos israelíes sobre Damasco o los sufridos por Somalia de parte de la aviación de EEUU. Todo ello silenciado por los mismos medios que no cejan en señalar a Moscú como único culpable de las pérdidas de vidas en Ucrania.
Y mientras nuestro director asume que por decir lo que dice, será acusado de “pro ruso y pro chino”, nos recuerda, como tantas veces lo ha señalado en esta columna, que este conflicto no comenzó hace unos días sino hace 8 años, con un golpe de estado en Ucrania y con una agresión nazi fascista, criminal, subversiva y terrorista del gobierno de Kiev sobre las regiones autónomas del Donbás. Y que allí se sigue asesinando a mansalva a la población civil ruso parlante y destruyendo la infraestructura de esa región. Mientras la prensa occidental, o sea, la prensa anglosajona, transmite tales crímenes como si fuesen actos realizados por Rusia.
Entre tanto, Carlos analiza a conciencia todo el escenario mundial con argumentos y datos sólidos, y afirma que esta guerra es apenas parte de otra guerra mucho mayor, originada en la desesperación de EEUU y sus aliados por tratar de frenar el inevitable avance de Rusia y China como potencias emergentes. Lo que ya ha dado paso a un nuevo orden multipolar que resume un cambio histórico y tectónico para la humanidad. Mientras que “El Consenso de Washington de los Noventa” ya ha muerto y que aquel Occidente que era amo y señor de la tierra, es cosa del pasado.
También nuestro director desgrana en profundidad el papel actual de Europa, que ha perdido a una estadista como Merkel y que “se está pegando un tiro en los pies”, ya que sufrirá las consecuencias económicas del conflicto por el incremento de los valores energéticos y por el daño interior que le traerán las sanciones a Rusia. Pero también porque no podrá hacer frente a los grandes y profundos cambios geopolíticos globales.
Eduardo Bonugli (Madrid, 06/03/22)
Ciudadanos de la Republica Popular del Donetsk (RPD) Festejan el reconocimiento de su independencia de Ucrania
Civiles huyen de los ataques de las tropas Ucranianas en las Republicas del Donetsk y Lugansk
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/03/Donetk-Tapa.jpg700992Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-03-06 20:01:032022-03-06 20:01:56Geopolitica: “Una Guerra – Todas Las Guerras” Columna Radial de Pereyra Mele del 6/03/2022
Ante la ausencia de la ONU, Rusia violó la soberanía de Ucrania para impedir la “guerra preventiva” que los neoconservadores planeaban y así poder refundar el orden mundial.
Autorizado por su autor para ser publicado por Dossier Geopolitico POR EDUARDO J. VIOR 05-03-22 – TELAM
Al invadir Ucrania el 24 de marzo pasado, Rusia no sólo mandó tropas a las repúblicas secesionistas de Lugansk y Donetsk cuyas independencias había reconocido tres días antes, sino que atacó a su vecino en todos los frentes. Indudablemente, con este acto el gobierno de Vladimir Putin trasgredió el Derecho Internacional, pero los acontecimientos desde febrero de 2014, la falta de voluntad de negociación por parte de las potencias occidentales, la amenaza de los laboratorios de guerra bacteriológica en suelo ucraniano y el anuncio de Volodymir Zelensky de que desarrollaría armas nucleares no dejaron al presidente ruso otra alternativa. Ucrania es el más reciente campo de prueba de la estrategia mundial de los neoconservadores norteamericanos. Los sectores más radicales de la derecha estadounidense amenazan la existencia misma de Rusia y el sistema internacional vigente es incapaz de mantener la paz. Por ello es que Vladimir Putin se ha atrevido a una jugada tan arriesgada. La suerte está echada y la frontera entre los mundos está trazada. Ahora es imperioso ponerle orden.
Las delegaciones de Ucrania (izq.) y Rusia (der.) se saludan al iniciar su segunda reunión en Brest el 3 de marzo pasado.
En la madrugada del 24 de febrero fuerzas rusas entraron en Ucrania. Al anunciar lo que llamó una “«operación especial”, Vladimir Putin declaró que era la primera respuesta de su país a “quienes aspiran a la dominación mundial” y pretenden extender la OTAN hasta las puertas de Rusia. En esa larga alocución el presidente recordó cómo las sucesivas violaciones del Derecho Internacional por parte de la OTAN desde el bombardeo de Yugoslavia (1999) hasta las invasiones a Irak (2003), Libia y Siria (ambas 2011). Como conclusión de su relato anunció el envío de tropas rusas a Ucrania, para “desmilitarizar, desnazificar, desatomizar y neutralizar” el país. ¿De qué habla el presidente Putin? ¿Contra quién está luchando? ¿Por qué se mantiene sorda y muda la prensa atlantista?
Desde 1981 un pequeño grupo de intelectuales neoconservadores se fue encaramando en la conducción de la política exterior y la estrategia norteamericanas, pasando sin complejos de un partido a otro según quiñen tuviera el gobierno. Este equipo, unido por múltiples lazos (políticos, personales y de negocios), atravesó todos los gobiernos desde Ronald Reagan (1981-89) hasta Barack Obama (2009-17) en posiciones cada vez más altas. A partir del famoso memorando que Paul Wolfowitz (entonces subsecretario de Defensa) elevó en 1992, en el que proponía olvidarse de los acuerdos de 1990-91 y que EE.UU. asumiera en soledad el liderazgo mundial, los neoconservadores impulsaron la expansión de la OTAN hacia el este de Europa, saludaron los autoatentados del 11-9-01 como inicio del “Gran Siglo Americano”, sostuvieron el ataque contra Afganistán y desde 2003 pergeñaron todas las guerras que inició EE.UU.
En 2014 fueron los neoconservadores quienes organizaron el “cambio de régimen” en Ucrania. Victoria Nuland, entonces subsecretaria de Estado para Asuntos Europeos, viajó a Kiev para respaldar a los neonazis de Pravy Sektor (Sector Derecho) y supervisar al comando israelí “Delta”. Fue en aquel momento cuando se interceptó y difundió una conversación telefónica en la que la subsecretaria ordenaba al embajador de Estados Unidos “cagarse en la Unión Europea” (Fuck the EU!).
También en aquella época, Jake Sullivan (entonces Consejero de Seguridad Nacional del entonces vicepresidente Joe Biden) y Antony Blinken–(en la época asesor adjunto de Seguridad Nacional) metieron a Hunter Biden (el hijo mayor de Joe Biden) en el consejo de administración de Burisma Holdings, una de las principales compañías de explotación del gas natural ucraniano. Este hijo de Joe Biden es literalmente un drogadicto que serviría de pantalla para cubrir una monumental estafa a costa del pueblo ucraniano. Hunter Biden designó después a varios amigos (tan drogadictos como él), para utilizarlos como “representantes” de varias empresas y saquear el gas ucraniano. A ellos se refirió recientemente el presidente ruso Vladimir Putin, cuando mencionó la “banda de drogadictos” que gobierna Ucrania.
Jake Sullivan y Antony Blinken también se apoyaron en el mafioso Íhor Kolomoiski, el tercer personaje más rico de Ucrania. Kolomoiski es un empresario y político ucraniano-israelí-chipriota. Según la revista Forbes, hasta 2020 ocupaba el octavo lugar en el ranking de los más ricos del país. Es el fundador de PrivatBank y propietario del FCDnipró. Algunos de sus campos de actividad son las ferroaleaciones, las finanzas, los productos petrolíferos y los medios de comunicación. Controla el canal de televisión 1+1. Ya durante 2014 Kolomosiki se destacó por sus altisonantes declaraciones contra el separatismo de las regiones de mayoría rusohablante. Según varias denuncias, entonces gastó fortunas, para contener el separatismo. Se creé que puso más de 10 millones de dólares en la creación del batallón Dnipró. Financió asimismo los batallones de voluntarios Azov, Donbás, Dnepr 1 y Dnepr 2 y apoyó públicamente al batallón Aidar.
Aun siendo judío, Igor Kolomoiski financia a Pravy Sektor (Sector Derecho), una organización neonazi que participó en los hechos de violencia en la Plaza Maidan durante el golpe de 2014. En tanto adherente al “sionismo revisionista” que lideraba Benyamin Netanyahu, Kolomoiski utilizó su influencia para asumir el control de la comunidad judía europea, hasta que la mayoría de las comunidades lo expulsó. De todos modos, el magnate logró que el cabecilla de Pravy Sektor, Dimitro Yarosh, fuera nombrado secretario adjunto del Consejo Nacional de Seguridad y de Defensa del nuevo régimen y él mismo se hizo nombrar gobernador del oblast (provincia) de Dniepropetrovsk. Ambos duraron poco en sus cargos, pero mantuvieron su poder.
Rusia no reconoció a las repúblicas de Donetsk y Lugansk, que ya en 2014 proclamaron su independencia, para mantener abierta la vía diplomática. Insistió repetidamente en que Ucrania cumpliera el acuerdo de Minsk de 2015 retirando a sus tropas de la línea demarcación, cesando el hostigamiento permanente contra la población civil del Donbas (entre marzo de 2014 y el 24 de febrero pasado murieron allí más de 14.000 civiles), disolviendo los batallones neonazis e intercambiando los prisioneros, pero nunca tuvo éxito.
Durante el gobierno de Donald Trump (2017-21) se mantuvo el statu quo, pero no se agravó. Por el contrario, desde febrero de 2021 una misión militar británica comenzó a entrenar al ejército ucraniano y a los milicianos neonazis en el este del país. Desde que Joe Biden es presidente los neconservadores controlan todas las palancas del sistema. “Jake” Sullivan es consejero de Seguridad Nacional y Antony Blinken, secretario de Estado, con Victoria Nuland como subsecretaria de Asuntos Políticos. Ésta última viajó a Moscú en octubre de 2021, donde amenazó con aplastar la economía de Rusia, si ese país no se somete. Fue tamaño despropósito (anti)diplomático el que desató la actual crisis.
En 2019 Volodimir Zelenski, hijo de judíos asquenazis y comediante de televisión, fue electo en segunda vuelta presidente de Ucrania con el 70% de los votos. Este joven cómico tuvo en 2015 en el canal 1+1 (de propiedad de Kolomoiski) una exitosa serie titulada “El siervo del pueblo”, en la que su protagonista, un simple hombre venido desde afuera de la política, asesina a todos los miembros de la Rada Supema (parlamento), para vengar su desprecio y arrogancia. Esa serie le valió una gran popularidad que permitió a su protector postularlo como candidato en la elección de 2019, que ganó con el 70% de los votos. Pero Zelenski, en realidad, sólo pudo convertirse en presidente gracias al financiamiento de George Soros. Desde principios de 1990 la tristemente célebre fundación Open Society, creada originalmente en Ucrania por el multimillonario húngaro de origen judío con el objetivo de ayudar en la “transición a la democracia y a la economía de mercado”, se convirtió en una especie de gobierno paralelo que financia una serie de proyectos en diferentes áreas. Soros y Kolomoisky son amigos estrechos.
El 2 de noviembre de 2021 Victoria Nuland trajo de regreso a Dimitro Yarosh y lo impuso al presidente ucraniano como consejero especial del jefe de las fuerzas armadas. El líder derechista aporta desde entonces todo su respaldo al “Fuhrer blanco”, el ahora coronel Andrei Biletsky, y al batallón Azov, la tropa de Biletsky. El batallón Azov es una copia de la división SS Das Reich y desde el verano de 2021 está bajo las órdenes de mercenarios estadounidenses de la antigua Blackwater.
Es bien conocido que Íhor Kolomoiski financia a los neonazis ucranianos y que todos son apoyados por los neocons norteamericanos. Sin embargo, estos lazos entre distintas facciones de la oligarquía ucraniana y la extrema derecha encaramada en Washington todavía no justifican el temor ruso que llevó a la invasión de Ucrania. Como lo explica un informe de la revista india GreatGameIndia, el gobierno ruso, además de protestar por el desarrollo de la OTAN en la región, acusa a EE.UU. de tener instalaciones de armas biológicas cerca de su frontera. Según un usuario de Twitter llamado @WarClandenstine, es posible que Rusia tenga como objetivo los Biolabs:
De acuerdo al tuit de @FestusmcGilicu1: ubicación de los ocho laboratorios norteamericano productores de armas bacteriológicas que se encuentran en Ucrania.
En otro tuit del mismo día quien firma como @FestusmcGilicu1, en respuesta al mensaje del presidente Joe Biden condenando la entrada de las tropas rusas en Ucrania, preguntaba “Creo que he descubierto por qué están tan interesados en Ucrania. ¿Qué es exactamente un error? [Que un] laboratorio de armas biológicas se encuentre en cualquier lugar cerca de allí, por no hablar de 8 de ellos.”
Posteo de @WarClandestine en Twitter el pasado 24-3 en el que menciona la sospecha de que Rusia tenga también como objetivo a los laboratorios norteamericanos para la producción de armas bacteriológicas en Ucrania.
Según los documentos oficiales de Washington, el Programa de Reducción de la Amenaza Biológica del Departamento de Defensa de EE.UU. (BTRP) ha estado colaborando con países asociados para «contrarrestar la amenaza de brotes (deliberados, accidentales o naturales) de las enfermedades infecciosas más peligrosas del mundo”. De acuerdo al comunicado oficial, “el objetivo del programa en Ucrania es concentrar y salvaguardar los agentes patógenos y las toxinas de interés para la seguridad, así como ayudar al país a reconocer y notificar los brotes de agentes patógenos dañinos antes de que supongan un riesgo para la estabilidad o la seguridad». Estados Unidos no sólo ayudó a crear los laboratorios, sino que también financia iniciativas de investigación en Ucrania en las que colaboran científicos ucranianos y estadounidenses.
En múltiples ocasiones Rusia ha acusado a Estados Unidos y a Ucrania de producir armas biológicas. Mientras se discutía la incapacidad de la Organización Mundial de la Salud para determinar el origen del virus Covid-19 en 2021, el secretario del Consejo de Seguridad ruso, Nikolai Patrushev, declaró al periódico Kommersant que Moscú sospechaba que Washington estaba desarrollando armas biológicas cerca de sus fronteras.
Dijo que «se presta atención al hecho de que en el mundo cada vez más nuevos laboratorios biológicos bajo el control de los Estados Unidos están creciendo a pasos agigantados. Además, por una extraña coincidencia, principalmente en las fronteras de Rusia y China». Continuó diciendo que no está claro lo que ocurre en esos laboratorios. Y añadió «por cierto, hay que prestar atención al hecho de que en los alrededores de los mismos se registran brotes de enfermedades que no son típicas de estas regiones». Cuando se le preguntó si quería decir que en esos Biolabs los estadounidenses estaban trabajando en armas biológicas, respondió: «Tenemos buenas razones para creer que es así».
Hasta hace poco, la existencia y los detalles de estos laboratorios de armas biológicas eran de dominio público. La embajada de EE.UU. había revelado previamente la ubicación y los detalles de estos laboratorios en una serie de archivos PDF en línea. Sin embargo, el 26 de febrero de 2022 el sitio web oficial de la embajada cerró los enlaces. Todos los documentos asociados a estos laboratorios han sido retirados de Internet. Afortunadamente, estos archivos han sido guardados y todavía se puede acceder a ellos. ¿Qué trata de ocultar la embajada estadounidense?
A esta altura del conflicto puede concluirse que Rusia tiene la iniciativa en el campo militar y ya alcanzó uno de sus objetivos: desmilitarizar Ucrania. Sin embargo, Rusia insiste en no dar batalla en las ciudades y confía en rendiciones pactadas. Una confianza que se demostró dañina en Járkov.
Las sanciones económicas occidentales, aparte de ser parciales y de estar acompañadas por un discurso hipócrita (no fueron retirados del sistema Swift, por ejemplo, los bancos mediante los cuales los europeos pagan el gas ruso), a mediano plazo van a volver como un búmerang, ya que la combinación del sistema chino de intercambios bancarios con el ruso de mensajería financiera va a multiplicar el número de operaciones que se realicen fuera del área dólar y va a atraer a cada vez más países. Hasta ahora el vencedor neto de la guerra es EE.UU., quien obligó a Alemania a renunciar al gasoducto Nord Stream 2 y a depender de las importaciones del mucho más caro GNL norteamericano. Esta dependencia va a incidir negativamente en la transición energética en la que la RFA estaba hasta hace poco a la vanguardia. Efectivamente, durante el tiempo que demande el pasaje de las energías fósiles a las renovables se triplicará el consumo de gas. Al tener que pagarlo dos o tres veces más caro, Alemania –y con ella toda Europa- perderá la ventaja que le daba su desarrollo tecnológico. Por otra parte, la economía europea quedará en gran parte desacoplada de la euroasiática.
Washington está ganando también la batalla mediática. Con brutal eficacia impuso en las redes sociales una censura nunca antes vista contra medios rusos o simpatizantes de Rusia, persigue con tono maccartista a periodistas y corresponsales e impone un discurso único denigratorio de los líderes de ese país. Moscú va a necesitar varios años para recuperar la confianza perdida entre el público occidental.
El gobierno ruso no es responsable por la guerra actual: Durante ocho años realizó todos los intentos posibles por entablar negociaciones, no tanto sobre Ucrania como sobre la situación general de inseguridad que la acción conjunta de oligarcas, mafiosos y neonazis implica y, más ampliamente, sobre una vuelta al status quo europeo anterior a 1997, cuando comenzó la expansión de la OTAN hacia el este. Amenazando con incorporar Ucrania a la alianza, impulsando una cadena de laboratorios que, probablemente, produzcan armas biotecnológicas, alentando el delirio de V. Zelensky de querer fabricar armas atómicas, acumulando tropas en la línea de demarcación y hostigando a la población civil del este para que emigre a Rusia, Occidente consiguió lo que quería: que Rusia inicie una guerra contra Ucrania y quede internacionalmente como agresora.
Durante estos ocho años todos los mecanismos del sistema internacional han ido fallando: la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) fue cooptada por EE.UU. e incumplió su misión de vigilancia del cese del fuego en la línea de demarcación en el este de Ucrania. La Organización Internacional para la Proscripción de las Armas Químicas y Bioquímicas (AIPAC) omitió controlar los laboratorios financiados por EE.UU. en Ucrania. La AIEA rechazó investigar las denuncias rusas sobre la utilización de material atómico ucraniano para fines no pacíficos. Y, finalmente, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) brilló por su ausencia durante toda la crisis.
Desde el punto de vista político y estratégico la invasión rusa está justificada, pero se trató de una intervención militar en un país soberano, así que Rusia violó el Derecho Internacional vigente. Si todos los argumentos de la realidad dicen una cosa y el orden jurídico dice lo contrario, obviamente, el que falla es el último de los nombrados. El orden mundial multipolar y pluralista en construcción requiere un sistema internacional de regulación de conflictos muy diferente al imperante.
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/03/PAZ.jpg12801920Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-03-06 12:24:232022-03-06 12:27:52CHOQUE ENTRE USA Y CHINA EN EUROPA ORIENTAL 9: Sólo la derrota del unilateralismo puede salvar la paz
Con motivo del incremento del Conflicto que se desarrolla en la Europa del Este y con la involucración directa de Rusia en la Guerra Civil de Ucrania el Director de Dossier Geopolitico carlos Pereyra Mele e Integrantes del Equipo de Dossier geopolitico han sido requeridos por numerosos medios orales televisivos y escritos sobre el mismo aqui una breve síntesis de algunas de esas intervenciones:
1 Como cada viernes en este tramo de » Ayer y Hoy» por 650 Belgrano nuestro compañero el licenciado Carlos Alberto Pereyra Mele nos trae las ùltimas novedades en materia de polìtica internacional desde su habitual columna semanal para nuestro programa. En el dìa de hoy se refiere al los verdaderos motivos del conflicto bèlico entre Rusia y Ucrania que tiene en vilo al mundo.
3 agencia de Noticias FARGO -Foro Argentino de Radios Comunitarias
El analista internacional y especialista en geopolítica, Carlos Pereyra Mele, afirmó que Rusia lleva adelante una operación militar “quirúrgica” contra objetivos militares en Ucrania con el fin de “desmantelar la capacidad bélica” en ese país, al referirse a los acontecimientos de este jueves a la madrugada.
“Se ha destruido parte de la fuerza aérea, los equipos electrónicos, las bases militares, etcétera, para dejar inerme a ese Estado”, manifestó el especialista en geopolítica, en comunicación con el Informativo FARCO, y explicó que Vladimir Putin decidió avanzar de esta manera porque fueron desoídos los reclamos de la Federación Rusa ante los países que integran la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte).
“Lo que ha acontecido en Ucrania era crónica de una muerte anunciada porque recuerden que desde hace ya bastante tiempo Rusia puso bien en claro cuál eran las líneas rojas que no se podía cruzar”, agregó.
Cuando la Unión Soviética se disolvió en 1991, la OTAN instaló bases en Polonia, Lituania, Letonia, Estonia, Rumania, Bulgaria, entre otros países. Desde hace un tiempo, sostuvo Mele, Ucrania pretende incorporarse a la organización internacional y eso, para Rusia, “es el acabose”, es decir la gota que rebalsó el vaso. “No estamos hablando de países iguales, estamos hablando de super potencias que ven afectada su seguridad nacional in extremis y actúan in extremis”
Mientra todo el aparato mediatico cultural manejado por el Mundo Anglosajon se puso en marcha para demonizar a Rusia en la misma Semana se realizaban varios ataques en zonas en Guerra por parte de esos mismos paises o sus «aliados»
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/02/PM-RADIO2.png360640Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-03-02 23:55:542022-03-02 23:55:55Pereyra Mele Entrevistado por distinas radios de Argentina sobre el Choque entre Atlantistas y Continentalistas
Por enésima vez, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, debió repetir una verdad. En esta ocasión frente al canciller de Alemania, Olaf Scholz, sobre el falso relato de la OTAN sobre sus intenciones respecto a Rusia. También el canciller ruso, Serguéi Lavrov, tuvo que dejar en evidencia a la Organización para la Seguridad en Europa [OSCE].
AUDIO DE LA ENTREVISTA:
¿Hasta cuándo?
Scholz preparo su visita a Moscú con declaraciones beligerantes: «Urgentemente esperamos señales de una desescalada de tensiones por parte de Moscú. Una mayor agresión bélica tendrá graves consecuencias para Rusia», dijo a modo de ir marcando un terreno que nunca había pisado.Entonces, Putin disparó verdades como puños en la rueda de prensa junto al líder alemán: ante los avisos del alemán sobre el inminente inicio de una guerra por parte de Rusia, al indicar que es una situación que Europa no vive desde la Segunda Guerra Mundial, Putin le recordó que la OTAN ya desencadenó una en las últimas décadas: el bombardeo a Yugoslavia. «Pero nosotros no queremos empezar una guerra», le dijo a la cara.Añadió que Rusia no puede hacer la vista gorda ante la libre interpretación del principio de indivisibilidad de la seguridad por parte de EEUU y la OTAN, que estipula que la libertad de elegir alianzas queda limitada por la necesidad de evitar que algunos países fomenten su seguridad a costa de la seguridad de los demás: «EEUU y la Alianza Atlántica interpretan con bastante libertad y a su favor los principios clave de la seguridad igual e indivisible, consagrados en muchos documentos comunes europeos».Todo el montaje, a niveles gubernamentales y mediáticos de Occidente sobre la famosa ‘invasión rusa a Ucrania’, es una operación económica a dos bandas, de acuerdo al director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele.»La primera es seguir aumentando la venta de armamentos, que es una de las pocas bazas económicas importantes que tienen EEUU y Gran Bretaña, en su economía alicaída y ya no tan eficiente como hace unos años. Y la segunda, es impedir que la energía, [es decir] el gas y el petróleo rusos lleguen a Europa, para ser ellos los proveedores», explica Pereyra Mele.
El toque de atención de Lavrov
Mientras, este mismo martes, a la par que Putin se reunía con Scholz, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, hacía lo propio con el actual presidente de la OSCE y canciller polaco, Zbigniew Rau. Y el contexto no podía ser más inquietante. Y es que en las últimas semanas, varios países, incluidos EEUU y Reino Unido, retiraron a sus observadores de la misión de la OSCE en Ucrania.Al finalizar las negociaciones, dijo Rau al respecto: «Constaté con toda seguridad que esta situación [la retirada de observadores de algunos países de la misión de la OSCE en Donbás] no afectará de ninguna manera el cumplimiento del mandato de la misión».Entonces, Lavrov tuvo que hacerle un ayuda-memoria y lanzarle una advertencia: «Realmente no me gustaría que se repitiese la desgraciada experiencia de la OSCE en 1999, cuando el jefe de la misión de la OSCE en la región serbia de Kosovo, el señor [William] Walker, ciudadano estadounidense, exageró el tema del falso asesinato de pacíficos ciudadanos en el pueblo de Racak».El canciller ruso explicó que tras la masacre, se demostró que los «pacíficos ciudadanos en realidad eran militantes armados que murieron en combate. […] Pero el señor Walker luego declaró públicamente que fue un acto genocida, anunció por sí solo que retiraría la misión de la OSCE de Kosovo y, de hecho, esto se utilizó como desencadenante de la agresión de la OTAN contra la ex Yugoslavia». A propósito, Putin tuvo que recordarle a Scholz, que Ucrania está llevando a cabo un genocidio en las regiones de Donetsk y Lugansk.»Todos saben perfectamente, porque la historia así lo ha demostrado, que la primera víctima en todo conflicto bélico, es la verdad. Y a lo que ha hecho referencia el canciller Lavrov es a todo este relato que se ha ido instalando, y que luego, pasan los años y se ven las consecuencias y que el relato era una gran falsedad, y en la práctica se llega a la conclusión de que, debido a ello, numerosos países han desaparecido, ha habido gigantescas masacres, crímenes de lesa humanidad», advierte el analista.
«Se sigue ‘batiendo el parche’ de ese relato falso en el que se intenta hacer pasar lo malo como bueno, y a las víctimas como victimarios», concluye Carlos Pereyra Mele.
(*) Javier Benítez Periodista internacional. Tras una vasta carrera en medios uruguayos, en 2006 se instala en Barcelona, donde tuvo un pasaje por Ràdio 4 (RNE) y otros medios, a la par de ejercer corresponsalías para Latinoamérica. En 2013 se traslada a Moscú y se incorpora a RT en Español, y en 2015 desembarca en Radio Sputnik. En 2016 fue galardonado en Madrid por la Organización de Periodistas Iberoamericanos como «Personalidad del año» en Radiodifusión.
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2022/02/Sputnik-Tapa-de-hoy.jpg11662072Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2022-02-17 18:22:562022-02-17 18:39:56Pereyra Mele entrevistado por Sputnik
16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo.
Eje Central:
Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios) conflicto que conduce a un mundo Bipolar nuevamente
AUDIO
La columna del Club de la Pluma, que presenta el director de Dossier Geopolítico Carlos Pereyra Mele comienza esta semana con Colombia donde continúa el sangriento caos del gobierno tiránico de Uribe / Duque y con el supuesto ataque al helicóptero presidencial, mientras que Brasil entra en un callejón sin salida por el posible juicio político a Bolsonaro ante el escándalo de corrupción en la compra de vacunas, y de Perú donde sigue creciendo la tensión por el intento de trabar la asunción de Pedro Castillo, cuando ya hasta el propio EEUU ha reconocido su triunfo legítimo.
Luego aborda la división interna en Norteamérica con el resurgir del “trumpismo” lanzando una nueva aplicación para zafar la proscripción que sufre en las redes sociales, llamando a la insubordinación ciudadana y con sus gobernadores empeñados en la construcción del muro de México. Y al respecto, Carlos nos alerta de las complicaciones que esto significa para Biden, más las nuevas variedades del Covid que acechan al país y por el irregular paisaje interno que dibujan las estadísticas de las vacunaciones, reflejando el accionar de negacionistas y antivacunas, siempre con argumentos anti científicos, similares a sus pares de Argentina, justo cuando se teme la llegada de una nueva ola mucho más grave.
Y entrando en la geopolítica, nos analiza la “movida militar” anglo norteamericana en la Europa Oriental, con epicentro en la fracturada Ucrania y definida como la “Geopolítica de los 5 Mares” porque involucra al Mar Báltico, Mar Negro, Mar Caspio, Mar Muerto, y Mediterráneo, marcando así la OTAN una zona que pretende ser un cerco militar y naval a Rusia, mientras ésta trata de construir una “Zona de Amortiguación” o cordón sanitario en sus fronteras para evitar contactos directos que desencadenen en un conflicto bélico de nivel mundial.
Y así Pereyra Mele nos ofrece otra cátedra que une política con geografía y con estrategia para explicarnos una maniobra de 27 países variopintos, con 5 mil efectivos, 32 buques, 40 aviones y helicópteros, incluyendo países lejanos y distantes como Israel, Marruecos, Japón, Australia y Corea. Con Alemania y otros 17 países miembros sin participar. Y nos señala el nombre dado de “BRISAS MARINAS” para este enorme operativo que agrega convulsión a una zona de históricas fricciones y con el objetivo puesto en tensionar militarmente las mismas fronteras rusas.
Además, Pereyra Mele va desentrañando esta alianza occidental hasta desnudar una complicada madeja de grupos de países unidos y enfrentados a la vez, con fuertes objetivos contradictorios y entremezclados por las ambiciones, la historia y los intereses por las riquezas en gas y petróleo de la zona. Así aparecen en el relato Moldavia, Rumania, Georgia, Eslovaquia, República Checa, y el Grupo de Lublin con Polonia, Lituania y Ucrania, cada uno con sus particularidades, también están allí los recientes enemigos bélicos Armenia y Azerbaiyán y, cómo no, Turquía con su llave del Bósforo que puede cerrar -o abrir- la salida de la Flota Rusa al Mediterráneo que necesita a su vez atender sus tropas en Siria y Libia. Un complejo tablero de ajedrez que nos describe el politólogo, con EEUU al mando de un mosaico heterogéneo y heterodoxo; y en frente a una Rusia que se concentra en asegurar sus fronteras cargando a sus espaldas con el viejo resquemor de de estos países hacia la antigua URSS.
Y mientras nos recuerda la reciente invasión a las aguas territoriales rusas por parte de un buque británico para boicotear la cumbre Pútin / UE, Carlos nos cuenta el último incidente de aviones rusos atacando a barcos estadounidenses, y termina reflexionando sobre el ambiente caldeado en la zona, “y no ya por el verano -relata- sino por la obsesión estadounidense de tener a Rusia a tiro de escopeta”.
Eduardo Bonugli (Madrid 04/07/21)
Mar Baltico, Mar Negro y Mar Mediterraneo
La Energia en la Region y el Paso de los Dardanelos
Conflicto en el caucaso entre el Mar Negro y el Mar Caspio
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2021/07/Europa-Oriental.jpg442612Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2021-07-04 21:27:152021-07-04 21:27:17Columna radial Semanal de Análisis Geopolitica por Carlos Pereyra Mele 4/7/2021
Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el Periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo.
TEMAS:
Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios) conflicto que conduce a un mundo Bipolar nuevamente
APolítica Internacional de la semana:
1 Se avecina una hambruna en 25 Países advierte la ONU; 2 Comienza a regir el Tratado T MEC; 3 EEUU siguen los conflictos sociales y raciales, en Portland, Chicago, Alburquerque y Seattle, Aumenta nuevamente la desocupación, El Gobierno exige el cierre del Consulado de la RPC en Houston, China reacciona cerrando un Consulado de USA en el Tibet; 4 25 años de la masacre Serbia/Bosnia en Srebrenica de 8000 Bosnios musulmanes; 5 Brasil presenta nuevo Libro Blanco de la Defensa incluyendo al posibilidad de una crisi en suramerica y prueba el Gobierno de San Pablo una vacuna experimental China en su población; 6 Proscripción política en Ecuador del Partido del ex presidente Correa y en Boliva del partido MAS del ex presidente Evo Morales.
BAnálisis Geopolitico hoy: La OTAN intenta cercar a la Federación Rusa
La OTAN avanza hacia el Este Europeo y en el Cáucaso, incorpora como Miembro 30 a Macedonia del Norte; a Georgia que mantiene el conflicto con las Repúblicas de Osetia del Sur y Abjasia; incorpora a Ucrania como Socio de Oportunidad mejorada de la OTAN, que tiene dos Repúblicas separatistas las de Donetsk y Lugansk prorrusas y en los Balcanes avanza sobre las ex Repúblicas Socialistas de Montenegro con lo que rompe el “corredor San Petersburgo con el Puerto de Bar en el Mar Adriático, también organiza el expediente de guerra santa incentivando la rupturas de las Iglesias Ortodoxas con el patriarcado de Moscú y para conflictuar mas el panorama de la explosiva zona balcánica Moldavia entra en el Radar Turco queriendo establecer una zona Pan-Turca, pero también alimenta el conflicto con la zona de la Transnistria que es eslava prorusa, como vemos panorama conflictivo y de difícil solución, pero que evidentemente estos cuasis estados serán peones del Gran Juego en marcha y serán seguramente absorbido por poderes espaciales geopolíticos mayores. Como el tándem Ruso chino
AUDIO:
Georgia, Osetia del Sur y Abjasia Zona del Cáucaso
CÁUCASO
Balcanes: Montenegro; Macedonia del Norte
Ucrania y Repúblicas separatistas las de Donetsk y Lugansk
Moldavia y la República separatista de Transnistria
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2020/07/cerco.jpg424512Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2020-07-26 17:12:332020-07-26 17:12:35Análisis Semanal de Geopolitica x Carlos Pereyra Mele Radio el Club de la Pluma 26/7/2020
Con la conducción de Antonio Martinez Vidal y Julio René Sotelo. Un programa de análisis sobre política internacional. Realizaron una entrevista al Director de Dossier Geopolitico: Carlos Pereyra Mele, en el Programa CONTEXTO GLOBAL para la Televisión de CHACO.TV Temática: la Situación del «Sistema Mundo 2019» y como ello repercute sobre nuestro Continente y en especial sobre Venezuela.
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2019/04/contexto-global1.jpg6131100Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2019-04-25 09:49:522019-04-25 09:49:55Pereyra Mele en Contexto Global
4 UE y Gibraltar Europa la Considera «Colonia» y ello beneficia a Argentina por tema de de los archipiélagos de Malvinas
5 Corte de Justicia Internacional de la Haya, declara que el archipiélago de Chagos correspondiente a Mauricio debe ser reintegrado por Inglaterra, que también influye favorablemente a los intereses de argentina con relación al conflicto con Inglaterra por Malvinas
6 La Triple frontera -Argentina, Brasil, Paraguay- vuelve a la palestra por el interés de EEUU e Israel intentando instalar la «idea» de que allí existen grupos Terroristas Internacionales
https://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2019/04/triple-frontier.jpg7201280Dossierhttps://dossiergeopolitico.com/wp-content/uploads/2018/05/Dossier_Logo-2.pngDossier2019-04-09 10:46:022019-04-09 10:46:07COLUMNA RADIAL DE GEOPOLITICA 7/4/2019 X CARLOS PEREYRA MELE