DETRÁS DE LA CORTINA DE ESTAÑO: BRICS VS OTAN/G7

Occidente está atrapado nostálgicamente con políticas de ‘contención’ obsoletas, esta vez contra la integración del Sur Global. Desafortunadamente para ellos, el resto del mundo sigue adelante, juntos. Pepe Escobar 28 de junio

Érase una vez un Telón de Acero que dividía el continente europeo. Acuñado por el ex primer ministro británico Winston Churchill, el término se refería a los esfuerzos de la entonces Unión Soviética por crear una frontera física e ideológica con Occidente. Este último, por su parte, siguió una política de contención frente a la expansión e influencia del comunismo.

Avance rápido a la era contemporánea del techno feudalismo , y ahora existe lo que debería llamarse una cortina de hojalata, fabricada por el occidente colectivo temeroso, despistado, a través del G7 y la OTAN: esta vez, esencialmente para contener la integración del Sur Global. .

BRICS contra el G7

El ejemplo más reciente y significativo de esta integración ha sido la presentación de BRICS+ en la cumbre en línea de la semana pasada organizada por Beijing. Esto fue mucho más allá de establecer los lineamientos de un ‘nuevo G8’, y mucho menos una alternativa al G7.

Solo mire a los interlocutores de los cinco BRICS históricos (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica): encontramos un microcosmos del Sur Global, que abarca el Sudeste Asiático, Asia Central, Asia Occidental, África y América del Sur; “Global” en el Sur Global.

De manera reveladora, los claros mensajes del presidente ruso, Vladimir Putin, durante la cumbre de Beijing, en marcado contraste con la propaganda del G7, en realidad estaban dirigidos a todo el Sur Global:

– Rusia cumplirá con sus obligaciones de suministro de energía y fertilizantes.

– Rusia espera una buena cosecha de cereales – y suministrar hasta 50 millones de toneladas a los mercados mundiales.

– Rusia garantizará el paso de los barcos de granos a aguas internacionales incluso cuando Kiev minó los puertos ucranianos.

– La situación negativa del grano ucraniano se infla artificialmente.

– El fuerte aumento de la inflación en todo el mundo es el resultado de la irresponsabilidad de los países del G7, no de la Operación Z en Ucrania.

– El desequilibrio de las relaciones mundiales se ha estado gestando durante mucho tiempo y se ha convertido en un resultado inevitable de la erosión del derecho internacional.

Un sistema alternativo

Putin también abordó directamente uno de los temas clave que los BRICS han estado discutiendo en profundidad desde la década de 2000: el diseño y la implementación de una moneda de reserva internacional.

«El sistema de mensajería financiera de Rusia está abierto para la conexión con los bancos de los países BRICS».

“El sistema de pago MIR ruso está ampliando su presencia. Estamos explorando la posibilidad de crear una moneda de reserva internacional basada en la canasta de monedas BRICS”, dijo el líder ruso.

Esto es inevitable después de las histéricas sanciones occidentales posteriores a la Operación Z; la desdolarización total impuesta a Moscú; y aumentar el comercio entre las naciones del BRICS. Por ejemplo, para 2030, una cuarta parte de la demanda de petróleo del planeta provendrá de China e India, con Rusia como principal proveedor.

El “RIC” (Rusia,India,China) en BRICS simplemente no puede correr el riesgo de quedar excluido de un sistema financiero dominado por el G7. Incluso la India, que camina sobre la cuerda floja,  está empezando a tomar la corriente.

¿Quién habla por la ‘comunidad internacional’?

En su etapa actual, los BRICS representan el 40 % de la población mundial, el 25 % de la economía mundial, el 18 % del comercio mundial y contribuyen con más del 50 % del crecimiento económico mundial. Todos los indicadores están en alza.

Sergey Storchak, CEO del banco ruso VEG, lo enmarcó de manera bastante diplomática: “Si las voces de los mercados emergentes no se escuchan en los próximos años, debemos pensar muy seriamente en establecer un sistema regional paralelo, o tal vez un sistema global. ”

Ya se está discutiendo activamente un «sistema regional paralelo» entre la Unión Económica de Eurasia (EAEU) y China, coordinado por el Ministro de Integración y Macroeconomía, Sergey Glazyev, quien recientemente escribió un sorprendente manifiesto que amplía sus ideas sobre la soberanía económica mundial.

Desarrollando el ‘mundo en desarrollo’

Lo que suceda en el frente financiero trans euroasiático procederá en paralelo con una estrategia de desarrollo china hasta ahora poco conocida: la Iniciativa de Desarrollo Global (GDI), anunciada por el presidente Xi Jinping en la Asamblea General de la ONU el año pasado.

GDI puede verse como un mecanismo de apoyo de la estrategia general, que sigue siendo la Iniciativa Belt and Road (BRI), que consiste en corredores económicos que interconectan Eurasia hasta su península occidental, Europa.

En el  Diálogo de Alto Nivel sobre Desarrollo Global , parte de la cumbre BRICS, el Sur Global aprendió un poco más sobre GDI, una organización creada en 2015.

En pocas palabras, el GDI tiene como objetivo potenciar la cooperación internacional para el desarrollo complementando el financiamiento de una gran cantidad de organismos, por ejemplo, el Fondo de Cooperación Sur-Sur, la Asociación Internacional de Fomento (AIF), el Fondo Asiático de Desarrollo (ADF) y el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM).

Las prioridades incluyen “reducción de la pobreza, seguridad alimentaria, respuesta y vacunas contra el COVID-19”, industrialización e infraestructura digital. Posteriormente, se estableció un grupo de Amigos de GDI a principios de 2022 y ya ha atraído a más de 50 países.

BRI y GDI deberían avanzar en conjunto, incluso cuando el propio Xi dejó en claro durante la cumbre del BRICS que “algunos países están politizando y marginando la agenda de desarrollo al construir muros y aplicar sanciones paralizantes a otros”.

Por otra parte, el desarrollo sostenible no es exactamente la taza de té del G7, y mucho menos de la OTAN.

Siete contra el mundo

El principal objetivo declarado de la cumbre del G7 en Schloss Elmau en los Alpes bávaros es «proyectar la unidad», como en los incondicionales del oeste colectivo (incluido Japón) unidos en un «apoyo» sostenible e indefinido al estado ucraniano irremediablemente fallido.

Eso es parte de la “lucha contra el imperialismo de Putin”, pero también está “la lucha contra el hambre y la pobreza, la crisis sanitaria y el cambio climático”, como dijo el canciller alemán Scholz al Bundestag.

En Baviera, Scholz presionó por un Plan Marshall para Ucrania: un concepto ridículo considerando que Kiev y sus alrededores bien podrían reducirse a un estado insignificante para fines de 2022. La noción de que el G7 puede funcionar para “prevenir una hambruna catastrófica, ” según Scholz, alcanza un paroxismo de ridiculez, ya que la hambruna que se avecina es una consecuencia directa de la histeria de las sanciones impuestas por el G7.

El hecho de que Berlín invitara a India, Indonesia, Sudáfrica y Senegal como complementos al G7 sirvió como un alivio cómico adicional.

La cortina de estaño está levantada

Sería inútil esperar de la asombrosa colección de mediocridades «unidas» en Baviera, bajo la líder de facto de la Comisión Europea (CE), la Führer Ursula von der Leyen, algún análisis sustancial sobre la ruptura de las cadenas de suministro globales y las razones por las que obligó a Moscú a reducir los flujos de gas a Europa. En cambio, culparon a Putin y Xi.

Bienvenido a la Cortina de Hojalata: una reinvención del siglo XXI del Intermarium desde el Báltico hasta el Mar Negro, ideada por el Imperio de las Mentiras, completa con el oeste de Ucrania absorbido por Polonia, los Tres Enanos Bálticos: Bulgaria, Rumania, Eslovenia, Chequia y incluso Suecia y Finlandia, aspirantes a la OTAN, todos los cuales estarán protegidos de “la amenaza rusa”.

Una UE fuera de control

El papel de la UE, que se enseñorea de Alemania, Francia e Italia dentro del G7, es particularmente instructivo, especialmente ahora que Gran Bretaña ha vuelto al estatus de un estado insular intrascendente.

Cada año se emiten hasta 60 ‘directrices’ europeas. Deben transponerse imperativamente al derecho interno de cada Estado miembro de la UE. En la mayoría de los casos, no hay debate alguno.

Luego hay más de 10.000 ‘fallos’ europeos, donde los ‘expertos’ de la Comisión Europea (CE) en Bruselas emiten ‘recomendaciones’ a cada gobierno, directamente fuera del canon neoliberal, con respecto a sus gastos, sus ingresos y ‘reformas’ ( sobre salud, educación, pensiones) que deben ser obedecidas.

Por lo tanto, las elecciones en todos los países miembros de la UE no tienen ningún sentido. Los jefes de los gobiernos nacionales (Macron, Scholz, Draghi) son meros ejecutores. No se permite ningún debate democrático: la ‘democracia’, al igual que los ‘valores de la UE’, no son más que cortinas de humo.

El gobierno real lo ejercen un puñado de apparatchiks elegidos por compromiso entre los poderes ejecutivos, actuando de una manera supremamente opaca.

La CE está totalmente fuera de cualquier tipo de control. Así fue como una impresionante mediocridad como Ursula von der Leyen, anteriormente la peor ministra de Defensa de la Alemania moderna, fue catapultada hacia arriba para convertirse en el actual Führer de la CE, dictando su política exterior, energética e incluso económica.

¿Qué representan?

Desde la perspectiva de Occidente, la Cortina de Hojalata, a pesar de todos sus siniestros matices de la Guerra Fría 2.0, es simplemente un comienzo antes del plato principal: una confrontación dura en Asia-Pacífico, rebautizada como «Indo-Pacífico», una copia al carbón de la raqueta de Ucrania. diseñado para contener BRI y GDI de China.

Como contragolpe, es esclarecedor observar cómo el Ministerio de Relaciones Exteriores de China ahora destaca en detalle el contraste entre BRICS, y BRICS+, y el combo imperial AUKUS/Quad/IPEF.

BRICS significa multilateralismo de facto; centrarse en el desarrollo global; cooperación para la recuperación económica; y mejorar la gobernanza mundial.

La raqueta inventada por los Estados Unidos, por otro lado, representa la mentalidad de la Guerra Fría; explotando a los países en desarrollo; agruparse para contener a China; y una política de “Estados Unidos primero” que consagra el “orden internacional basado en reglas” monopolista.

Sería un error esperar que las luminarias del G7 reunidas en Baviera entiendan lo absurdo de imponer un límite de precio a las exportaciones de petróleo y gas de Rusia, por ejemplo. Si eso realmente sucediera, Moscú no tendría problemas para cortar completamente el suministro de energía al G7. Y si se excluyen otras naciones, el precio del petróleo y el gas que importan aumentaría drásticamente.

BRICS allanando el camino a seguir

Así que no es de extrañar que el futuro sea ominoso. En una sorprendente entrevista a la televisión estatal de Bielorrusia , el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, resumió cómo “Occidente teme a la competencia honesta”.

De ahí, el vértice de la cultura de la cancelación, y “supresión de todo lo que contradiga de alguna manera la visión y ordenamiento neoliberal del mundo”. Lavrov también resumió la hoja de ruta por delante, en beneficio de todo el Sur Global:

    “No necesitamos un nuevo G8. Ya tenemos estructuras…principalmente en Eurasia. La EAEU está promoviendo activamente los procesos de integración con la República Popular China, alineando la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China con los planes de integración de Eurasia. Los miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático están examinando de cerca estos planes. Varios de ellos están firmando acuerdos de zona de libre comercio con la EAEU. La Organización de Cooperación de Shanghai también es parte de estos procesos… Hay una estructura más más allá de las fronteras geográficas de Eurasia”.

    “Son los BRICS. Esta asociación depende cada vez menos del estilo occidental de hacer negocios y de las reglas occidentales para las instituciones monetarias, financieras y comerciales internacionales. Prefieren métodos más equitativos que no hagan depender ningún proceso del papel dominante del dólar o de alguna otra moneda. El G20 representa plenamente a los BRICS y a cinco países más que comparten las posiciones de los BRICS, mientras que el G7 y sus partidarios están del otro lado de las barricadas”.

    “Este es un equilibrio serio. El G20 puede deteriorarse si Occidente lo utiliza para avivar la confrontación. Las estructuras que mencioné (SCO, BRICS, ASEAN, EAEU y CIS) se basan en el consenso, el respeto mutuo y el equilibrio de intereses, más que en la exigencia de aceptar realidades mundiales unipolares”.

¿Cortina de hojalata? Más como Cortina rasgada.

“EL BARCO DE LA MULTIPOLARIDAD PARTIÓ… NO HAY MARCHA ATRÁS” Es la frase central de la columna del Club de La Pluma, del director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, extraída del discurso del presidente ruso Vladimir Putin, en el foro económico de San Petersburgo, que derivó además, en la sentencia de que “La unipolaridad norteamericana ha finalizado.” 

Todo ello en una semana en que en Europa se agudizó la crisis energética, económica y política con una gigantesca manifestación en Bruselas y que el conflicto de Ucrania resulta cada día más desastroso para Occidente. También resalta Carlos, que el presidente de China, Xi Jinping, se comunicó telefónicamente con Putin, para darle todo su apoyo en el camino de reforzar su postura soberanista. 

Y entrando en geopolítica, nos asegura que ”somos observadores privilegiados” del momento bisagra de la historia, marcado por esta cumbre de los «BRICS Ampliados» de San Petersburgo, acompañada en paralelo de múltiples eventos de cooperación económica, y con la mayoría de las potencias emergentes apoyando la multipolaridad como sistema de gobernanza internacional, lo que evidencia el franco retroceso del G7 y G20. Además, analiza la particularidad de La India, que debe definirse sobre el posicionamiento internacional que ha de tomar. 

La repercusión mundial de este cónclave ha sido tan abrumadora que ni siquiera el poderoso aparato mediático de Occidente pudo censurarla. Fueron decisiones tan importantes como revolucionarias, que dieron la vuelta al mundo por su propia trascendencia.

Medidas tales como:

 -Profundizar el modelo “Sur Global” en detrimento del norte anglosajón.

-Incrementar la integración euroasiática y africana, y la interacción con América Latina.

-Crear mecanismos de pagos con monedas locales, evitando el uso del dólar.

-Reemplazar el Swift, la mayor herramienta financiera global de Estados Unidos.

-Crear de nueva Agencia de Calificación que suplantará su similar de Occidente, creada solo para imponer sus intereses.

-Aumentar la construcción de una cadena propia de valores y de suministros.

-Confirmar las gigantescas inversiones en infraestructura, por parte de India y China, en los miembros más pequeños de la región.

-Consolidar una nueva estructura económica mundial de intercambio, a través de gigantescas infraestructuras, tanto de rutas, de aeropuertos, de ferrocarriles, de logística, de puertos, y de rutas fluviales y marítimas. 

Y es en este nuevo escenario del BRICS, donde acaba de ingresar Argentina junto a Brasil, los dos mayores países de la región, dónde se le presenta a Sudamérica una oportunidad histórica de participar en la nueva reconfiguración global con voz y voto y en un momento dónde soplan fuertes vientos de cambios políticos en todo el subcontinente. 

Y no sólo se trata de ser parte de la nueva RUTA DE LA SEDA y de la estrategia de bases y puertos del COLLAR DE PERLAS, sino de hacerlo con pleno derecho, en una estructura centralizada y encabezada por las más importante potencias económicas del mundo, como China, India y Rusia. En un nuevo eje integracionista, más allá de la ideología, basado en las necesidades y las potencialidades de cada uno y que nos acerca la posibilidad, por primera vez en mucho tiempo, a la recreación del sueño de la PATRIA GRANDE.

Eduardo Bonugli (Madrid, 26/06/22)

Presidente de la Republica Argentina Alberto Fernandez solicita la incorporacion a los BRICS
XIV Reunion de los BRICS

El Director de Dossier Geopolitico Lic. Carlos Pereyra Mele entrevistado por el Periodista Mario Mazzitelli de la Radio La Luna AM1140 de Buenos aires para el Programa La brujula por la Luna sobre los cambios sistemicos y sus reflejos y consecuencia en America latina del lunes 20/6/2022

Tras 110 días de guerra está claro que EE.UU. ha sometido a Europa y que Rusia vencerá al régimen de Kiev. ¿Para qué prolonga, entonces, Occidente el sufrimiento de su aliada?

Por Eduardo J. VIOR TELAM

A casi cuatro meses de comenzada la guerra en Ucrania, desde el punto de vista militar es indudable que Rusia vencerá. También parece haber sobrellevado satisfactoriamente la ola de sanciones occidentales contra su economía. EE.UU., por su parte, puso nuevamente a funcionar su complejo industrial militar y sometió a Europa, obligándola a pagar carísimos los alimentos y la energía. Que Rusia prolongue la guerra hasta alcanzar sus objetivos, se entiende. Pero, ¿para qué siguen las potencias occidentales enviando a Ucrania toneladas de armas que no equilibran la superioridad de Rusia en el campo de batalla, multiplican las pérdidas de vidas y la destrucción de la economía del país y escalan el conflicto? ¿Es intención o automatismo?

Este miércoles 15 el jefe del Estado Mayor Conjunto (JEME) de las Fuerzas Armadas estadounidenses, el general Mark Milley, ha calculado las pérdidas del ejército ucraniano. Se cree que éste está perdiendo alrededor de 100 personas al día y que tiene de 100 a 300 heridos. Por su parte, el sábado pasado, por primera vez, Oleksiy Arestovich, el principal asesor de Zelensky, admitió en una entrevista que desde el comienzo de la Operación Militar Especial de Rusia, Ucrania ha perdido unas diez mil personas. Se supone que se refirió sólo a los militares muertos, porque el número de bajas civiles y el de heridos es mucho mayor, como indica el que se esté preparando la movilización de las mujeres.

A principios de esta semana podía dibujarse el siguiente cuadro de la situación militar: las fuerzas aliadas de Rusia y las milicias de las repúblicas secesionistas de Lugansk y Donetsk han recuperado el 97% del territorio de las antiguas provincias del mismo nombre, Rusia recupera posiciones que había perdido hace un mes en la provincia de Járkov y sostiene las posiciones en el sur. Falta poco para que tome la totalidad de los territorios habitados por población rusohablante. En este contexto, no se entiende la utilidad militar de los permanentes bombardeos ucranianos contra la población civil de la ciudad de Donetsk.

 Foto AFP
Foto AFP

Por su parte, el diario británico The Independent, citando un informe de inteligencia, ofreció el sábado 11 un gran análisis sobre el equilibrio de las fuerzas rusas y ucranianas: las tropas ucranianas son 20 veces inferiores a las rusas en artillería, 40 veces en municiones y 12 veces en alcance. Además, la parte ucraniana se ha quedado casi completamente sin cohetes antitanque, aunque sigue teniendo los MLRS Grad y los obuses que alcanzan un máximo de 20-30 km. Del mismo modo, carece de armas para golpear la artillería rusa de largo alcance. Por su descoordinación con otros sistemas de armas, la incorporación creciente de cañones autopropulsados de gran calibre de origen francés y norteamericano aumenta los daños civiles, pero no aumenta la eficacia militar. A su vez, los rusos disponen de numerosos cohetes operativos a muchas decenas e incluso cientos de kilómetros. Se da una situación de «absoluta desigualdad en el campo de batalla, por no hablar del completo dominio de la aviación enemiga en el aire», dice el informe británico. Como consecuencia, entre las tropas ucranianas cunde el desaliento y aumenta la deserción.

Existe además un efecto colateral que se venía advirtiendo desde el inicio: la entrega compulsiva de armamentos está alimentando un mercado negro en el cual se puede adquirir un sistema Javelin estadounidense por unos 30 mil dólares, cuando sólo el misil cuesta 170 mil dólares y el centro de control unos 200 mil más. Organizaciones delictivas de todo tipo están aprovechando la ocasión para conseguir una amplia variedad de armas y se sospecha que no sólo portátiles. Las posibilidades de que sean utilizadas con fines criminales en cualquier parte del mundo son aterradoras, si se piensa que se han entregado misiles anti buques costeros que nadie sabe a dónde terminan.

Ante este panorama, a los líderes occidentales no se les ocurre nada mejor que enviar armas aún más potentes. Así, este martes 14 el subsecretario de Defensa para Asuntos Políticos de EE.UU., Colin Kahl informó que Estados Unidos proporcionará a Ucrania misiles guiados pesados con un alcance de 70 km para su uso con los lanzadores de cohetes múltiples HIMARS. Según Kahl, el sistema de cohetes de artillería de alta movilidad vendrá con cohetes guiados GMLRS. Con este equipo militar no se requiere un consumo masivo de municiones, ya que se trata de un sistema de alta precisión y potencia cuya efectividad es comparable al «efecto de un ataque aéreo». Así Ucrania podría atacar más profundamente el territorio ruso, dañando objetivos civiles, pero serán inútiles para los militares, porque desde hace tiempo las fuerzas aliadas evitan las grandes concentraciones y utilizan pequeñas unidades móviles.

Foto Xinhua
Foto Xinhua

En este contexto no es de extrañar que el profesor de Relaciones Internacionales Andrew Latham, de la Universidad Macalester en Minnesota, haya llegado el martes 7 a la conclusión de que “Ucrania no puede vencer”. El resultado de esta guerra no puede ser una Ucrania independiente. Es obvio que la parte oriental es para Rusia y la occidental quedará bajo la influencia de Polonia.

El profesor Latham califica este escenario como una victoria incondicional del Kremlin, porque una de las principales tareas de la Operación Militar Especial era impedir la expansión de la OTAN y la fragmentación de Ucrania la excluiría de la esfera de influencia de la alianza.

A esta altura de la guerra van quedando claras las respectivas estrategias de la OTAN y de Rusia. Ambas se dividen en dos campos, el económico y el militar. La apuesta de la OTAN fue empujar a la guerra a Moscú utilizando como anzuelo a Ucrania, a quien le dio todas las garantías de que intervendría en su apoyo para derrotar a Rusia.

En el campo militar se planificó inundar el país con armas antitanques y aéreos portátiles de distintos alcances y, dado que ya habían previsto la falta de voluntad de resistencia de la mayoría del pueblo ucraniano, generar un sistema de guerrillas sostenido por la organización atlantista, introduciendo mercenarios bajo la cobertura de ser voluntarios. No existen las resistencias populares que inventó la propaganda occidental. En el Donbass la población recibe como libertadores a los rusos y chechenos, mientras que en las regiones más occidentalizadas se debió prohibir la salida a los hombres en edad de combatir y ahora comienzan a convocar a las mujeres.

En el plano económico la situación no es mejor para la Alianza Atlántica. No ha conseguido el apoyo diplomático esperado, al punto de que Silvio Berlusconi ha dicho públicamente que apenas el 25% del mundo se ha coaligado contra Rusia. Moscú ha compensado rápidamente las sanciones occidentales reorientando sus exportaciones hacia otros mercados. De todos modos, la mitad de los miembros de la UE sigue comprando gas a Rusia y lo paga en rublos. Como no pueden comprar petróleo directamente, hay países europeos que lo adquieren a armadores griegos o a refinerías indias, por supuesto que mucho más caro. Al mismo tiempo, al haber minado Ucrania el acceso a sus puertos sobre el Mar Negro, impide la salida del trigo que Europa necesita. Las distribuidoras de alimentos y de energía están aprovechando la coyuntura para aumentar los precios. En economías sin mecanismos de ajuste, tasas de inflación que rondan el 7% anual hunden a poblaciones enteras que ya vivían al borde de la pobreza. En el hemisferio norte está a punto de comenzar el verano. Habrá que ver de qué manera reaccionan los europeos, cuando al hambre sumen el frío.

Ucrania ya no está de moda, incluso los «socios extranjeros» están cansados de ella. Así lo afirmó Zelensky durante un encuentro con periodistas el pasado martes 7. Este “cansancio” de los líderes occidentales se hizo más que evidente en el choque verbal que el fin de semana pasado tuvo el presidente norteamericano con miembros del gobierno ucraniano. En una escapada de la Cumbre de las Américas Joe Biden concurrió el viernes 10 en Los Angeles a una cena con donantes del Partido Demócrata. Preguntado sobre el desencadenamiento de la guerra, el mandatario contó que el presidente de Ucrania «no quería oír» las advertencias sobre la invasión rusa. Biden dijo que «no había duda» de que Vladimir Putin había estado planeando «entrar», pero Volodymir Zelensky había desoído las advertencias de EE.UU.

 Foto AFP
Foto AFP

Con sumo disgusto reaccionó el portavoz presidencial ucraniano, Serhiy Nykyforov, a las declaraciones de Biden. Según él, su presidente había pedido en repetidas ocasiones a los socios internacionales que impusieran sanciones de forma preventiva, para obligar a Rusia a retirar las tropas estacionadas en la frontera con Ucrania. «Y aquí ya podemos decir que nuestros socios no quisieron escucharnos», dijo.

Las declaraciones del jefe de la Casa Blanca son, por lo menos, ambiguas: ¿quiso decir que ellos sabían que Putin de todos modos invadiría Ucrania y que Zelensky no quiso escucharlos? En ese caso, cabe la pregunta sobre qué le habrían aconsejado: ¿negociar o iniciar a su vez una guerra preventiva? ¿Por qué han seguido sosteniendo al mandatario ucraniano, si es tan negligente y obcecado? Por el contrario, si el presidente quiere decir que Zelensky debió haber negociado para impedir la invasión, ¿por qué no lo han presionado en los cuatro últimos meses para que negocie?

Parece aún faltar mucho para que Rusia y Ucrania negocien. La experiencia y el sentido común indican que quien tiene chance de vencer en una guerra la sigue hasta alcanzar alguno de sus objetivos, pero que, quien sabe que no puede vencer busca un alto el fuego, por lo menos para ganar tiempo. Sin embargo, el liderazgo ucraniano sigue enviando al frente a miles de reclutas inexpertos y, a pesar de las quejas de Kiev por el insuficiente apoyo recibido, la dirigencia occidental le sigue mandando armas, entrena a sus tropas y envía mercenarios.

“La OTAN busca conseguir que Ucrania pague el menor precio posible por la paz cuando se siente en la mesa de negociaciones con Rusia”, ha afirmado este domingo el secretario general del bloque militar, Jens Stoltenberg, de visita en Finlandia. «Nuestro apoyo miliar es un método de reforzar sus posiciones en la mesa de negociaciones cuando se sienten para conseguir un acuerdo de paz, ojalá sea pronto», indicó. No parece una alternativa realista, ya que, mientras Ucrania se niegue a negociar, Rusia seguirá su ofensiva y su contendiente será cada vez más débil. Por lo tanto, tendrá menos poder a la hora de negociar. Stoltenberg da la impresión de no saber a dónde quiere llegar y, entonces, sigue mandando armas de modo automático, para justificar su ceguera.

A esta falta de claridad sobre los objetivos occidentales contribuyen poderosamente también las contradictorias señales que emite el gobierno norteamericano. Mientras que Joe Biden, veterano de la Guerra Fría, insiste en advertir que, si Rusia utiliza armas nucleares tácticas para acabar la guerra en Ucrania, EE.UU. responderá con la misma moneda, miembros del Consejo de Seguridad Nacional declaran oficiosamente a los medios que “tal vez baste con adecuadas respuestas convencionales”. La claridad, consecuencia y coherencia de los mensajes que den los líderes de las principales potencias es una condición indispensable de la paz mundial. Tanto aliados como adversarios necesitan conocer el rumbo de la mayor superpotencia, para poder organizar racionalmente su actuación. La previsibilidad es un ingrediente esencial para el restablecimiento de la paz mundial. En EE.UU., empero, no queda claro quién fija la línea del gobierno ni cuáles son sus objetivos.

La derrota de Ucrania es ineluctable y el envío de armas occidentales sólo prolonga la guerra a costas de más vidas y de una mayor destrucción de la economía ucraniana. Un conflicto así sólo se lo puede resolver dialogando y cediendo lo necesario como para garantizar la seguridad de Rusia y la supervivencia de Ucrania, aunque sea en dimensiones reducidas.

En un momento tan peligroso debería haber en Occidente un liderazgo firme y unificado que dé a Rusia señales claras y la seguridad de que lo que se acuerde será de cumplimiento efectivo, pero no es el caso. La extrema oligarquización del capitalismo norteamericano y la subordinación del Estado a los intereses de unas pocas corporaciones y personas han esmerilado la autoridad presidencial. A esta condición estructural hay que añadir la debilidad física y neurológica del presidente. Así, cada fracción dentro del gobierno y de la alianza sigue su propio juego. Sólo algunos aparatos burocráticos, como el Pentágono, tienen consciencia de los límites impasables. Nadie en Washington o en Bruselas tiene el poder para fijar objetivos claros y consensuados, cada uno atiende su juego y todos lo hacen automáticamente.

Occidente no tiene en la guerra que se libra en Ucrania objetivos alcanzables y se limita a prolongar el conflicto enviando armas con la vana esperanza de mejorar la posición ucraniana en la venidera negociación. El problema es que, mandando equipamiento sin clara orientación política arriesga que los dirigentes de Kiev quieran subir la apuesta jugando a va banque y, atacando a Rusia, provoquen su reacción contra los proveedores de las armas. Mientras los líderes de la OTAN no cesen de mandar armas y no impongan a sus aliados en Kiev que negocien en serio, el riesgo de una extensión y ampliación de la guerra se mantendrá alto. Roguemos para que la razón vuelva a Occidente.

Todos los tratadistas históricos militares han escrito sobre el quiebre, en la II Guerra Mundial que causó la derrota alemana en Stalingrado, quien después de esa derrota ya carecio de la posibilidad de tener la iniciativa y solo se redujo a frenar el avance ruso -fallido- hasta la Caida de Berlin en manos del Ejército Rojo en mayo de 1945. 

Por ello, en estas columnas radiales en el Club de la Pluma, en noviembre del 2016, afirme que la victoria en la Batalla por la Ciudad Siria de Alepo, por parte del Ejército Arabe Sirio apoyado por las fuerzas aeroespaciales rusas y las unidades de hezbolá fue el “stalingrado” de los Yijadistas (los famosos “rebeldes moderados”), apoyados por el Eje: EEUU/UK y varios países de la OTAN, involucrados en darles equipamiento, financiamiento, instrucción e inteligencia a esos grupos de mercenarios terrorista. Nunca mas los terroristas tuvieron la posibilidad de tener la ofensiva o iniciar una ofensiva importante. Debo destacar que muchos comunicadores a partir de está clasificación usaron el término para definir un antes y un después en la Guerra impuesta a Siria.

Ahora estamos ante una situación similar, está semana cayo definitivamente el ultimo reducto que sin ningun posibilidad de escape o de causar daño al estar rodeados y sin posibilidad de recibir ningún tipo de ayuda los efectivos del Ejército Ucraniano y del Batallón Azov (milicias paramilitares neonazis) que fueran incorporadas legalmente por el Régimen de Kiev a la estructuras de sus FFAA. En la Ciudad Portuaria de Mariupol, está derrota en toda la linea -que patéticamente e infantilmente a sido tratada por Kiev -Zelensky- y la prensa occidental de EVACUACIÓN, es una DERROTA en toda la línea, por ello nos atrevemos a afirmar que está batalla final es el “stalingrado” Ucraniano, con está victoria la Federacion Rusia y las dos repúblicas de Donetsk y Lugansk. Ahora controlan todo el litoral del Mar de Azov tiene conexión total terrestre con la península de Crimea ya no depende solo del Puente entre Crimea y Rusia, y además le permitio capturar y poner nuevamente en funcionamiento el gran acueducto que envía agua potable del Río Dniéper y que hasta antes del 2014 había sido la fuente hídrica que transformó a Crimea en una península de gran producción agrícola.

 

Queremos destacar que en este tema de las Operaciones Militares y doctrinas militares, Dossier Geopolitico desarrollo el 14/5/2022 una conferencia dictada por el Coronel Carlos Pissolito que adelantó estos puntos, y se puede ver:  (https://www.youtube.com/watch?v=L2QoACQy3nQ&t=3702s)

Pero además esa DERROTA en Mariupol, libera tropas para operar en el Este, y ya se ciernen sobre una gran masa de tropas del ejército ucraniano, dos alternativas o una retirada o quedar encerrados en una bolsa donde caerían alrededor 16.000 efectivos y correr la misma suerte que los militares y los paramilitares de Mariupol. Y también aquí como en Alepo estamos en presencia de una nueva derrota de la OTAN pues estos cercados de Mariupol contaban con la asistencia y asesoramiento de militares de la OTAN en la batalla.

Un apartado especial le dedicamos en nuestra columna de geopolitica de hoy es a la tan cacareada OTAN y sus extraños apoyos a Ucrania, mientras los miembros de la Unión Europea se deshace en contradicciones de como comprar los productos energéticos faltantes igual que los alimentarios; y pensamos en voz alta, que: fuera de EEUU/UK y Canadá la OTAN hoy, es una armada brancaleonica, sinceramente creemos que las FFAA de Polonia pueden combatir junto a las Alemanas -con sus viejos rencores-; que los Griegos pueden luchar junto a las tropas de Turquía -con quienes todavía tienen el conflicto de Chipre sin resolver- o que las tropas Italianas pueden combatir en conjunto con las tropas balcánicas es mas me animaria a decir de una convivencia complicada entre las FFAA de Francia y el Reino Unido, los demas integrantes su apoyo es mas moral que efectivo desde lo militar. Lo único que sí tenemos seguro es que la guerra de Ucrania ha servido muy directamente a los complejos industriales militares de EEUU, la UK y algún que otro europeo.

Finalmente podemos decir que UCRANIA PERDIÓ LA GUERRA y SOLO LE QUEDA DESANGRARSE en beneficio de los complejos industriales militares 

Y la pregunta final con la que cerramos está columna dominical es qué actitud tomará el mando anglosajón liderado por EEUU y seguido por UK, si seguir interviniendo a cuentagotas como ahora o involucrarse totalmente en el terreno lo que llevaría con total seguridad, que pasemos al estadio de Guerra de Alta Complejidad -Nuclear seguramente-

Todo un dilema para las gerontocracias de USA y de un Boris Jhonson cada día mas cercano a la destitución 

Lic. Carlos Pereyra Mele

Director de Dossier Geopolitico

La mirada perdida y la desazón ante el futuro incierto de los altos oficiales de de la wehrmacht del VI Ejercito Aleman rendidos en Stalingrado 
«Ellos murieron para que alemania viviera«, por lo menos la propaganda nazi no dio la patetica version de evacuacion de Stalingrado como la prensa occidental de Mariupol
Yihadistas se rinden en Alepo Siria La mirada perdida y la desazón ante el futuro incierto
Los del batallón paramilitar neonazi Azov se rinden en Mariupol; Las mismas miradas pérdidas y la desazón ante el futuro incierto

DOSSIER GEOPOLITICO DG le está invitando a la Tercera Conferencia del Ciclo 2022

Conferencia: El Atlántico Sur y los Conflictos Globales

Disertará el Lic. Adolfo Koutoudjian, Licenciado en Geografía por la Universidad de Buenos Aires (UBA). En el área docente se desempeña como profesor de Geopolítica en la Facultad de la Defensa Nacional, la Escuela Superior de Guerra Conjunta de las Fuerzas Armadas y la Escuela de Guerra Naval; y como profesor invitado, en el Departamento de Geografía de la UBA. Es autor de numerosas publicaciones en los temas de su especialidad, y consultor en diversos organismos y publicaciones internacionales.

Sábado:
30 abril 2022 05:00 p. m. Buenos Aires, Georgetown
España 22 hs pm; Costa Rica 14 hs pm; Brasil 17 hs pm; Rusia 11 hs pm, Perú 15hs pm.

Unirse a la reunión Zoom
https://us02web.zoom.us/j/82239436341?pwd=YkZlSlpMSW1nWWhtYXpQWUZhZUk2UT09

Desarrollada por el periodista Lic. Eduardo Luque quien es profesor de Historia por la Universidad Central de Barcelona. Lic. en Pedagogía por la UAB, Lic. en Psicopedagogía. Analista internacional y experto en Geopolítica. Colaborador de RT, HispanTV y articulista Revista el Viejo Topo, Crónica Popular y en Canarias semanal España.

El disertante expuso las dificultades que afectarán a la Unión Europea su alineamiento a las directivas de política exterior de Estados Unidos de Norte America. Y alertó sobre el despliegue que posiblemente desarrollará la OTAN sobre latinoamérica (en la próxima reunión a realizarse en Madrid).

Organizo Dossier Geopolítico DG.

Lic. Carlos Pereyra Mele, Director de Dossier Geopolítico (DG)

El 2 de abril del 2022 con motivo de la celebración y recordación del 40 aniversario del Dia de los Veteranos de Guerra y Caídos en la Guerra del Atlántico Sur, el multimedio Internacional irani HISPANTV Nexo Latino: realizó una programación especial para analizar esos acontecimiento y para ello convocó en una primera parte del mismo entrevisto a los expertos: en asuntos islámicos Abdul Karim Paz y al analista político Carlos Pereyra Mele sobre el  tema. Y en una segunda parte del mismo programa participo Mario Ramón Duarte, abogado y escritor y el analista político Carlos Pereyra Mele; ambos integrantes del Think Thank DOSSIER GEOPOLITICO

PARTE 1

PARTE 2

Por Ignacio Coppet (*)

El 2 de abril significó para la Nación en su conjunto un acto de grandeza y de coraje, que permitió el reencuentro con lo mejor de la tradición de las grandes epopeyas patrias.

as efemérides sirven para ejercitar los recuerdos. ¡Ay de aquellos pueblos que olvidan su historia y que pierden su memoria!

Hoy conmemoramos los 40 años de la recuperación territorial de las Islas Malvinas. Tengo grabada a fuego en la memoria esa madrugada del 2 de abril de 1982, cuando los argentinos despertamos con esa extraordinaria noticia. Celebré, como millones de compatriotas, con viva emoción junto a mis padres y hermanos la buena nueva. 

Mucha tinta se utilizó y se continúa utilizando para denigrar uno de los mayores acontecimientos históricos del siglo pasado. El 2 de abril significó para la Nación en su conjunto un acto de grandeza y de coraje, que permitió el reencuentro con lo mejor de la tradición de las grandes epopeyas patrias. 

Nuestro país, desde antes de su Independencia política, estuvo acechado por el imperialismo británico. La hispanidad fue sin lugar a dudas el anticuerpo más poderoso para el avance anglosajón, precisamente porque frenó su pretensión colonial inspirada por la mentalidad del calvinismo protestante, que gravitó además en las sombras por medio de las sociedades secretas, intentando quebrar la unidad de lengua y fe católica heredada por la Madre Patria.

El siglo XIX fue epicentro de la agresión británica través de tres acontecimientos concluyentes de las pretensiones imperiales.

Malvinas 20220331
Hay que malvinizar la Argentina.

El primero se produjo con las Invasiones Inglesas de 1806 y 1807, rechazadas por la valiente estirpe criolla. No obstante, la ambición opresora se mantuvo con una inusitada influencia en los ámbitos diplomáticos, políticos, culturales y sociales, al punto de que Gran Bretaña desde 1808 había logrado el control efectivo de ambos márgenes del Río de la Plata. 

El segundo sucedió el 3 de enero de 1833, con la ocupación territorial de nuestras Islas Malvinas, el desalojo de la población y de las autoridades argentinas establecidas legítimamente, reemplazándolas por súbditos británicos. Desde ese momento el Reino Unido usurpa y ocupa nuestro suelo soberano.

El tercero se produjo con el bloqueo anglo–francés de 1845 contra la Confederación Argentina gobernada por Juan Manuel de Rosas, quien fue el reaseguro de la defensa de la soberanía nacional, frente a la pretensión europea de “liberar” la navegación de los ríos interiores. Esta intromisión extranjera provocó una gran reacción nacional en la batalla adversa del 20 de noviembre de 1845 en la Vuelta de Obligado, y los posteriores triunfos en Tonelero, Acevedo, San Lorenzo y Quebracho que lograron recuperar la campaña del Paraná para concluir con el heroico triunfo de las tropas de la Confederación Argentina. Es en este sentido que el General Juan D. Perón reconoció el accionar del Restaurador de las Leyes, al decir: “El primero que después de San Martín muere en el exilio por haber defendido dignamente la soberanía popular y la independencia de la Patria. Los que se han dicho sanmartinianos parecen no haber comprendido la lucha contra el colonialismo que realizó Rosas lo que San Martín vio claro a quince mil kilómetros de distancia. Él le rindió a Rosas el mejor homenaje que un soldado puede rendir a otro soldado: su sable libertador”. 

Prácticamente la primera mitad del pasado siglo la Argentina estuvo sometida a los intereses del imperialismo británico. Prueba de ello es la celebración del fatídico tratado Roca–Runciman, convenio firmado el 1 de mayo de 1933 por el vicepresidente de la Nación Julio A. Roca (h) y el encargado de negocios británico Walter Runciman. Este acuerdo significó la profundización de la dependencia económica que condenó al país a ser una semicolonia anglosajona, a través de concesiones escandalosas en detrimento de nuestros intereses nacionales, que hasta los mismos británicos se mostraron sorprendidos. Vinieron por la carne, el petróleo y los transportes, todos ellos beneplácitos que implicaron la entrega del patrimonio nacional. No en vano el liberalismo que inspiraba a la oligarquía vernácula responsable de tamaña traición, manifestó en boca de los diplomáticos argentinos de entonces que: “La Argentina es, desde el punto de vista económico, una parte integrante del imperialismo británico”.

Asunto Malvinas 20220401
Hay que malvinizar la Argentina.

Únicamente los gobiernos Justicialistas lograron revertir esta situación a través de la recuperación del patrimonio nacional enajenado, la nacionalización de la economía y la propuesta de un modelo comunitario alternativo en lo que se denominó comunidad organizada y Tercera Posición. Asimismo las tres gestiones de gobierno de Perón intentaron recuperar por medio de la diplomacia las Islas Malvinas en 1953 y en 1974 a través de la propuesta de formación del condominio insular binacional que obligaba a los ingleses a reconocer el litigio.

Tras el golpe de Estado de 1976 la Argentina retrotrajo su situación independiente entrando otra vez bajo la órbita británica y norteamericana. Se actualizaba el estatuto legal del coloniaje que explica en varios sentidos la frustración actual y los flagelos provocados por el imperialismo y la corrupción del capital extranjero. Se cumplía la advertencia del historiador británico Harry Ferns, quien antes del retorno de Perón de su extenso exilio, en su obra La Argentina, señaló: “Como no sea mediante una guerra civil devastadora, resulta difícil imaginar cómo puede deshacerse la revolución efectuada por Perón. (…) Hacerles realizar a nuestros enemigos lo que nosotros necesitamos que hagan para que se destruyan solos”.

La presencia británica en nuestra patria es evidente, decisiva y perversa, con muy malos influjos en todos los ámbitos. Lo inglés es admirado por la oligarquía, eternamente servil y genuflexa a la corona.

Malvinas 20220331
Hay que malvinizar la Argentina.

Por eso mismo, recordar la Gesta del 2 de abril de 1982 tiene un significado especial y particular porque la Argentina en esa inolvidable jornada se puso de pie, encarnando el ser nacional como pocas veces antes, independientemente de los intereses espurios de una dictadura criminal en decadencia.

Durante el desarrollo de la guerra hubo de todo. Sin caer en los extremos tanto de la leyenda rosa, como tampoco de la leyenda negra, que viene pretendiendo desmalvinizar la conciencia de nuestro pueblo, para que olvidemos el heroísmo y el sacrificio de los ideales grandes que protagonizaron nuestros soldados y oficiales.

El espíritu que se vivió en Malvinas es un eslabón de la épica encarnada en las largas batallas por la emancipación nacional que como argentinos de bien no podemos relegar. Precisamente olvidar esa Gesta, sería traicionar la sangre derramada y el sacrificio de nuestro pueblo, semilla fértil que necesitamos sembrar para el porvenir de la Patria. 

En una Argentina por décadas doblegada por la entrega y la dependencia, dominada por el carácter antinacional de su dirigencia y por la falta de conciencia histórica y patriótica de la educación, estamos sucumbiendo como mártires del liberalismo progresista imperante, coligado a las políticas de traición a la soberanía nacional. Es nuestra responsabilidad seguir siendo combatientes en la recuperación de la independencia económica, para la plena soberanía política y la justicia social integral en aras del bien común. Esto implica además recuperar al hombre argentino como centro de la política y a la comunidad organizada como espacio de su realización. El ejemplo de aquellos hermanos que nos llenaron de orgullo hace cuarenta años, y ofrendaron su vida por la recuperación del territorio usurpado por el pirata inglés, es un aliciente más que suficiente.

A secas: malvinizar las entrañas de nuestra Nación, para recuperar un espíritu patriótico que no negocia y que no transa con los enemigos históricos de los argentinos.

Celebremos a nuestros héroes como se lo merecen. Honor y gloria para cada uno de ellos.

Argentina: ¡Levántate y anda! Sal de la miseria, de la pequeñez y del egoísmo. Argentina, encuentra tu lugar en la historia. 

* Ignacio Cloppet. Miembro de la Academia Argentina de la Historia.

FUENTE DIARIO PERFIL https://www.perfil.com/noticias/opinion/ignacio-cloppet-hay-que-malvinizar-la-argentina.phtml

Tte. Gral. Juan M. Paleo*

El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas argentinas evoca aquí las circunstancias de la guerra, cuatro décadas después, y subraya la importancia de la política de Defensa nacional.

El 2 de abril de 1982 es una fecha imborrable en las páginas de gloria de la vida de nuestra Nación. El día del Veterano de Guerra y de los Caídos en la Gesta del Atlántico Sur nos remonta a un acontecimiento que une y abraza a todos los argentinos. Una jornada de reflexión y de fortalecimiento de nuestras convicciones patrióticas en la que rendimos homenaje a nuestros soldados, tanto a los que cayeron cumpliendo con la misión como a los que regresaron para dar testimonio de esa entrega.

Recordar a los héroes no es reconocer los errores de la guerra ni las decisiones de ese entonces. Es rescatar el valor del heroísmo, de la entrega por el prójimo y el valor vigente y permanente de una causa que nos duele como Patria y que encuentra la unidad de voluntades de todo un pueblo.

En tal sentido y como Oficial más antiguo en actividad quiero destacar y agradecer el patriotismo, coraje, y abnegación de los oficiales, suboficiales y soldados que combatieron en la Guerra de Malvinas defendiendo nuestra soberanía. El accionar de todos ellos se vio reflejado en las acciones militares de gran valor de los efectivos desplegados que hicieron que el Almirante John Woodward (Comandante de la Fuerza expedicionaria británica) se expresara en estos términos: “Ganamos la guerra con un importante grado de suerte. Cuando los argentinos se rindieron, las pérdidas británicas iban en aumento y estábamos a punto de quedarnos sin alimentos y municiones. Si ellos hubieran resistido una semana más la historia hubiera podido terminar de manera muy diferente.”  La efectividad en combate de nuestros Oficiales, Suboficiales y soldados conscriptos quedó taxativamente plasmado en ejemplos concretos como la batalla de Pradera de Ganso: 630 efectivos argentinos se enfrentaron a un regimiento de paracaidistas que tenían apoyo de fuego aéreo, naval y mejor equipamiento individual. Estos soldados pusieron en una situación tan comprometida a los paracaidistas británicos, que hicieron que su jefe de regimiento tuviera que hacer un asalto desesperado para salvar la situación, perdiendo la vida en esa acción. Sólo el agotamiento de las municiones de la guarnición y la superioridad de fuego británica harían que éstos se impongan en ese combate. 

Malvinas

También considero necesario destacar en particular el valor del Liderazgo, que caracterizó a nuestros oficiales de las tres Fuerzas Armadas durante el desarrollo de todo el conflicto. Es ya reconocido por todo el mundo las acciones de nuestros pilotos de la Fuerza Aérea y Armada (en equipo con el valioso apoyo de los suboficiales) contra la flota británica que hundieron 8 buques y averiaron otros 13 constituyendo las mayores pérdidas navales que tuvieron los británicos desde la Segunda Guerra Mundial. Ese liderazgo de los oficiales se manifestó siempre desde el frente, así lo atestiguan los 63 oficiales muertos en combate que representan el 10% de los caídos totales, número que está muy por encima de lo que establecen los estimados de los reglamentos de las potencias occidentales. Ese invalorable liderazgo de oficiales como el Teniente Primero Roberto Estévez, Teniente Luis Carlos Martella, Capitán José Daniel Vázquez y Capitán de Corbeta Sergio Raúl Gómez Roca son el ejemplo con el cual se instruyen actualmente los cadetes que se forman en nuestras FFAA para ser oficiales.

En esta recordación de la guerra de Malvinas me parece más que oportuno remarcar la importancia que la Defensa Nacional tiene para nuestra sociedad. Poseemos un territorio extenso y diverso, con importantes ventajas en términos de paz vecinal pero, a la vez, con numerosas vulnerabilidades; con una inmensa cantidad de recursos naturales que escasearán en el futuro próximo en un mundo más poblado, desigual, contaminado y conflictivo.

En tal sentido y pensando entonces Malvinas no como una cuestión del pasado, sino como un desafío presente y futuro tenemos que la ley de defensa 23.554 establece en su artículo 2 que la defensa nacional: “Tiene por finalidad garantizar de modo permanente la soberanía e independencia de la Nación Argentina, su integridad territorial y capacidad de autodeterminación; proteger la vida y la libertad de sus habitantes”.  En el mismo sentido la Directiva de Política de Defensa Nacional 2021 (documento político rector  de máximo nivel que orienta el diseño, capacidades y empleo del instrumento militar) afirma que “La persistente presencia militar, ilegítima e ilegal del Reino Unido De Gran Bretaña e Irlanda del Norte en las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes obliga a tomar los recaudos de planificación de capacidades, despliegue y organización acordes por parte de nuestro sistema de Defensa”. Cómo se puede apreciar, la causa nacional Malvinas afecta en forma directa en la estrategia y diseño de nuestro instrumento militar argentino. 

Siguiendo entonces los lineamientos de la conducción política, nuestra realidad geopolítica y socio económica, estamos desarrollando una estrategia defensiva multicapa de restricción de área de acuerdo a nuestro ciclo de planeamiento. Esta estrategia se basa en un empleo no lineal de las FFAA tendientes a restringir la libertad de maniobra de la fuerza agresora y desgastar su capacidad de operar atacando las vulnerabilidades críticas de esa fuerza y evitando el aferramiento en combates decisivos. Todo ello considerando a nuestro extenso territorio como una ventaja, como un elemento a nuestro favor, que obligue al agresor a extender sus líneas de comunicaciones y el sostenimiento de sus fuerzas, tornando imposible mantenerse dentro de nuestros espacios soberanos. En este sentido estamos generando la doctrina necesaria y priorizando la recuperación de las capacidades que componen la Fuerza de Intervención Rápida conjunta, que serán las primeras en intervenir en caso de crisis o de conflicto armado. 

Por primera vez disponemos de una herramienta como el FONDEF, que le da credibilidad y previsibilidad al planeamiento y que opera como la fragua que le proporciona cimientos firmes a la construcción de un Instrumento Militar moderno y eficaz. Apoyados en esta herramienta buscamos la concreción de 3 proyectos fundamentales para la implementación de esta estrategia multicapa: la recuperación de la capacidad supersónica a través de la incorporación del avión Caza Multirol para afectar al agresor y degradarlo desde las más largas distancias; la recuperación de la capacidad submarina, desarrollando nuevamente nuestra fuerza de submarinos con la misma finalidad y la incorporación de Vehículos Blindados a Rueda para el Ejército que le permitan, como parte de la Fuerza de Despliegue Rápido, desplazarse con velocidad y protección para el personal por todo el territorio, permitiendo su reempleo y evitando su aferramiento.

Por otro lado, hemos reforzado los sistemas de vigilancia y control en especial en el Atlántico Sur. Hemos recuperado la capacidad de patrullado oceánico, hemos puesto en servicio el radar que operaba en Río Gallegos y se colocará a la brevedad un radar 3D de última tecnología desarrollado por INVAP RPA-170M en Río Grande. A su vez, FADEA se encuentra realizando los procesos de mantenimiento y modernización de los aviones de exploración aeronaval P3- Orión, así como también las FFAA desarrollan en forma conjunta sistemas aéreos no tripulados con capacidad de operar en el ambiente aeronaval. Toda esa información que obtienen esos sistemas será procesada y gestionada por el recientemente creado Comando Conjunto Marítimo dependiente del Comando Operacional que está a cargo de las operaciones militares en tiempos de paz.

También hacemos previsiones para un avance en la dimensión espacial a través de la incorporación de un transponder para uso militar exclusivo y a futuro disponer de un satélite militar que nos asegure comunicaciones confiables y capacidad de transmisión de datos sobre la totalidad de nuestros espacios soberanos.

En síntesis, la estrategia defensiva multicapa ya está en marcha. A través de la Vigilancia y control del Espacio (COCAES), de la Vigilancia y Control de los Espacios Marítimos (COCM) y el despliegue en todo el norte del Ejército con tres Comandos Conjuntos Subordinados en Salta, Resistencia y Posadas (MARVAL) el Estado Mayor Conjunto, a través de su Comando Operacional, conduce las operaciones de esta “CAPA” que ya está activa, aunque no nos encontremos en conflicto. Idéntico concepto es para la Vigilancia y Control del Ciberespacio a través del Comando Conjunto de Ciberdefensa, que se encuentra desarrollando sus capacidades para permitir incluir dentro de su anillo de protección, cada vez más objetivos de valor estratégico.

Estamos aprovechando todas las lecciones aprendidas del ejemplo de los héroes de Malvinas

Como vemos, estamos aprovechando todas las lecciones aprendidas del ejemplo que nos legaron los héroes de Malvinas. Todo lo que estamos haciendo es el mejor homenaje que les podemos brindar, porque demuestra que ese sacrificio de oficiales, suboficiales y soldados en la guerra no fue en vano.

Como sostuvimos anteriormente no se puede pensar Malvinas sin tener en cuenta la Antártida. En este sentido es de primordial importancia Tierra del Fuego que actúa como un “plataforma natural” de proyección sobre el Atlántico Sur y Antártida. Es por esto que se está trabajando para recuperar capacidades en términos de infraestructura y medios que le otorguen a la Argentina una mayor capacidad de realizar operaciones en dicha área. En este momento se están evaluando proyectos para la construcción de un buque logístico multipropósito con la finalidad de subsanar la discontinuidad territorial de la Isla de Tierra del Fuego y un buque polar que apoyará las tareas de abastecimiento que realiza actualmente el rompehielos Almirante Irízar. 

En lo que respecta a infraestructura, se construirá una base naval integrada en Ushuaia tanto de uso civil como militar que posicionará a esa ciudad como la más importante en capacidad de prestar servicios a los buques que se dirigen hacia la Antártida o naveguen el Atlántico Sur. La misma junto a la modernización de la base Petrel constituirá el puente estratégico hacia el continente antártico más importante de la región. En este sentido se conformará una Base Aérea Adelantada que reforzará la presencia en el Atlántico Sur e incrementará las capacidades logísticas de la isla. Finalmente, siendo un área estratégica para el país se constituirá una nueva unidad de Operaciones Especiales del Ejército, que reforzará las capacidades militares en Tierra del Fuego.

El futuro depende de las acciones que tomemos hoy y somos responsables, desde nuestro rol, del país que entregaremos a las futuras generaciones.

En la Guerra de Malvinas quedó al descubierto la imperiosa necesidad de coordinar y armonizar en una acción conjunta a las Fuerzas Armadas, de avanzar en el planeamiento estratégico, la educación, la doctrina y el adiestramiento conjunto. Ya el informe Rattenbach hace cuatro décadas constataba las serias deficiencias del accionar conjunto durante el Conflicto. Con realismo contundente, en el punto 870 se define su importancia: “las deficiencias observadas en materia conjunta han resultado significativas y reclaman urgente solución. El primer accionar conjunto de las Fuerzas Armadas se produjo en esta guerra con Gran Bretaña. No se registran, previamente, operaciones de adiestramiento o ejercicios conjuntos de importancia. Ello ha constituido una grave responsabilidad de los conductores del presente conflicto”.  

En el 871 se extiende sobre la importancia de este tema: “En la guerra moderna, sólo la integración a nivel conjunto de las FF.AA. permite el logro de los objetivos militares propuestos. Ello requiere, por consiguiente, un desarrollo armónico, balanceado, racional y adaptado a las necesidades del combate moderno de las tres FF.AA. De nada vale que una Fuerza adquiera un potencial o capacidad determinada, si no es acompañada por un desarrollo similar en las otras Fuerzas”. 

El punto 872 de ese informe agrega que “las guerras son ganadas o perdidas por las fuerzas armadas de una Nación, y no por tal o cual de ellas. La guerra moderna no admite la posibilidad del triunfo por parte de una fuerza exclusivamente. En cambio, existe la seguridad de la derrota si ellas actúan en compartimentos estancos”. “…solucionar este problema, debe constituirse en una responsabilidad primordial de las autoridades de cada Fuerza. Será necesario, en primer término, limar asperezas, delimitar ámbitos operacionales, desarrollar la doctrina conjunta, efectuar ejercitaciones teóricas y prácticas, instrumentar cursos de Estado Mayor y de conducción conjuntos, y fundamentalmente, hacer comprender a todos y cada uno de los integrantes de un comando operacional que la misión y la suerte de dicho comando se hallan por encima de toda consideración de orden institucional”.

La guerra mostró la necesidad de coordinar una acción conjunta de las Fuerzas Armadas

Y quizás sea este ámbito, el de la Acción Militar Conjunta, donde se ha avanzado más en la reforma al Sistema de Defensa a 40 años de dicho informe. La creación primero del Comando Operacional, la creación del Comando Conjunto Antártico, el Comando Conjunto Aeroespacial, el Comando Conjunto de Ciberdefensa y el Comando Conjunto Marítimo son prueba de ello. Frente a la crisis generada por la pandemia, el accionar militar se materializó en las Operaciones Belgrano I y Belgrano II,  a través de los 14 Comandos Conjuntos de Emergencia a lo largo del país, y ello demostró una experiencia exitosa de operaciones conjuntas.

Nuestras Fuerzas Armadas han asimilado las lecciones y experiencias de la guerra

Nuestras Fuerzas Armadas han asimilado las lecciones y experiencias de la guerra y elaboramos en conjunto una estrategia militar que responda a nuestros intereses y posibilidades para hacer frente a los riesgos y desafíos estratégicos que constituyen las nuevas exigencias para el sistema de defensa nacional del siglo XXI. Para ello trabajamos sostenidamente bajo la orientación del Ministerio de Defensa conscientes de ser los responsables del Instrumento Militar que le dejaremos a los argentinos del mañana.

Recordamos y homenajeamos en este día a todos nuestros veteranos de guerra, a los 649 héroes que ofrendaron su vida, a los que regresaron para dar testimonio de esa entrega y a los que nos fueron dejando en el transcurso de los años, expresándoles nuestro reconocimiento en nombre de las Fuerzas Armadas, con el firme anhelo de que la historia coloque en su justo lugar la grandeza de esta gesta. Sin distinción de armas, jerarquías o género ninguno hizo cuestionamientos políticos ni estratégicos. Oficiales, suboficiales y soldados, hombres y mujeres, combatientes o del cuerpo profesional, no se preguntaron los por qué o los para qué. Simplemente fueron a cumplir con su deber de soldados. 

Pido a Dios nuestro Señor que tenga en su gloria a los caídos y proteja a nuestros veteranos y sus familias. Y que podamos mas temprano que tarde, ver cumplido el anhelo de volver a ver a flamear en forma definitiva el pabellón nacional en nuestras irredentas Islas Malvinas.

*Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.

PUBLICADA EN DIARIO PERFIL https://www.perfil.com/noticias/opinion/historia-de-heroes-y-lecciones-aprendidas.phtml