Por Mario R. Duarte Dossier Geopolitico (*)
“Un Hacktivista es un hacker que usa sus conocimientos informáticos para llevar a cabo acciones en el ciberespacio, con una finalidad y motivación política o ideológica”.
En pleno desarrollo de este convulsionado siglo XXI, de características multidimensionales en todo sentido, no cabe la menor duda que si a alguien le quedaban interrogantes pendientes o le faltara demostraciones concretas para entender y comprender que estamos, ante un nuevo cambio epocal, ante una nueva normalidad, ante un nuevo escenario de la historia, jamás antes visto, y en aras de un camino muy sinuoso todavía, en lo que respecta al ámbito digital, con una gran problemática aún pendiente de una solución real y definitiva, como es la regulación global del ciberespacio.
Y más allá de todo lo que hemos venido analizando, por nuestra parte como académicos especializados en la materia, a través del devenir de esta última década, las temáticas abordadas con debida seriedad y profundo análisis; con el transcurrir de los días, vamos observando que el fenómeno que nos rodea en el nuevo entorno por el que transcurre gran parte de nuestras vidas, no deja de sorprendernos, al decir y confirmar nuestros pronósticos emitidos tiempos atrás como una suerte de presagio, ante este universo desconocido, pero que día a día, lejos de ser ciencia ficción, se manifiesta como ciencia acción, ante los acontecimientos diarios.
Entre esos estudios que realizamos y contemplamos dentro de lo que se denomina la era de la digitalización o la cuarta revolución industrial, ha tomado mucho auge una temática o problemática por demás importante en la actualidad, que es el denominado Hacktivismo.
Para ello es preciso realizar un concepto lo más representativo posible de este accionar; por eso decimos que el Hactivismo es una palabra que surge de la fusión de otras dos: el término Hacker y el término Activismo. En lo que refiere al primer término, es decir Hacker, en general hace referencia a personas aficionados y/o expertos en materia informática; mientras que el Activismo es la acción directa y militante para conseguir una meta social, política o económica. Si bien, ambos términos mencionados están cargados de múltiples interpretaciones, definir el Hacktivismo se hace un poco complejo, pero es necesario entender el movimiento Hacktivista como en continuo cambio, evolucionando como un proceso abierto. En fin, el Hacktivismo, conocida como una cultura Hacker dentro del ciberespacio es: una forma de protesta realizada por aficionados o profesionales de la seguridad informática con fines reivindicativos de derechos, promulgación de ideas políticas o quejas de la sociedad en general, haciendo uso de los fallos de seguridad de la entidades o sistemas gubernamentales; es decir surge como un nuevo fenómeno, cuya base ideológica es el intercambio y apertura del conocimiento y la vulnerabilidad de derechos de propiedad intelectual que aprisionan el desarrollo del conocimiento.
Por último y con el fin de dar una forma conceptual basta y completa, decimos que así motivados por un fin político, social o económico aparecen los Hacktivistas, que de forma personal o colectiva llevan a cabo acciones contra la seguridad de los sistemas, para escribir códigos que promuevan ideologías políticas, libertad de expresión, derechos humanos y ética de la información, es decir pretenden producir resultados similares a los de cualquier otra forma de activismo social, como las protestas o desobediencia civil.
Pero ante el avance exponencial de la tecnología y los procesos disruptivos que acontecen día a día, minuto a minuto, y todo esto sumado a la nueva configuración de este nuevo orden mundial que asoma con nuevos actores emergentes en la multipolaridad que está naciendo ante un mundo nuevo, del cual emanan un sinfín de interrogantes, surge una multiplicidad de estudios y análisis que realizamos, los cuales no hacen afirmar con plena convicción que el Hacktivismo va mucho más allá de acceder clandestinamente a un sistema informático ajeno para difundir un mensaje reivindicativo.
Si bien algunos expertos expresan que el Hacktivismo surgió con los inicios de internet y ha participado en acciones antiterroristas o contra la corrupción. No obstante, la visión inocente que se tiene de esta forma de activismo digital ha hecho que muchos gobiernos se sientan tentados a utilizar a los Hacktivistas como herramientas para sus fines políticos.
Las reivindicaciones a menudo han estado ligadas a la tecnología. El uso de los carteles, las redes sociales o los métodos seguros y la criptografía reforzada para comunicar mensajes son solo algunos ejemplos de cómo el Activismo y la tecnología coinciden. Las redes sociales, por ejemplo, fueron fundamentales en las masivas movilizaciones de la década pasada. Las protestas del 2011, como Occupy Wall Street en Nueva York, el 15 M en España o las Revueltas Árabes, no se pueden entender sin Facebook o Twitter, al igual que las protestas de Hong Kong en 2019 sin Telegram o Pokemon Go.
Desde la creación de internet, muchos de sus usuarios han aprendido a manipular los sistemas informáticos ajenos sin autorización. A medida que internet conecta cada vez más cosas y a más personas; ahora en un escalón superior con la llegada de a poco con el Metaverso (el nuevo universo digital); es más atractivo utilizar estas habilidades para hacer llegar más lejos un mensaje político. Los Hacktivistas, repetimos, buscan forzar los cambios que quieren ver en el sistema accediendo y atacando a los ordenadores y las redes de comunicación de otros, y estas operaciones si bien le han otorgado cierta fama en la cultura popular, no hay que olvidar que estos actúan todas las veces que lo hacen en el marco de la Ilegalidad, es decir fuera de lo legal.
Una de las acciones clásicas del Hacktivismo es aumentar el tráfico de la página web de una empresa o institución, cualquiera sea su actividad, para colapsar sus servidores y dejarla inoperativa, ésta modalidad es conocida como ataque DDoS, otra conocida también es el Defacement (desfiguración), cuando se reemplaza el contenido de la página elegida, por los mensajes diseñados por los Hacktivistas, normalmente con fines reivindicatorios; de esta manera quien quisiera entrar en la página web, o no podría o vería la denuncia del Hacktivista, en vez del contenido habitual, a esto si lo pensamos a nivel gubernamental, seria para un gobierno una verdadera catástrofe, debido a que la mayoría de sus organismos o instituciones están en línea y funcionan a través de ella.
Algunos grupos Hacktivistas que podemos mencionar entre los más conocidos se encuentran: Electronic Disturbance Theater, The Yes Men, Guardians of Peace, Wikileaks, entre otros, pero el más conocido a nivel mundial es Anonymus, grupo que se hizo famoso en 2008 cuando le declara la guerra a la iglesia de la cienciología (secta popular entre las estrellas de Hollywood). Por definición, los grupos Hacktivistas no están afiliados a ningún Estado y actúan por cuenta propia, pero en muchas ocasiones gobiernos y Hacktivistas han encontrado objetivos comunes y han actuado codo a codo.
Ahora bien, en la actualidad y en lo que respecta al decir del grupo Anonymous y el Hacktivismo, están directa o indirectamente amen de la óptica en que se lo analiza, metidos de lleno en lo que se denomina la Primer Guerra Digital de la historia en el conflicto bélico entre Ucrania y Rusia. Anonymus le ha declarado la guerra al gobierno Ruso en la persona de su presidente Vladimir Putin, el ataque contra las webs del gobierno local de Chechenia y el central de Rusia, la filtración de 200 GB de correos electrónicos de la empresa de armamento Bielorrusa Tetraedr y las llamadas constantes en sus redes a combatir la desinformación son algunas de las acciones que ha llevado a cabo en los últimos días el colectivo hacker, esto se dio a conocer tanto en su cuenta de Twitter y Youtube. Sin dudas que esta es solo una de las caras más visibles del Poliedro cibernético y global que rodea el conflicto Ucrania-Rusia, donde ambas naciones se están lanzando Ataques de Denegación de Servicios DDoS; por eso ahora afirmamos que esta guerra que se lleva adelante en Europa es de carácter híbrida. Sin dudas que la nueva guerra bacteriológica es digital y tiene como objetivo neutralizar la viralidad del enemigo, un enemigo que va más allá de Ucrania, Rusia, EEUU o la OTAN, de lo que si hay certeza es que estamos viviendo la primer guerra digital de la historia y esperemos que esta no sea una de esas parte que ha anunciado hace un par de años atrás el Papa Francisco, la Tercer Guerra Mundial de a pedazos; y el agravante de todo esto sigue siendo en materia tecnológica la Falta de Regulación del Ciberespacio que es el entorno donde se desarrollan todas estas actividades digitales.
No cabe duda, de que los tiempos han cambiado y que, en ésta época inédita en la historia de la humanidad, pareciera ser lamentablemente que las guerras además de las movilizaciones de tropas ya sea tierra, aire o marítima, también comienzan simultáneamente con este nuevo elemento de la geopolítica que es el ciberespacio a través de ciberataques, tal cual lo anunciamos hace ya unos años atrás con diversos artículos sobre ciberataques, ciberguerras, y los diversos mecanismos que se utilizan en la actualidad para desvirtuar las ciertas cuestiones, como las fake news, deep fake, lawfare y un sin fin de nuevos mecanismos más, a los que hago alusión en mi obra bibliográfica: “Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégicos”.
Conscientes de las nuevas reglas de juego en la nueva normalidad en que nos encontramos inmersos, los gobiernos del siglo XXI expanden su control biopolítico a la esfera virtual y de ésta apreciación no queda exento ninguna potencia o país, ejemplos abundan; por eso es tiempo que empecemos a entender ya, que estamos transitando ante un horizonte desconocido y la mejor forma de predecir el futuro mejor es ir construyéndose día a día, con reglas claras de juego en donde la Regulación del Ciberespacio, una materia pendiente de los organismos multilaterales, sea efectiva realidad, para utilizar la tecnología en pos de una humanidad en donde empecemos a entender que si el Hacktivismo se usa para una actividad noble donde los verdaderos reclamos sean justos con el fin de ayudar a comprender esta nueva realidad, con más ciberseguridad, más ciber etica y más ciber transparencia, estaremos empezando a conocer el verdadero uso y objetivo de la social media.
(*) DR. MARIO RAMON DUARTE ABOGADO (UCASAL) – JUEZ ADM. MUN. FALTAS (M/C) – ESP. DERECHO PÚBLICO (UCSF) – MIEMBRO DOSSIER GEOPOLÍTICO (CÓRDOBA-ARG) – ACADÉMICO AICTEH (VALENCIA-ESPAÑA) – SEMINARISTA BIOLAW AND BIOETC (UNIV. GEOR.-EEUU)
Fuentes Consultadas
Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégicos. Autor: Mario Ramón Duarte Edit: Phillos Academy (2021)
https://www.lisainstitute.com/blogs/blog/hacktivismo-definicion-tipos-modus-operandi-motivaciones
http://blog.txipinet.com/2006/07/30/8-ntroduccion-al-hacktivismo/