16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios)

AUDIO

Carlos Pereyra Mele, inicia la última columna del año, expresando un sincero y merecido homenaje al Club de La Pluma y a su director, Norberto Ganci, quienes desde hace 16 años permiten a Dossier Geopolítico transmitir su visión mundial desde el sur de América, desde este hábitat y lugar de convivencia diaria, con unas reflexiones propias, profundas y diferentes a las poderosas potencias centrales, quienes usan sus medios de prensa como herramientas de poder, y para disimular su evidente declinación.

Y en nombre de todo este “tanque de Ideas”, despide un año muy productivo en el intercambio y divulgación de todo tipo de ideas y trabajos políticos, educativos, culturales y con conferencias por distintos medios, incluso desde universidades argentinas y brasileras Y siempre independiente de la financiación de cualquier grupo internacional, nacional, económico, o de poder. 

Luego de recordar la continuidad de los daños por la pandemia por el mundo, bastante menores para los países centrales por acaparar recursos y tecnologías, nuestro director se refiere a Afganistán como el hecho geopolítico más importante del año, ante la terrible y espantosa derrota militar completa de Estados Unidos y la OTAN y la apresurada huida tras 20 años de invasión y dominio, donde gastaron más de 2 billones de dólares para dejar un país más desmantelado, destruido y atrasado que antes, y sin asumir las características de una derrota que confirmó las caídas de sus potestades como centro mundial del poder, alcanzadas en los 90 tras el fin de la URSS, pero que solo mantuvieron por una década. Mientras persisten  tirando de la cuerda, amenazando y ampliando sanciones a los países que considera enemigos, buscando recuperar la vieja hegemonía perdida, y ya imposible de alcanzar. Unas consecuencias que se sintetizan en el fortalecimiento de Rusia y en el creciente éxito del plan geopolítico chino de unificar toda el Asia con parte de Europa y con parte de África. 

Xi Jinping apoya a Putin con las lineas Rojas rusas contra la OTAN/USA

A continuación, Carlos nos detalla dos hechos trascendentales de esta semana. Uno ha sido el apoyo de  Xi Jinping a Putin, respaldando sus exigencias a Biden sobre las líneas rojas rusas contra el avance de la OTAN en el Báltico y en Ucrania. Y el otro punto, que fue el acuerdo entre Rusia y China para comerciar por fuera del sistema bancario occidental “Swift”, lo que desmantelará esta herramienta financiera usada como arma por Washington en su guerra híbrida global, para chantaje y control de países.

Mientras recuerda que se cumple un año del acuerdo del RCEP firmado por China y 15 países asiáticos, ninguneado por la prensa occidental, pero avanzando con notorios resultados, y confirma que lo que hasta hace poco era una guerra entre Armenia y Azerbaiyán, se ha transformado en otro acuerdo estratégico gracias a la mano diplomática de Rusia, que alumbrará aparte de la paz, una línea ferroviaria – comercial de estos países con el resto del continente. Sin duda, son hechos concretos que están produciendo un profundo cambio en todas las estructuras de Asia, y que demuestran el gigantesco retroceso del imperio anglosajón en el mundo. 

Entretanto, en la UE  se agudiza el desconcierto y la división interna, resaltando la decisión de Alemania de no venderle más armas a Ucrania, lo que ha encolerizado a su presidente Selensky que ha vuelto a montar el típico show dramático de las “agresiones rusas”, pero que viene a demostrar que estos países fronterizos son señuelos sacrificables en la estrategia de Occidente, como si fuesen las cartas sin valor de un mazo de naipes global, con el que EEUU se juega el poder, usando y sacrificando a sus aliados.

También nuestro director nos explica al detalle, la bofetada histórica de los anglosajones a Europa por los submarinos australianos que la dejó en estado de somnolencia. Fue el precio de una maniobra para frenar a China con los acuerdos AUKUS Y QUAD, que el posterior acuerdo militar entre Rusia e India ha desmantelado. 

Y por último, Pereyra Mele comenta las elecciones en Chile donde el pinochetismo se juega el poder. Y también los informes occidentales que aseguran que Chile, Brasil y Colombia son los tres países sudamericanos con mayor posibilidad de sufrir profundas desestabilizaciones de todo tipo. Países alineados con Washington y con el neoliberalismo global, lo que indica que tal dependencia no ha servido para mejorar la situación de sus gentes.

 Eduardo Bonugli (Madrid, 19/12//21)

Trabajo Final, Diplomatura en Estudios Estratégicos Chinos Universidad de la Defensa UNDEF Argentina: análisis desde la visión clásica de los geopoliticos atlantistas occidentales y los continentalistas euroasiáticos  Por Carlos Alberto PEREYRA MELE 

Seleccione la consigna N8 La “Ruta de la Seda Marítima o Collar de Perlas” de la apuesta diplomática clave de Política Exterior China y su ambicioso giro hacia el Oeste incluyendo los fundamentos o críticas de la afirmación, su contexto histórico, económico, político y cultural y una reflexión personal. 

El llamado Collar de Perlas es la proyección geopolitica china, que nos permite establecer los gigantescos cambios de los paradigmas que controlan el “sistema mundo” y los “geopoliticos” que se avecinan, desde la conquista del Mundo por los Europeos (S XV-XVI) y muy especialmente desde que Juan Sebastián Elcano realizó la circunnavegación del mundo y lo dejo cerrado dándole a las potencias europeas la superioridad sobre otros continentes al poder colonizarlos, dominarlos y explotarlos, que con la primera y segunda revolución industrial, le permitio establecer su superioridad sobre los conquistados y globalizados según sus cánones políticos, culturales y económicos. Como hemos podido ver en el curso de está Diplomatura; hasta la mitad del S XIX los mercados y el PBI económico mundial seguía estando en Asia (China e India). Solamente recordar por ejemplo: la Ruta del famoso “Galeón de Manila”, La ruta española de México a Filipinas y el comercio con China nos recuerda la importancia que tenia ese mercado para los europeos, pues gran parte de esos productos luego viajaban a toda Europa vía Cadiz y Sevilla. Y que era disputado por todas las potencias navales del viejo continente.

Esto también nos debe poner la centralidad del presente análisis, lo que fue y es el control marítimo y su dominio, para construir poder, y recordar cómo se fue trasladando ese poder de estados-naciones europeos de países, como España y Portugal a Francia e Inglaterra fundamentalmente (especialmente Inglaterra “reina” de los mares desde 1805 -Batalla de Trafalgar- hasta primeras décadas del S XX) y desde 1898 como EEUU surgirá como la “nueva” potencia naval derrotando a España y capturando Cuba, Puerto Rico (en el Caribe), “su” mar mediterraneo, y la Isla de Guam y las Filipinas, en el Pacifico, lo que llevó al gran intelectual argentino de la generación de 1900:  Manuel Baldomero Ugarte (Buenos Aires, 1875 – Niza, 1951) a alertarnos con gran visión a hispanoamérica, sobre el nacimiento de la República Imperial Norteamericana con alcance global y sus consecuencia para los pueblos americanos al sur del río Bravo.

Desde la antigüedad se sabe de la importancia, para las navegaciones rudimentarias que utilizaban los recursos naturales como: corrientes marinas y los vientos, del control de los pasos marítimos y de los sistemas de islas para la logística y abastecimientos de flotas, un caso paradigmático es Gibraltar -que desde 1704 le permite a Inglaterra administrar, regular y controlar el paso del Mar Mediterraneo al Océano Atlántico hasta la fecha o el control del Canal de Suez por parte de Inglaterra que controló durante décadas -el paso del Mar Rojo al Mar Mediterraneo que lo transformó en un lago inglés al mismo o el control del Canal de Panamá que le dio a EEUU (1914) la llave del paso del Atlantico al Pacifico y viceversa, y que con Cuba y Puerto rico lo transformó en un lago norteamericano al Mar Caribe. Pero ese control de pasos marítimos no perdió importancia con el advenimiento de la navegación por el vapor y nuevas fuentes energéticas sino que se incrementó.

Mientras ello ocurría, en el llamado mundo “occidental”, en China se impondría un auto-aislacionismo en el Imperio del Centro a la navegación y expediciones de grandes flotas por diversos motivos, después de los grandes viajes del navegante Zheng He que les permitio llegar al sur del Pacifico, el Océano Índico, al Cuerno de África y el actual Yemen y las costas africanas hasta la altura del canal de Madagascar. Pero China decidió abandonar el tridente de Neptuno y tendría una consecuencia nefasta para su futuro cercano, que llegaría con el llamado “siglo de la Humillación” (1850/1949), invadida con las dos guerras del Opio por Inglaterra y las potencias europeas, y por EEUU y por Japón. Hasta el triunfo de la revolución comunista y la instauración de la República Popular China. Que modificara esa tendencia declinante, de pobreza, de hambrunas, atraso y dependencia del extranjero invasor.

Esto nos lleva a extraer una primera aproximación al tema elegido, que los alcance de la Nueva Ruta de la Seda y del Collar de las Perlas, es justamente una idea geopolitica que saca a China del encierro geográfico que se le impuso y que tienen en cuenta las teoría de los clásicos anglosajones de la Geopolitica como:

A1: Halford John Mackinder -15 de febrero de 1861 – 6 de marzo de 1947- y sus seguidores estadounidenses como Nicholas John Spykman -13 de octubre de 1893 – 26 de junio de 1943- y Almirante Alfred Thayer Mahan, -27 de septiembre de 1840, West Point, Nueva York-1 de diciembre de 1914- Todos estos teóricos del poder naval y el control de las rutas comerciales -Talasocracias o atlantistas-, que se enfrenta a las teorías de los llamados continentalistas. 

A2: como el aleman Karl Ernst Haushofer -Múnich, 27 de agosto de 1869 – Pähl, 13 de marzo de 1946- y de pensadores geopoliticos rusos como Alexander Duguin.

¿Por qué decimos esto?: Vivíamos en un mundo dominado por Estados Unidos pero que de cierto modo estaba organizado por tratados internacionales. Sin embargo, eso se está viniendo abajo. Controlar territorios es un concepto importante para los Estados más poderosos. Eso les brinda poder económico y apoyo militar.

A1: La Teoría de  Mackinder de 1904 que marcó profundamente la geopolítica durante décadas del siglo pasado y que ahora está nuevamente de vuelta. En aquella época, los océanos eran dominados por la marina británica, lo cual era crucial para que una isla como Gran Bretaña sostuviera su gran imperio. Sin embargo, Mackinder pensó que esta situación se encontraba amenazada y fue ahí donde comenzó a profundizar sobre lo que él llamaba el «Heartland» (Corazón de la Tierra) de Eurasia. Mackinder pensó que un área tan extensa y rica, que a la vez podía ser recorrida con un sistema ferroviario, era una zona clave para los países con ansias de poder. «Quien domina el este de Europa, domina Heartland, quien domina Heartland, reina en la ‘Isla del Mundo’, quien domina la ‘Isla del Mundo’, gobierna el mundo entero«, según la teoría de Mackinder. Pero no incluye a China en sus análisis centrales, que vivía el periodo de la humillación (Pero China sus estrategas y geopoliticos si estudiaron está teoría, evidentemente). El continuador estadounidense Spykman de esa teoría no piensa que el heartland, «ese pivote geográfico del mundo», esa centralidad según un enfoque económico-geográfico, se encuentre localizado en Europa central / Rusia sino en una zona periférica, sobre el litoral o sobre una cuenca. Según él, el centro del mundo está compuesto de tierras litorales, las coastlands de Mackinder a las que llama «borde de tierras» o «anillo de tierras» o «borde de cuencas», el rimland.​ Este territorio periférico estaría atrapado entre el corazón europeo (Alemania, Rusia), y los mares tutelados por los ingleses. Pero después de la 2da Guerra Mundial es evidente que se establece la geoestrategia de EEUU en el control y cerco al mundo euroasiático controlado por la ex URSS, al cual en 1949 se incorpora China en ese bloque que debía ser aislado, dividido y contenido. Qué en la práctica geoestratégica, es lo que vemos con el desplazamiento hoy del eje de contención, de Medio Oriente y Europa al Pacifico-Indico desde las administraciones de Obama para aquí? 

A2 Contrario sensu, el continentalismo encabezado por Haushofer teorizaba que su país Alemania, humillado tras la gran guerra, podía formar una gran alianza con Rusia, Persia y Japón y así cortar los tentáculos del poder naval británico. Y luego con la Guerra Fría, por ello Estados Unidos estableció una serie de bases alrededor de los bloques dominados por los soviéticos, desde Alemania hasta Italia, Turquía, Corea del Sur y Japón. Pero en 1991 ese esquema se disolvió con la implosión soviética y con el acuerdo Chino estadounidense de Mao y Nixon. En 1997, el pensador ruso Dugin expresó sus ideas en un libro llamado The Foundations of Geopolitics,  «En geopolítica, hay dos polos absolutos de poder. Está el poder naval, que pertenece a Occidente, y el poder terrestre, que es Rusia. Hay una pelea por controlar Heartland. Como decía Mackinder, quien controla el este de Europa, controla Heartland. Y quien controla Heartland, domina el mundo», dijo en una conferencia en Shanghái. Pero nuevamente esa posición no incorporaba totalmente a China como algo central en este despliegue del nuevo orden mundial multipolar de tres cabezas China, EEUU y Rusia. Y que además lo estamos comprobando, que se manifiesta con el proyecto de la Nueva Ruta de la Seda y el Collar de Perlas que se centra, cada día mas con una alianza mas profunda euroasiática, entre China y Rusia como eje. Y que se expresa en una  gran variedad de proyectos de cooperación, de infraestructura marítima y desarrollo de la cadena de valor centrados en la integración del mercado, y el desarrollo de la cadena de valor  comercial, que otorgaron al gigante asiático el estatus de “potencia global”. Pero también en Acuerdos sobre Seguridad y Defensa

REFLEXIÓN FINAL: Ahora bien: El territorio euroasiático ha sido testigo del crecimiento de un nuevo poder, un nuevo emergente para disputar el control de la región pero de alcance global. Si Mackinder viviera hoy; quizás estaría mas preocupado de las extensas redes ferroviarias, caminos, puentes, túneles, aeropuertos, puertos, gasoductos, oleoductos, etc., que China está construyendo a lo largo de todo el continente. Y su versión naval el Collar de Perlas y que por ejemplo tiene una importancia central El CECP (China Pakistán)  que incluye la modernización de carreteras, ferrocarriles, gasoductos y otros grandes proyectos de infraestructura desde la costa paquistaní del Mar Arábigo hasta la frontera noreste del país, que limita con China.Con el Puerto de Gwadar hacia la región del Golfo Pérsico y Medio Oriente y una posición ventajosa para tener mayor influencia en África, así como en el sur y centro de Asia, evitando el estrecho de Malaca. Otra realidad será con seguridad el nuevo rol de un Yemen estabilizado que será parte fundamental de nexo entre Asia, África y Europa en está red de puertos. Como lo son los acuerdos geoestratégicos de una alianza en gestación Chino-Rusa, que se contrapone a la revisión de la Postura Global del Pentágono, que se anunció el lunes, que señala una postura global y la intención de desarrollar una «capacidad de respuesta global» que abarque no solo el Indo-Pacífico y Europa, sino que también incluya «requisitos de postura duradera» en el Medio Oriente, en África y en América Latina. Por eso, países del «sur global» como el nuestro, nos guste o no, van a quedar en el medio de un escenario global de disputas y confrontaciones entre el «mundo euroasiático» que avanza y los EEUU, en un mundo que se ha achicado dramáticamente y que hoy parece un «vecindario populoso». Un problema de magnitud como el que se nos presenta, que además desconocemos está nueva realidad: como la reciente Asociación Económica Regional Integral o RCEP, o el Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras – BAII o la cada vez mas poderosa Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), para no dejarnos alinear tipo manu militari o tratando de responder a todas las presiones simultáneamente. todas son acciones de naturaleza Geoestratégica, y no se pueden pensar y resolver sin tener presente este escenario global en que nos encontramos. Pero también los tiempos difíciles son también tiempos de oportunidades.

Por ello consideramos que 5 siglos de dominio absoluto occidental y en especial anglosajón han llegado a su fin”…y se abre un abanico de nuevas oportunidades como también de desafíos de gran calado a los pueblos del Sur y a nuestro subcontinente suramericano por encima de idiologismo que nos atosigan y nos confunden.

Lic. Carlos Alberto Pereyra Mele

Director de Dossier Geopolitico

Córdoba, Argentina, Diciembre de 2021 

Fuentes: Diccionario latinoamericano de seguridad y geopolítica. Coautor Editorial Biblos 2009 – Artículos propios y periodísticos Extranjeros

Los estrechos desde la Antiguedad hasta la actualidad siguen siendo el Control de la navegacion

CURSO PESA 2021 AQUI PROGRAMA DE LA DIPLOMATURA SOBRE ESTUDIOS ESTRATEGICOS DE CHINA UNDEF ARGENTINA

Los halcones de Washington flotan para expulsar a Rusia de SWIFT, pero la incipiente alianza geoeconómica de Moscú con Beijing mantendrá el flujo de dinero

Pepe Escobar 16 de diciembre de 2021

Xi Jinping y Vladimir Putin pasaron una hora y 14 minutos en una conversación por video el miércoles. Geopolíticamente, allanando el camino para 2022, este es el que realmente importa, mucho más que Putin-Biden hace una semana.

El secretario de prensa del Kremlin, Dmitry Peskov, quien generalmente mide cuidadosamente sus palabras, había insinuado anteriormente que este intercambio sería «extremadamente importante».

Era obvio que los dos líderes no solo intercambiarían información sobre el gasoducto Power of Siberia 2. Pero Peskov se refería a la geopolítica del horario de máxima audiencia: cómo Rusia-China coordinarían sus contragolpes contra el combo guerra híbrida / Guerra Fría 2.0 desplegado por Estados Unidos y sus aliados.

Si bien no se esperaban filtraciones sustanciales de la 37a reunión entre Xi y Putin desde 2013 (se volverán a encontrar en persona en febrero de 2022, al comienzo de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing), el asistente del presidente de Política Exterior Yuri Ushakov logró Entregue sucintamente al menos dos bits importantes de información.

Estos son los aspectos más destacados de la convocatoria:

Moscú informará a Pekín sobre el progreso, o la falta del mismo, en las negociaciones con Estados Unidos / OTAN sobre garantías de seguridad para Rusia.
Beijing apoya las demandas de Moscú a EE.UU. / OTAN por estas garantías de seguridad.
Putin y Xi acordaron crear una "estructura financiera independiente para las operaciones comerciales que no podrían ser influenciadas por otros países". Fuentes diplomáticas, extraoficialmente, dicen que la estructura puede ser anunciada por una cumbre conjunta a fines de 2022.
Hablaron de la “Cumbre por la Democracia” organizada por Biden, concluyendo que era contraproducente e impuso nuevas líneas divisorias. 

De todo lo anterior, el tercer punto es el que realmente cambia las reglas del juego: ya se está trabajando desde hace algunos años, y está ganando un impulso definitivo después de que los halcones de Washington del tipo Victoria Nuland presentaran recientemente la idea de expulsar a Rusia de SWIFT, la vasta red de mensajería utilizada por los bancos y otras instituciones financieras para realizar instrucciones de transferencia de dinero, como el paquete de sanciones definitivo para la no invasión de Ucrania.

Putin y Xi discutieron una vez más uno de sus temas clave en las reuniones bilaterales y BRICS: la necesidad de seguir aumentando la participación del yuan y el rublo en acuerdos mutuos, sin pasar por el dólar estadounidense, y abriendo nuevas vías bursátiles para los inversores rusos y chinos.

Pasar por alto un mecanismo SWIFT «influenciado por terceros países» se convierte en una necesidad. Ushakov lo expresó diplomáticamente como «la necesidad de intensificar los esfuerzos para formar una infraestructura financiera independiente para dar servicio a las operaciones comerciales entre Rusia y China».

Las empresas energéticas rusas, desde Gazprom hasta Rosneft, saben todo lo que hay que saber no solo sobre las amenazas estadounidenses, sino también sobre los efectos negativos del tsunami de dólares estadounidenses que inundó la economía mundial a través de la flexibilización cuantitativa de la Fed.

Este impulso Rusia-China es otra dimensión más del poder geoeconómico, geoestratégico y demográfico que se desplaza rápidamente hacia Eurasia y posiblemente presagia el advenimiento de un nuevo sistema mundial relacionado con otros asuntos que Putin-Xi ciertamente discutió: la interconexión de la Franja y la Ruta con la Unión Económica Euroasiática (EAEU), el alcance ampliado de la Organización de Cooperación de Shanghái (SCO) y la próxima presidencia china de BRICS en 2022.

Estados Unidos, con una deuda de 34 billones de dólares, el 236% de su PIB militarizado, está prácticamente en bancarrota. Rusia-China ya ha experimentado con sus sistemas de pago alternativos, que inevitablemente se integrarán.

Los bancos más importantes de ambos países adoptarán el sistema, así como los bancos de Eurasia que hacen negocios con ellos, y luego vastas franjas del Sur Global. SWIFT, a largo plazo, se utilizará solo en casos excepcionales si China y Rusia se salen con la suya.

MAIDAN REDUX

Ahora el corazón del rompecabezas geopolitico.

Ushakov confirmó que la Federación de Rusia ha presentado propuestas sobre garantías de seguridad a Estados Unidos. Como el propio Putin había confirmado incluso antes de hablar con Xi, se trata de «seguridad indivisible»: un mecanismo que ha sido consagrado en todo el territorio de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa desde una cumbre de 1975 en Helsinki.

Como era de esperar, bajo las órdenes de los poderes fácticos, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ya lo rechazó.

Tanto Xi como Putin identifican claramente cómo el Equipo Biden está desplegando una táctica de polarización estratégica bajo el viejo divide y vencerás. La ilusión en juego es construir un bloque pro-estadounidense – con participantes que van desde el Reino Unido y Australia hasta Israel y Arabia Saudita – para «aislar» Rusia-China.

Eso es lo que se esconde detrás de la narrativa que estalló estruendosamente sin parar en todo Occidente, a la que también estaba vinculada la Cumbre para la Democracia de Biden. Taiwán está siendo manipulado contra Pekín, mientras que Ucrania está siendo literalmente armada contra Rusia. La «agresión de China» se encuentra con la «agresión de Rusia».

Beijing no ha caído en la trampa, pero ha afirmado en diferentes niveles que Taiwán eventualmente se integrará en la patria continental, sin ninguna «invasión» ridícula. Y la ilusión de que la presión estadounidense masiva conducirá a grietas dentro del Partido Comunista Chino probablemente también esté generando tracción cero.

Ucrania es una propuesta mucho más volátil: una pesadilla disfuncional de inestabilidad sistémica, corrupción generalizada, turbios enredos oligárquicos y pobreza.

Washington todavía sigue el plan Maidan elaborado por Zbigniew Brzezinski y presentado para el distribuidor de galletas Nuland en 2014. Sin embargo, siete años después, ningún «estratega» estadounidense logró entender por qué Rusia no invadió Ucrania, que ha sido parte de Rusia durante siglos.

Para estos «estrategas», es imperativo que Rusia se enfrente a un segundo Vietnam, después de Afganistán en la década de 1980. Bueno, no va a suceder porque Moscú no tiene ningún interés en «invadir» Ucrania.

Se vuelve más complicado. El miedo final, dictar toda la política exterior de Estados Unidos desde principios del sglo 20 º es la posibilidad de Alemania de alzarse con una nueva versión de 1887 Tratado de Reaseguro de Bismarck con Rusia.

Agregue China a la combinación y estos tres actores podrán controlar casi toda la masa continental euroasiática. Actualizando Mackinder, Estados Unidos se convertiría en una isla geopolíticamente irrelevante.

Putin-Xi puede haber examinado no solo cómo las tácticas de guerra híbridas imperiales contra ellos se tambalean, sino también cómo las tácticas están arrastrando a Europa hacia el abismo de la irrelevancia.

Para la UE, como señala el ex diplomático británico Alastair Crooke, el equilibrio estratégico es un desastre: “La UE virtualmente ha roto sus relaciones con Rusia y China, al mismo tiempo. Los halcones de Washington lo querían. Un ‘Brzezinski europeo’ sin duda habría aconsejado a la UE de otra manera: nunca pierdas a ambos a la vez, nunca eres tan poderoso ”.

No es de extrañar que el liderazgo en Moscú-Beijing no pueda tomar en serio a nadie en Bruselas, ya sea una variedad de chihuahuas de la OTAN o la espectacularmente incompetente Ursula von der Leyen en la Comisión Europea.

Un débil rayo de luz es que París y Berlín, a diferencia de la Polonia rusófoba y la franja báltica, al menos prefieren tener algún tipo de negociación con Moscú sobre Ucrania en lugar de imponer sanciones adicionales.

Ahora imagine al ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, explicando el ABC de la política exterior a una despistada Annalena “Grune” Baerbock, que ahora se hace pasar por ministra de Relaciones Exteriores de Alemania y muestra una nueva mezcla de incompetencia y agresividad. De hecho, hizo la llamada telefónica.

Lavrov tuvo que explicar meticulosamente las consecuencias de la expansión de la OTAN; el acuerdo de Minsk; y cómo Berlín debería ejercer su derecho a presionar a Kiev para que respete a Minsk.

No se deben esperar filtraciones al respecto de Ushakov. Pero es justo imaginar que con «socios» como Estados Unidos, la OTAN y la UE, Xi y Putin deberían concluir que China y Rusia ni siquiera necesitan enemigos.

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios)

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El director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, en su columna de geopolítica del Club de La Pluma, comenta la actuación en esta semana del anciano presidente de EEUU, en dos “show mediáticos”. Uno de ellos, su Cumbre por la Democracia, con la presencia de dictaduras, estados  incumplidores de los derechos humanos y subversivos a las resoluciones de la ONU, “aunque amigos”. Y la videoconferencia con Putin, anunciada como “un mano a mano”, pero donde solo el ruso cumplió con el desafío, ya que Biden necesitó de 4 asesores para hacerle frente y ni así logró moverle un pelo al euroasiático.

Aunque para Carlos, la única gran noticia que hay, no es otra que EEUU ha reconocido con esta reunión que Rusia es un jugador de primer nivel mundial, que es parte del poder multipolar junto a China y que es una potencia en ascenso a pesar de la implosión de URSS en 1991, que dejó entonces la hegemonía mundial en manos del imperio norteamericano. Un poder que apenas pudo conservar por una década, en la que desmembró aquella potencia en 19 estados ingobernables, Ucrania incluida, pero donde hoy ha resurgido Rusia, para compartir el poder global y desnudar el fracaso y la decadencia de Occidente, en solo 30 años

Y entrando en geopolítica, reitera que los famosos cinco siglos de dominio occidental están llegando a su fin, lo que evidencia el fracaso de su estrategia de impedir que el mundo euroasiático, específicamente Rusia y China, se unifican y pudieran desarrollar todas sus potencialidades, siempre con conflictos creados por sus inteligencias, que también utilizaron, según coyuntura, a algún país europeo para impedir una alianza rusa europea, tanto en la guerra fía como en la actualidad. Y nos analiza cómo aquel poder absoluto sobrevenido en 1991 le llevó a EEUU a creerse dueño absoluto del mundo, del poder militar y del sistema económico, lo que a la postre lo debilitó profundamente. Porque las naciones asiáticas fueron tan arrinconadas por Occidente con una infernal panoplia de sanciones, de guerras comerciales, de obstáculos, de amenazas, etc., que el resultado fue el inverso al buscado, provocando que, ante tanta adversidad, las relaciones ruso chinas se profundizará en lo comercial, en lo económico y en todos tipo de aspectos, pero sobre todo en la geoestrategia de formar un bloque de poder mundial que ya ha salido a la luz. Todo un cambio geopolítico profundo y trascendente, que fue anticipado y advertido por nuestro director durante años, en esta columna y en otros medios alternativos.

Y nos detalla el gran avance de Eurasia, con su Ruta de la Seda china, con el Collar de Perlas, con la Asociación de Cooperación de Shanghái, con el acuerdo del mayor Tratado de Libre Comercio del mundo el RECEP con 15 países asiáticos que incluyen a Japón y Corea del Sur. El nuevo sistema ferroviario China – Laos que llegará a Singapur y a Vietnam, de los tratados comerciales, estratégicos, económicos y militares con Irán (siempre ninguneado, olvidado y castigado por Occidente) y… del trascendental acuerdo firmado el 6 de diciembre pasado entre la Federación Rusa con India para  potenciar la industria militar, el comercio y la colaboración en defensa, que rompe la estrategia de la OTAN  con sus tratados del QUAD y AUKUS. Mientras que Emiratos Árabes rompe su alianza con Arabia Saudita y crecen los indicios del triunfo de los hutíes en la guerra del Yemen contra los saudíes, apoyados por Israel y armados por los atlantistas.

Y Carlos finaliza la columna en Sudamérica, con los datos de la CEPAL que muestran que el  35% del comercio regional es con China, mientras que con EEUU apenas alcanza al 15% además de concentrarse en México, Colombia y Las Guayanas, y con la salvedad de que en los países ideológicamente más cercanos a Washington, la relación comercial con China sigue creciendo.

Y reflexiona con que los cambios que se avecinan con esta realidad son profundisimos y obligan a analizar seriamente el escenario para tomar decisiones importantes y acertadas en relación al presente y al futuro.

Eduardo Bonugli (Madrid 12/12/21)

TROPAS RUSAS EN INDIAS EN MANIOBRAS MILITARES
S400 RUSOS VENDIDOS A LA INDIA A PESAR DE LAS AMENAZAS DE SANCIONES POR EEUU

GEOPOLÏTICA – El 6 de octubre en Nueva Delhi se produjo la cumbre entre Putin y Modi, que alumbró la «Asociación para la Paz, el Progreso y la Prosperidad», que Rusia e India acordaron en un documento de 99 puntos, que tal vez sea uno de los sucesos diplomáticos mas relevantes en lo que va del siglo XXI, porque puede cambiar el juego geoestratégico global, potenciando y consolidando el nuevo orden multipolar. Sin embargo, poco se ha hablado sobre este evento y muy pocos comentarios sobre su importancia y trascendencia.

Este articulo hace un reflexivo análisis sobre el tema que merece la atención de ustedes, y el estudio detenido de los vectores que resultan de su proposición porque nos da la posibilidad de observar el flujo de las dinamicas geopoliticas, que no son blanco o negro, sino que admiten diversos matices. En mi opinión Rusia está llevando adelante una diplomacia muy sutil y delicada, muy pensada como en un juego de ajedrez, que para mi cuenta con la aquiescencia o consentimiento de la República Popular China con quien está convergiendo en una alianza estratégica. A. Mitre para Dossier Geopolitico

La Cumbre Putin-Modi: ¿Un cambio de juego geoestratégico global? Una alianza de equilibrio 

Andrew Korybko 10 de diciembre Global Research

La alianza de «equilibrio» de facto entre Rusia e India a nivel hemisférico que se acordó durante la Cumbre Putin-Modi de esta semana es uno de los desarrollos diplomáticos más importantes de este siglo hasta ahora. Es verdaderamente un cambio de juego geoestratégico global debido al papel insustituible que pretende desempeñar en la actual Nueva Guerra Fría entre Estados Unidos y China.

La cumbre de importancia mundial

La visita del presidente ruso Putin a Nueva Delhi para reunirse con el primer ministro indio Modi fue un acontecimiento que cambió las reglas del juego desde el punto de vista geoestratégico en el contexto de la Nueva Guerra Fría en curso. La “Asociación para la Paz, el Progreso y la Prosperidad” que ambas partes acordaron equivale a una alianza de facto en todo menos en el nombre y se basa en su “Tratado de Paz, Amistad y Cooperación” de 1971 de hace exactamente medio siglo. Este documento de 99 puntos tiene como objetivo alinear los actos de «equilibrio» de ambas grandes potencias en todo el hemisferio oriental para optimizar al máximo su impacto en la configuración de la dinámica del orden mundial multipolar emergente. Se puede considerar como uno de los desarrollos diplomáticos más importantes de este siglo hasta el momento y probablemente seguirá siendo relevante durante décadas.

Informe de antecedentes

El autor esboza los contornos de sus grandes estrategias complementarias en las siguientes piezas: 16 de mayo de 2020: «Las perspectivas de Rusia e India liderando conjuntamente un nuevo movimiento de países no alineados» – 17 de febrero de 2021: «Por qué los realistas estructurales se equivocan al predecir que Rusia ayudará a Estados Unidos contra China» – 7 de octubre de 2021: “Hacia la bi-multipolaridad”Lo que viene a continuación es un resumen simplificado de la información compartida anteriormente.

Actos complementarios de «equilibrio»

Básicamente, tanto Rusia como India aspiran a «equilibrar» las consecuencias de la Nueva Guerra Fría principalmente entre Estados Unidos y China, aunque hasta ahora lo han estado haciendo de diferentes maneras: Rusia se alineó más cerca de China mientras que India hizo lo mismo con Estados Unidos. Las sospechas mutuas sobre la gran intención estratégica de cada uno que esto provocó se resolvieron finalmente a principios de este año. Rusia e India se dieron cuenta de que pueden hacer más si coordinan sus políticas. Esto explica la cláusula 93 de su pacto de asociación reafirmado que declara que «Las partes acordaron explorar áreas de cooperación mutuamente aceptables y beneficiosas en terceros países, especialmente en Asia Central, Sudeste Asiático y África».

El «NEO-NAM»

Esa política equivale informalmente a un intento de organizar una red hemisférica de estados «no alineados» que comparten el interés de Rusia e India en el «equilibrio» entre Estados Unidos y China. En otras palabras, es el prototipo del «Neo-NAM» sobre el que el autor escribió en mayo de 2020 para la revista oficial del Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO, que está a cargo del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia). Como explicó en la publicación militar India Force hace dos meses, esto tiene como objetivo permitir que ambas grandes potencias se adapten de manera flexible a las circunstancias geoestratégicas en constante cambio de la Nueva Guerra Fría a través de lo que se describe como su visión de «bi-multipolaridad».

La ley de «equilibrio» indo-chino de Rusia

Es crucial aclarar que Rusia no tiene intenciones de infringir los intereses de China, incluso si algunos en la India desearían secretamente que lo hiciera o al menos pudiera ser engañado para hacerlo. Más bien, la Gran Potencia euroasiática entiende que tiene la responsabilidad de desempeñar un papel insustituible en la gestión pragmática de las tensiones entre sus compañeros BRICS y SCO para contrarrestar los incesantes intentos de Estados Unidos de dividirlos y gobernarlos. Moscú parece haber aceptado que si esta rivalidad no desaparece por algún tiempo, entonces el Kremlin debe buscar asegurarse de que no conduzca a otro conflicto similar al de Galwan que podría escalar a una guerra convencional total en el peor de los casos.

«Diplomacia Militar»

Con esto en mente, Rusia está practicando lo que se puede describir como “diplomacia militar” o el uso de medios militares para lograr fines políticos. En este caso, se trata de exportar armas igualmente estratégicas y de alta calidad a los rivales China e India para mantener el equilibrio de poder entre ellos con miras a alentarlos posteriormente a resolver sus disputas por medios políticos en lugar de militares. Esto contrasta con la práctica estadounidense de la «diplomacia militar», que intenta dar a su socio preferido en cualquier par de rivales la ventaja militar para alentar intentos agresivos de resolver las disputas existentes de manera unilateral en lugar de a través de una serie de compromisos políticos

RIC

El cálculo del Kremlin es que si la India se va a armar hasta los dientes de todos modos, entonces es mejor que lo haga con armas rusas que con las estadounidenses. Si bien, es comprensible que China se sienta incómoda con el aumento militar masivo de la India, parece preferir discretamente que Rusia la ayude a que sea Estados Unidos, si parece inevitable. Eso, a su vez, podría permitir a Moscú gestionar de forma más eficaz la perniciosa influencia de Washington de dividir y gobernar sobre Nueva Delhi y, con suerte, estabilizar los asuntos euroasiáticos. La prueba de este concepto en la práctica se vio a fines del mes pasado durante la reunión de Ministros de Relaciones Exteriores Rusia-India-China (RIC) que se llevó a cabo a pesar de las tensiones existentes entre China y la India, probablemente debido al papel mediador de Rusia

Nuevas dinámicas de la Guerra Fría

China no cree en plantear opciones de suma cero a sus socios como lo hace EE. UU., Pero se verá cada vez más obligada por la dinámica hipercompetitiva de la influencia estadounidense de la Nueva Guerra Fría a aceptar que se está presionando a terceros países para que elijan entre Beijing. y Washington. Esto podría colocar a esos estados en posiciones muy desafiantes ya que su cooperación con China es mutuamente beneficiosa, pero también temen la ira de la Guerra Híbrida de los EE. UU. si no se someten a las demandas de EE. UU. de distanciarse de la República Popular, como lo demuestra el alto perfil. ejemplo que Washington está tratando de hacer con Etiopía después de su negativa en principio a hacerlo.

La «válvula de presión» geopolítica

Lo que se necesita con urgencia es una «válvula de presión» para proporcionar a esos países la llamada «tercera opción» mediante la cual, con suerte, puedan lograr un equilibrio entre ambas superpotencias sin ofender inadvertidamente a una u otra. Ahí radica la gran importancia estratégica del Neo-NAM que el autor propuso que fuera liderado conjuntamente por Rusia e India. El primero mencionado se percibe como cercano a China, mientras que el segundo se considera más cercano a los EE.UU., Sin embargo, han demostrado su autonomía estratégica a través de la última Cumbre Putin-Modi. Rusia continúa armando a India hasta los dientes a pesar de las preocupaciones de China, mientras que India continúa comprando armas rusas a pesar de las amenazas de sanciones de Estados Unidos por hacerlo.

Alcance hemisférico

Su declaración de intención de cooperar en terceros países de Asia central, el sudeste asiático y África involucra significativamente los mayores escenarios de rivalidad en la Nueva Guerra Fría entre Estados Unidos y China y, por lo tanto, puede permitir que estas dos Grandes Potencias optimicen al máximo su complementariedad en todo el hemisferio «. actos de «equilibrio». También existe la posibilidad de que amplíen su cooperación para incluir a Asia Occidental teniendo en cuenta las estrechas relaciones que ambos disfrutan con Irán, Israel y los Emiratos Árabes Unidos. Cuando uno recuerda que también se comprometieron a trabajar más juntos en las regiones del Ártico ruso y el Lejano Oriente, se puede ver que su alianza de «equilibrio» de facto realmente abarca todo el hemisferio oriental.

La dimensión europea

Si bien puede que no tenga un gran impacto directo en Europa en Eurasia occidental, sí tiene uno muy influyente en lo que respecta a sus consecuencias indirectas. El Corredor de Transporte Norte-Sur (NSTC) entre ellos a través de Irán y Azerbaiyán tiene como objetivo facilitar el comercio UE-India a través de Rusia, mientras que la posible expansión del Corredor Marítimo Vladivostok-Chennai (VCMC) para incluir la Ruta del Mar del Norte (NSR) a través del Ártico. para conectar los océanos Atlántico y Pacífico podría lograr este fin económico a través de medios marítimos para complementar el componente continental del NSTC.

Hacia un «Pacto de no agresión» ruso- estadounidense

Algunos escépticos podrían cuestionar la viabilidad política de que Rusia facilite el comercio entre la UE y la India (ya sea por vía continental o marítima) considerando las intensas tensiones entre Moscú y Occidente, pero es aquí donde deberían contemplar la intención detrás de las dos últimas Cumbres Putin-Biden. Su objetivo es regular responsablemente su rivalidad para que finalmente puedan llegar a un llamado «pacto de no agresión». Este resultado sería mutuamente beneficioso, ya que le permitiría a EE. UU. redirigir más de sus recursos militares y de otro tipo al «Indo-Pacífico» para «contener» a China de manera más agresiva, mientras se restablecen las relaciones entre la UE y Rusia para mejorar las economías en dificultades de los demás.

La facción anti rusa del «Estado Profundo» estadounidense

Este escenario sigue dependiendo de la capacidad de la Administración Biden para administrar la facción anti-rusa de las burocracias militares, de inteligencia y diplomáticas permanentes de los EE. UU. («Estado profundo») que están tratando de sabotear el esperado «pacto de no agresión» de estos dos mediante el aprovechamiento su red de influencia en los países bálticos Polonia y Ucrania para provocar otra crisis Este-Oeste. En este momento, su rival (la facción anti china), anticipo es predominante con respecto a la formulación de la gran estrategia de Estados Unidos, como lo evidenciaron las dos últimas Cumbres Putin-Biden. Este cambio en la dinámica del «estado profundo» de EE. UU. fue el legado más perdurable del expresidente estadounidense Trump y fue heredado por Biden, como se acaba de argumentar.

Pensamientos concluyentes

Volviendo al tema de este análisis, la alianza de «equilibrio» de facto entre Rusia e India en todo el hemisferio que se acordó durante la Cumbre Putin-Modi de esta semana es uno de los desarrollos diplomáticos más importantes de este siglo hasta el momento. Es verdaderamente un cambio de juego geoestratégico global debido al papel insustituible que pretende desempeñar en la actual Nueva Guerra Fría entre Estados Unidos y China. Es de suma importancia que los observadores reconozcan esta realidad emergente a fin de formular las políticas más efectivas para que sus países se adapten a ella. El eje ruso-indio es ahora uno de los más importantes del mundo y probablemente lo seguirá siendo durante décadas, quizás incluso durante el resto del siglo XXI.

Las fuentes de energía tradicionales se agotan y los países compiten entre ellos para garantizar el suministro energético a su población

ALBA FERNÁNDEZ CANDIAL

La escasez de energía a nivel global ocupa portadas y titulares desde hace meses y se ha convertido en uno de los temas de debate más comentados por la población. ¿Nos quedaremos sin combustible en algún momento? ¿Habrá suficiente energía para activar la calefacción en invierno?

En Europa, los diferentes gobiernos han empezado una puja de precios por el gas que ha alcanzado récords históricos: la demanda es muy alta pero la producción de gas es limitada, así que quien pague más dinero será quien consiga garantizarse el suministro. Además, el mercado europeo del gas también está condicionado por varios intereses políticos, alianzas y conflictos que dificultan todavía más su distribución.

Las reservas europeas de gas son pequeñas, así que el continente depende de otros países productores. Europa tiene tres proveedores principales: Rusia, que llega a varios países del norte y este de Europa; Noruega, que abastece a los países nórdicos y el centro de Europa, y Argelia, que abastece principalmente a los países del Mediterráneo.

Gasoductos a Europa: Rusia 39,7%; Noruega 34,1%; Argelia 15,2%; Qatar 5,1%; Nigeria 2,1%; Libia 1,4%

Rusia proporciona más de una tercera parte del gas que se consume en toda Europa y eso le da cierto poder a la hora de presionar o conseguir ventajas en otras negociaciones políticas. Por ejemplo, en la construcción del nuevo gasoducto Nord Stream 2, que llevará el gas directamente de Rusia a Alemania.

Hasta ahora, la mayoría del gas ruso se distribuye a través de gasoductos que pasan por Ucrania, cuyo gobierno está enfrentado con el gobierno ruso. El paso de estos gasoductos reporta centenares de millones de euros a Ucrania en concepto de derechos de tránsito. Por eso, el presidente Vladimir Putin ha presionado para crear un nuevo recorrido alternativo por Alemania y así perjudicar al gobierno ucraniano.

Ahora bien, la Unión Europea no ve con buenos ojos que Putin utilice el gas para aumentar su influencia sobre Europa. Tampoco ve bien los movimientos militares del ejército ruso en la frontera con Ucrania, que se consideran una amenaza. Así que de momento la puesta en marcha del Nord Stream 2 está parada, a la espera de conseguir el permiso definitivo de las autoridades europeas.

Por su parte, Putin ya ha anunciado que el suministro de gas ruso en Europa será menor este invierno, alegando que la prioridad es abastecer a la población rusa. Las autoridades europeas denuncian que la crisis migratoria en la frontera con Bielorrusia, aliada de Putin, es otra estrategia del gobierno ruso para presionar a la UE en la crisis del gas.

GAS RUSO A EUROPA 39,7%

Argelia y Marruecos: más allá del gas

Argelia lleva años siendo el principal suministrador de gas para países del sur de Europa como España o Portugal. Sin embargo, le ha salido un competidor: Marruecos, que apuesta por un modelo energético muy diferente y quiere construir grandes parques solares y eólicos en su territorio.

No obstante, el enfrentamiento entre ambos países va más allá de la energía y tiene su origen en la época colonial y las fronteras que las potencias europeas trazaron entre los dos países durante el siglo XIX.

Desde que se independizaron a mediados del siglo XX, Argelia y Marruecos se disputan una serie de territorios fronterizos y reclaman su soberanía. Entre estos territorios destaca el Sáhara Occidental, que Marruecos ocupó tras la retirada de España en 1975, mientras que Argelia apoya al Frente Polisario, movimiento político impulsado por el pueblo saharaui que reclama su independencia de Marruecos.

Por otro lado, el gobierno argelino siempre ha colaborado con Rusia, mientras que el actual rey de Marruecos, Mohamed VI, es aliado de Estados Unidos, dos potencias que mantienen el enfrentamiento de la Guerra Fría.

En las últimas semanas, la tensión ha aumentado hasta el punto de que Argelia ha cerrado el gasoducto que pasa por Marruecos y lleva el gas hasta el sur de Europa. Esto ha dejado a Marruecos sin los correspondientes derechos de paso y sin suministro de gas. En el caso de España y Portugal, ahora el gas debe transportarse en buques de transporte, lo que supone una opción más lenta y cara que hace que el precio del gas aumente.

Gas Argelino a Europa

Un mundo globalizado

La crisis del gas en Europa también se ha visto afectada por la ausencia de carbón en China. El carbón es una de las fuentes de energía más antiguas y también una de las más contaminantes, pero sigue utilizándose porque es muy barato.

Ahora bien, el carbón es un combustible fósil y sus reservas se están agotando en todo el mundo. China era el principal consumidor de carbón del mundo pero ha tenido que buscar alternativas porque sus minas se están consumiendo. También las de Australia e Indonesia, sus principales proveedores.

Ante la necesidad de materias primas para generar energía, seguir produciendo y mantener su economía (China es el único país que crece en medio de la pandemia), el gobierno chino ha apostado por el gas.

En un país con más de 1.400 millones de habitantes, la demanda energética es altísima y acaba condicionando el suministro en otros países e incluso en otros continentes: cuanto más gas se desvíe hacia China, menos quedará para abastecer a Europa. Una muestra más de los efectos de vivir en un mundo globalizado.

Falta de energía… y de transporte

Además de la escasez de energía, la consecuente subida de precios y la falta de materiales para fabricar productos, hay otro factor que se suma a la crisis de suministros: el déficit en el transporte marítimo, que representa más de la mitad del transporte que se hace en todo el mundo.

La causa principal es la pandemia de covid-19, que ha actuado como un efecto dominó. Primero obligó a cerrar los principales puertos de mercancías del mundo, lo que retrasó la entrega de materiales a las fábricas. Después, estas fábricas estuvieron paradas durante los meses de confinamiento y restricciones, por lo que la producción también se detuvo y los grandes buques de mercancías no tenían nada para transportar.

Al mismo tiempo, la pandemia afectó a las plantillas de trabajadores: a las personas que trabajan en el puerto cargando contenedores de los almacenes a los buques, pero también a las tripulaciones de las embarcaciones, que pasan semanas en alta mar para transportar mercancías de una punta a otra del mundo.

Por último, a raíz del parón por la pandemia, muchas empresas quebraron y eso complicó todavía más la situación, porque faltaban compañías de servicios que pudieran transportar los productos. Algunas empresas han optado por contratar a trabajadores de países en desarrollo, donde la mano de obra es más barata, para ahorrar costes en plena crisis. Pero en estos países el ritmo de vacunación es más lento, así que su incorporación también se retrasa.

El transporte de mercancías y materias primas se ha convertido así en un cuello de botella y todavía pueden pasar varios meses hasta que se recupere el ritmo habitual.

Fuente La vanguardia https://www.lavanguardia.com/vida/junior-report/20211209/7905730/crisis-gas-europa-conflictos-intereses-geopolitica.html

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios)

AUDIO

Como la actualidad geopolítica manda y ordena, Carlos Pereyra Mele, director de Dossier Geopolítico, dedica su columna semanal del Club de La Pluma, al apresurado, superficial y errático plan de la UE, anunciado hace unos días, para supuestamente “frenar el liderazgo comercial de China en el mundo”. Un plan que aspira a una inversión de apenas 300 mil millones de dólares hasta 2027. Que es ridícula al lado del billón 300 mil millones que China ya tiene invertido y ejecutado desde 2013, en su avanzada estrategia continental de la Ruta de La Seda y del Collar de Perlas. Estrategia exitosa y en pleno avance, que angustia obsesivamente a EEUU en su ocaso del poder mundial. 

Al respecto, nuestro director nos adelanta que el plan europeo HA NACIDO MUERTO porque la UE no dispone de esos fondos, Una parte de ellos, los llamados Fondos de Desarrollo Sostenible, deberán ser emitidos por su Banco Central y solo servirán de garantías para que las empresas privadas participen. Las que a su vez serán financiadas por la banca, quién para ello, recibirá más fondos del Banco Central. Toda una maniobra circular de rescate financiero que sirve a las grandes empresas y a los  bancos, que siguen sin levantar cabeza tras la crisis del Covid, pero que está lejos de ser una sombra para la gran apuesta geoestratégica de China. Eso sí, el anuncio del proyecto, tan superficial como espectacular, fue adornado por la clásica letanía occidental de democracia, libertad y derechos humanos, siempre a la carta y a conveniencia. Y nos recuerda que si la UE aún no ha podido concretar ni siquiera los fondos de rescates por la pandemia a sus propios países, resulta difícil creer que van a invertir en otros países, solo para frenar a China. 

Luego, Carlos nos brinda una excelente descripción, con detalles y explicaciones que perecen un mapa sonoro, sobre el COLLAR DE PERLAS chino, que es una sucesión geográfica de puertos, vías de navegación, mares, estrechos, pasos, puestos de abastecimientos, etc., coordinados con rutas terrestres y con infraestructuras modernas y de alta tecnología, dispuestos de forma parecida a un collar y que le permite sortear el cerco militar bélico de Occidente alrededor de su país y zona de influencia, que resulta una fuente permanente de tensiones y una seria amenaza de enfrentamientos armados. Ello está logrando que sus productos viajen seguros por el Índico, luego por Pakistán, el Mar Arábigo, Mar Rojo y canal de Suez, hasta el Puerto El Pireo de Grecia. Mientras que nos recuerda que el posible final de la guerra de El Yemen, con el triunfo de los hutíes sobre la invasora Arabia Saudita, permitirá que se instale allí la base más importante naval China en la región, fundamental para la conexión con África. 

Y nos habla de los profundos cambios del sistema naval y la importancia histórica de sus controles y de cómo China aprendió esto de su enemigo, de sus estrategias y doctrinas, que hoy le son favorables al gigante asiático, como la teoría de John Mackinder que decía que “el que controlara la isla el mundo -Eurasia-  gobernaría el mundo entero”. Quién también, si viviera, estaría muy preocupado ante las extensas redes ferroviarias, caminos, puentes, túneles, aeropuertos, puertos, gasoductos, oleoductos, más la versión naval del Collar de Perlas Chino. También nos habla y demuestra las urgentes razones de Occidente con los tratados del QUAD y AUKUS, al perder el control absoluto del Pacífico Sur. Y que esta realidad, larvada con proyectos desde 2013, pone de manifiesto las razones por las que el actual presidente de China, Xi Jinping haya sido ratificado para un segundo mandato, alcanzando similar poder y prestigio que el jefe de la revolución, Mao Zedong 

Y así, Pereyra Mele cierra su columna  reflexionando que los países del Sur Global, como los sudamericanos y el nuestro, NOS GUSTE O NO, quedarán en medio de un escenario mundial de disputas y confrontaciones y ante el frente euroasiático que avanza en perjuicio de los Estados Unidos, cuyo mundo se ha achicado dramáticamente. Por ello, reiteró que: cinco siglos de dominio absoluto occidental y anglosajón han llegado a su fin y que se nos abre un abanico de nuevas oportunidades como también de desafíos de gran calado, a lo que hay que responder por encima de las ideologías que tanto atosigan y confunden.

Eduardo Bonugli (Madrid, 05/12/21)

Nueva Ruta de la Seda Terrestre y Maritima de China

Ante la decadencia de EE.UU. y el aislacionismo británico, la divergencia entre Francia y Alemania puede trasladar la lucha por la hegemonía mundial al interior de Europa. Por: Eduardo J. Vior – https://www.elpaisdigital.com.ar/

El Tratado del Quirinal, concluido por Francia e Italia, así como el proyecto de gobierno del próximo Canciller alemán, Olaf Schotz, expresan políticas divergentes que tienden a dividir a la Unión Europea. Mientras que uno busca recuperar espacio de soberanía en la política europea y regional, el otro se pliega a la hegemonía anglonorteamericana. Ambos cursos no pueden convivir bajo el mismo techo. Si no encuentran dónde convergir, los días de la UE están contados.

El viernes 26 de noviembre Francia e Italia firmaron con gran pompa en Roma un tratado bilateral de cooperación reforzada. El tratado fue rubricado por la mañana en el palacio presidencial del Quirinal por el presidente francés Emmanuel Macron y el jefe del gobierno italiano Mario Draghi en presencia del presidente italiano Sergio Mattarella.

Este tipo de «tratado de cooperación bilateral reforzada» es poco frecuente en Europa. Para Francia es sólo el segundo después del Tratado del Elíseo con Alemania, de 1963, completado por el Tratado de Aquisgrán en 2019. El texto, que prevé una intensificación del trabajo conjunto en materia de diplomacia y defensa y las transiciones digital, medioambiental y espacial, contiene pocas novedades o ambiciones concretas a corto plazo, aunque propone crear mecanismos para desactivar las crisis y sistemas de convergencia para ir profundizando la integración.

Desde el nombramiento en febrero pasado del ex presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, como jefe del gobierno italiano, París y Roma han superado sus diferencias de años anteriores y trabajan estrechamente. Esto tiene mucho que ver con las coincidencias entre Emmanuel Macron y Mario Draghi en la mayoría de los temas importantes que el tratado intenta institucionalizar.

«Para ser soberana, Europa debe ser capaz de protegerse, de defender sus fronteras, debemos crear una verdadera defensa europea. Este tratado ayuda a esta defensa europea, que por supuesto es complementaria de la OTAN, no la sustituye: una Europa más fuerte hace más fuerte a la OTAN. Este es uno de los primeros y más fundamentales pasos hacia los que se dirige este tratado». Esto es lo que ha dicho el primer ministro Mario Draghi en la rueda de prensa con el presidente francés Emmanuel Macron tras la firma del tratado en el Quirinal.

Al firmar el acuerdo, ambas potencias se resguardan ante los cambios en curso en el continente y su entorno: el fin del gobirtno de Angela Merkel deja a la UE sin liderazgo y las primeras señales que da la coalición “semáforo” a punto de sucederla hacen temer que el vacío de liderazgo se profundice; la salida de Gran Bretaña de la UE la ha debilitado económicamente, pero la ha acercado aún más a EE.UU. y la ha tornado todavía más agresiva, como se evidencia en Europa Oriental, donde la política británica de formación de un «cordón sanitario” en torno a Rusia no sólo está dañando a ésta y a Alemania, sino también interceptando la tradicional influencia francesa sobre Polonia y Serbia. Finalmente, el repliegue de EE.UU. en Oriente Medio y su limitada capacidad en el Sahel han abierto espacios al ingreso de Rusia y otros actores menores (Turquía, Emiratos, Egipto) que amenazan lo que Italia y Francia han considerado siempre como “sus” áreas de influencia.

 La Canciller a cargo, Angela Merkel, y su sucesor electo, Olaf Scholz

La coalición entre la socialdemocracia (SPD), los Verdes (Die Grünen) y los liberales (FDP),  punto de asumir el gobierno en Berlín, ofrece para la opinión pública algunas sorpresas positivas, pero también suscita muchos interrogantes entre los socios de la UE. Una de estas sorpresas positivas es la claridad con la que los tres socios se comprometen a la protección del clima como «prioridad absoluta». El cuidado del clima, dicen, asegura «la libertad, la justicia y una prosperidad sostenible». Este mantra tiene la función de mantener unida a la coalición. Sin embargo, es dudoso que mantenga su efecto durante cuatro años o incluso sea adoptado por los socios europeos.

El contrato de la coalición contiene otro anuncio sorprendentemente claro: la UE debe convertirse en un Estado federal, sujeto a la subsidiariedad y la proporcionalidad. La regla de la unanimidad en la Política Exterior y de Seguridad Común va a desaparecer. La coalición afirma que Europa “debe volver a la cima del mundo”. Esto se garantizará, supone, mediante una iniciativa de inversión «centrada en proyectos con valor añadido para el conjunto de la UE», que se concretaría mediante esfuerzos conjuntos de investigación y desarrollo, proyectos de política industrial subvencionados y cerrando las brechas en las redes transnacionales de ferrocarril, datos y energía. No obstante, el programa de la nueva coalición no aclara de dónde saldrán los fondos para financiar proyectos tan encomiables ni cómo se gestará la “transición ecológica”, para que el abandono del carbón no provoque una crisis energética mayúscula.

Si está decidido no aumentar los impuestos, van a tener que encontrar la forma de evadir los límites a la toma de deuda o liberar miles de millones de euros previstos para otros gastos. El Pacto de Estabilidad y Crecimiento de la UE se mantendrá como «base» de la sostenibilidad de la deuda, pero el programa de la coalición introduce la novedad de «garantizar inversiones sostenibles y respetuosas con el clima», lo que implica un ablandamiento de facto de la política de ajuste.

Annalena Baerbock y Robert Habeck (Verdes), Olaf Scholz (SPD, Canciller) y Christian Lindner (FDP)

Mientras que en la política europea la nueva coalición ofrece más Alemania que antes, en la política internacional y de Defensa parece un dócil cachorrito del Departamento de Estado. Vuelve «a una política exterior alemana normativa y basada en valores», dice Cathryn Clüver Ashbrook, directora del Consejo Alemán de Relaciones Exteriores. Es un eufemismo para decir que será una política menos realista que la de Merkel y más llena de declaraciones altisonantes al gusto del universalismo liberal. No por casualidad la experta citada predice que «especialmente el gobierno de EE.UU., bajo la presidencia de Joe Biden, acogerá muy bien esta oferta».

«La futura coalición muestra una nueva claridad y sigue viendo a China como un socio, pero también como un rival sistemático», dice también Clüver Ashbrook. La internacionalista acoge con satisfacción que Alemania coordine su futura política hacia China con EE.UU., “para reducir la dependencia estratégica respecto a ese país”. El acuerdo también adopta un tono más duro que antes con respecto a Rusia.

Sintetizando, puede describirse la política europea del gobierno a punto de asumir como ilusoria: suponer que sus socios en la UE van a aceptar delegar soberanía a un Estado federal con un claro predominio alemán, es carecer de sentido de realidad y despertar en el continente los peores fantasmas del pasado. Por otra parte, la tan cacareada “transición ecológica” necesita mucha plata. No basta con insinuar que se permitirán “trasgresiones” al Plan Europeo de Estabilidad y Crecimiento. Es necesario cancelarlo y convertir al Banco Central Europeo (BCE) en un Banco de desarrollo e inversión, pero este giro chocaría con la resistencia de la oligarquía financiera que domina Europa y mantiene la alianza con Gran Bretaña a pesar de la salida de ésta de la Unión.

Durante años, Alemania y Francia tomaron la delantera en el desarrollo de la integración europea. François Mitterrand y Helmut Kohl imaginaron la transformación del mercado común en un Estado supranacional capaz de competir con la URSS y China. Sin embargo, debido a la incorporación de los antiguos miembros del Pacto de Varsovia, que fue forzada por Estados Unidos, esta estructura se convirtió en una colosal e inoperante burocracia cuyas decisiones son determinadas por la OTAN.

Los ejércitos británico y francés eran los únicos con peso en la Unión Europea. Por eso se unieron mediante los Tratados de Lancaster House en 2010, pero, cuando se produjo el Brexit, el ejército francés se quedó solo, como demuestra la rescisión de los contratos de submarinos franco-australianos en favor de Londres. La única opción que le quedaba a Francia, entonces, era acercarse al ejército italiano, que tiene la mitad de tamaño del francés. Esto es lo que se acaba de decidir con el Tratado del Quirinal.

Sucede que, al mismo tiempo, la canciller Angela Merkel deja paso a Olaf Scholtz cuya política europea y exterior se somete a los dictados de EE.UU. y el Reino Unido. El futuro Canciller es un abogado preocupado por hacer funcionar la industria de su país sobre la base de un compromiso entre trabajadores y empresarios. Nunca se ha interesado por las cuestiones internacionales y en las negociaciones para formar la coalición ha consentido que se nombre  a la abogada ecologista Annalena Baerbock como ministra de Asuntos Exteriores. No sólo se trata de una defensora de las energías renovables que no dice cómo se pagará la transición ecológica, sino que es también una lobbista de la OTAN, una firme defensora de la adhesión de Ucrania a la Alianza y a la Unión Europea y una feroz opositora de Rusia, por lo que rechaza el gasoducto Nord Stream 2 y favorece la construcción de más terminales de gas licuado importado de Estados Unidos. Por último, califica a China de «rival sistémico» y apoya todos sus separatismos (el taiwanés, el tibetano y el uigur).

Francia persigue contra la voluntad de los otros 26 miembros la quimera de una Unión Europea independiente que compita con Estados Unidos. Alemania, en cambio, se equivoca al refugiarse bajo el paraguas nuclear de Estados Unidos, cuando esa gran potencia ha empezado a decaer y la República Federal tendría todas las de ganar, si se asocia con Rusia y China.

La Unión Europea tiende hoy a disolverse por las políticas divergentes de sus miembros principales. Estados Unidos se está hundiendo sobre sí mismo y pronto la Unión Europea no tendrá dueño. Sin embargo, la experiencia enseña que los imperios nunca caen pacíficamente. El bloque comunitario tiene la elección: renovarse como asociación de estados y culturas que, entonces, debería incluir a Rusia; disolverse y arriesgarse a que la guerra vuelva a instalarse en el corazón del continente o plegarse ciegamente al coloso en hundimiento y correr el mismo riesgo, sólo que algunos quilómetros más al Este. Está claro cuál de las tres alternativas es la deseable.

Sobre el autor: Dr. en Ciencias Sociales analista internacional

FUENTE: https://www.elpaisdigital.com.ar/contenido/puede-disolverse-la-unin-europea/33748

Emanuel Pietrobon,publicó este artículo en Vision & Global Trends. Instituto Internacional de Análisis Globales de nuestros socios estratégicos de Italia. Polexit? Nie, dziękuję!

Donde pone blanco sobre negro, dos puntos claramente: 1, que el Brexit fue una imposicion norteamericana a la jubilada de privilegio (Inglaterra), y 2, que la Polonia que tanto les gustan presentar a los soberanistas antiglobalistas como la rebelion anti UE (por un fallo de su Tribunales)  es un gigantesco bulo y que solo juegan el viejo rol de (peones) en un juego de ajedrez en un tablero inestable. Donde las piezas principales sacrifican a los débiles en sus luchas por el poder. Dossier Geopolitico

Emanuel Pietrobon – 11/10/2021

Polexit? Nie, dziękuję!

En los últimos días se ha debatido mucho sobre un fallo del Tribunal Supremo de Polonia que reafirmó la primacía del texto fundamental polaco sobre los tratados internacionales, específicamente los europeos. Algunos ya han gritado por el riesgo de Polexit, pero ¿qué está pasando y qué pasará (realmente)?

Polexit? Nie, dziękuję; Polacos como la Unión Europea y por Derecho y Justicia es solo otro tira y afloja en términos electorales y de negociación. Pero comencemos desde el principio.

El proyecto europeo nació a instancias de Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. ¿Objetivo? Pacificar el belicoso Viejo Continente, convertirlo en la fábrica del capitalismo internacional y un puesto de avanzada de la americanidad en el apéndice occidental de Eurasia.

Quienes hablan de autonomía estratégica, como Emmanuel Macron, parecen olvidar esta verdad, tan fundamental como actual y, quizás, inalterable. Y, de hecho, es rápidamente negado por la realidad de los hechos. Porque, ¿cómo puede un satélite separarse de su propio planeta? No puede. Y si lo hiciera, dejaría de serlo.

La pregunta es: ¿Europa quiere dejar de ser una provincia del Imperio americano? Los hechos parecen sugerir que no. También porque la autonomía estratégica, que por decirlo así es París o Berlín, nunca se agita para exigir la independencia tout court , sino para reclamar (en voz baja) el derecho a tener un margen de maniobra mayor pero aún limitado en materia de política interna ( por ejemplo, impuestos al Gran Silicon Valley) y política exterior (por ejemplo, inversiones en un país gobernado por un régimen que no le gusta a Estados Unidos).

Ahora, reconstruya las bases, vayamos a Polonia. Varsovia no es Londres. Varsovia es Europa, Londres nunca lo ha sido. Londres es Atlántico, de la cabeza a los pies, piel a alma, y ​​siempre lo ha sido. Y Londres, sobre todo, es hermana de Washington. No cometa el gravísimo error de creer que el Brexit fue un fenómeno genuino. Lejos de ahí. En Londres, de hecho, no hay hoja que Washington no quiera. Y aquí está, como era de esperar, que Global Britain tuvo lugar después del Brexit.

De todos modos, volviendo a Polonia, esto es todo:

  • Se trata de una sentencia que reafirma la primacía de la Constitución sobre determinados puntos de algunos tratados europeos, aquellos que podrían definirse como «valores no negociables».
  • Esta es una oración que ciertamente tiene valor político, pero que está formulada en un contexto preciso (el tira y afloja en la cuestión del arco iris) y por una razón igualmente bien definida (enviar una advertencia con la esperanza de aumentar la negociación poder en Bruselas).
  • No habrá Polexit, porque Polonia, antes incluso de ser un satélite de Europa, es un satélite de Estados Unidos.
  • El PiS nunca ha sido un partido antieuropeo: es un poco euroescéptico. Dos cosas muy distintas.
  • Los polacos son la población más europeísta del continente (84%). ¿Y los alemanes? La UE «sólo» gusta al 69% de ellos. Los franceses, en cambio, están últimos en la clasificación con un muy modesto 51% (casi, se podría decir, la UE es más popular entre los rusos, 37%). Fuente: Pew Research Center, 2019.
  • De ello se desprende, dado el punto anterior, que los polacos no apoyarían ningún Polexit y que solo hablar de ello provocaría una hemorragia de consenso para PiS.
  • Lo que conviene a Estados Unidos es una Europa tan unida como dividida, como la Alemania previa a la unificación. De ahí el recurso (imperativo e indispensable) al Brexit, un fenómeno preparatorio para el regreso del Reino Unido al antiguo papel de katechon de hegemonías en la construcción de la Europa terrestre. Y de ahí el uso de pequeñas potencias terrestres, como Polonia, a las que delegar tareas de disturbio en el otro lado del continente, cercar la zona franco-alemana y al mismo tiempo evitar un acercamiento mackinderiano entre la citada y Rusia.

Publicado en el sitio web Vision & Global Trends. Instituto Internacional de Análisis Globales de nuestros socios estratégicos de Italia
Publicado en : https://www.vision-gt.eu/news/polexit-nie-dziekuje/

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios)

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En la columna de esta semana del Club de la Pluma, el director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, comienza con el informe de la ONU que alerta de que 45 millones de afganos corren serio riesgo de una gigantesca hambruna, mientras EEUU, el principal responsable de esta tragedia tras 20 años de ocupación, mantiene embargado los fondos con que este país podría tener acceso a los alimentos más imprescindibles. 

Mientras que sobre la Cumbre Climática de Glasgow, nos cuenta que ha sido un fiasco con “OTRO PASO HACIA LA NADA” porque las grandes naciones, y principales responsables del calentamiento global, no se han puesto de acuerdo para luchar contra el mismo. 

Sobre China, nos informa que el Comité Central del Partido Comunista ha decidido que Xi Jinping sea otra vez nominado para Jefe de Estado, en las elecciones del año que viene, lo que le concede una altura política similar a la del padre y creador de la República Popular, Mao Tse Tung.

Luego nos sitúa en África del Norte para avisarnos que en una próxima columna analizará profundamente el enfrentamiento entre Argelia y Marruecos, que afecta de lleno a la Unión Europea, ya que Argelia acaba de cerrar el gasoducto que abastecía a España y Portugal y que pasa por suelo marroquí, agravando un conflicto incentivado por Inglaterra y EEUU, como parte de la estrategia del Caos Permanente y a favor de Rabat y que perjudica a la Unión Europea. Siendo ésta política de agresión, la única baza que hoy en día manejan éstas potencias declinantes, ante la pérdida de sus posicionamientos internacionales. 

Sobre EEUU, nuestro director aborda la reciente aprobación por el Congreso de Washington de una partida multimillonaria para infraestructuras, presentada como un gran éxito de Biden, cuando en realidad, tal inversión reconoce y desnuda el fracaso y el atraso norteamericano tanto en rutas, puentes, puertos, transportes, tecnología, agua, etc. Una inversión hecha emitiendo dólares, en un intento de recuperar terreno en áreas donde China ya le proyecta profundisimas sombras. 

Y entrando en geopolítica, analiza lo que está ocurriendo en Europa del Este, en la frontera  entre Polonia y Bielorrusia y para ello nos ubica primero en el Triángulo de los Tres Mares y en los países de la zona. Nos describe lo pequeña que es Bielorrusia y el drama de los emigrantes que quieren llegar a Alemania pasando por Polonia. También de los desplazamientos militares de ese país y de la OTAN para frenarlos. De las amenazas de Bruselas con sanciones a Lukashenko y de la respuesta de éste en cortarle el gas a Polonia. 

Asegura que NO se trata de un tipo de marcha de centroamericanos hacia EEUU, sino de vuelos con origen a miles de kilómetros. De aviones alquilados en Irlanda, o sea de empresas propias de la UE, vía Dubai (país pro occidental), o de Turquía (País de la OTAN) o de Jordania, (monarquía muy cercana a EEUU), con billetes a más de 10.000 euros por persona, y casualmente con aerolíneas también pro occidentales como Belavia, Turkish Airlines y Qatar Airlines, que sobrevuelan Ucrania con total libertad. Por lo que nos asegura que estamos ante “UN JUEGO MALÉFICO A MUCHAS BANDAS, CON MUCHO EN DANZA Y POCAS EXPLICACIONES FÁCILES”. 

Vuelos con «migrantes» a Bielorusia

Y cierra la columna informando que en las últimas horas, el Reino Unido, con el visto bueno de EEUU y de la OTAN ha echado más combustible al fuego en la zona, al reforzar el pacto de defensa con Ucrania, apostando por la desestabilización y por la creación de conflictos profundos en la misma frontera rusa, que tendrán una reacción similar por parte de Moscú y sus aliados. 

Carlos Pereyra Mele se despide así, planteando que estos conflictos creados estratégicamente, en vez de apaciguarse se incrementan, se profundizan y avizoran situaciones bastantes graves, no solamente para los habitantes de la zona, sino también para el resto del planeta Tierra.

Eduardo Bonugli (Madrid, 14/11/21)

Vuelos desde el Kurdistan Iraqui a Bielorusia con escala en Turquia
La Zona del Conflicto en Europa del Este