Por: Dr. Jorge Rachid que autoriza su publicacion en Dossier Geopolitico

Quizás el título le resulte extraño a quienes no visualizan la política internacional en forma periódica, pero la confrontación del Mundo Multipolar (BRICS, OCS, Liga Árabe, Unión Africana, CELAC) bajo amenaza del Mundo Unipolar (EEUU, Israel, Inglaterra, Unión Europea, OTAN) se despliega a nivel Global. En algunas latitudes a través de cruentas guerras, en otras con sanciones económicas masivas, puntualmente en América Latina y no es casualidad, ya que el Mundo Unipolar la considera territorio propio desde hace 500 años, lo hace a través de Bloqueos a países hermanos y desestabilizaciones a las democracias que hayan elegido Gobiernos populares, que son las que intentan colocar límites al Mercado como ordenador social de los Pueblos.

Esa es una razón por la cual los Medios Hegemónicos, a nivel nacional e internacional,  no profundizan la información internacional, es más la ocultan, la manipulan o tergiversan, porque de hacerlo el Pueblo se enteraría de quienes son los protagonistas de la película que estamos viviendo en la Argentina con Milei, cuáles son sus conexiones internacionales, a qué intereses financieros responden y con quienes pactaron la entrega de la Soberanía Nacional en recursos naturales, lo cual incluye al deterioro de la calidad de vida de los argentinos, con destrucción de empleo e industria, sumado a la pérdida de los avances científicos tecnológicos, que nuestro país lidera a nivel Latinoamericano.

Pocos argentinos responderán conocer a Richarson generala de la lV Flota de EEUU, menos aún sabrán que la base ofensiva de Inglaterra en Malvinas, que tiene más militares que kelpers, trabaja en conjunto el Plan colonizador, siendo ambas parte de un Plan Estratégico sobre nuestro país, en su partición de la zona Austral. La ofensiva Atlántica, así se llama la coalición Unipolar que incluye a Israel y la Unión Europea, intenta frenar la expansión del Multipolarismo, que ya ha volcado el mapa comercial y político mundial hacia el Oriente. 

Las amenazas, las extorsiones, las deudas, el cierre de Mercados, la prohibición de nuevas tecnologías, el cierre de la investigación aplicada, la destrucción de la industria, el sometimiento a un comercio chico Occidental de 1.800 millones de habitantes del planeta, dándole la espalda al BRICS, la OCS, el Banco Asiático de Infraestructura e Inversión, al Banco del BRICS, a la Ruta de la Seda y la Ruta del Ártico, explican parte de esa lucha que abandona 6.400 millones de personas de un mundo, que nuevamente intentan clausurar, borrar de la información como hasta el año1970, pese a la proclama del libre comercio.

Volvamos a la información, hasta el año 1970 China no existía para el Mundo Occidental, no formaba parte de Naciones Unidas y sólo era reconocida Taiwan, por decisión de EEUU que castigaba así la Revolución Maoísta de 1949 triunfante en la Larga Marcha de 20 años en contra del colonialismo, inglés y la ocupación japonesa. Los aliados de Mao occidentalizados huyeron a Taiwan, que hoy EEUU/UE quieren reflotar en la confrontación, para poner límites a la expansión China, que ya recuperó sin sangre, con políticas a largo plazo, Macao, Shangai y Hong Kong, con el lema “un país dos sistemas”.

Vemos entonces como las piezas del tablero mundial se mueven: hasta hace poco Arabia Saudita era parte de la coalición EEUU/Israel, de hecho bombardeaba Yemen desde hacía 5 años por orden de EEUU, pero ahora ha sellado una alianza con Irán bajo el auspicio Chino, con lo cual el Estrecho de Ormuz queda bajo influencia oriental, por donde transcurren el gas y el petróleo mundial. Por esa razón EEUU declara terroristas a los Hutíes yemenitas que lo controlan. Esa acción, la alianza propiciada por China, permitió que Siria retornase a la Liga Árabe y que el BRICS se abriera a 11 países, entre ellos Argentina, que Milei decidió cancelar en acuerdo con las directivas emanadas a su Presidencia desde EEUU/Israel.

La iniciativa, si se puede llamar así, de Milei de trasladar la Embajada Argentina a Jerusalém e invitar a Selenski a su asunción, pone al país en un estado involucrado en guerras, que si bien en su fase bélica se desarrolla en otros territorios, va tomando volumen en las decisiones políticas internas, volcadas a fijar el colonialismo que va adoptando el Gobierno. El Genocidio israelí en Gaza y no frenar la confrontación en Ucrania, forma parte de un involucramiento innecesario, sólo explicable por la sumisión a los dictados de EEUU e Israel únicos aliados de Milei, que propician ambas confrontaciones en función de que la producción de armas, constituye hoy parte importante de sus PBI.

No se lee en los Medios Hegemónicos, que la OTAN declaró enemigos en su última reunión, a China y Rusia, que además aumentó los presupuestos en armamentos de los países miembros, comunicó a las empresas líderes europeas, en especial automotrices, matricerías, industria pesada y textiles, que adopten las medidas necesarias para su fabricación a escala, en caso de desatarse una guerra global prevista. Es la verdadera razón de la prolongación de las guerras actuales.

Al mismo tiempo se produce el desembarco de nuevas Bases Militares de EEUU en Europa y 17 de las mismas en Suecia, nueva socia de la OTAN, con la característica que ese país es limítrofe con Rusia. Sería similar a que Rusia coloque Bases Militares en México, Cuba, Nicaragua, Venezuela lo que anticiparía una guerra militar, ya que la guerra comercial, de recursos, diplomática, geopolítica está en pleno desarrollo desde hace años, como lo define Francisco, el Papa argentino que reza por la paz mundial.

Es cuando la definición Unipolar de debilitar la Argentina aparece en varias hipótesis con escenarios diferentes: fragmentación geográfica y política, control económico y estatal, partición parcial Patagónica, apropiación de Vaca Muerta y el Litio, compra compulsiva de territorio argentino con Glaciares, expansión OTAN a Mar territorial, Antártida y control de Pasos Bioceánicos. 

Ese diseño es funcional a la necesidad de impedir la reconstrucción del UNASUR y del desarrollo regional conjunto de Latinoamérica, al mismo tiempo del ataque sistemático de Guerra de lV generación psicológica, a los procesos populistas de la región, manteniendo el Bloqueo a países “hostiles”, según la propia definición del Departamento de Estado de EEUU y las FFAA especiales, desplegadas en las 70 bases militares en la región.

Por lo cual Milei es sólo la punta de un iceberg, que esconde una estrategia de dominación colonial con apropiación de recursos naturales estratégicos en la región y una avanzada de guerra en otras latitudes. Como esto está pasando en el Mundo, que ha cambiado hacia el Oriente, el diseño pos ll Guerra Mundial que forjó Naciones Unidas tal cual la conocemos, ha perdido su rol de equilibrar los conflictos y evitar nuevas masacres como en ambas guerras mundiales, al ser desbordada por la nueva situación geopolítica. 

Tanto el Plenario de la UN, como el Consejo de Seguridad, con los vetos de países en conflicto entre ellos, han desvirtuado su funcionamiento siendo sólo una pantalla sin capacidad de decisión. Lo mismo sucede con sus dispositivos que con los años en vez de armonizar, se dedicaron a extorsionar, endeudar, controlar a los países llamados emergentes o periféricos a través del FMI , BM, OCDE, OMS Tribunales de Justicia de La Haya, ya caducos en su accionar.

Entonces la Guerra Mundial no es algo lejano a la Argentina de hoy, es más somos actores de la misma como un  experimento anarco libertario, así llamado como eufemismo de nuevas formas de autocracias dictatoriales, a los fines de controlar los procesos políticos no alineados con el mundo Unipolar. Esa situación es delicada y no expresada al conjunto del pueblo argentino, que cualquier mañana posible puede encontrarse en un proceso de guerra mundial que afectará al país en muchos aspectos. 

Quizás el más preocupante sea la dependencia de medicamentos esenciales o materias primas, además de insumos importados, rubro en el cual poseíamos soberanía sanitaria hasta los años 70, que perdimos por la lógica neoliberal de importar por costos (Escuela de Chicago Milton Friedman), como sucede en la actualidad Milei. Estar involucrados siendo parte de la guerra, impide el despliegue como proveedores neutrales en cualquier conflicto, dañando la capacidad industrial argentina, en especial alimentos, que permitió en la época de Perón acumular ventajas comparativas, que dieron lugar a un proceso de sustitución de importaciones y de Justicia Social.

Una guerra lejana es un drama en el cual podemos colaborar y crecer desde la solidaridad y luchando por la paz, una guerra cercana sólo promete dolor social y muertes argentinas. Ese el  Mundo Milei, que es un proyecto que implica un proceso de desguace nacional de consecuencias impredecibles, a menos que tomemos el caminos de un diseño estratégico de Patria, ya definido en términos conceptuales y doctrinarios de la Comunidad Organizada, con Justicia Social y Soberanía política, en términos de Patria Matria Grande, por la que lucharon nuestros Padres Fundadores: San Martín, Bolívar y Artigas.

JORGE RACHID CABA, 14 de marzo de 2024

BIBLIOTECA

Boron Atilio,Sader Emir, Claudio Merino: Hacia la Tercera Guerra Mundial? Ed El Viejo Topo

Walter Formento, Wim Dierckxsens: Geopolítica de la crisis económica mundial Ed. Fabbro

Gabriel Fernández: Fuentes Seguras Ed. Fabbro

El mundo transita claramente al multilateralismo, con escenarios de alta tensión y un decidido expansionismo de los países más poderosos. Los recursos naturales del continente blanco aparecen con enorme valor estratégico.

Por Omar Ruiz (*)

Argentina y Suramérica se encuentran en un escenario caracterizado por las tensiones que se producen en la configuración del nuevo mundo multipolar, y a partir de las crisis, tanto del orden unilateral liberal siguiente a la guerra fría, como de las reglas del derecho internacional y el multilateralismo.

Esta nueva configuración se expresa por un lado en el proceso de desplazamiento y transición de la hegemonía económica y comercial de EE.UU. (que mantiene su poder cultural y militar) hacia China; y por otro, el desafío disruptivo que Rusia con su intervención militar en Ucrania realiza para contener la expansión de la OTAN y establecer los límites de una nueva arquitectura de seguridad mundial.

Asistimos a una gradual división del mundo entre el occidente noratlántico y el nororiente, y un sur global que intenta hacerse un lugar en medio de estas disputas.

Occidente pretende contener militarmente a China por su proyecto geoeconómico de Ruta y Franja de la seda, a través de la reciente conformación de la alianza militar AUKUS (Australia, Reino Unido y EE.UU.) y de QUAD (diálogo de cooperación en seguridad entre EE.UU., Japón, India y Australia).

A su vez, asistimos al resurgimiento de la geopolítica, expresada en distintos puntos del planeta, como Asia Pacífico, con la guerra no declarada por el control del Mar de China, el reclamo soberano de Beijing sobre Taiwán, el movimiento anticolonialista en Africa noroccidental, la guerra en Israel y Palestina, y la proyección global de la OTAN como alianza ofensiva. La OTAN se está fortaleciendo para enfrentar las pretensiones rusas de garantizar una zona de seguridad y de lograr el desmantelamiento, aunque sea parcial, de los sistemas de misiles en Europa del este.

Los cálculos geopolíticos también están dados por los porcentajes de crecimiento demográficos actuales, en poco más de tres décadas el mundo tendrá un tercio más de habitantes, la mayoría se concentrará en Asia, con lo cual se incrementará el consumo de agua dulce y se encarecerá el precio de la misma, tendremos, además, más demanda de alimentos, disminución de suelo cultivable y aumentará el consumo de energía.

Al igual que Malvinas y Atlántico Sur, la Antártida tiene una gran importancia geopolítica para el mundo y en particular para nuestro país. Argentina ha sido el primer país del mundo en tener presencia en el continente antártico, son 120 años de permanencia desde el 22 de febrero de 1904 cuando se establece una base en la isla Laurie, del grupo de Islas Orcadas y se inaugura allí un observatorio meteorológico.

Reservas

Considerando la gran reserva de agua, hidrocarburos y minerales que existen en la Antártida y su valor geoestratégico se abren muchos interrogantes y tensiones que nos interpelan sobre la futura gobernabilidad y gobernanza de la Antártida.

Agua. La Antártida contiene las reservas de agua dulce más importantes del planeta; se estima que cerca de un 70 %; el otro 30 % se encuentra repartida entre el Amazonas, el Acuífero Guaraní y el Lago Baikal entre otros. El sexto continente es el depósito de casi 30 millones de kilómetros cúbicos de hielo. Si el continente blanco se derritiera, los océanos subirían aproximadamente entre 45 y 65 metros, lo que haría desaparecer todas las ciudades costeras. La Organización de Naciones Unidas viene advirtiendo sobre que, son muchos los países que sufren o sufrirán sequías, lo que aumentará la necesidad de agua y el ejercicio del derecho humano a su acceso. Por otra parte, en el mundo viven 8.000 millones de personas y el crecimiento demográfico ejerce y ejercerá en el futuro una tensión sobre los recursos naturales y alimentos, la pesca, y en particular en la Antártida.

Minerales. En la Antártida está comprobada la existencia de minerales críticos y tierras raras, así, por ejemplo, en el cuadrante americano encontramos, titanio, hierro y cobre y en la península antártica en particular, níquel, cromo, cobre, cobalto, oro y plata; en el cuadrante australiano, hidrocarburos, zinc y plomo; cuadrante africano, uranio, hierro y en el cuadrante pacífico magnesio y molibdeno. Muchos de estos minerales son utilizados en la industria de baterías para celulares, turbinas eólicas, misiles y elementos aeroespaciales.

Hidrocarburos. Distintas estimaciones establecen la posible existencia en los hielos antárticos de entre 50 y 200 billones de barriles de petróleo, 115 trillones de pies cúbicos de gas y 500 mil millones de toneladas de carbón. Se trata de reservas que no han sido explotadas porque el Tratado Antártico lo prohíbe, por las condiciones climáticas imperantes y los costos.

El centro de las miradas

El interés que despiertan sus potenciales recursos naturales, el agotamiento de los combustibles fósiles, el incremento poblacional en el mundo, la escasez de alimentos y el aumento en la demanda de agua y energía, ponen al continente antártico en el centro de la disputa geopolítica actual y futura. El Reino Unido desde su «Collar de Perlas» atlántico (Islas de Ascensión, Santa Helena y Tristán de Acuña) junto a la ocupación ilegal de Malvinas, proyecta su espacio de poder en tres continentes (Africa, América del Sur y Antártida), estableciendo además sobre cuatro océanos (Atlántico, Pacífico, Indico y Antártico) un control aéreo y marítimo. Esto se expresa en una militarización de toda la región desde la base instalada a partir de 1982 en Monte Agradable, Islas Malvinas, desde donde proyecta su poder hacia la Antártida, constituyendo así una clara amenaza tanto a la Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur, creada por Naciones Unidas en 1986 e integrada por 23 países de Africa y 3 de América del Sur; como también al Tratado de Tlatelolco de prohibición de armas atómicas en esta región. A su vez, la Antártida como zona desmilitarizada y desnuclearizada, (con un régimen amplio de inspecciones nacionales establecido por el Artículo VII del Tratado Antártico) está potencialmente alcanzada y monitoreada por estos dispositivos militares británicos.

Las presentaciones en Naciones Unidas de los proyectos de Plataforma Continental, que tres (Argentina, Australia y Chile) de los doce países signatarios y reclamantes de soberanía sobre la Antártida realizaron en los últimos años, significan también un posicionamiento geopolítico y futuros reclamos.

Australia pidió el reconocimiento ante la ONU (Comisión de Límites de Plataforma Continental) de más de 2.5 millones de kilómetros cuadrados en el Océano Antártico y acompaña el mismo de un fuerte incremento en el gasto militar con la futura compra de doce submarinos avanzados, tres nuevos destructores, equipados con proyectiles crucero «Tomahawk» con rango de 2,200 kilómetros, y cien (100), F-35 Lightning «Joint Strike Fighters». Su Territorio Antártico es reconocido por el Reino Unido, Francia, Nueva Zelanda y Noruega, a diferencia del sector antártico argentino que no sólo no es reconocido por estos países, sino que además es pretendido en un cien por ciento por el Reino Unido al igual que la pretensión que los británicos tienen sobre el sector chileno.

El think-tank australiano Lowy Institute viene definiendo al Tratado Antártico, como «un compromiso frágil e imperfecto» y advertía que conforme los precios del petróleo van subiendo y el mercado se va haciendo más pequeño «es probable que el marco actual de administración de la Antártida a través de la cooperación internacional se encuentre bajo creciente presión y no pueda ser sostenido».

Límites

Argentina, a diferencia de los otros reclamantes (con excepción de Australia), realizó una presentación completa ante la Comisión de Límites de la Plataforma Continental, incluyendo tres grandes áreas: el margen continental, el sector antártico argentino y las islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur.

Mientras tanto, se suman nuevas adhesiones al Tratado Antártico (Eslovenia en 2019 y San Marino en 2023). Son 59 los miembros del Tratado Antártico, de los cuales 29 son consultivos (participación con voz y voto) y 27 no consultivos (participación sólo con voz). Para ser miembro consultivo es necesario haber realizado investigaciones en la Antártida o haber construido alguna base. China y EE.UU. están construyendo nuevas bases y despliegan al igual que países como Rusia un poder inteligente esperando las nuevas instancias.

El poder blando (ciencia, cultura, infraestructura y logística) también tiene lugar en la Antártida desde hace décadas, en varias bases o estaciones se ha hecho un gran esfuerzo para promover la vida civil, con la idea de legitimar y potenciar aún más sus reclamos territoriales, así en la estación Bellingshausen existe una iglesia ortodoxa rusa y en los años 70 hubo nacimientos en bases argentinas y chilenas, siendo de nacionalidad argentina el primer bebé nacido en el continente blanco.

Hasta el momento no hay espacio en la Antártida para el poder duro (militar), ya que el Tratado Antártico no lo permite, en 2048 se presenta una oportunidad para volver a discutir la explotación de recursos naturales y ¿su protección?…

* Omar Ruiz es Magister en RR.II., diplomado en Defensa y docente en Derecho Internacional Público

Fuente El Tribuno https://www.eltribuno.com/salta/opiniones/2024-3-5-22-24-0-la-mirada-geopolitica-del-mundo-esta-puesta-en-la-antartida

Invitado por la afamada Escuela Superior de Guerra del Brasil, el día 14 de marzo de 2024, el Prof. Dr. Miguel Ángel Barrios dictó un seminario para la alta oficialidad brasilera y oficiales extranjeros que cursan distintas especialidades en la misma,  diplomáticos de Itamaraty e invitados especiales en la misma en la Ciudad de Río de Janeiro, sobre la temática:  «América del Sur en la nueva multipolaridad». Y esta invitación y reconocimiento institucional suma un logro mas al grupo de trabajo de los que integramos el Tanque de Ideas Dossier Geopolitico, que Miguel Barrios integra desde su fundacion, Felicitaciones Miguel A. Barrios…Carlos Pereyra Mele Director de Dossier Geopolitico

En su disertación ante tan clasificado auditorio el Dr Barrios enumeró los  riesgos geopoliticos actuales, los cuales podemos resumir en los siguientes títulos y eje temáticos

  • -Del mundo unipolar a un mundo multipolar
  • -Las Empresas tecnológicas como actores de la política global 
  • -De la guerra convencional a la guerra híbrida
  • -El poder de la ciencia de los Datos con la cuarta revolución industrial 
  • -Las nuevas amenazas:cambio climático, tecnologías disruptivas, pandemias ,ciberataques 
  • -Crisis socioeconómica
  • -Normalización del conflicto 
  • -Posibilidades de secesionismo
  • -Polarización política
  • -Guerras indefinidas en Medio Oriente 

Todo este esquema que abordó el Dr Barrios con profusión de datos y ejemplos a los asistentes del Seminario. Tuvo su centralidad en los siguiente: Barrios fue direccionando la disertación hacia el “Eje” clave geopolitico para nuestra América Suramericana y que tiene como única alternativa en todas sus variantes de los problemas geopoliticos arriba mencionados, que no es otro que el de tomar el camino de la reunificación como un destino estratégico en la senda de Juan Perón y Getulio Vargas con el Nuevo ABC o sino seremos meros segmentos del mercado financiero global.

Al finalizar el Seminario, el Director  y jefe de los Seminarios de Capacitación Superior de la ESG, Gral. de Brigada Don César Zambao da Silva entregó al Prof. Dr. Miguel A. Barrios un reconocimiento por sus dilatados estudios en el campo de la Seguridad y Defensa y por la promoción de la alianza Brasil-Argentina

Dossier Geopolitico Argentina marzo de 2024

Dr. Barrios en la ESG de Brasil Rio de Janeiro

Por Miguel Barrios (*)

Si la política es la relación del hombre con el hombre en su conjunto, es siempre “localizada” en espacios concretos. El hombre es un ser social, histórico, cultural de trascendencia espiritual, de naturaleza terrestre, por lo que hace naturalmente “geopolítica” aunque sea de modo no explicito.

No hay historia sino en espacios, lo que no impide que haya personas o comunidades que “cuenten” la historia con una gran desatención de los espacios. Pero la historia no es tiempo, sino espacio y tiempo, los tiempos solos son muy abstractos, tanto que la geopolítica es anterior a la “geografía”.

La cultura latinoamericana, el pueblo latinoamericano, para su autoconciencia también requiere gestar su “conciencia geopolítica”, mediante la unión.

Por ello, en tiempos de decadencia y agotamiento y casi segura implosión de nuestros sistemas políticos, y que a través del engendro Milei acelera la descomposición con un relato neomitrista, lo más urgente es reiniciar un nuevo revisionismo continentalista para orientarnos en la brújula de una estratégica periodización del pensamiento geopolítico latinoamericano unionista.

Esto es más urgente aún, porque la Argentina se puede convertir en un modelo colonial para el siglo XXI bajo el gobierno de la auténtica casta financiera local-globalista que gobierna nuestro sistema político y de la cuál Milei, paradójicamente es su representante. Y lo más grave, en un proceso de mutación del sistema mundo aún no nítido de una unimultipolaridad a una multipolaridad de matriz imperial. La multipolaridad o unipolaridad sin integración nos lleva al abismo igualmente, aunque la ignorancia o alineamiento ideológico acrítico de este gobierno lo lleva a desconocer totalmente lo dicho.

En este sentido, con el fin de ser sencillos y didácticos, resaltaremos los siguientes momentos del pensamiento político latinoamericano:

1- El Proyecto Liberador.

Se trata de las ideas que surgen con motivo de las independencias latinoamericanas o “guerras civiles”. Para nosotros la partida de nacimiento constituye la “Carta a los españoles americanos” del jesuita peruano Juan Pablo Vizcardo y Guzmán en 1792 quién pronuncia por primera vez allí, la existencia de “una Patria”. En esta etapa se destacan la generación de los unificadores sintetizadas en la figura de los Libertadores José de San Martin y Simón Bolívar, la concepción de soberanía cultural del Maestro del Libertador Bolívar, don Simón Rodríguez, la concepción revolucionaria de Bernardo de Monteagudo, y la acción social y política de los curas Morelos e Hidalgo y la figura gigantesca en la liberación social del haitiano Alexander Petión.

2- Los proyectos de Confederación

De Artigas, la “Nación de Repúblicas” de Bolívar o la idea de unidad centroamericana de Morazán.

3- La idea de resistencia a los imperios.

Desde la figura del último libertador José Martí (héroe de la independencia y Cónsul de Argentina, Paraguay y Uruguay-hecho desconocido y que debemos revitalizar) al anunciador de la Patria Grande (con la incorporación de la América de variante portuguesa) del socialista católico nacional Manuel Ugarte y de la generación del 900.

4- Los Líderes Populares.

Se trata de los liderazgos de los movimientos nacionales populares que promueven la industrialización, la democratización y la integración. Juan Domingo Perón y Getulio Vargas y Carlos Ibáñez plantean el Nuevo ABC. Y Perón es el primer teórico y político del continentalismo en la fase previa al universalismo.

Manuel Ugarte será su Embajador en México y primer Embajador argentino en Cuba y Nicaragua de nuestra historia diplomática

5- Los movimientos de resistencia cultural.

El revisionismo histórico rioplatense con Luis Alberto de Herrera, Víctor Haedo, Methól Ferré, Vivian Trías, Jorge Abelardo Ramos, Hernández Arregui, Carlos Montenegro, José María Rosa, Gabriela Mistral, Helio Jaguaribe, Celso Furtado, Paulo Freire, Darcy Ribeiro. La Teología Latinoamericana con Helder Cámara, la Filosofía de la Liberación con Leopoldo Zea, la Teoría de la Dependencia con Theotonio Dos Santos o el Realismo Mágico Latinoamericano con García Márquez, Octavio Paz, Roa Bastos o Carlos Fuentes.

Es una constelación aún todavía no percibida en su hondura.

6- La etapa de los movimientos nacionales post consenso de Washington.

Simbolizada en el Mercosur, la UNASUR y la CELAC como ensamblaje ante el neoliberalismo.

El objetivo es redescubrir el ser latinoamericano. América Latina es un todo que no sabe totalizarse. Únicamente un pensamiento político de la integración conlleva a una ciudadanía regional hacia un Estado continental, para afrontar tal vez la etapa más difícil de nuestra historia.

El dilema es Patria Grande o la nada.

(*) Dr. Miguel Ángel Barrios Politólogo, Sociólogo e Historiador Miembro de Dossier Geopolitico

Autor de más de 20 obras de historia y política de América Latina

Dr Miguel A. Barrios

El faltazo al BRICS, la suspensión del swap con China, las duras condiciones que impone el FMI y la falta de otros apoyos muestran la desprotección de nuestro país

Por Eduardo J. Vior
analista internacional

El pasado 29 de diciembre se supo que el presidente Javier Milei había informado a los cinco países miembros del BRICS que este lunes 1° de enero Argentina no se incorporaría al foro internacional. Ya previamente el Banco Popular de China (PBC, por su nombre en inglés) había suspendido la vigencia del swap de monedas entre ambos países. Para reparar en algo la dañada relación, nuestra Cancillería anunció ese mismo viernes la designación de un nuevo embajador ante China. Ya en el nuevo año, este martes 2 el gobierno informó que el jueves 4 se reunirá con una misión del FMI, para tratar la reanudación de los pagos del organismo, mientras que el multimillonario Elon Musk volvía a señalar su aprobación de las medidas del gobierno libertario. Sólo el magnate y la congregación judía Javad Lubavich aparecen públicamente apoyando al presidente Milei. Demasiado poco para mantener la gobernanza de un país de nuestras dimensiones y peso. ¿Cuánto y cómo puede sostenerse este esquema de poder ante las crisis internacionales que se avecinan?

2024: BRICS 10 er i gang - steigan.no
El gobierno de Javier Milei confirmó a fin de año que nuestro país no ingresará a BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). La decisión fue formalizada a través de una misiva oficial enviada el pasado 22 de diciembre a su par de la Federación Rusa, Vladímir Putín, quien ocupa en 2024 la presidencia rotativa del bloque, y comunicada a los otros cuatro mandatarios de los países fundadores del grupo.

En dichas cartas el presidente fundamenta su decisión diciendo que “no se considera oportuno en esta instancia participar como miembro a partir del 1° de enero del 2024, ya que muchos ejes de la política exterior actual difieren de la anterior”. El texto insiste en subrayar la diferencia de orientación de la política exterior actual respecto a la anterior. No obstante, el jefe de Estado argentino ratificó a Putín y a sus colegas “el compromiso” de su gobierno “con la intensificación de los lazos bilaterales con su país, en particular el aumento de los flujos de comercio e inversión”.

En agosto pasado, gracias a la intensa presión de Lula Da Silva y Xi Jinping, en la Cumbre del foro en Johanesburgo fue aprobado el ingreso de Argentina como miembro pleno de ese bloque junto con Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Etiopía, Irán y Egipto. La incorporación debía efectivizarse este 1º de enero. Argentina fue el único país que rechazó el convite.

El desplante del libertario no hizo más que agravar la relación con China, ya bastante afectada por sus declaraciones altisonantes durante la campaña electoral. Como respuesta a la incertidumbre en la relación bilateral, inmediatamente después del balotaje del 19 de noviembre el PBC suspendió el intercambio de monedas vigente desde 2013. Dado que Argentina ya había gastado previamente todos los yuanes de libre disponibilidad para pagar las cuotas del préstamo del FMI, el BCRA se encontró sin fondos. En esta situación está todavía después de casi un mes de gobierno.

Por esta razón, al mismo tiempo que informaba el envío de la carta a BRICS, la Cancillería comunicaba el jueves 22 que el diplomático de carrera Marcelo Suárez Salvia será el nuevo embajador argentino en China. Es un funcionario del servicio exterior que ha estado al frente de la Dirección Nacional de Ceremonial del Ministerio y anteriormente fue embajador en Canadá (2016-17), jefe de gabinete de la canciller Susana Malcorra (2016), cónsul en Chicago (EE.UU.) y tuvo otros cargos diplomáticos en Italia y en misiones argentinas ante Naciones Unidas, entre otros destinos. 

Así, el gobierno argentino procura destrabar una de las quejas de China ante la demora en designar embajador. Sin embargo, es significativo que no haya mandado un representante político y haya optado por un especialista en protocolo, el área menos política de la Cancillería. Evidentemente, al tiempo que nos alejamos de BRICS nuestro gobierno rebaja el nivel de la representación en China. 

Entre tanto, el poder ejecutivo argentino solicitó al Congreso Nacional la aprobación de un acuerdo con la República Popular sobre doble imposición, es decir, que empresas que ya tributen en el país asiático no lo harán en el nuestro. Se trata de una manera sencilla de autorizar la evasión impositiva desfinanciando a la vez a nuestro Estado.

Por otra parte, este martes se supo que el jueves 4 el jefe de gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, recibirán a una comitiva del FMI para renegociar el préstamo de 2022 por 44.000 millones de dólares destinados a pagar el crédito otorgado por el organismo en 2018 al gobierno de Mauricio Macri. Al dar a conocer la noticia, el vocero presidencial Manuel Adorni indicó que en el encuentro se explorará el modo de retomar el acuerdo que “está virtualmente caído”, según dijo. Sin yuanes ni créditos privados, el gobierno argentino agacha la cabeza y acepta las órdenes de los burócratas venidos de Nueva York.

Sólo una personalidad extranjera apoya entusiastamente al gobierno de Javier Milei: Elon Musk. El pasado viernes 29 en la red X de su propiedad la cuenta @Endwokeness publicó un recuento de acciones ejecutadas por el gobierno libertario. Este repaso incluyó desde el polémico Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 hasta la llamativa prohibición del término “woke” (corrección política) en el ámbito militar argentino. La celebración de estas medidas provocó una breve reacción de Musk con un simple “Wow” que ratifica su apoyo al gobierno de Javier Milei y se suma al intercambio que tuvieron poco después del cambio de gobierno y a la mención que el presidente hizo de Starlink, cuando justificó la desregulación de la oferta de Internet.

Entre los magnates argentinos que sostienen el nuevo gobierno (Galperín, Eurnekián, Elsztain) sobresale el último. El propietario del hólding inmobiliario IRSA, representante de la congregación mística neocapitalista Javad Lubavich y vicepresidente del Congreso Judío Mundial, consiguió que el presidente Milei (quien se aloja desde hace 45 días en un hotel de su propiedad) designara a su ex gerente Nicolás Pakgojz para dirigir la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), la administradora de todos los inmuebles del Estado nacional. Elsztain fue también quien dio a Milei el contacto con Javad Lubavich. 


Javier Milei con Eduardo Elzstein

En suma, a principios de 2024 Argentina se ha distanciado de Brasil y China (sus dos principales socios comerciales), no ocupa el lugar que le corresponde entre sus pares de BRICS ni se preocupa por activar Mercosur, Unasur o CELAC, donde tendría una posición relevante que podría aprovechar económicamente. Tampoco mantiene relaciones fluidas con Estados Unidos u otras potencias occidentales. Hoy en día nuestro país carece de protagonismo internacional. Tanto más dependiente se ha hecho de unos pocos grupos rentísticos nacionales insertos en la economía mundial de casino. Para la gestión de la deuda externa depende completamente del FMI, cuya burocracia va a completar el crédito de U$S56.000 millones comprometido con Macri, por un lado para lavar su propia culpa implicando a nuestro país, por el otro para facilitar la conversión a dólares de la deuda interna del Banco Central y la fuga de ese préstamo adicional hacia paraísos fiscales.

El gobierno de Javier Milei tiene un proyecto colonial de sometimiento de nuestro país al capital financiero especulativo concentrado y de desquiciamiento de toda su estructura política, económica, social y cultural para que sea ingobernable por décadas. El caos que ha creado ya el DNU 70/23 es inmenso. Sin embargo, a pesar del saqueo del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de ANSES (U$S53.000 millones) y del proyectado remate a precio vil de YPF y Aerolíneas, Argentina depende de diarias inyecciones de dólares para mantener el mínimo funcionamiento de la administración. Este plan, empero, requiere que la tasa de interés en EE.UU. se mantenga alta, para continuar la fuga hacia el dólar. 

La situación mundial se encuentra al borde del estallido. Si la defensa ucraniana se desmorona y el ejército ruso avanza, cuanto menos, hasta el Dniéper, no sólo el gobierno de Joe Biden va a ser duramente golpeado dentro de Estados Unidos, sino que Black Rock va a tener que dar cuenta a sus accionistas de las pérdidas concomitantes con la ocupación rusa de las tierras que recibió de Ucrania como garantía por sus préstamos de guerra. Probablemente quiera entonces resarcirse aumentando los beneficios de sus inversiones en Argentina.

Si EE.UU. e Israel atacan a Yemen, para restablecer el abastecimiento de petróleo para el segundo, el movimiento Ansar Alá y el ejército yemenita van a responder bombardeando los yacimientos en Arabia Saudita y Emiratos. Ante el brusco aumento del precio de los hidrocarburos que sobrevendría y el pánico que recorrería toda la economía occidental, es probable que las grandes corporaciones quisieran echar mano a Vaca Muerta. No basta para remplazar la oferta que se perdería, pero en pocos años podría aportar gran parte del gas faltante.

En caso de que las provocaciones norteamericanas en el Mar de la China Meridional desemboquen en un enfrentamiento con China, se vería afectada el comercio marítimo internacional y por consiguiente nuestros intercambios con la potencia asiática. Además del daño comercial que sufriríamos, es legítimo prever que, dado el alineamiento ideológico de nuestro gobierno con Occidente, Beijing exigiera entonces la devolución del swap.

Pueden pensarse otras hipótesis de conflicto. En todas ellas Argentina aparece aislada y a merced de los acontecimientos. Cualquiera de estos cimbronazos va a provocar peleas entre los bandoleros que han asaltado el poder, para protegerse y quedarse con los restos del naufragio. Sería bueno, entonces, que el movimiento nacional y popular no sólo mantenga su unidad, sino que deje de lado toda ilusión de sacar ventajas mediante negociaciones y afiance sus vínculos con los movimientos populares latinoamericanos y del Sur Global. En el siglo XXI la Geopolítica se ha vuelto una cuestión muy seria como para dejársela sólo a los gobiernos.

A partir del 29/12/2023 tenemos un acuerdo de difusión de los trabajos de Dossier Geopolítico en el Canal de Telegram (originado en Moscú) de «Nuestra América» [ Metapolítica. Filosofía política. Antiglobalismo. El objetivo de este canal es analizar la base ideológica de América Latina, como parte del mundo multipolar. Publicamos noticias y opiniones que son importantes para la formación de un polo]

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Lo que fortalece la expansión de nuestros análisis y aportes a la temática geopolítica mundial que generamos.

Lic. Carlos Pereyra Mele
Director de Dossier Geopolitico 

En su reciente referendum consultivo sobre la Guayana Esequiba el pueblo venezolano afirmó su unidad nacional, legitimó a su gobierno y afirmó su soberanía nacional.

Por Eduardo Vior Analista Internacional colaborador de Dossier Geopolitico

06-12-2023 | TELAM

Foto AFP
Foto: AFP.

Las estrofas del Himno Nacional resonaron el domingo a menudo en las calles de Venezuela. Es que el triunfo del “SÍ” en el referendo consultivo sobre la soberanía venezolana en la Guayana Esequiba (o, simplemente, Esequibo) representa una victoria por puntos de Venezuela sobre la Exxon Mobil, del conjunto de las fuerzas democráticas gubernamentales y opositoras sobre los intentos desestabilizadores, del partido oficialista sobre sus contendientes y del propio presidente Maduro dentro del mismo partido de gobierno.

El canciller venezolano, Yván Gil, emitió este lunes en la red social “X” un comunicado oficial en el que rechazó las declaraciones del portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos en relación al referendum consultivo realizado el pasado 3 de diciembre calificándolas como “una intromisión inaceptable”. Pocas horas antes el portavoz norteamericano Matthew Miller había advertido a Venezuela que la disputa territorial con Guyana por el Esequibo no puede ser resuelta mediante un referendum y subrayó que el gobierno de Joe Biden sólo reconoce la frontera establecida en 1899 por un laudo arbitral entre los dos países suramericanos, “mientras no haya un acuerdo entre las dos partes o un organismo competente lo decida”.

Por el contrario, el presidente Nicolás Maduro celebró este lunes el resultado del referendo que le otorga el respaldo popular para reclamar la soberanía sobre el territorio del Esequibo. El mandatario afirmó que “ahora sí vamos a recuperar” esa zona rica en petróleo, ante una Guyana que se muestra “vigilante” y que cuenta con el apoyo de Estados Unidos. Contra algunos reparos de la oposición, el mandatario reafirmó que “este referéndum es vinculante y acato el mandato del pueblo, el mandato popular es sagrado, la voz del pueblo es la voz de Dios”, agregó.

Aprovechando la ocasión, el jefe de Estado convocó a fortalecer la unidad nacional. “Tenemos como gran tarea seguir transitando caminos de encuentro y consensos, siempre junto al Pueblo, con planificación y organización para la convivencia sana, la defensa integral, la estabilidad, la recuperación económica y la armonización de políticas públicas en beneficio de la nación”, expresó en la red social X.

El presidente solicitó asimismo este lunes a Estados Unidos no interferir en la disputa por el Esequibo. Durante su programa “Con Maduro +” instó a la Casa Blanca a permitir que Guyana y Venezuela resuelvan la controversia conforme al Acuerdo de Ginebra de 1966. Con este pedido Maduro reaccionó a las declaraciones del portavoz Miller y acusó a EE.UU. de alentar a Guyana a provocar a Venezuela.

Según informó también este lunes el Consejo Nacional Electoral (CNE), más del 95% de los 10,4 millones de votantes que participaron en esta consulta, entre 20,7 millones convocados (el 50% del padrón), aprobó la incorporación de la zona reclamada a Venezuela como 24º estado de la Federación con el nombre de  Guayana Esequiba, así como dar la nacionalidad a sus 125.000 habitantes.

Las cinco preguntas que debieron responder los votantes en el referendo consultivo fueron las siguientes:

1. “¿Está usted de acuerdo en rechazar, por todos los medios, conforme a Derecho, la línea impuesta fraudulentamente por el Laudo Arbitral de París de 1899 que pretende despojarnos de nuestra Guayana Esequiba?”

2. “¿Apoya usted el Acuerdo de Ginebra de 1966 como el único instrumento jurídico válido para alcanzar una solución práctica y satisfactoria para Venezuela y Guyana en torno a la controversia sobre el territorio de la Guayana Esequiba?”

3. “¿Está usted de acuerdo con la posición histórica de Venezuela de no reconocer la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia para resolver la controversia territorial sobre la Guayana Esequiba?”

4. “¿Está usted de acuerdo en oponerse, por todos los medios, conforme a Derecho, a la pretensión de Guyana de disponer unilateralmente de un mar pendiente por delimitar, de manera ilegal y en violación del Dderecho Internacional?”

5. “¿Está usted de acuerdo con la creación del estado Guayana Esequiba y que se desarrolle un plan acelerado para la atención integral a la población actual y futura de ese territorio, que incluya entre otros el otorgamiento de la ciudadanía y cédula de identidad venezolana, conforme al Acuerdo de Ginebra y el Derecho Internacional, incorporando en consecuencia dicho estado en el mapa del territorio venezolano?”

Guyana recurrió ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya contra la realización del referendum. Finalmente, el pasado viernes, el tribunal pronunció un fallo en el que pidió a Venezuela “abstenerse de cualquier acción que altere la situación que prevalece en el territorio en disputa”, pero no prohibió la realización del acto comicial.

Tras el referendo el ministro guyanés de Exteriores, Hugh Todd, dijo a la AFP que su país mantendrá una posición “vigilante”. Todd resaltó que Guyana cooperará con Estados Unidos para su defensa. Por su lado, el vicepresidente de Guyana, Bharrat Jagdea, aseguró que su país está preparado para cualquier eventualidad.

Preocupadas por el cariz que toma el conflicto en su frontera norte, las autoridades brasileñas mantienen contactos de alto nivel con ambos países en busca de un acercamiento, dijo a la prensa en Brasilia la secretaria para Latinoamérica de la cancillería brasileña, Gisela Padovan. No obstante, como el alto mando brasileño mantiene tradicionalmente muy fluidos intercambios con sus pares venezolanos, sabe que Caracas no invadirá Guyana. De todos modos ha mandado varias unidades para vigilar la zona.

En inmediata aplicación del voto popular, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) de Venezuela ha intensificado su acción social en los municipios linderos con Guyana. El Comando Estratégico Operacional (Ceofanb) compartió el martes 5 en redes sociales imágenes de los uniformados brindando atención médica y construyendo puentes en la localidad de Punta Barima, Estado de Delta Amacuro.

El Esequibo es un espacio territorial rico en petróleo, oro y bienes comunes que Venezuela reclama, porque durante la colonia pertenecía a la Capitanía General de Venezuela e Inglaterra lo ocupó en la década de 1830. En 1899 se reunió en París un tribunal arbitral que falló a favor de la soberanía inglesa sobre el territorio. Sin embargo, cincuenta años más tarde, al morir uno de los jueces, se supo que el fallo había sido “comprado” por la diplomacia de Londres y el gobierno venezolano lo impugnó. En 1966, poco antes de la independencia de Guyana ese mismo año, Gran Bretaña y Venezuela acordaron en Ginebra volver a negociar sobre la soberanía sobre el territorio. Sin embargo, desde que en 2019 Exxon Mobil y Chevron comenzaron a extraer petróleo en la zona marítima en litigio, Georgetown anunció que sólo reconocería el laudo arbitral de 1899 y permitió el ingreso de tropas norteamericanas a su territorio. El Comando Sur del US Army anunció recientemente la próxima instalación de una base militar en el Esequibo.

Ante la agudización del conflicto y el riesgo de que Estados Unidos erija otra base más cerca de su frontera (ya tiene otras en Colombia y en Curazao), el gobierno de Nicolás Maduro inició el año pasado una fuerte movilización nacionalista que este domingo tuvo un primer punto culminante en la celebración del referendum.

Sin ser un triunfo restallante, el referendum del pasado domingo 3 fue un éxito para el gobierno de Nicolás Maduro que le permite entrar con optimismo en la carrera para la elección presidencial del próximo13 de octubre de 2024. Si bien la participación electoral fue baja (50% del padrón), hay que recordar que sólo el referéndum revocatorio de 2004, en plena presidencia de Hugo Chávez y apenas dos años después de la derrota del golpe de estado de 2002, concitó una participación del 66%. En cambio, en el referendum electoral de 2007 sólo participó 55% del padrón. No hay otros referendos con los cuales comparar y hacerlo con elecciones presidenciales o legislativas no es pertinente.

El gobierno venezolano se propuso realizar una demostración de unidad nacional y tuvo éxito, ya que sólo el grupo reunido en torno a María Corina Machado rechazó la convocatoria. El resto de la oposición, la central empresarial FEDECAMARAS y la Conferencia Episcopal Venezolana (muy crítica del gobierno) apoyaron el llamado a las urnas.

Del mismo modo, la convocatoria sirvió al gobernante Partido Socialista Unificado de Venezuela (PSUV) para “calentar los motores” de cara a la elección presidencial venidera.

En lo que respecta al litigio fronterizo, la aprobación de la pregunta 5 obligará a una reforma constitucional siguiendo el precedente argentino de 1994, para incorporar a la Guayana Esequiba como 24º estado de Venezuela. A diferencia de nuestro país, empero, como el territorio reclamado linda con los estados venezolanos de Delta Amacuro y Bolívar, Caracas planea en los próximos años desarrollar intensamente la infraestructura social, educativa y sanitaria de la frontera, para inducir a más guyaneses a utilizar los servicios de Venezuela (muchos ya lo hacen) y, de ese modo, persuadirlos de tomar la ciudadanía venezolana. En la medida en que aumente el número de venezolanos que habite la Esequiba, disminuirá la legitimidad de la soberanía guyanesa.

Si UNASUR estuviera funcionando, este conflicto se resolvería en la mesa de negociaciones, pero hoy en día sólo vale la competencia pacífica. Mucho más ante un gobierno guyanés que se deja dictar su conducta desde Washington y se ha puesto completamente al servicio de Exxon Mobil.

Ante la centralidad que “la Olla” entre los ríos Orinoco y Esequibo adquirirá próximamente en la política petrolera mundial, Venezuela sigue el ejemplo argentino y lo supera hábilmente generando una movilización nacional que unifica a la sociedad, fortalece al Estado y aprovecha ventajosamente la coyuntura internacional. Cuando los vientos de la tormenta mundial arrecian, sólo la unidad nacional puede ofrecer protección.
Las opiniones expresadas son responsabilidad exclusiva del autor/autora y no representan necesariamente la posición de la agencia.

FUENTE: https://www.telam.com.ar/notas/202312/648714-venezuela-esquibo-guyana-referendum.html

¡¡ LA NARCO POLÍTICA SE EXPANDE DESDE EL CORAZÓN DE SUDAMÉRICA !!

Así lo alerta el director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, en su columna del Club de La Pluma, señalando que Paraguay es ya el cuarto país del mundo con mayor criminalidad, gracias a que la narco política y el terrorismo narco se han apoderado de las estructuras del estado y desde el cual, gracias a su posición geográfica y a su capacidad refinadora, de almacenamiento y de logística, está expandiendo la geopolítica de las drogas en toda la región, trazando el eje del crimen desde Perú y Bolivia como países productores, sumando a Brasil y Argentina como sus primeros consumidores y utilizando a Uruguay, el segundo país con mayor desarrollo de la narco política, como puerto de salida hacia los ricos mercados de Europa.

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Y mientras profundiza su análisis del Paraguay, como un emporio del crimen organizado, poniendo énfasis en el gran desarrollo del contrabando de todo tipo, tráfico de armas y tráfico de personas, aborda la extraña paradoja de que a pesar de la actuación en territorio paraguayo de agencias norteamericanas como la CIA, el FBI y la DEA, haya aumentado -en lugar de disminuir- la producción, la exportación y el consumo de drogas, tanto como la impunidad de las mafias. Repitiendo lo ya ocurrido en México y Colombia. Además del impresionante aumento de las sucursales de la mayoría de los bancos anglo americanos, en un escenario donde es fundamental blanquear y transferir las cifras gigantescas de dinero negro que allí se generan.

Además, nos señala Pereyra Mele, la conexión directa de Paraguay con los cárteles de San Paulo y Río De Janeiro y con el “triángulo de oro” del consumo argentino entre Buenos Aires, Córdoba y Rosario. Siendo esta última ciudad el terrible ejemplo de cómo el narcotrafico se transforma en narco política, atacando gravemente el orden institucional y democrático de los países.

Y en medio de este desolador panorama, nos confirma que a su vez, Paraguay se ha transformado en una base militar norteamericana, que además pretende que sus ingenieros marines operen las estratégicas aguas de río Paraná, además de ser parte de la nueva estructura conducida por el comando Sur de los Estados Unidos.

Con lo que se confirma que la geopolítica de las drogas se utiliza también para desmembrar gobiernos que no son afines y para consolidar a grupos de poder disciplinados con la estrategia norteamericana de dominio y control de Sudamérica.

Eduardo Bonugli (Madrid, 03/12/23)

Por qué Paraguay se sumó a México y Colombia como uno de los países con mayor criminalidad del mundo BBC NEWS

Por Sergio Rodríguez Gelfenstein

Entre noviembre de 1884 y febrero de 1885, en la ciudad de Berlín, convocada por Francia y Gran Bretaña​ y organizada por el canciller de Alemania, Otto Von Bismarck, se reunieron las principales potencias mundiales a fin de organizar el reparto de África. Algunos años después, en mayo de 1916 a través del Acuerdo Sykes-Picot Gran Bretaña y Francia hicieron lo propio en el Asia Occidental y el norte de África.

Estos repartos coloniales vinieron a consagrar el poderío mundial de Gran Bretaña, pero en esta instancia, debió ser un poder compartido, primero con Francia y posteriormente con Estados Unidos. No obstante, hubo un período de la historia en que Gran Bretaña fue ama y señora del planeta, a partir de el asombroso aumento de la productividad como consecuencia de la revolución industrial. Como parte sustancial de su poderío, Gran Bretaña construyó y desarrolló un gigantesco imperio colonial.

Ciento cincuenta años después, la huella colonial sigue presente en todo el planeta, en algunas regiones todavía a través de su expresión primigenia, y en otras, en forma de control neocolonial para mantener los hilos que permiten el dominio de buena parte del planeta. Vale mirar los trazados rectilíneos en los mapas derivados del surgimiento de Estados nacionales en los espacios trazados por las metrópolis tras el reparto del planeta. Para ello, no se contó con la opinión y aceptación de los pueblos originarios de esas regiones que vivían en tales territorios desde épocas ancestrales. 

Así mismo,  es menester observar la enorme cantidad de conflictos latentes emanados de las metrópolis tras retirarse de sus colonias, derrotadas u obligadas por circunstancias al margen de su control. Por ejemplo, el territorio de Cachemira que debió ser pakistaní, quedó en India. Kuwait, una provincia iraquí, fue elevada al status de Estado nacional por obra y gracia de Londres. Jordania, fue inventada nadie sabe de dónde, para ser entregada a la dinastía hachemita como premio consuelo por haber sido desplazada de Arabia que fue, a su vez, entregada como recompensa a la familia Saud, por su perruna lealtad a Gran Bretaña. 

En África, tutsis, hutus, bantúes, tuaregs, masái, mursis, zulúes y centenares de pueblos originarios, vieron trazadas líneas de separación de sus territorios ancestrales, siendo obligados por la fuerza a hablar idiomas extranjeros y aceptar religiones extrañas. De un día para otro, vieron horrorizados que en sus comunidades, una parte debía, hablar francés y la otra inglés además de tener que “pedir visa” para visitar a sus familiares que habitaban en comunidades cercanas. 

Ya a comienzos del siglo XIX, Gran Bretaña supo combinar su dominio naval, la enorme capacidad de crédito en las finanzas, una gran experiencia comercial y una exitosa diplomacia de alianzas para constituirse en la potencia hegemónica global. Así, la revolución industrial vino a fortalecer una posición que ya había mostrado grandes éxitos en las luchas mercantilistas y preindustriales del siglo anterior. En 1815, la derrota de Napoleón Bonaparte vino a consolidar la hegemonía inglesa. 

América Latina y el Caribe no fueron ajenos a esta circunstancia. Los conflictos en Europa y las imprevisibles victorias de uno u otro bando concluían con acuerdos que transferían la posesión de un territorio colonial de una soberanía a otra. Así, por ejemplo, Trinidad y Tobago fueron cedidas por España a Gran Bretaña por el Tratado de Amiens de 1802. Aruba por su parte, que fue ocupada por los holandeses en 1636 permaneció bajo su control durante casi dos siglos, pasando a dominio de Gran Bretaña en 1805 y devuelta al control neerlandés en 1816. Otro caso es el de Belice, un territorio que ocupado por Gran Bretaña en 1638, mantuvo una constante tensión con sus vecinos españoles hasta que en 1798, Madrid fue definitivamente desplazada,  convirtiéndola en la única colonia británica de América Central con el nombre de Honduras Británica. 

En este período de inicios del siglo XIX, aprovechando su poderío ilimitado, desde su pequeña posesión en Guayana, Gran Bretaña comenzó en 1814 su expansión hacia el oeste. Así, las 20 mil millas² originales de su colonia se fueron ampliando a 60 mil a mediados del siglo XIX, a 76 mil en 1855 hasta llegar a las 109 mil millas, equivalentes a 159 mil Km².

En este contexto internacional se produjo la declaración del presidente Monroe del 2 de diciembre de 1823, devenida en doctrina de política exterior de Estados Unidos. A fines de siglo, ya en plena etapa imperialista, Washington comenzó a dar mayor continuidad a la aplicación de esta doctrina: en 1898 Estados Unidos intervino militarmente en Cuba y en 1903 promovió la secesión de Panamá de Colombia para apoderarse de un territorio que le permitiera a construir el tan deseado canal. Al iniciar el siglo XX, los presidentes Teodoro Roosevelt y William Howard Taft implementaron nuevas modalidades de intervención que fueron conocidas como  “Política del Gran Garrote” y “Diplomacia del Dólar”. En ese marco, Estados Unidos ocupó Cuba entre 1906 y 1909. 

Así mismo, en la crisis de Venezuela, iniciada en 1902 cuando barcos de guerra de Inglaterra, Alemania e Italia bombardearon y bloquearon los puertos venezolanos para exigir el pago de deudas adquiridas durante la lucha de independencia, el gobierno del país invocó la doctrina Monroe ante lo cual Washington actuó para “apaciguar” a los europeos a cambio de lo cual se comprometió a obligar a Venezuela a sufragar sus compromisos financieros. 

Todo ello contrastaba con la tradición bolivariana de defensa irrestricta de la soberanía. Con su infinita sabiduría, el Libertador Simón Bolívar ya en 1819 durante su discurso en el Congreso de Angostura estableció claros principios y doctrinas para la creación de las repúblicas americanas que habrían de constituirse. En el caso de Colombia (a la cual pertenecía Venezuela),  en 1821 en el Congreso de Cúcuta, los plenipotenciarios acogieron la idea del Libertador y establecieron precisa delimitación del territorio nacional. Al hacerlo, se había originado una Doctrina de Derecho Internacional emanada del uti possidetis juris de 1810 que aceptaba como título legítimo la posesión en que habían estado los territorios americanos y a la cual tenían derecho en virtud de las disposiciones que habían generado su creación.

A Bolívar se le debe esta iniciativa que se incorporó al ordenamiento jurídico de la naciente república. El Libertador previó con extraordinaria visión de largo plazo que las discusiones de límites entre las nuevas repúblicas generarían graves inconvenientes por lo que era necesario trazar definidas reglas que dieran bases jurídicas a todos y evitaran problemas de orden público internacional. Nadie sabe cuántas guerras le evitó el Libertador a Nuestra América. Como la historia se ha encargado de demostrar –a diferencia de otras regiones del mundo- nuestros problemas limítrofes han sido ínfimos si se les compara con otros continentes. 

En este contexto, Venezuela permanentemente protestó por la actitud prepotente y expansionista de Gran Bretaña. Por esta razón, en 1896 Estados Unidos y Gran Bretaña iniciaron conversaciones sobre el problema limítrofe de esta última con Venezuela. Esto condujo en 1897 a un tratado para establecer el arbitraje.

Estados Unidos logró imponer condiciones de arbitraje absolutamente lesivas para Venezuela y favorables a Gran Bretaña. Este arbitraje es el que en 1899, al margen del derecho internacional, incumpliendo las normas que se habían establecido y sin que Venezuela pudiera exponer sus argumentos, falló legitimando la usurpación a través de un laudo.   El verdadero alcance de la expoliación sólo se vino a saber muchos años después.

En 1949 se dio a conocer un memorándum escrito por el abogado estadounidense Severo Mallet-Prevost quien había actuado como consejero de Venezuela en la negociación. En el documento, publicado después de su fallecimiento, Mallet-Prevost reconocía que el laudo fue producto de un arreglo político entre Estados Unidos y Gran Bretaña que hizo un trazado arbitrario de la frontera, acordado al margen del derecho internacional .Vale decir que dos de los cinco jueces que fallaron eran británicos y otros dos estadounidenses.

Esto demuestra la naturaleza viciada del laudo y es la razón por la que ningún gobierno venezolano lo ha reconocido. En 1966, Gran Bretaña aceptó finalmente, iniciar negociaciones con Venezuela, llegando al Acuerdo de Ginebra de 17 de febrero de 1966. Este documento fue reconocido por Guyana al acceder a su independencia el 26 de mayo de ese año.

Venezuela a su vez, reconoció la independencia de Guyana, reservándose el mantenimiento de su demanda histórica y por tanto reconociendo la soberanía del nuevo Estado a partir del territorio al este de la línea media del Río Esequibo desde su nacimiento hasta su desembocadura en el Océano Atlántico. Desde entonces, el diferendo se mantuvo en un plano amistoso.

Sin embargo, en fecha reciente se produjo una primera señal de alarma evidenciando una alteración de esta situación, cuando Guyana renunció a dar continuidad al trabajo del buen oficiante designado por Naciones Unidas. Esta fue una indicación inequívoca que anunciaba la intención guyanesa de llevar el conflicto por otra ruta. Lamentablemente así fue. Guyana decidió dar una concesión a la empresa estadounidense ExxonMobil, la cual bajo influjo imperial y apoyada por su gobierno y por poderosos intereses económicos y políticos trasnacionales se propuso escalar el conflicto para poner a Venezuela en el banquillo de los acusados como cabeza de playa de una nueva escalada intervencionista contra Venezuela que ha llevado el diferendo -de forma ilegal- a la Corte Internacional de Justicia de La Haya que no tiene jurisdicción sobre este asunto.

El originario pensamiento ecléctico de Hugo Chávez y su acelerada evolución política e ideológica lo condujo, de sostener preceptos nacionalistas, patrióticos y bolivarianos, a claras ideas antiimperialistas e incluso socialistas. Acorde a ello, su reflexión y su práctica también fue progresando en cuanto a su mirada sobre la Doctrina Monroe y sus efectos en Venezuela y América Latina y el Caribe. 

Su acendrado sentimiento bolivariano, sustentado en un profundo conocimiento de la vida y la obra del Libertador lo llevaron a apuntalar casi de forma natural su rechazo al panamericanismo y las derivaciones intervencionistas que emanan de la Doctrina Monroe. 

En la gran batalla librada en Mar del Plata contra el Tratado de Libre Comercio de las Américas (ALCA) presentado por Estados Unidos en noviembre de 2005,   Chávez comenzaba a perfilar la idea de continuidad que esbozaba la Doctrina Monroe, el panamericanismo y esta nueva propuesta de Estados Unidos. En su discurso durante la concentración popular en apoyo a la política latinoamericana y caribeña y contra el imperialismo frente al Palacio de Miraflores el 19 de noviembre de ese año, trazó con precisión la forma que debía adquirir el pensamiento y la práctica antiimperialista. 

Al referirse a su participación en el evento de la ciudad argentina, expresó: “Allí llegamos nosotros los venezolanos, decididos a continuar resistiendo la agresión imperialista, a continuar diciéndole no a la propuesta imperialista de engullirnos, en una propuesta –como ya he dicho– muy vieja, pero que va cambiando de nombre, a medida que pasan los años, las décadas y los siglos; ya la llamaban Doctrina Monroe en una época, más recientemente Iniciativa para las Américas y luego, la propuesta de ALCA, ALCA, ALCA, ¡Al carajo! ALCA ¡Al carajo! Se va, mandamos al ALCA ¡Al carajo! Bien lejos, porque aquí tendremos patria, aquí seremos libres, no seremos colonia norteamericana, preferimos morir mil veces, a que Venezuela se convierta otra vez, en una colonia norteamericana”.

En el futuro, el pensamiento integracionista bolivariano de Chávez se fue llenando de un sustento antimperialista que impregnó su quehacer en la construcción de instancias de unión latinoamericana y caribeña alejadas de la impronta panamericana. En 2011, al definir los fines de la naciente Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) expresó que debía ser “un escudo protector contra la injerencia […] incluso un cortafuego contra la locura imperial”. Así mismo conceptualizó a la nueva organización como “el proyecto de unión política, económica, cultural y social más importante de nuestra historia contemporánea” desterrando para siempre cualquier atisbo de aceptación de la Doctrina Monroe y su influjo como soporte del proyecto integracionista de la región.

Las líneas anteriores nos permiten apreciar que desde Bolívar a Chávez, la marca de la Doctrina Monroe ha estado siempre presente en Venezuela. A través del tiempo, su rastro ha señalado el devenir propio de la vida de Venezuela como nación independiente. 

América Latina y el Caribe se han movido en torno a la diatriba entre bolivarismo y monroísmo. Nuestra condición de ser el país natal del Libertador, en el cual desarrolló los primeros años de su vida política llevando a Venezuela a su surgimiento como nación independiente y soberana,  señalan el derrotero de una huella que en términos políticos y económicos, pero también en los planos de la cultura, la identidad y los símbolos, han establecido el rumbo del país. Incluso en aquellos momentos de la historia cuando los gobiernos han estado más cerca de Washington que de los propios intereses nacionales, la condición de nido de las ideas bolivarianas ha estado presente para dar continuidad al espíritu y al sentimiento de nación.

Es verdad que tras Bolívar, vino Páez y la subordinación del país a la oligarquía. También es cierto que después de Cipriano Castro, llegó Juan Vicente Gómez para entregar Venezuela y su petróleo a Estados Unidos. Pero la llegada al poder de Hugo Chávez y su extraordinario quehacer pedagógico en materia de hacer conocer la historia con criterio refundacional, apelando a la revisión de los argumentos tradicionales, que se mostraban como impolutas verdades de nuestro pasado y que de esa manera se le enseñaba a las nuevas generaciones como parte de los anales que dieron origen y continuidad a la nacionalidad venezolana, han venido a producir un cisma en la interpretación de la vida pretérita del país.  

La publicación en el año 2000 de la versión número 4 de los documentos de Santa Fe, elaborados por una comisión de expertos estadounidenses ultra conservadores sólo unos meses después de la llegada al poder de Hugo Chávez, apuntaban claramente a contener su impulso integracionista bajo la acusación de que “apoyándose en el bolivarismo,  [Chávez] aspira a formar la Gran Colombia (Venezuela, Colombia, Panamá y Ecuador), probablemente como república socialista”.

Después de eso, vinieron el golpe de Estado del año 2002 y el paro y sabotaje petrolero del mismo año que marcaron el preludio de un rosario de agresiones continuadas hasta que el 8 de marzo de 2015 el presidente Barack Obama firmara una orden ejecutiva por la cual declaraba a Venezuela “una amenaza inusual y extraordinaria” a la seguridad nacional de Estados Unidos. 

De esta manera, se estableció una razón jurídica para iniciar un proceso permanente de agresión a Venezuela que aun hoy no cesa. Este decreto se ha seguido renovando anualmente durante las administraciones de Donald Trump y Joe Biden. El fantasma de la Doctrina Monroe y el panamericanismo siguen apareciendo en el espectro de la patria de Bolívar. Doscientos años después, el enemigo es el mismo.

Las opiniones expresadas son responsabilidad exclusiva del autor/autora y no representan necesariamente la posición de Dossier Geopolitico



Por Jiang Shixue*

Algunas personas han descubierto que la mayoría de los países desarrollados del mundo están en el hemisferio norte y la mayoría de los países en desarrollo están en el hemisferio sur. Por tanto, norte es sinónimo de países desarrollados y sur es idéntico a países en desarrollo. Y las relaciones norte-sur se dan entre países desarrollados y países en desarrollo, mientras la cooperación sur-sur es entre países en desarrollo. Este entendimiento se ha convertido en consenso internacional. Incluso Deng Xiaoping dijo a mediados de la década de 1980 que el orden internacional se caracterizaba por cuatro palabras: este y oeste, y norte y sur, lo que significa que la relación este-oeste se refiere a la que se produce entre países desarrollados y en desarrollo, y la relación norte-sur ocurre entre países socialistas y países capitalistas.

Además de la palabra sur, existe la expresión sur global, que ha aparecido en el círculo académico y los medios de comunicación de todo el mundo. La locución fue acuñada por el activista político estadunidense Carl Oglesby (1935-2011), cuando publicó en 1969 un artículo sobre la guerra de Vietnam en la revista católica Commonwealth. Argumentó que la guerra de Vietnam fue el resultado inevitable de cientos de años de dominio del sur global por el norte global.

Lo sorprendente es que, después de entrar en 2023, el sur global haya atraído una atención sin precedente por muchas personas, tanto a escala internacional como en China. La popularidad de esa expresión puede estar relacionada con las siguientes tres conferencias: la primera fue la Cumbre de la voz del sur global, en India (6/1/23). El anfitrión invitó a 120 países, excluyendo a China. La segunda fue la Conferencia de seguridad de Múnich (17-19/2/23), cuyo panel de discusión se tituló Recalibrando la brújula: cooperación sur-norte. La tercera fue la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón (5/23). Este encuentro estableció dos agendas, una de las cuales fue el acercamiento al sur global. Algunos países en desarrollo asistieron a esta cumbre, y en esta oportunidad tampoco fue invitada China.

Pese a la exageración de la frase sur global, hay que señalar que no existe un consenso sobre su definición. Mientras algunos creen que ocurre lo mismo al expresarse acerca del sur, es decir, los países en desarrollo, los países subdesarrollados, los países pobres o los países atrasados; otros sostienen que, al igual que la anticuada frase tercer mundo, mantiene una fuerte connotación política, que refleja la naturaleza del orden mundial dividido entre los países desarrollados y en desarrollo. Otros más tienden a decir que mientras los países en desarrollo reflejan su individualidad, el sur global les presta más atención como un cuerpo colectivo y también resalta los múltiples impactos de la globalización en los países en desarrollo.

Precisamente debido a la falta de un consenso general la gente a menudo aplica el concepto de sur global siguiendo caprichos propios o la interpreta según su comprensión como la definición del término.

Sin importar si la carencia de una definición bien reconocida conduce a confusión y desconcierto académico, es necesario señalar que algunos países, Estados Unidos, en particular, desean expulsar a China de la familia del sur global. De hecho, ya cuando Trump estaba en el poder, Estados Unidos ya había dicho que China no es un país en desarrollo. Por ejemplo, en el Memorando presidencial sobre la reforma del estatus de los países en desarrollo en la Organización Mundial del Comercio (26/7/19), Estados Unidos anunció que nunca aceptó el reclamo de China de tener el estatus de país en desarrollo.

Vale la pena resaltar que las motivaciones de Estados Unidos no surten mayor efecto debido a que el estatus internacional de determinado país no lo deciden unas pocas naciones, sino la comunidad internacional conjunta. En su informe titulado Forjar un sur global (19/12/04), el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) ya había incluido a China en la lista del sur global, que comprende más de 130 países en desarrollo.

Es cierto que, a medida que su economía crece rápidamente, el estatus internacional de China ha aumentado cada día. Pero la identidad de China como país en desarrollo no ha cambiado. Según la reciente clasificación por ingresos del Banco Mundial, por ejemplo, China aún está debajo del umbral del grupo de ingresos altos (INB per cápita de 13 mil 846 dólares o más). Aun en el futuro previsible, China seguirá siendo miembro de la gran familia de países en desarrollo y seguirá contribuyendo a la prosperidad común de los mismos mediante la promoción de la cooperación sur-sur. Por tanto, el concepto y aplicación del sur global dejando a China a un lado es una seudo hipótesis o una falsa proposición.

*Profesor distinguido. Escuela de Relaciones Internacionales de la Universidad de Estudios Internacionales de Sichuan

LA JORNADA

FUENTE: https://www.nodal.am/2023/11/el-sur-global-sin-china-es-una-seudohipotesis-por-jiang-shixue/ 

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