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Por Daniel Symcha que autoriza su publicación en Dossier Geopolitico

En el año 2007 el General de cuatro estrellas del ejército estadounidense y ex comandante supremo aliado de la OTAN en el periodo 1997-2000, Wesley Clark durante una entrevista en el medio estadounidense “Democracy now” conducido por la periodista Amy Goodman, afirmó haber tenido conocimiento de la nueva la estrategia militar de los EEUU diez días después de los ataques del 11 de septiembre de 2001. Clark dijo públicamente que un ex oficial de su Estado Mayor en su oficina del Pentágono había recibido un memorando de la oficina del entonces Secretario de Defensa Donald Rumsfeld, que describía cómo los EEUU iban a eliminar a siete países en cinco años, empezando por Irak, y continuando luego por Libia, Líbano, Somalía, Sudán, Siria y, finalmente, Irán.

Veintitrés años después alternando entre las “Revoluciones de Colores” (Yugoslavia, Ucrania, Georgia, Kirguistán y Líbano) del periodo que va del año 2000 al 2005; las “Primaveras Árabes” (Kuwait, Sudán, Jordania, Siria, Egipto, Irak, Marruecos, Palestina, Bahrein, Túnez, Libia, Sáhara Occidental y Yemen) en el periodo que va del año 2010 al 2012; las intervenciones militares directas mediante alianzas como en el caso de Kuwait, Afganistán e Irak; el apoyo a las intervenciones de aliados como Israel o incentivando y solventando grupos insurgentes armados, vemos que no solamente se cumplió lo denunciado por el entonces General Clark sino que se consolidó un arco de fuego en torno a Rusia y China y se instaló un proceso socio económico que menoscaba la economía europea bajando las capacidades productivas y depreciando su moneda en el mercado mundial.

Estrategia del caos

Si bien más allá de las invasiones a Panamá y Granada los EEUU no han tenido ninguna victoria militar de manera singular, la anglosfera se especializa en elaborar alianzas que permitan mantener el status quo de dominación a escala global potenciando las capacidades de intervención. Un claro ejemplo de ello es el primitivo UKUSA (United Kingdom – United States of America Agreement) del año 1946, que posteriormente dará lugar a la alianza denominada “Los cinco ojos” un acuerdo de cooperación en inteligencia entre cinco países: Estados Unidos, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Canadá, Australia, Nueva Zelanda.

Otro de los ejemplos es la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) del año 1949 que involucra a 30 países y tuvo intervenciones militares de acuerdo a los intereses geopolíticos anglo-norteamericanos: Guerra del Golfo (En 1990 y 1991, la OTAN llevó a cabo las operaciones Anchor Guard y Ace Guard, a petición de Turquía); Bosnia y Herzegovina (Embargo de armas y zona de exclusión aérea); Kosovo (Con el envío de una fuerza de 3.700 hombres en 1999 y la realización de una campaña aérea contra las fuerzas serbias); Afganistán (En 2003 se hizo cargo de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad, ISAF, del Consejo de Seguridad de la ONU); Somalia (Desde 2008, llevan a cabo una serie de operaciones navales antipiratería); Libia (En 2011 estableció una zona de exclusión aérea e inició ataques aéreos a las fuerzas libias); Ucrania (Desde la “Revolución Naranja” y luego la anexión rusa de Crimea en 2014, la OTAN ha intensificado sus operaciones de vigilancia aérea y apoyo a las fuerzas ucranianas).

La desestabilización lograda en la región del Magreb, es decir, el norte de África y de los países de la región oriental del Mar Mediterráneo implicó un costo social muy alto para Europa continental y un fuerte impacto para las estructuras políticas que se encontraban bajo la influencia de la OTAN y su red de organizaciones destinadas a contrarrestar las amenazas híbridas implementando nuevos conceptos estratégicos de gobernanza partir de fomentar redes intergubernamentales e intersectoriales bajo un mismo criterio lo cual impactó sobre la construcción de sentido en la población civil europea, permitiendo asimilar las acciones militares sin prever las consecuencias de las mismas sobre las sociedades. Ejemplo de esto es el Hybrid Coe (Centro Europeo de Excelencia para la Lucha contra las Amenazas Híbridas) con sede en Helsinki, Finlandia (Hybrid Coe, 2014).

La crisis militar y social europea donde se mueve la OTAN y los magros logros obtenidos viene a poner en claro la incapacidad demostrada por la organización para hacer frente a la defensa de los intereses vitales de Europa lo cual quedó en evidencia durante la veloz expansión de un ataque biológico, como fue  la pandemia del Covid 19.

La creación de organizaciones armadas

La participación de mercenarios en las guerras no es un asunto nuevo. Ya Maquiavelo planteaba la necesidad de evitar su uso porque no se podía garantizar su lealtad.

EEUU apoyó, mediante las ganancias del negocio de la droga entre las comunidades negras de la Costa Oeste norteamericana coordinado por la CIA, a los contrarrevolucionarios en Nicaragua. El descubrimiento de este sistema de financiación ilegal le costó la vida al periodista Gary Webb del periódico San Jose Mercury News. Mucho antes el gobierno norteamericano mediante la CIA financió a los grupos anticastristas que fueron derrotados en Bahía Cochinos, Cuba. Caso similar sucedió con los Talibanes durante la ocupación rusa en Afganistán.

Podríamos enumerar cientos de casos, pero lo cierto es que el armado y financiamiento de grupos armados alrededor del planeta es moneda corriente para la política exterior norteamericana en su estrategia del caos.

Centrándonos en Oriente Medio, Al-Qaeda se formó a fines de los años 80 del siglo XX, cuando un grupo de voluntarios árabes, respaldados por Estados Unidos, se unió a la lucha de los muyahidines que enfrentaban la ocupación soviética en Afganistán (BBC, 2004). Estado Islámico (ISIS) surgió como una organización terrorista cercana a Al Qaeda para enfrentar la invasión de Irak en 2003 pero todos sus atentados posteriores son contra intereses y objetivos europeos, no norteamericanos a excepción del atropellamiento del año 2017 en Nueva York, algo no muy profesional ya que murieron más argentinos (5) que norteamericanos (2).

Hacia 1989 se formó el DAESH, es decir el “Estado Islámico en el Levante” (África), un grupo terrorista paramilitar de naturaleza yihadista wahabita que se unirá a Al-Qaeda en 1999 para recibir entrenamiento y financiación. En 2014 se separan de Al-Qaeda  y declararon un Califato en territorio de Irak y Siria (Arroyo, 2021) y proyectarán poder sobre países del África, zona de influencia europea.

El movimiento de resistencia islámica “Hamás” surgió por primera vez en 1987 pero las primeras raíces del movimiento surgieron a mediados de la década de 1940, con el establecimiento de los Hermanos Musulmanes en Gaza quienes desarrollaban actividades educativas religiosas y culturales, no militares. Hacia los años 60 del siglo XX comienza dentro de la organización un “movimiento correctivo” que incluye el manejo de armamento y se une este segmento a la FATAH, organización político-militar palestina, fundada en 1958 en Kuwait. Esta unidad tendrá su final en los acontecimientos de 1970 conocidos como “Septiembre Negro”. El ex Presidente Egipcio Hosni Mubarak, acusará a Israel de crear Hamas para combatir desde adentro la resistencia de la OLP (Organización para la Liberación de Palestina) (Essam, 2024).

Hamas llevará adelante un ataque sobre la población civil israelí el 7 de octubre de 2023 lo que desencadenará una avanzada militar de Israel sobre la Franja de Gaza primero y posteriormente contra el Líbano. Este ataque, perfectamente registrado audiovisualmente y difundido en redes sociales, no afectó infraestructura crítica ni infraestructura militar clave salvo la creación de sentido en la opinión pública.

Irán, Ucrania y Taiwán

Un punto estratégico de alta importancia geopolítica se encuentra al sur de la península arábiga, en Yemen, puerta de acceso al Mar Rojo y por lo tanto al canal de Suez. En Yemen se desarrolló una de las “Primaveras Árabes que terminó con la presidencia de Ali Abdullah Saleh, asumiendo el gobierno el mayor general del ejército yemení, Abd al-Rahman Rabbuh al-Mansur al-Hadi hasta el año 2022 donde cede el mando al Consejo de Liderazgo Presidencial. En 2014 luego de un intento de Golpe de Estado, comienza una guerra civil que dura hasta el presente con cuatro actores: la República de Yemen, El Movimiento Ansar-Allah, también conocido como «Hutí», Al- Qaeda y  La coalición liderada por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos. Las fuerzas hutíes atacan a toda embarcación de bandera israelí, norteamericana o anglosajona que navegue por el estrecho de Bab el-Mandeb en solidaridad con la población de Gaza asediada por las fuerzas armadas israelíes. Los rebeldes hutíes contarían con el respaldo logístico y armamentístico de Irán.

Mientras tanto, en 2014 en Ucrania era derrocado el presidente Viktor Yanukovich a partir de la revolución denominada “Euromaidan” donde tuvo una activa participación en las revueltas Victoria Nuland, Subsecretaria de Estado para Asuntos Políticos del gobierno norteamericano y lobista de las principales empresas productoras de armamentos de su país, entre las que se General Dynamics, Northrop Grumman y otras corporaciones cuyas ganancias crecen en proporción al belicismo de la política exterior de Estados Unidos (Boron, 2022).

Tras la caída de Yanukovich asume el gobierno Petró Poroshenko quien busca sumar a Ucrania a la OTAN y lleva adelante una serie de medidas contra la influencia rusa y la población rusoparlante en el país lo que genera reclamos sociales siendo el punto máximo el incendio de la sede de la Central Sindical de Odessa donde murieron 47 manifestantes que pedían un referéndum para alcanzar la autonomía de los Óblast de Crimea, Odessa, Donetsk, Jerson, Zaporiyia y Lugansk donde comienzan movimientos separatistas. En 2019, electo Volodímir  Zelensky, actor, comediante, abogado y político ucraniano, profundizará las medidas de  Poroshenko, solicitará el urgente ingreso a la OTAN y concentrará tropas en el límite de las regiones sublevadas lo que utilizará Rusia como excusa para organizar una “misión militar especial” destinada a proteger a las poblaciones rusoparlantes y a las regiones que se declararon independientes mediante un referéndum.

Mientras tanto, Gran Bretaña se suma al Acuerdo Integral y Progresivo para la Asociación Transpacífico, un pacto comercial histórico acordado en 2018 entre 11 países incluidos Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam.

En paralelo, en marzo de 2023, Estados Unidos, Reino Unido y Australia llevaron adelante el AUKUS, un plan para crear una nueva flota de submarinos de propulsión nuclear de cara a poder hacerle frente a una proyección del poder militar chino.

En este contexto se incrementaron las tensiones con China por la presencia de legisladores norteamericanos en Taiwán así como también por el posicionamiento de naves de combate de la Séptima Flota norteamericana en las proximidades de la isla. Este es el escenario donde el Presidente Argentino promete a la Generala Richardson, Jefa del Comando Sur Norteamericano, que la base multipropósito argentina ubicada en Ushuaia será de uso compartido con las tropas norteamericanas. 

Aproximación indirecta y política norteamericana

En este contexto global, se desarrollan en 2024 las elecciones en los EEUU las cuales ganó de manera contundente, Donald Trump quien promete terminar con la guerra de Ucrania. Durante este tiempo se incrementa una serie de acciones armadas, la mayoría de carácter asimétrico, en todo oriente medio volviendo a tener presencia organizaciones terroristas que operan conjuntamente sobre puntos de interés para la hegemonía norteamericana como Siria o el Líbano; se incrementa la tensión entre Israel e Irán con ataques directos; Israel ataca a Gaza en represalia a Hamás; Yemen ataca a Israel; la Alianza Árabe con apoyo británico y norteamericano atacan a los rebeldes en Yemen; se producen revueltas en Georgia; Talibanes atacan puestos fronterizos pakistaníes; recrudecimiento de los ataques de las filiales de Estado Islámico y Al Qaeda en Burkina Faso, Malí o Níger; la Liga Musulmana de Pakistán-Nawaz contra el gobierno pakistaní;  los cortes de fibra óptica submarina en el Mar Báltico y el cierre del paso de gas por Ucrania hacia Europa.

La retirada de los Demócratas de la administración norteamericana parece incluir un campo minado a escala global basado en la post legalidad “una situación en la que el derecho interno e internacional se manipula, se desconoce o se quiebra a expensas de un bifronte Estado gendarme que opera con escasa rendición de cuentas hacia adentro y con excesivo despliegue militar hacia afuera” (Tokatlian, 2012).

Se han activado todos los dispositivos estatales y paraestatales bajo la órbita del poder hegemónico para que jueguen de manera simultánea en todo el tablero geopolítico. Así podemos ver como fuerzas irregulares no estatales de supuesto origen islámico como el ISIS alcanzan altos niveles de organización, sincronización, control territorial e intervenciones cada vez más violentas, pero no atacando objetivos israelíes o norteamericanos sino territorios y objetivos europeos o musulmanes tal como lo fueron los atentados en París de noviembre del año 2015 contra bares en Saint Denis, la toma de rehenes en la sala de conciertos Bataclan y explosiones en los alrededores del Estadio de Francia; el atentado en la sala de conciertos Crocus City Hall, en Krasnogorsk en las afueras de Moscú, la capital rusa (Roth, 2024) o la masacre de Kermán, en el sur de Irán con 103 muertos. (Di Bussolo, 2024) 

Mientras tanto a excepción de los elementos de la Armada estadounidense desplegados en las proximidades de las mencionadas zonas de crisis, las tropas estadounidenses luego de la retirada de Afganistán, se encuentran acantonadas y a la espera en diferentes posiciones como la Base Aérea de Al Udeid en Qatar, la Base Aérea de Incirlik en Turquía, la Base Aérea de Ali Al Salem en Kuwait y la Base Naval de Bahrain, ubicada en la isla de Juffair, en el Reino de Bahréin (Schaer, 2024). Posiciones estratégicas para las operaciones militares de Estados Unidos en la región como por ejemplo soporte de inteligencia para Israel y las fuerzas irregulares que operan a favor de intereses norteamericanos, apoyo aéreo y ataques con misiles y, sobre todo, estar preparados para que cuando las operaciones híbridas comiencen a generar malestar social, poder avanzar sobre el objetivo final, Irán.

Están dados todos los elementos y los pasos de una estrategia de aproximación indirecta (Hart, 1960) que tan bien describe en su obra el franco británico Basil Henry Liddéll Hart…

…un dinamismo entre los diferentes frentes de combate que dispersan la atención, recursos y esfuerzos de quien en verdad es el objetivo principal de una estrategia militar planteada en 2001, Irán

Daniel Symcha

Bibliografía de referencia

Arroyo, C. (21 de Abril de 2021). Observatorio Internacional de Estudios sobre Terrorismo. Obtenido de https://observatorioterrorismo.com/apuntes/trayectoria-historica-de-daesh-origenes-y-evolucion-hasta-la-actualidad/ 

BBC. (22 de Julio de 2004). BBC. Obtenido de BBC: https://www.bbc.co.uk/spanish/specials/1548_guia_al_qaeda/page3.shtml 

Boron, A. (1 de Febrero de 2022). Página 12. Obtenido de Página 12: https://www.pagina12.com.ar/398803-victoria-nuland-un-personaje-sombrio-en-la-crisis-de-ucrania 

Di Bussolo, A. (4 de Enero de 2024). Vaticano News. Obtenido de Vaticano News: https://www.vaticannews.va/es/mundo/news/2024-01/iran-atentado-kerman-mausoleo-soleimani-victimas-isis.html 

Essam, L. (17 de Enero de 2024). BBC. Obtenido de BBC: https://www.bbc.com/mundo/articles/cg3vxwnderno 

Hart, B. (1960). Estrategia, la aproximación indirecta. Ciudad autónoma de Buenos Aires: 1884 Círculo Militar.

Hybrid Coe. (2014). Hybrid Coe. Obtenido de Hybrid Coe: https://www.hybridcoe.fi/who-what-and-how/ 

Roth, A. (23 de Marzo de 2024). Islamic State’s deadly Moscow attack highlights its fixation with Russia. Londres, Londres, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

Schaer, C. (30 de Enero de 2024). Deutsche Welle. Obtenido de Deutsche Welle: https://www.dw.com/es/tropas-de-eeuu-en-oriente-medio-en-la-l%C3%ADnea-de-fuego/a-68125615 

Tokatlian, J. G. (2012). Crisis y redistribución del poder mundial. Revista CIDOB d’Afers Internacionals, 25-41.

Por Carlos Pereyra Mele(*)

“Las noticias son buenas

si vas a dar batalla,

pues lo quieras o no,

afuera hay una guerra.

No sirve que te escondas

ni que vivas rezando.

Cuando la muerte se alza

siempre te acaba encontrando”

He elegido de introducción éste verso del cantautor Gabo Ferro como una forma de alerta por la peligrosa e inducida ignorancia de las sociedades occidentales, en un mundo sometido a terribles y permanentes conflictos fragmentados provocados por el poder anglosajón que nos dejan sin aliento, además de agobiarnos con su estrategia mediática que acelera la velocidad de las noticias para que se superpongan una contra otra. Y así lograr que el siguiente acontecimiento oculte al anterior, sin tiempo ni capacidad de comprensión ni de análisis equilibrados y que ello nos haga rehenes de la interpretación manipulada de los hechos. 

Tal maniobra mediática, con su correspondiente avalancha de desinformaciones, se ha puesto de manifiesto estos días con el fulminante ataque y destrucción de Siria, que responde por completo -no a una rebelión popular- y si a la estrategia de los servicios de inteligencia occidentales (EEUU, Israel, Inglaterra, Francia e Inglaterra) más la participación directa e imprescindible de Turquía, quiénes bajo la excusa épica de “liberar a los sirios de una cruel dictadura” cuando -por el contrario- persiguen con ésta agresión largamente ansiada y preparada, algunas de sus más desmesuradas ambiciones en Asia, tan añoradas como pro imperialistas. Ambiciones tales como:

  • El sueño húmedo de Henry Kissinger -y de anglosajones y europeos- del desguace y partición Siria hasta ser un páramo desquiciado por luchas tribales, étnicas y religiosas (para el expolio de sus inmensas reservas de gas y petróleo) y que encaja con el plan maestro del “Gran Oriente” balcanizado, indefenso y entregado a las codicias imperiales. Foto A
  • Un paso de gigante para la expansión sionista hacia el anhelado Gran Israel -“desde el Nilo hasta el Éufrates”- ocupando Siria más otros países vecinos y con Irán como objetivo tan preferente como obsesivo.
  • La más que conocida pretensión del presidente turco Recep Erdogan por restaurar el antiguo y todo poderoso Imperio Otomano, que paradójicamente, a partir de ahora sería el siguiente plato a devorar en el insaciable banquete sionista / norteamericano.
  • La obsesión mística y fanática del DAHES o ISIS por instaurar en la región EL CALIFATO, “una idea, un territorio”. Ahora con su nueva versión conocida como HTS (Hayat Tahrir al Sham) que proviene nada menos que de las antiguas organizaciones Al Qaeda, Al Nusra y el Estado Islámico (ISIS).

Son cuatro actores avariciosos -más sus descomunales pretensiones expansionistas- unidos en la necesidad común de derrocar al régimen de Bashar al-Assad, pero que ya ha degenerado en un anárquico y contradictorio marco de terribles enfrentamientos “entre vencedores”, donde se impone un horizonte de guerra de “todos contra todos”, apuntando a una tragedia global e histórica de terribles consecuencias humanitarias y que desmonta el falso e idílico relato de “una comunidad internacional” alumbrando la democracia y el bienestar para los sirios.

Por ahora, y pocos días después del “esperanzador triunfo de La Libertad”, ONG occidentales han adelantado ya el desplazamiento forzoso y desesperado, sólo en el norte de Siria, de más de 120.000 personas por los combates entres estos bandos y por los bombardeos israelíes.  

Y mientras que en Occidente están extasiados por el frenesí de festejos ante “la caída del dictador” y ciegos por los augurios delirantes de un “futuro brillante” para Siria -que cómo estado ya no existe- pretenden hacernos olvidar hechos trascendentales ocurridos en el mundo a lo largo de las últimas semanas, tales como: 

  • El impresionante misil ruso hipersónico Oreshnik y sus letales efectos que ha dejado muda a la OTAN, así como impotente y sin margen de efecto a las indecentes amenazas nucleares del moribundo régimen de Biden.
  • También quieren minimizar que en estos días la Unión Europea ha terminado de pisotear los últimos despojos de su “sacrosanta democracia occidental”, marcando un antes y un después sobre el derecho universal del voto, ante los descalabros electorales en su frontera oriental y con la anulación de las elecciones en Rumania por haber dado el triunfo al candidato crítico con la OTAN y contrario al envío de armas a Ucrania. 
  • Se empeñan en disimular las vergüenzas de que el “milagro económico político” de Corea del Sur, protectorado estadounidense siempre presentado como un espejo moral del Occidente “demoliberal”, que se despachó con un golpe de estado tan “bananero” como lastimoso y cobarde, pero que confirma que las franquicias atlantistas en Asia, salvo Australia y Nueva Zelanda (Japón, Filipinas, Vietnam y otros), sufren una crítica desestabilización interna, similar a la bolsa de gatos de los europeos.
  • Y otro tanto ocurre con el escandaloso derrumbe del gobierno francés de apenas tres meses de vida, envuelto en una impresionante crisis económica, social y política, que no sólo acelera la caída en picado de Emmanuel Macron, sino que ridiculiza patéticamente a Francia como potencia nuclear, miembro con derecho a veto del Consejo de Seguridad de la ONU, socio preponderante de la OTAN y activo valedor -a la par de la pauperizada Gran Bretaña- en incrementar la guerra de Ucrania, que incluye el repudiado capricho de enviar tropas propias al frente. Además de ser, junto a la agónica Alemania de Olaf Scholz, la más achacosa e inútil locomotora económica, política y estratégica de la Unión Europea de toda su historia. Sin olvidar que el 2024 fue el año en que Francia fue expulsada ignominiosamente de África.

Así y todo, y a pesar de tan terribles realidades casi terminales para el globalismo neoliberal, las fuerzas mediáticas de Occidente -mientras se regocijan sobre las ruinas y el dolor de los sirios- se empeñan en burlarse de Rusia e Irán (y por añadidura de China) como eco de los desprecios nada diplomáticos de la canciller de la UE, Kaja Kallas y del secretario general de la OTAN, Mark Rutte, quiénes por sus típicas ingenuidades geopolíticas, creen que este efímero triunfo puede frenar el cataclismo del mundo unipolar, cuando en realidad los supuestos beneficios de la tragedia siria no tardarán mucho en mostrarse, no solo como un chasco, sino como otro grave tiro el pie para sus “colonias europeas”.

Sin lugar a dudas, la pérdida de influencia sobre Siria y la ocupación de su territorio por ésta “Alianza Frankenstein” es un importante contratiempo para las estrategias de Moscú y Teherán, inclusive para China y para el imparable ascenso de la economía de los BRICS. Y es prudente entender y sopesar que ha afectado algunos planes del mundo multipolar, prestando atención a lo relacionado con la logística y el transporte y en lo tocante a la Nueva Ruta de la Seda, por la pérdida de influencia sobre tan estratégico territorio. Aunque se debe recordar ahora más que nunca, el mayor legado en infraestructuras de Putin: el estratégico corredor Norte Sur que sale de San Petersburgo, pasa por todo el Cáucaso, llega a Irán y sale al Golfo Pérsico. Una ruta que permitirá el transporte de mercaderías y energías en ambas direcciones, totalmente alejado de la zona de conflicto que hoy se dirime en Siria y haciendo que Rusia quede fuera de las sanciones occidentales, además de reducir de 45 a 10 días el trayecto hasta Bombay, además de propiciarle enlaces con Irán, la India y muchos otros países y llegando incluso a competir con el canal de Suez. (1)

Por lo que ésta contingencia -sorpresiva para muchos- no variará las grandes tendencias que se vislumbran para el siglo XXI, y que todo lo ocurrido en estos últimos cinco lustros, tanto los avances logrados por las nuevas potencias emergentes como la degradación del imperio anglosajón en todos sus órdenes, SON YA IRREVERSIBLES. Además de que “la victoria occidental en Siria” está condenada a provocar graves sangrías internas entre sus promotores, además de una devastadora tragedia humanitaria y -lamentablemente- posibles sufrimientos para las poblaciones occidentales.

El discreto silencio y la sobriedad de Rusia y China ante los acontecimientos, han desatado la creencia entre los occidentales que se deben a un reconocimiento tácito de la derrota. Y eso es así por que ésta camada de dirigentes de EEUU y Europa -la más incompetente y neófita de siempre- no ha aprendido nada de la historia. Sigue sin entender la idiosincrasia oriental a pesar de los golpes recibidos. Resulta increíble que aún no tengan claro que el silencio, la paciencia y la prudencia del mundo asiático, sirven para proteger acuerdos profundos e inalterables además de ser un preludio a respuestas demoledoras. 

Ya no quedan dudas de que el régimen sirio de Al Assad recibió propuestas de ayudas contundentes de parte de sus potencias aliadas, pero su decisión final fue entregar mansamente el poder. El tiempo sacará a la luz la verdad y las respuestas a las preguntas ¿Si no pudo, no quiso o no supo defenderse? También es cierto que era un régimen agotado hasta la extenuación tras años de guerra, enmarañado en sus propios errores y que no tenía el fondo ni los arrestos de la década pasada, cuando de forma épica supo resistir e imponerse desde 2011 al tsunami imperial de las Primaveras Árabes. Aquellas que terminaron en un sonado y trágico fracaso para la estrategia anglosajona, como que dejaron terribles secuelas para las poblaciones que supuestamente iban a “ser liberadas por Occidente”, además de abandonar a países enteros en manos de terroristas y mafiosos, a los que entonces los hacían pasar como “rebeldes”. Un falso relato que hoy se repite.

La historia de las Primaveras Árabes nos enseña también que los terroristas de entonces, adiestrados, financiados y dirigidos por EEUU, Inglaterra y la UE, atacaron a regímenes laicos proclives a la convivencia entre culturas y religiones diversas. Tanto Libia, Irak, Siria y el Líbano, era o son, contenedores de importantes minorías étnicas y religiosas, siempre protegidas y a salvaguarda de las sectas fanatizadas. Por lo que hoy, en medio de tanta orgía mediática por “la caída del tirano”, urge la preocupación y la duda por lo la suerte -“en la nueva  y prometedora Siria”- de esos miles de cristianos acostumbrados a la tolerancia de Al Assad y que ahora ya están bajo la dictadura extremista del Estado Islámico. 

¿Qué festejará y dirá esta prensa triunfalista y de qué manera actuará el poder anglosajón? cuando los “barbudos fanáticos corta/cuellos” del nuevo gobierno de Damasco, que fueron su vanguardia de élite en esta invasión, se ceben contra los creyentes cristianos de allí, que representan nada menos que a la religión occidental mayoritaria por excelencia.

En tanto que cualquier pronóstico se ensombrece aún más, cuando se conoce que una de las primeras medidas dictadas por los terroristas en el poder fue liberar de forma masiva a los yihadistas encarcelados en Siria, que ya se están reincorporado a las filas de una organización resurgida a fuerza de dólares, que mantiene intacta su ideología extremista y la renovada pretensión de instalar un califato tanto en Oriente Medio cómo en África. Algo que ahora -con la ayuda de Occidente- sienten que lo tienen a tiro de piedra. Mientras que desde la prensa orgánica de la OTAN tratan románticamente de “rebeldes” a estos criminales aliados suyos, con 

Abu Mohammed al Jawlani al mando del HTS (Hayat Tahrir al-Sham, traducido como Organización o Entidad de Liberación del Levante) agregando la infantil mentira de que se han convertido de repente en ”pragmáticos, moderados y hasta inclusivos”, cuando en realidad es una organización islamista suní involucrada en la guerra civil Siria y considerada terrorista por la ONU, la Unión Europea, Estados Unidos, Rusia, Turquía y otros países. (2) Foto B

Y entre tanta falsedad de relatos, solo le falta al increíble periodismo occidental publicar imágenes de los terroristas enarbolando la enseña multicolor de LGTB+ en lugar de la bandera negra del ISIS. Mientras está tardando (y de qué manera) la clásica campaña del neo feminismo capitalista, reclamando por los derechos de las mujeres en la nueva “Siria fundamentalista”, tal cual lo hacen con clara intencionalidad política contra Irán y otros gobiernos incómodos para el imperio norteamericano. Por el contrario, los lunáticos titulares en el “mundo libre” insisten, desean, ruegan y sobre todo deliran con que se impondrá la moderación entre los yihadistas. 

Demasiado frescor ingenuo para apagar tanto fuego infernal, porque la realidad es tozuda y aunque la mano de la censura trate de tapar la luz de la verdad, en las redes sociales se pueden ver que las masacres, los asesinatos, las venganzas y las persecuciones ya campean por toda Siria. Ya sean entre tribus, etnias o religiones y también entre particulares, además de los saqueos y actos de pillaje. En pocas palabras, lo que se promueve desde “el mundo libre” como  seguridad, democracia y progreso, ya llegó a Siria en forma de destrucción, tragedia, odio y muerte.

Y esto lo saben los jerarcas europeos mientras manejan de forma magistral la censura contra sus ciudadanos. En Bruselas han saltado todas las alarmas y se han activado -con máxima alerta- los distintos protocolos antiterroristas, mientras se refuerzan los servicios de seguridad y espionaje. La preocupación y el temor son máximos. Europa es siempre el destino preferido de los que huyen de las guerras en Asia y África -pero también de los terroristas- además del peligro oculto por la acción de “los lobos solitarios islamistas” que viven resentidos en los países comunitarios. Es así el penoso precio a pagar por Europa al ser aliado privilegiado de EEUU. Más la evidencia de que se viene un nuevo tiro en el pié de los patéticos oligarcas comunitarios. 

Entretanto, se ha publicado la suspensión de visas y del estatus de refugiado a los sirios que intenten llegar al territorio de la Unión, además de la oferta de dinero a los  residentes que opten por retornar a su devastado país. Unas medidas que son apenas pequeñas muestras de un sofisticado aparato de seguridad que conoce la profundidad de los peligros y las consecuencias de esta nueva guerra híbrida de Occidente.

También hay mucha inquietud entre las petro monarquías árabes del golfo Pérsico, cuya conflictividad en la región y el accionar de los terroristas pondrán en riesgo los intereses de Arabia Saudita, Emiratos Árabes y resto de pequeños principados. Saben además que en la zona submarina cercana a la costa de Gaza, los israelíes han descubierto inmensos depósitos de gas, por lo que los judíos no van a permitir que los qataríes y vecinos, utilicen los terrenos arrasados de la nueva Siria como paso de sus gasoductos hacia Europa. Semejante negocio fabuloso se lo reservarán los sionistas para ellos mismos, aunque sea a bombazo limpio. 

Entre tanto, por los intereses de Tel Aviv y por las no condiciones del nuevo estado fallido de Siria, estaría muerto antes de nacer el anhelado proyecto de construcción del gasoducto que aliviaría la dependencia europea del gas y petróleo ruso, que saldría de Catar, pasaría por Siria, el Mediterráneo y de allí a Europa, y que fuera el motivo real de las primaveras árabes del 2011 ante la negativa de  Al-Assad a la obra. Por lo tanto, encontramos otra vez a Europa en la lista de los perjudicados por los triunfos anglosajones. 

Mientras que Netanyahu ya habría decidido cambiar el destino final  de la población sobreviviente del genocidio de Gaza, que en principio iba a ser Jordania, pero que ahora sería la parte del territorio en Siria que quede bajo control del HTS. Al hacerlo economizaría en vigilancia y municiones, al juntar en una misma zona a los viejos enemigos palestinos con los nuevos “aliados terroristas”, ya que con ambos solo piensa utilizar la diplomacia de los bombardeos.

Y siguiendo con Israel, se confirma su tendencia histórica de no cumplir los acuerdos firmados, al haber hecho estallar con violencia los acuerdos sobre Los Altos del Golán, invadiendo hasta las cercanías de Damasco y destruyendo la flota naval y todo el parque aeronáutico existente, con la argumentación de que el nuevo gobierno en Damasco no utilice esas herramientas militares para poner en riesgo la seguridad de Israel. Lo que viene a desnudar la realidad de que los socios de esta “alianza Frankenstein” están condenados al enfrentamiento mortal entre ellos y que su “tan noble propósito” de liberar al pueblo sirio, era más bien, no dejar en Siria piedra sobre piedra.

En tanto que desde el punto de vista geopolítico, la fulminante invasión y principio de destrucción de Siria no debería ser un hecho tan sorprendente como tampoco inesperado por los verdaderos conocedores de la realidad global. Su destrucción, vaciamiento y posterior desguace era algo previsto “por necesidad imperial” según diferentes doctrinas norteamericanas del siglo XX….

…Sobre todo por la del “Caos Organizado”, mediante el cual se buscaba transformar el Medio Oriente -incluida Siria-  en una región totalmente balcanizada, desmembrada y debilitada, como parte de plan de la doctrina Wolfowitz del ex Secretario de Defensa de EEUU, Paul Wolfowitz entre 2001 y 2005, que trazaba una política exterior «unipolar» y de acción militar preventiva para evitar que otras naciones -Rusia y China- ascendieran a la categoría de superpotencias...

…Tal doctrina fue apoyada activamente por el ex vicepresidente norteamericano Dick Cheney, durante los períodos del presidente Bush (h) entre 2001 y 2009 y llevada adelante desde entonces por las inteligencias norteamericana, británica, francesa y del estado de Israel, uno de los grandes beneficiarios -momentáneos- de este derrumbe del estado Sirio. Pero con el propósito final de servir a los intereses económicos del poder anglosajón y para reforzar su dominio estratégico en la región. Sin embargo, a pesar del triunfalismo desaforado de los medios occidentales, y siendo verdad que se ha logrado generar ese gran caos, no hay nada de nada sobre que sea organizado.

Sin lugar a dudas, las espadas están en alto y los ánimos enfurecidos entre los integrantes del bando vencedor. El poderoso ejército turco, motor de la invasión, está presente en el norte de Siria ante un colchón de amortiguación que lo separa de sus enemigos históricos que intentan establecer un Estado Kurdo y muy decididos a ajustar cuentas. Mientras que los Kurdos son apoyados incondicionalmente por EEUU ya que les protegen sus bases allí instaladas, con las que saquean las riquezas petrolíferas y gasíferas de lo que fue el estado Sirio. Por lo que a ese colchón de seguridad no le falta nada para saltar por los aires para que se produzca por fin, el postergado choque de titanes entre la potencia de Turquía y la OTAN. 

Por su parte Israel tiene clavado entre ceja y ceja, y desde siempre, el objetivo de hacer desaparecer los restos del viejo imperio otomano -o al menos neutralizarlo- como paso necesario en su expansión sin freno y más ahora que le ha tomado el gusto a los genocidios y a las ocupaciones de tierras. En tanto que bombardea a discreción el suelo sirio marcando el territorio a los terroristas del ISIS (ahora HTS), sabiendo que es otro de los tantos enemigos que se la tienen jurada y que le echan el aliento en la propia puerta de Israel. Mientras los anglosajones saben que a partir de lograda cualquier invasión, se agota de inmediato la subordinación de sus terroristas de vanguardia y que a partir de este punto van por libres con sus ataques imprevisibles hacia cualquier cosa que suene a occidental.

Y si a éste escenario latente de guerra de “todos contra todos” le sumamos el irreconciliable marco interno social y religioso de lo que queda de Siria, que es la sumatoria explosiva de la minoría musulmana sunni, más la minoría dominante alawi, más los kurdos, los drusos y los cristianos, solo queda por preguntar ¿Qué milagro debe ocurrir para que ésta bomba de tiempo no estalle? Y sin entrar en el terreno del mal gusto, estos enfrentamientos generalizados se parecen al cuento del escorpión y la rana. Siendo cada uno de los bandos, por momentos escorpión y por momentos rana. Aunque lo que sí parece garantizado, es que todos se encaminan hacia el conocido final del cuento.

Entre tanto sigue sonando la fanfarria mediática occidental, aunque la tozuda realidad les va mezquinando argumentos al festejo, hasta reducirlos a las morbosas y supuestas acusaciones de crueldad del régimen de Al-Assad mientras crece la censura y la manipulación sobre la realidad verdadera.

Y si han instalado la sensación triunfalista de que todo está ganado para Occidente, que Netanyahu es invencible, intocable y todopoderoso y que EEUU tiene un fondo de armario repleto de dineros, tropas y armas como para hacerse otra vez dueño total del mundo, les resulta imposible esconder el mar en un agujero en la arena y comienzan aparecer artículos de prensa -siempre sesgados y tendenciosos- pero que se ven obligados a reconocer la realidad central del momento, como ocurre con ésta nota: https://www.eldiario.es/internacional/impacto-cambio-regimen-siria-respaldado-eeuu-israel-turquia_129_11901393.html.

En tanto que la foto con los rostros de los líderes occidentales en la catedral de Notre Dame de París, habla a las claras que han sido sobrepasados por unos acontecimientos que no han sabido -ni podido- controlar, además de desarrollarse a una velocidad tan hipersónica, como el temible misil Oreshnik que tanto les quita el sueño. 

Y mientras la OTAN deshoja la margarita sobre cómo se financiará durante la etapa Trump, Europa “en modo Nerón”, canta en coro desafinado para incendiarse con más guerra y más derrumbe económico, social y político. 

Y Estados Unidos por su parte,  sigue en un enfrentamiento interno con tufos de guerra civil, en tanto que el nuevo presidente electo recibirá en pocas semanas un terreno alevosamente conflictivo y minado por su predecesor.

(*) Prof. Lic. Carlos Pereyra Mele

director de Dossier Geopolitico

Córdoba (Argentina), 16/12/24

ANEXOS:

1- Sobre el corredor Norte-Sur de Rusia:

https://noticiaslatam.lat/20240316/con-el-corredor-norte-sur-rusia-estara-fuera-del-alcance-de-sanciones-occidentales—1148999010.html

2- Más datos de “Los Rebeldes Moderados y Pragmáticos” y sus comportamientos, según agencias de noticias independientes:

El HTS, y más aún el SNA (Ejército Nacional Sirio, anteriormente Ejército Libre Sirio (FSA) y también conocido como Ejército Libre Sirio (TFSA) respaldado por Turquía, que no es monolítico como el régimen Talibán, y si una multitud de grupos regionales condiferentes visiones y motivaciones. Todos bajo el paraguas del HTS y el SNA. Lo peor de todo es que son muchos y muy diferentes los intereses…La característica principal es que son muchos, diversos, aventureros, mercenarios, criminales, sádicos y pervertidos, además de que la mayoría no son nacidos en Siria y que fueron reclutados deliberadamente con la gestión  y el dinero de Israel y Turquía. 

Y ya hay informes sobre masacres procedentes de Siria, perpetradas por extremistas que no respetan un mando central en estas trágicas horas donde se han manipulado multitudes en la zona para que estén hambrientas de espectáculos sangrientos. Una práctica habitual en Oriente, que consiste en vengarse de los vecinos, pero no por sus propias manos, sino por manos de extranjeros. Por ejemplo, en la granja Al-Rabiya, provincia de Latakia, fusilaron a alauitas sólo por sus confesiones. Los autores del delito llaman a los muertos “cerdos nusayritas”.

3- La Doctrina Wolfowitz, “el credo que puede abocar a EE.UU a un gran conflicto”

https://www.eldebate.com/internacional/20230320/doctrina-wolfowitz-vision-hegemonia-estadounidense_101945.html

El autor Agradece la colaboración en redacción y correcciones realizada por nuestros Colega desde Madrid Eduardo Bonugli.

FOTO A
FOTO B cuando el «rebelde» moderado, pragmatico e inclusivo Abu Mohammed al Jawlani Jefe del HTS era buscado como TERRORISTA por el Gobierno de EEUU y hoy gobierna el estado fallido Sirio

Por Lorenzo María Pacini

El concepto de Pentalasia podría asumir un nuevo y significativo papel para comprender los acontecimientos mundiales en Medio Oriente y más allá.

Entre los conceptos geopolíticos menos conocidos por el público en general está el de Pentalasia, que hoy podría asumir un papel recientemente significativo para comprender los acontecimientos mundiales en Medio Oriente y más allá.

El concepto en la doctrina geopolítica

Desde un punto de vista geopolítico, Pentalasia representa una configuración regional estratégica de cinco estados interconectados o áreas geográficas que abarcan Asia, como sugiere su nombre. Un espacio de cooperación multilateral basado en intereses comunes como la seguridad, el desarrollo económico, la estabilidad política y la sostenibilidad medioambiental.

En esta perspectiva, Pentalasia podría surgir como un proyecto de integración regional en una zona particularmente estratégica del mundo. Los Estados involucrados podrían compartir fronteras territoriales o estar unidos por vínculos históricos, culturales y económicos, creando un bloque capaz de afrontar los desafíos globales de manera concertada. Su colaboración podría basarse en un arreglo institucional que promueva el diálogo político, el intercambio económico y la resolución pacífica de conflictos.

Un ejemplo hipotético podría ser el de cinco países ubicados en una región neurálgica, distinta a Oriente Medio, Asia Central o el Sudeste Asiático, que decidieran unirse para garantizar la seguridad energética, promover la infraestructura regional y fortalecer su influencia en la dinámica global. En este contexto, Pentalasia podría actuar como contrapeso a las grandes potencias mundiales o a las organizaciones internacionales dominantes.

Además de los aspectos económicos y políticos, es evidente que un bloque de estas características tendría importantes implicaciones culturales, proporcionando una plataforma para mejorar la diversidad y fortalecer una identidad común, además de abordar cuestiones transnacionales promoviendo soluciones colectivas.

Por tanto, no sólo una entidad geopolítica, sino también un laboratorio para un nuevo enfoque de gobernanza regional, basado en el equilibrio entre interdependencia y soberanía.

Irán como centro de la cuestión

Centrémonos en Oriente Medio, la primera zona de identificación de Pentalasia.

Veamos el país más importante de la región: Irán.

Se trata de una potencia regional por derecho propio y de una potencia internacional al estilo de países emergentes como Brasil y Sudáfrica, hasta tal punto que el futuro del planeta está indisolublemente ligado a lo que ocurra en Irán. Es el Estado mejor situado para dominar Oriente Próximo y, junto con Rusia, el mejor situado para monopolizar las rutas entre el Gran Oriente y el Gran Occidente. En muchos sentidos, de hecho, Irán es una Rusia meridional y abundan las líneas genéticas paternas R1a (las mismas asociadas al mundo eslavo, los escitas, los indoarios, la cultura del hacha de guerra del Volga y la cultura kurgan). En la antigüedad, el Imperio persa –que corresponde a la esfera de influencia del Irán moderno– compartía fronteras con el Imperio romano al oeste y con la India al este, y dominaba también las rutas hacia China. Este simple hecho dice mucho sobre el destino histórico y geopolítico de Teherán.

Durante la época de los imperios coloniales, Irán fue el único país de la zona, junto con la mutilada Turquía, que no cayó en manos extranjeras, aunque la influencia tanto británica (en el Golfo Pérsico e Índico) como rusa (hacia el Cáucaso y el Caspio) fue muy fuerte. Era la época de la Anglo-Persian Oil Company (precursora de la actual British Petroleum) y su influencia en el Golfo Pérsico. En 1925, Reza Khan, primer ministro y antiguo general de la Brigada Cosaca Persa, organizó un golpe de Estado y se erigió en ‘shah’ (palabra iraní relacionada con el ‘ksatriya’ hindú y que significa algo así como ‘señor’) de Persia. Debido a su afinidad con Alemania, Reza Shah fue obligado por los británicos y los soviéticos a abdicar en favor de su hijo, Mohammad Reza Pahlavi. Los aliados temían que los alemanes, al entrar por el Cáucaso, pudieran llegar a Irán (y, por ende, a la India y el Tíbet, donde Alemania tenía muchos simpatizantes) y causar graves problemas en los territorios británico, soviético y francés. Además, los británicos ya tenían en la mira el ferrocarril Transiraní como ruta de abastecimiento a la URSS.

A través de Persia, Winston Churchill apoyó el esfuerzo bélico soviético con enormes envíos de material militar y materias primas. La compañía estadounidense Occidental Petroleum (hoy Oxy), de Armand Hammer, también aceptó llevarse petróleo soviético del Caspio por esa ruta. En 1951, Mohammad Mossadegh fue elegido primer ministro de Irán e inició un programa soberanista que nacionalizó la industria petrolera iraní y sus reservas de crudo, aplastando el monopolio de Londres. El gobierno británico, encabezado por Winston Churchill, respondió con el primer embargo naval al petróleo iraní, lanzó una campaña de sanciones económicas para arruinar y aislar al país, congeló los activos iraníes y conspiró con el presidente estadounidense Eisenhower para lanzar la Operación Ajax (conocida en Irán como Coup Mordad 1338) en 1953, esencialmente un golpe de Estado patrocinado por la inteligencia angloamericana. Mossadegh, muy popular en Irán, fue arrestado y su gobierno fue reemplazado por uno bajo el mando del Sha, totalmente bajo el mando de Londres y en buenos términos con Israel, Estados Unidos y Arabia Saudita. El régimen iraní empezó a reorganizarse siguiendo los pasos de las dictaduras petroleras árabes del Golfo y de la Libia del rey Idris. Durante décadas, el servicio de inteligencia del Sha , el SAVAK, aterrorizó a gran parte de la población y fue temido y odiado por sus brutales tácticas para reprimir cualquier oposición al régimen (esencialmente, clérigos chiítas y activistas comunistas).

El descontento popular culminó en la Revolución Islámica de 1979, encabezada por el Ayatolá Jomeini, que instauró una especie de teocracia nacionalista chiita, restableció una agenda política soberana, expulsó a la British Petroleum, formó la Guardia Revolucionaria y reformó el país. Poco después, Irán vivió la imposición de la guerra con el Irak de Saddam Hussein, apoyado por los angloamericanos, los mismos que lo traicionaron poco después. Esta guerra, en la que Irak utilizó armas químicas con pleno conocimiento de Occidente, reveló el enorme poder magnético que ejercía la religión chiita sobre las masas iraníes, dándoles la fuerza para hacer con alegría los mayores sacrificios y emprender acciones kamikazes que aplastaban la moral del enemigo.

El papel de Irán como nexo de unión no se limita a su bisagra este-oeste. De todos los países con costa en el océano Índico, Irán es el más próximo al Mediterráneo, al Caspio, a Rusia, al Heartland, a Israel y al antiguo espacio soviético. Su posición única en el corazón de Pentalasia (una auténtica tierra de los cinco mares ) lo convierte en una bisagra que conecta el océano Índico y el golfo Pérsico con una delicada arquitectura geopolítica que se extiende al Cáucaso, Turquía, Israel, Asia Central, Rusia y Europa. Pentalasia es, por tanto, la región bisagra por excelencia, que conecta cinco espacios marítimos totalmente diferentes e inconmensurablemente importantes.

Además, la región es rica en hidrocarburos. Probablemente no haya otro lugar en el mundo como éste y no es de extrañar que sea el entorno más sensible del planeta. Es comprensible que el atlantismo esté interesado en ocuparlo y desestabilizarlo (Israel, Irak, Siria, Líbano, Kurdistán): si este espacio se estructurara y estabilizara bajo una potencia soberana, esto restaría enorme importancia a las rutas marítimas, que son el gran recurso de las potencias talasocráticas.

Irán entra en la historia moderna como el único estado del mundo que posee mares en el Océano Índico, el Mar Caspio y el Golfo Pérsico, así como tierras en el Corazón de Eurasia y Pentalasia.

Si observamos el mapa de la Eurasia balcanizada, vemos que Irán también se sitúa en los «Balcanes euroasiáticos», la «Zona central de inestabilidad» y el «Nuevo pivote global». El papel geopolítico de Irán no es sólo el de nexo de unión, sino también el de potencial muro de contención, gracias a su territorio, que en su mayor parte es una meseta montañosa, una especie de fortaleza natural, un espacio fácilmente defendible, bien poblado (75 millones de habitantes, aproximadamente lo mismo que Turquía), con mejores medios materiales y económicos y más población que el Irak de Sadam Husein, pero con la complicada orografía de Afganistán y excelentes salidas al mar. Al ampliar su influencia en el Mediterráneo, Irán puede aislar al mundo árabe petrolero del resto de Eurasia y también sería capaz de cortar a Turquía los recursos del Golfo.

Los retos regionales de Irán son el Estado de Israel, las monarquías petroleras árabes y la presencia desestabilizadora de Estados Unidos y el Reino Unido en la región. Turquía, Israel y las monarquías petroleras árabes aspiran a dominar la región convirtiéndola en «Pentalandia». Sin embargo, les guste o no, geopolíticamente hablando la potencia más adecuada para hacerlo es Irán, que ya la ha gobernado en el pasado (medos, persas, aqueménidas, partos, sasánidas, etc.). Teherán, aliado con Siria, Irak, Líbano y las comunidades chiítas, alauitas, cristianas, drusas, ismaelitas, sufíes, etc., podría desempeñar un papel importante en la estabilización de este espacio y, por ende, en la paz mundial. Para evitarlo, el atlantismo financia el radicalismo sunita (en particular las corrientes salafista-wahabitas vinculadas a Arabia Saudita, Turquía, Estados Unidos e Israel) y hace todo lo posible para fomentar el odio sectario entre chiítas y sunitas, tal vez con la esperanza de provocar una macroguerra civil religiosa en la región.

Irán es, junto con los Emiratos Árabes Unidos y Omán, el único país del Golfo Pérsico que también tiene costa en el Océano Índico. El atlantismo apoya firmemente a las dictaduras petroleras árabes (Arabia Saudita, Qatar, los Emiratos, Bahréin), pero Irán está en mejor posición que cualquier otro país del mundo para dominar el Golfo Pérsico porque:

  1. Domina el estratégico estrecho de Ormuz, por el que pasa el 40% del tráfico petrolero mundial (incluido el 40% del petróleo de China). Si Irán cerrara este estrecho (lo que se consideraría un acto de guerra), las consecuencias internacionales serían difíciles de calcular. Recientemente, los Emiratos Árabes Unidos abrieron un oleoducto desde el Golfo Pérsico hasta el Mar Arábigo (parte del Océano Índico), eludiendo el control iraní del estrecho de Ormuz.
  2. Irán es el país con más costas en el Golfo Pérsico que ningún otro. El escenario geopolítico «normal» prevé que las actividades comerciales y financieras del Golfo Pérsico, que suponen un fabuloso tráfico de capitales cada día, se realicen en Irán y que el principal centro financiero del Golfo Pérsico no sea Dubai, sino la isla persa de Kish (destinada a convertirse en el Dubai de Irán, también gracias a los arquitectos alemanes), declarada por Teherán «zona de libre comercio», al estilo de las zonas similares de China. Kish alberga la Bolsa de Petróleo Iraní, un mercado de acciones de petróleo en divisas distintas del dólar (principalmente euro, rial, rublos, renminbi y yen), lo que es casi una declaración de guerra a Estados Unidos, atacándolo donde más le duele: el monopolio del petrodólar, creado de la nada como moneda de intercambio internacional. Kish tiende a desviar la atención de la opulenta ciudad de los Emiratos, donde se encuentra la Bolsa de Dubai, el trono supremo del petrodólar, que está estrechamente controlada por la NYMEX de Nueva York (controlada a su vez por Morgan Stanley, Goldman Sachs y otras capitales neoyorquinas y londinenses), la ICE Futures (Intercontinental Exchange), la IPE (International Petroleum Exchange) de Londres y la London International Commodity Exchange. Todas estas entidades realizan sus negocios en dólares. La Bolsa de Kish se inauguró en agosto de 2011 y utilizó el euro y el dírham emiratí en sus primeras transacciones.
  3. La mayoría de la población de la costa del Golfo Pérsico es chií. Hay un dicho que dice que «el Islam no conquistó Persia, sino que Persia conquistó al Islam», es decir, que en Irán se ha producido una indoeuropeización y una desemitización del Islam, dando lugar a una religiosidad chií, más jerarquizada que el sunnismo, con un clero plenamente organizado y con claras reminiscencias mazdeístas, zoroastrianas y maniqueas. En todo Oriente Próximo, los chiíes son una potencial quinta columna para Irán: constituyen el 66% de la población de Irak y Bahréin (un Estado petrolero insular dominado por una monarquía sunita que ha reprimido duramente a la mayoría chií sin que la «comunidad internacional» haya movido un dedo), el 33% de Kuwait, el 20% de Arabia Saudí (concentrada en las provincias petroleras del Golfo Pérsico) y el 10% de los Emiratos y Qatar. También hay importantes poblaciones chiítas en Azerbaiyán (65%), Yemen (40%), Líbano (33%) y Siria (15%), así como en Pakistán, Turquía, India, Afganistán y otros países. Estas comunidades son esenciales para la columna vertebral del «nuevo imperio persa» –la esfera de influencia de Irán– y ponen muy nerviosos a los regímenes árabes petroleros.

FUENTE: https://strategic-culture.su/news/2024/12/13/pentalasia-in-grand-chessboard-and-central-role-iran/

Por United World International

Pero Turquía, Rusia, Irán y otros países de la región aún pueden colaborar para impedir los planes de Estados Unidos.

El autor, historiador y politólogo de la UWI, el profesor asociado Mehmet Perinçek, evaluó la caída de Bashar Assad. Perinçek se centra en el carácter de los actores y fuerzas del nuevo gobierno de Damasco.

Para prever lo que puede ocurrir en Siria a partir de ahora, primero tenemos que entender el papel de los que han llegado al poder.

Estados Unidos e Israel pretenden fragmentar los Estados-nación de la región. El Proyecto Gran Oriente Medio y su objetivo de redibujar las fronteras de la región siguiendo líneas étnicas y sectarias son estrategias bien conocidas. Ya hemos visto ejemplos de ello en Yugoslavia, Irak y Libia.

Turquía representa con su presencia un obstáculo importante para este plan. La estrategia estadounidense siempre ha considerado a Turquía como un país demasiado grande y fuerte para controlarlo fácilmente. En consecuencia, su objetivo es la integridad territorial de Turquía. Para lograrlo, necesitan cercar a Turquía. Este cerco se lleva a cabo actualmente a través de las islas del Egeo, el Mediterráneo oriental y Tracia, pero uno de sus componentes más críticos está sin duda en el norte de Siria: El PKK/YPG.

Los acontecimientos en Siria deben interpretarse como acciones dirigidas tanto contra Turquía como contra Siria. Deben verse como parte de este plan de cerco.

Terrorismo separatista y terrorismo intolerante

Volviendo ahora a lo que decía al principio: el papel de los que han llegado al poder. Hay dos facciones importantes en juego en Siria a este respecto: la facción de los terroristas separatistas y la facción de los terroristas fanáticos. Ambas fueron creadas y están dirigidas por Estados Unidos. Las dos fuerzas que pretenden dar forma al futuro de Siria están bajo el control de EEUU.

Por lo tanto, Siria se enfrenta a la amenaza de la partición en el próximo período. Ya han aparecido indicios de ello. Ya han comenzado las conversaciones para redactar una nueva constitución con una estructura federal. Siria está a punto de ser reclamada por quien pueda apoderarse de ella. El PKK/YPG está ampliando su territorio, mientras que las fuerzas intolerantes se han hecho con el poder. Simultáneamente, Israel se aprovecha de la situación ocupando tierras sirias.

Es importante recordar que, cuando Turquía experimentó el intento de golpe de Estado de la organización terrorista Fethullah Gülen (FETÖ), respaldada por Estados Unidos, los días 15 y 16 de julio de 2016, hubo una preparación similar. El PKK/YPG estaba al tanto del golpe de antemano y se había preparado para actuar si tenía éxito. En este escenario, se habría establecido un gobierno títere de EEUU en Turquía y se activaría simultáneamente el terrorismo separatista. Lo que se está planeando ahora para Siria se parece a esto.

¿Qué ha salido mal?

Entonces, ¿qué se puede hacer para contrarrestar esto? En primer lugar, reconozcamos que hubo pasos que deberían haberse dado antes. La base terrorista fanática en Idlib -que es la causa principal de los recientes acontecimientos- y las bases terroristas separatistas al este del Éufrates deberían haber sido atacadas mediante la cooperación de Turquía, Rusia e Irán. No ha sido así. En consecuencia, las fuerzas respaldadas por Estados Unidos, que se habían debilitado durante la guerra civil, consiguieron reagruparse y ganar fuerza.

A pesar de estos errores, el asunto no ha terminado. Turquía, Irán, Rusia y otros países de la región aún pueden colaborar para contrarrestar la agenda de partición de Estados Unidos e Israel. En este punto, Turquía debe llevar a cabo una lucha decisiva y coherente contra el PKK/YPG. Mientras lo hace, debe alinearse con las fuerzas en Siria que puedan restaurar la unidad nacional y la integridad territorial.

Quienes celebran la situación actual de Siria pronto se darán cuenta de que hay pocas razones para ello. Veremos hasta qué punto los planes de EE.UU. e Israel para dividir Siria y cuán profundamente podría perjudicar a Turquía.

¿Qué harán Rusia e Irán?

En cuanto a Rusia e Irán, hasta ahora han desempeñado papeles fundamentales en la resistencia de Siria. Sin embargo, Rusia lleva dos años ausente de Siria debido a su operación militar especial en Ucrania. Irán se ha centrado en la cuestión palestina y Hezbolá ha entrado directamente en conflicto con Israel. Estados Unidos, Israel y sus colaboradores en Turquía han explotado esta situación.

Además de las preocupaciones de los aliados de Siria, la propia Siria ha estado sometida a sanciones durante 13-14 años. Sus recursos petrolíferos están en manos del PKK/YPG. Considero digno de mención que no existe otro canal o ruta que no sea Idlib para que este petróleo pueda comercializarse a nivel mundial.

Es poco probable que Irán y Rusia adopten una postura de confrontación contra el nuevo gobierno de Siria. Por el contrario, tratarán de mantener relaciones para preservar sus posiciones actuales. Este enfoque es comprensible. Pronto se sabrá hasta qué punto tiene éxito.

Un detalle importante que arroja luz sobre el carácter de este nuevo gobierno apareció en un reciente informe del Washington Post. Citando a una fuente diplomática antaño cercana a Assad pero ahora en el bando opuesto, el informe revelaba que Estados Unidos se dirigió a Assad con una oferta antes de la última ofensiva de HTS. La propuesta consistía en que Assad abandonara su apoyo a Irán y Hezbolá y cortara la conexión logística entre ambos. A cambio, Estados Unidos prometía levantar las sanciones. Assad rechazó esta oferta, y por eso lo derrocaron.

Fuente en español Geopolitika.ru

Fuente: https://unitedworldint.com

Mediante la división del territorio entre el Mediterráneo y el Éufrates el Imperio retoma el control de Asia Occidental y separa al bloque euroasiático de la insurgencia regional y africana

Eduardo J. Vior
analista internacional especial para Dossier Geopolitico

Pocas veces en una guerra mundial tanto dependió de tan poco: la desintegración por desidia de la República Árabe Siria aleja a Rusia de Asia Occidental, rompe la unidad geográfica del Eje de la Resistencia, da a Israel una comunicación terrestre con sus aliados kurdos y azerbaiyanos y con Turquía, que después de cien años vuelve al centro del Creciente Fértil, y reinstala allí el juego sectario de las potencias occidentales.

La recolonización de Palestina se acelera en la medida en que Eurasia retrocede alejándose del Mediterráneo y de África. Al asumir el mando el 20 de enero, Donald Trump encontrará el escenario que pidió, pero deberá lidiar con nuevas constelaciones de poder en Asia Occidental.


Áreas controladas por las distintas facciones al 8 de diciembre

Los bombardeos israelíes contra puertos sirios en la norteña provincia de Latakia este martes 10 y contra bases y unidades militares en todo el país el día anterior marcanro, sin solución de continuidad, el pasaje de la destrucción del Estado sirio a la guerra faccional que se avecina. Con los ataques el Estado sionista quiere impedir que el armamento del disuelto Ejército Árabe Sirio (SAA, por su nombre en inglés) caiga en manos de los milicianos proturcos que asaltaron el poder el domingo pasado. Por eso mismo, ante la incertidumbre que reina Washington todavía no ha reconocido al nuevo régimen. Su gobierno se manifestó dispuesto a dar el placet a los nuevos dirigentes sirios, a condición de que “se proteja a las minorías y se evite el terrorismo”.

El colapso del SAA en diez días y la huida de Assad de Damasco a primera hora del domingo anunciaron la disolución de Siria. Bashar al Assad no fue derrotado por ejército alguno, sino por la corrupción, el narcotráfico y su falta de voluntad para organizar la resistencia. Si bien el aliado ruso recuperó Alepo en 2019 y logró en 2022 un acuerdo con Turquía y los rebeldes que congeló los combates, la guerra iniciada en 2011 nunca terminó. 

Unos ocho millones de sirios salieron del país desde entonces, de los cuales más de dos millones residen en Turquía y más de uno en Alemania. La reconstrucción del país apenas avanzó y la economía sólo se mantenía a nivel de subsistencia. Lo poco de equilibrio que quedaba ha desaparecido con la pérdida del Estado. La anarquía se impone.

Milicianos islamistas festejan el 9 de diciembre en Damasco el poder recibido

El pasado lunes 9 se produjo el traspaso (arreglado por Rusia) del gobierno por el saliente primer ministro Mohammed al-Jalali a Mohammed al-Bashir, encargado de la gestión por el jefe de Hayat Tahrir al-Sham (Organización para la Liberación del Levante, HTS por su nombre en árabe), Abu Muhammad al-Golani. Al Bashir era previamente jefe del “Gobierno de Salvación” en la norteña provincia de Idleb y es miembro de HTS. Varias escenas mostraron asimismo actos de robo, saqueo y caos, incluido el robo de dinero del Banco Central y la destrucción de entidades de servicio.

La transición gubernamental coincide con “medidas propuestas para disolver todos los grupos paramilitares y unificarlos bajo el mando de operaciones militares”, según informaron fuentes del nuevo poder. La propuesta de fusión de las organizaciones armadas que remplazaron a al Assad responde a la idea de evitar luchas interfaccionales, pero ya se anuncia como irrealizable.

Sin embargo, con la sabiduría que da la experiencia imperial británica, la agencia Reuters titulaba este lunes 9 que “La caída de Assad aviva el temor de que resurja el islamismo”. En efecto, de las prisiones abiertas el domingo salieron toda clase de internos, también centenares de miembros del Estado Islámico (EI). 

Entre tanto se intensificaron los bombardeos israelíes contra instalaciones militares y navales en todo el país (250 el lunes, 130 el martes) y el ejército israelí ocupó la mitad oriental del Monte Hermón y la llamada “zona de contacto” al pie del Golán, acercándose a 20 km de Damasco. 


Las tropas israelíes ocuparon al este y norte del Golán una faja de terreno dos veces más grande que Gaza

Por su parte, el primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu, afirmó este lunes que su país no abandonará la región anexionada siria de los Altos del Golán. “Los Altos del Golán serán para siempre una parte inseparable de Israel”, afirmó el mandatario. Al mismo tiempo defendió el despliegue de fuerzas en territorio sirio, al este del macizo. 

Todos los actores internacionales dudan de que el nuevo régimen pueda asegurar el control sobre una porción importante del territorio sirio. HTS es una milicia mercenaria compuesta por combatientes de distintos orígenes (muchos de ellos son uzbecos, turcomanos y uigures), ricamente financiada por dinero israelí, británico y norteamericano. Hasta hace poco era protegida por Turquía y estaba aliada con el Ejército Nacional Sirio (SNA, por su nombre en inglés), una milicia dirgida directamente desde Ankara. Carece de toda base étnica o religiosa y, por lo tanto, no tiene arraigo territorial en región alguna del país. Se sostuvo en Idlib, porque sus patrones la alimentaban, pero desconoce la compleja realidad étnica, cultural y confesional de la civilización más antigua (7.000 años) y más compleja de Asia Occidental. No queda claro cuáles serán sus vínculos con Turquía en el próximo tiempo.


El 9 de diciembre combatientes de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) lideradas por los kurdos inspeccionan vehículos y equipos militares dañados y abandonados en el aeropuerto internacional de Qamishli, antigua base militar conjunta sirio-rusa, en la ciudad nororiental siria de Qamishli.

Consecuentemente, cada partido interno o externo hará rápidamente valer sus intereses. Es altamente probable que Turquía establezca en Alepo un gobierno propio como antesala de la reincorporación de la provincia a su territorio. Los kurdos pretenden mantener su autonomía en el norte, pero dependen de la protección norteamericana. Las Fuerzas Democráticas Kurdas de Siria (SDF, por su nombre en inglés) han perdido en los últimos días el control de crecientes franjas de territorio al este de Afrin (provincia de Alepo), incluidas las ciudades de Tell Rifaat y Manbij, situadas al oeste del río Éufrates, a manos del SNA y ahora resisten su ofensiva al este del río.

Con el apoyo de los ataques aéreos turcos los islamistas avanzaron el martes 10 hacia la ciudad de Kobani. Con Rusia, el Estado sirio e Irán fuera de juego, los kurdos sirios tienen menos margen para cerrar acuerdos que garanticen su protección, y quedaron a merced de Estados Unidos, que tiene unos 900 soldados estacionados en el noreste de Siria para garantizar el saqueo del petróleo y que EI no resurja (más de lo que ellos necesitan). El presidente Joe Biden dijo el domingo que Estados Unidos planea mantener sus fuerzas sobre el terreno, pero no se sabe qué hará Donald Trump, que en 2019 ordenó su retirada, aunque luego la contradijo bajo la presión bipartidista del Congreso. 

El Estado Islámico está recuperando el control del desierto central. Combatientes del EI han matado este martes 10 al menos a 54 personas en la región de Homs, todas ellas, al parecer, antiguos miembros del gobierno de Bashar al Asad que intentaron huir tras su caída el sábado.

Un factor mayor en el nuevo juego político será la producción y exportación de Captagon. La fenetilina (INN), también conocida como anfetaminoetilteofilina y anfetilina, es una unión química de anfetamina y teofilina que se comporta como un profármaco para las dos drogas antes mencionadas. Se comercializa para su uso como psicoestimulante bajo las marcas Captagon, Biocapton y Fitton. 

En Asia Occidental y Central su producción fue creciendo desde la década de 1980 y es ampliamente utilizada por los grupos islamistas para estimular a sus combatientes, pero también como medio transable pare llenar sus arcas. Desde 2016 su producción creció en Siria y, aparentemente, su exportación era una de las fuentes de divisas del gobierno de al Assad. Desde su caída el domingo pasado la producción y el tráfico prácticamente han cesado, pero seguramente pronto estarán nuevamente circulando, por lo que puede esperarse una feroz lucha por el mercado entre las facciones que se han adueñado del país.

https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/0/06/Marinebasis_Tartus_Openstreetmap.png/320px-Marinebasis_Tartus_Openstreetmap.png Investigación
Base naval rusa de Tartús, en la ciudad de Tartús, provincia de Latakia

Aún no está claro, si Rusia va a defender sus bases en Tartus y Hmeimim, en la norteña Latakia. Si se decide a hacerlo, va a aprovechar el repliegue hacia allí de la 25º División de fuerzas especiales para reorganizar una mínima versión del SAA. Israel probablemente extienda su dominio a toda la frontera sirio-libanesa en el afán de cercar a Hezbolá y poder intervenir en los principales centros urbanos del país, ya que nadie sabe quién los controlará en el vital eje Alepo-Hama-Homs-Damasco-Deraa.

La tragedia en Siria es garantía de nuevos millones de refugiados, del crecimiento del fanatismo religioso, del terrorismo y del miedo en países que hasta hace poco se consideraban seguros. Tras las purgas contra alauitas y militares patriotas, comenzará una lucha sectaria más tradicional. Ante este telón de fondo, es muy probable que los terroristas e islamistas de todo tipo, incluidos los de los países del Cáucaso y Asia Central, quieran regresar a sus países económicamente más viables, teniendo en cuenta la posibilidad de reubicarse en Rusia. A esto hay que añadir los intereses encontrados de las potencias.

Según explicaba este lunes un artículo en el diario oficialista turco Hürriyet, Ankara planea trabajar en tres direcciones: en primer lugar, quiere impulsar “el correcto funcionamiento del proceso de transición en Siria y la construcción de una nueva Siria”, es decir, un país sin Estado central fuerte y repartido entre distintos poderes. Turquía aspira en esta reorganización a convertirse en la “potencia protectora” del eje central. La segunda línea es la lucha contra el PKK y las YPG (el Partido de los Trabajadores de Kurdistán y las Unidades de Protección Popular, organizaciones de autodefensa de los kurdos). “En tercer lugar, agrega el artículo, garantizar el regreso a su país de los refugiados sirios que se encuentran en el nuestro”. 

Nada induce a observadores racionales a ser optimistas respecto a lo que suceda en Siria y sus repercusiones internacionales. Por cierto, Israel recibió por primera vez en la historia una ruta terrestre hacia Turquía, Azerbaiyán, los territorios kurdos y la Unión Europea (UE) y la posibilidad de anexionarse Cisjordania y parte de Gaza, sin que nadie reclame seriamente. Su ocupación al este del Golán va a perdurar por años. 

Francia, en tanto, se ha convertido en el primer país occidental en felicitar a los islamistas por su victoria en Siria y, si Rusia es expulsada de sus bases en Latakia, al quedar afectada su comunicación con las tropas rusas desplegadas en África, beneficiará la restauración del dominio neocolonial francés allí. 

A su vez, los alauitas, chiítas y cristianos de todo el país han huido hacia Latakia, provincia mayormente alauita y cristiana. En esencia, la región costera se está convirtiendo en un nuevo enclave etno-confesional. 

Rusia está en contacto con los grupos militantes que han tomado el poder en Siria. Al parecer, allí se discutirá el futuro de las bases rusas. Estados Unidos, por su parte, seguirá ocupando la zona de At-Tanf y el noreste del país. El propio Irán ha retirado sus efectivos del país. Hezbolá, en tanto, ha retirado sus unidades a territorio libanés. El ejército libanés está reforzando la seguridad fronteriza con Siria. Irak, por lo que le toca, sigue desplazando tanques y brigadas mecanizadas al confín con Siria. También se observan allí destacamentos de la milicia chiita Hashd Shaabi. Turquía, finalmente, pretende eliminar la presencia kurda al menos al oeste del Éufrates y los territorios adyacentes serán ocupados por el Ejército Nacional Sirio. Los territorios al este del Éufrates también están amenazados.

Más allá de las fronteras sirias hay que prever ahora que Israel quiera anexionarse Gaza y Cisjordania y fragmentar Líbano para debilitar a Hezbolá.

La desaparición de la República Árabe Siria multiconfesional es un duro golpe para Irán. Durante décadas Siria sirvió como un corredor vital para el suministro de armas y apoyo a Hezbolá en Líbano y una plataforma política para consolidar un frente antioccidental y antiisraelí. Si el nuevo poder islamista aliado a Turquía se consolida en Damasco, será un freno para la política regional de Teherán. Si, como es más probable, el país se desangra en una interminable guerra entre sectas, la República Islámica –tal como hizo en Irak- puede encontrar algunos aliados y participar del juego local.

A cierta distancia, mucho depende de que Georgia pueda repeler la actual campaña desestabilizadora. Si el golpe de estado triunfa allí, el Cáucaso se convertirá en una frontera porosa para los terroristas islamistas que retornan de Siria. Rusia quedará muy vulnerable.

La derrota de Siria seguramente hará modificar al liderazgo ruso el paso de su avance en Ucrania. Ante la creciente amenaza en su flanco sur, probablemente deba considerar las condiciones de negociación que propone Donald Trump.

También China debe repensar su juego en Asia Occidental. En los últimos años había acrecido su influencia como única garante de la paz y del comercio libre, pero, ante el debilitamiento de Irán y el desorden que se anuncia en la región, su rol queda relativizado por la capacidad caotizante que han recuperado las potencias occidentales. 

La desintegración del Estado sirio separa al bloque euroasiático del Mediterráneo y el Mar Rojo y disminuye su influencia sobre África.

Por el contrario, la Alianza Atlántica ha conseguido un frente continuo desde el Mar Ártico hasta el Océano Índico. Un muro de 5.000 km de largo separa ahora a Oriente de Occidente.

Si Donald Trump pretende desacoplar a Occidente bajo la égida norteamericana del Oriente continental, el primer gran paso ha sido dado. La cuestión reside en saber cuánto aguantará.

Por Ricardo Martins

Vivimos tiempos épicos. Sí, uno es el vergonzoso genocidio de Gaza, que quedará grabado en nuestra historia como uno de los momentos más bajos de la humanidad en el siglo XXI y, lo que es peor, apoyado por muchas naciones “democráticas” que defienden los derechos humanos, como Estados Unidos y Alemania. En segundo lugar, el mundo está dando a luz a una nueva era, la era en la que el dominio exclusivo de Estados Unidos y su moneda, el dólar estadounidense, está llegando lentamente a su fin. Es una era que fue establecida por Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial y que quedó esclerosada en un mundo completamente nuevo en el siglo XXI .

En este artículo (en dos partes), analizo cómo se está produciendo este cambio de era y cómo la Cumbre de los BRICS que se celebrará en Kazán entre el 22 y el 24 de octubre de 2024 está teniendo un papel divisorio. En esta primera parte, me centro en el nuevo sistema de pagos y los mecanismos que se están imaginando.

El dominio estadounidense está llegando a su fin

Los sistemas monetarios y de pago de los BRICS: un gran paso hacia el comienzo del fin del dominio estadounidense sobre el sistema del dólar.

Después de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos creó un sistema mundial a su imagen, con instituciones apropiadas para atender las necesidades de la época y también las suyas propias, como se explica en el libro de Robert Kagan, The World America Made , de 2012.

Las diferentes crisis provocadas por sus creaciones financieras, las diferentes guerras e invasiones de naciones soberanas, las sanciones unilaterales que resultaron en tantas muertes y sufrimientos a personas inocentes en países como Cuba, Irán, Siria y Afganistán, entre otros, y sobre todo la militarización del comercio mundial y la moneda de reserva, el dólar estadounidense, impuesta por ellos al mundo (incluido el hecho de que el petróleo solo podía venderse en su moneda), fue una llamada de atención al mundo, especialmente al Sur Global.

Los BRICS, a través del liderazgo de China y Rusia, personificaron las aspiraciones de libertad y prosperidad del Sur Global y se instaló en ellos la sensación de urgencia de un nuevo orden mundial.

¿Qué se prometió cumplir en la Cumbre de Kazán?

Kazán tiene como objetivo explícito discutir un sistema de pagos integrado para los BRICS, al que puedan sumarse otros países que no son parte del BRICS, según el economista francés Jacques Sapir .

La cuestión real es el desarrollo de este sistema de pagos internos del que tanto se habla en los BRICS . Se sabe que no será una moneda, sino un sistema de pagos, como anunció Vladimir Putin en la cumbre económica. Así lo ha precisado el ministro de Finanzas ruso, Sr. Siluanov, que ha hecho varias declaraciones al respecto.

Lo que pretenden los BRICS es crear un sistema en el que ni el dólar ni el euro tengan ningún papel, es decir, que sus pagos se realicen sin depender de estas monedas.

La mecánica del nuevo sistema de pagos

En una transacción internacional, existe una unidad de cuenta que define la cantidad a pagar, una unidad de transacción que indica la moneda en la que se realiza el intercambio y una moneda de liquidación en la que se pagará al país vendedor y deberá pagar el país comprador.

Parece que ya se ha llegado a una decisión común según la cual las monedas de liquidación serán las monedas nacionales de los países miembros. Sin embargo, como estas monedas pueden fluctuar entre sí, resulta imprescindible definir una unidad de cuenta y una unidad de liquidación, y aquí es donde surge el problema.

Hace un año se planteó la idea de crear un sistema similar a los Derechos Especiales de Giro (DEG) del Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, tanto Rusia como China señalaron que el sistema de DEG incluye el dólar y el euro, que quieren evitar. Ahora parece que nos estamos encaminando hacia una unidad de cuenta electrónica.

Aquí es donde vemos el impacto de la tecnología de las criptomonedas en un mecanismo político. Se utilizará una forma de criptomoneda, pero esta criptomoneda estará vinculada a un activo real, y es posible, incluso probable, que este activo sea el oro. Sin embargo, el valor de esta criptomoneda en oro podría fluctuar; no es un sistema de patrón oro, según Sapir.

Esta criptomoneda se intercambiaría por monedas nacionales: cada país que venda recibirá una determinada cantidad de criptomoneda, y cada país que compre deberá pagar una determinada cantidad de la misma. Por lo tanto, para comprar criptomonedas o convertirlas en moneda corriente, se utilizarán monedas nacionales.

Todo esto requerirá una serie de mecanismos técnicos. Parece que Rusia quiere que las transacciones o la conversión de criptomonedas a monedas nacionales se produzcan cada seis meses o a finales de año. Las transacciones dentro de este sistema permanecerían en criptomonedas durante ese período de seis meses o un año hasta que se complete la liquidación, ya que un país podría comprar bienes BRICS de otro y venderlos a un tercer país. Este sistema pretende evitar las transacciones constantes, permitiendo solo la transacción final una vez que todo se haya liquidado.

Mis conclusiones

En Kazán se anunció un nuevo sistema de pagos y liquidaciones que permita sortear el euro y el dólar estadounidense, así como el sistema de pagos SWIFT. Este sistema del que se habla es similar al que se experimentó en Europa en los años 50, hasta 1957, por lo que ya se ha probado y, por tanto, parece viable y representaría la libertad para numerosas naciones de poder sortear el dólar estadounidense.

Se espera también un papel más preponderante del NDB, que el año que viene ocupará la presidencia rotatoria de Rusia. Rusia ha sido muy activa, junto con China, en el estudio de las distintas posibilidades del nuevo sistema monetario y de pagos.

Por último, todo el mundo sabe que estos sistemas monetarios y de pagos se implementarán lentamente, pero es un gran paso hacia un mundo más libre y justo y el comienzo del fin del oportunismo de EE.UU. con el sistema del dólar, lo que implica el comienzo de un lento fin del imperio estadounidense. Este es, de hecho, el núcleo de la guerra de EE.UU. contra China. No se trata de Taiwán. Después de la guerra en Ucrania y la congelación y confiscación de los activos de Rusia en dólares, se imprimió un sentido de urgencia a estos cambios tan esperados en el sistema de pagos internacional. Esperamos que la Cumbre de los BRICS en Kazán dé resultados.

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Los cambios anunciados en Kazán en el sistema de pagos y en las reservas de las naciones son pasos concretos hacia la independencia del sistema imperialista estadounidense, cuyo símbolo es un pequeño papel verde que ya no tiene respaldo real, sino que es sólo una promesa vacía.

Una estructura imperialista no termina en un día

Estados Unidos ha logrado construir una estructura imperial basada en más de 800 bases militares en todo el mundo, la imposición del dólar como moneda de comercio internacional y de reserva, la aplicación extraterritorial de sus leyes y la creación de una red de Estados vasallos y semivasallos en torno a su hegemonía. Sin embargo, el núcleo de su sistema imperial se basa en el dólar. La desdolarización liderada por los BRICS está llevando a Estados Unidos a la desesperación, haciendo que su sistema de sanciones también sea cada vez más inútil.

Los BRICS han asumido la responsabilidad de impulsar un cambio sustancial para un nuevo orden mundial

Ningún imperio dura para siempre, especialmente uno que carece de una visión estratégica, como es el caso de Estados Unidos. El imperio estadounidense perdió guerras o promovió aún más el caos en Vietnam (1955-1975), Afganistán (2002-2021), Irak (2003-2011), Libia (2011) y no ganó en Siria y ha demostrado ser incapaz de controlar a su aliado Israel, que sigue cometiendo crímenes de guerra, defendiendo el apartheid, participando en el terrorismo de Estado y llevando a cabo genocidio. Además, Estados Unidos ha sido incapaz de formular su política en Oriente Medio independientemente del prisma de Israel.

Además, en el plano interno, su infraestructura se está desmoronando y sus indicadores sociales se están acercando rápidamente a los de los países en desarrollo. Estados Unidos es el único país importante donde la expectativa de vida está disminuyendo, la pobreza extrema está aumentando rápidamente y también lo hace la falta de vivienda. Sus ciudadanos no tienen acceso universal y gratuito a la atención médica, como sucede en la mayoría de los países en desarrollo, como América Latina. Todos estos problemas ponen de relieve la fragilidad del imperio.

El nuevo enfermo

En su momento, durante su decadencia, el Imperio Otomano fue conocido como el “enfermo de Europa”. Ahora, parece que Estados Unidos está desempeñando ese papel, o tal vez es más bien como un hombre que se está ahogando: arrastra a sus allegados a su lucha y exige lealtad en esta lenta desaparición, en particular de los países europeos que se han beneficiado enormemente de sus generosas políticas después de la Segunda Guerra Mundial. En América Latina, la Doctrina Monroe sigue muy vigente, por lo que Brasil a veces parece reacio a comprometerse plenamente con los BRICS.

Los europeos, especialmente los alemanes, han dado señales de querer la independencia, y la idea de una autonomía estratégica se ha convertido en una ilusión. La ex canciller Angela Merkel, que era liberal en lo económico, escuchó a los líderes empresariales alemanes que sostenían que el futuro no estaba en el Atlántico, sino más al este, hacia Rusia y China.

A Estados Unidos no le gustó este cambio y logró que los europeos sintieran que todavía necesitaban al Tío Sam para su protección. Darle la espalda a Estados Unidos fue visto como una respuesta ingrata al papel que desempeñó Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial y el Plan Marshall.

Estados Unidos interfirió en Europa central y Ucrania, expandiendo la OTAN hacia el este. Esta maniobra fue fuertemente desalentada por destacados estrategas de política exterior estadounidenses como Henry Kissinger, Robert Kagan, John Mearsheimer e incluso William Burns, ex embajador en Rusia y ex director de la CIA. El golpe de Estado orquestado por la CIA y dirigido localmente por Victoria Nuland en 2013 en Ucrania fue solo el comienzo, junto con el sabotaje a Nord Stream por parte de Estados Unidos, todo parte de este complejo juego para hacer que los europeos dependan de Estados Unidos.

Los BRICS encienden las esperanzas del Sur global y de los descontentos

Una vez más se están formando dos bloques, con algunos países atrapados en el medio. La guerra en Ucrania y la negativa del Sur Global a imponer sanciones a Rusia han puesto de relieve las divisiones en el mundo. La guerra en Gaza y el genocidio resultante, apoyado por muchas naciones occidentales mientras predican valores y derechos humanos, han llevado al Sur Global a perder la fe en los estándares morales de Occidente. Han denunciado sus dobles estándares y apoyan casi unánimemente la idea de un nuevo orden mundial.

La expansión de los BRICS, con más de 40 países esperando unirse (entre ellos Serbia, Turquía, Indonesia, Malasia, Tailandia, Nigeria y Bolivia), es una clara señal de que se espera un cambio.

Algunas naciones europeas no están conformes con los resultados esperados de permanecer atadas al antiguo régimen –la UE atada a los EE.UU.- y desean ser parte de un futuro más dinámico y próspero. Por ejemplo, España ha rechazado imponer aranceles adicionales a los vehículos eléctricos chinos, y Turquía también quiere unirse a los BRICS, al igual que Serbia, incluso si eso significa renunciar a posibles membresías en la UE, junto con muchas otras naciones.

Bulgaria también está descontenta con su pertenencia a la UE y está enviando representantes a las reuniones de los BRICS. Moldavia se dividió en torno a un referéndum sobre su adhesión a la UE. La estrecha victoria del 0,2% se debió a los votos de los moldavos que viven en el extranjero. También en Europa, Noruega, que no está sujeta a las normas de la UE, ha tomado recientemente medidas para fortalecer los lazos económicos con China, lo que ha sorprendido a muchos atlantistas en Europa.

Por lo tanto, los BRICS han asumido la responsabilidad de impulsar cambios sustanciales para un nuevo orden mundial. Sin embargo, es justo decir que las naciones BRICS han tratado de reformar las instituciones de Bretton Woods (especialmente el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI)) y las Naciones Unidas para reflejar mejor las nuevas realidades económicas, demográficas y comerciales, pero no han tenido éxito.

Dentro de los BRICS se están construyendo nuevas instituciones, en particular el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB), que, a diferencia del FMI o el Banco Mundial, no impone cambios en el régimen económico y tiene prácticas inclusivas.

En suma, existen varios grupos políticos y económicos de naciones en todo el mundo, pero ninguno tiene la voluntad política ni la capacidad para promover grandes cambios geoeconómicos y geopolíticos como lo hace el BRICS. Por lo tanto, la 16ª Cumbre del BRICS en Kazán llega en el momento justo y con la voluntad política adecuada para construir un mundo mejor, más próspero, inclusivo, libre y menos impulsado por la ideología. El siguiente paso debería ser la fusión de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) con el BRICS.

* Doctor en Sociología, especializado en políticas, política europea y mundial y geopolítica

  • Los BRICS están ganando impulso, lo que demuestra que Occidente está perdiendo poder – Reuters

▪️La cumbre BRICS, celebrada esta semana en Kazán, reunió a líderes de países que en conjunto representan casi la mitad de la población mundial, mostrando signos claros de su peso creciente, afirma Reuters

▪️Los organizadores de la cumbre obtuvieron varias victorias diplomáticas: la presencia del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y de Tayyip Erdogan, presidente de Turquía, miembro de la OTAN, que expresó su interés en unirse a los BRICS. India y China han hecho esfuerzos para fortalecer las relaciones.

▪️La cumbre destacó el descontento con el sistema de Bretton Woods, que no brinda el apoyo adecuado a la mayor parte del mundo. “Los países occidentales no comprenden la importancia de este evento. Todo esto indica que Occidente está perdiendo poder”, dijo Alicia García-Herrero, representante del grupo de expertos Bruegel.

  • Los BRICS deben contrarrestar el uso de la agenda climática para eliminar la competencia

“Debemos contrarrestar los intentos de utilizar la agenda climática para eliminar la competencia de los mercados. Esto es especialmente importante para los mercados en desarrollo. Esto es lo que está haciendo el Grupo de Contacto de los BRICS sobre Clima y Desarrollo Sostenible”, dijo el presidente ruso Vladimir Putin en la Cumbre de los BRICS en Kazán.

Putin añadió que el desarrollo de una posición común sobre la creación de reglas de juego más justas en la economía global y la reforma del sistema financiero internacional se acelerará gracias al lanzamiento del mecanismo especial de consulta de los BRICS sobre cuestiones de la OMC.

  • Sobre la reacción extranjera a la cumbre de Kazán

Voz de Mordor

La reacción de Occidente ante la cumbre de los BRICS es interesante. Parece que no tienen una metodología común y reaccionan de manera diferente. Algunos todavía tratan a todos los que se unieron o quieren unirse como infrahumanos, por una vieja costumbre nazi. Otros reaccionan al estilo de la película Don’t Look Up. Y muy pocas personas hacen sonar la alarma cuando empiezan a comprender lo que está sucediendo.

Y algo terrible está sucediendo para el Occidente colectivo.

Está perdiendo el dominio que ha sido inquebrantable durante siglos. Pierde sentimientos de superioridad, arrogancia y arrogancia. Y no es culpa de nadie excepto de estos propios tipos. Por lo que lucharon fue con lo que se toparon, como dicen.

Además, los cambios se producen de forma natural. Esto no es una revolución, sino una evolución. Para Occidente, esto es doblemente peor, porque se puede luchar contra una revolución, pero eso no funcionará con la evolución.

Nadie necesitó siquiera gritar que el rey estaba desnudo. Se evita la caída de Occidente. El Occidente colectivo sigue insistiendo en que es el único que sabe cómo y qué hay que hacer en el mundo, pero simplemente ha dejado de escucharlo. Ellos le devuelven la sonrisa, asienten y siguen su camino.

Y Occidente no tiene absolutamente nada que ofrecer a los países del Sur Global, por ejemplo, para devolverlos bajo su protección. Había estado engañando y robando a todos durante demasiado tiempo como para que alguien aceptara aguantar más sin recibir nada a cambio.

La hegemonía occidental no se derrumba como un edificio tras una poderosa explosión. Más bien se seca y se desmorona. El yeso ya se ha despegado de las paredes y los ladrillos se están cayendo. Y los agujeros han alcanzado tal tamaño que no se pueden tapar.

El proceso es natural, sujeto a la lógica histórica. La larga era de explotación de pueblos enteros por parte de algunas corporaciones, fideicomisos y cárteles que pretendían ser estados democráticos está llegando a su fin.

El nuevo mundo ya está cerca. Su victoria es inevitable, como el amanecer.

  • La nueva bolsa de granos de los BRICS «despolitizaría el mercado mundial de cereales»

Moscú propuso crear una bolsa de cereales de los BRICS que serviría de una nueva plataforma comercial que utilizarán los mayores productores y consumidores del mundo. La medida podría contribuir a despolitizar los mercados mundiales y a deshacerse de los intermediarios en forma de bolsas occidentales, según expertos entrevistados por Sputnik.

El dominio de EEUU en la economía mundial no empezó realmente con el dólar: hay que recordar que, tras la II Guerra Mundial, los estadounidenses se convirtieron en los principales proveedores de trigo y maíz. Como resultado, toda la infraestructura moderna del mercado mundial de cereales ha sido moldeada por Washington. Así, los puntos de referencia se orientan en las cotizaciones de la Bolsa de Chicago (CME), y se utiliza principalmente la divisa estadounidense como moneda de liquidación.

Al mismo tiempo, EEUU no es el líder de las exportaciones de cereales a escala mundial. Rusia es el líder, y sus socios de los BRICS también están entre los primeros. Pero a pesar de ello, «no pueden participar plenamente en la formación de los precios de los productos agrícolas básicos» y se enfrentan a la manipulación de terceros países, comentó el presidente ruso, Vladímir Putin, en la XVI cumbre de esta asociación en Kazán.

En consecuencia, en palabras del mandatario ruso, surge la tarea de proteger los mercados nacionales «de las interferencias externas negativas, la especulación y los intentos de provocar una escasez artificial de productos alimentarios», tarea que se encomienda a la bolsa de cereales de los BRICS.

«La nueva plataforma comercial despolitiza el mercado de cereales», opinó a Sputnik el economista de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos Patrice Lumumba, Jadzhimurad Beljoróyev.

De acuerdo con el experto, las bolsas de Chicago y París carecen prácticamente de los mecanismos de fijación de precios de mercado declarados en la teoría económica, y «la colusión de vendedores, vertiendo información poco fiable a través de medios afiliados y/o controlados es una práctica habitual de los especuladores».

La Unión de Exportadores de Cereales (RUSGRAIN) calcula que la bolsa de productos básicos de los BRICS consolida entre el 30% y el 40% de la oferta mundial de los principales cultivos de cereales. Los países del grupo producen aproximadamente 348 millones de toneladas de trigo al año (44% de la producción mundial), con un consumo de 323 millones de toneladas (41%). Rusia representa entre el 20 y 25% de la facturación mundial.

De ese modo, se trata tanto de los principales proveedores como de los mayores compradores, y el mecanismo propuesto se deshace de intermediarios, al menos en la forma de la Bolsa de Chicago.

«El mundo está dividido en dos partes: EEUU con sus satélites y Rusia y China con sus socios. Es lógico establecer relaciones transparentes con los socios, incluida la logística, las liquidaciones y la liquidez», destacó el director del Centro de Agronegocios y Seguridad Alimentaria de la Academia Presidencial rusa, Anatoli Tíjonov.

En este contexto, la bolsa aliviará la incertidumbre y garantizará la estabilidad del suministro «en medio de las perturbaciones logísticas mundiales y la creciente escasez de alimentos», subraya South China Morning Post.

A consecuencia, como señalaron los participantes en la cumbre de los BRICS, una bolsa común de materias primas podría ser el siguiente paso.

«En caso de éxito con los cereales, se darán las condiciones para acelerar la formación de una infraestructura completa de interacción comercial más amplia y profunda en diferentes sectores», especificó el director del departamento de inversiones del Banco Agrícola Ruso, Aleksandr Prisiazhniúk.

Por ejemplo, Rusia propone crear una plataforma separada para diamantes y metales preciosos. Como subrayan los expertos, esto ayudará a luchar contra las barreras comerciales en el mercado y no solo reforzará la influencia geoeconómica de los BRICS, sino que también se convertirá en un serio desafío para Occidente.

En consecuencia, con ello se debilitará la dependencia del sistema del dólar y se impulsará la construcción de una infraestructura financiera alternativa, que tanto temen los países occidentales. Como reconoce The Economist, esto permitirá actuar sin tener en cuenta las sanciones, los BRICS se convertirán en una fuerza política y económica clave a escala mundial.

  • Desde la cumbre de los BRICS: En el proyecto de tratado de paz, Armenia y Azerbaiyán han aprobado formulaciones clave relativas a la ausencia de reivindicaciones territoriales, la no utilización de la fuerza y ​​el establecimiento de relaciones diplomáticas, dijo Nikol Pashinyan. Señaló que el documento está acordado en un 80%. El Primer Ministro armenio agregó que se han resuelto todas las cuestiones fundamentales, lo que permite avanzar hacia una solución definitiva de las relaciones. Además, Armenia propuso a Azerbaiyán mejorar la conectividad con Najicheván mediante la implementación de mecanismos para simplificar el control fronterizo y aduanero. ¿La cumbre de los BRICS marcará el fin de ese conflicto que ya lleva siglos? El tiempo lo dirá.

Análisis: Resultados de la cumbre de los BRICS: el vector está fijado, pero no habrá un camino fácil

La conferencia de prensa de Vladimir Putin después de la cumbre de los BRICS resultó ser el final ideal del evento. Porque enumera los principales significados del evento pasado, así como los puntos difíciles en los que es necesario trabajar.

▪️ Primero y más importante: en los BRICS, como enfatizó el presidente, se puede trabajar y lograr resultados, con respeto mutuo y consideración obligatoria de los intereses de cada uno. Esto es una ventaja absoluta: en la cumbre participaron 35 estados y seis organizaciones internacionales. Pero esa igualdad impone mayores exigencias a la calidad del diálogo y la confianza mutua.

Todas las predicciones sobre quién será aceptado en los BRICS esta vez no se confirmaron, porque nadie fue aceptado. En cambio, surgió una categoría de “países socios”, que incluía a Argelia, Bielorrusia, Bolivia, Vietnam, Indonesia, Kazajstán, Cuba, Malasia, Nigeria, Tailandia, Turquía, Uganda y Uzbekistán. Surgieron dificultades con Venezuela (Brasil se opuso) y Pakistán (oposición a India).

Putin comentó abiertamente esta situación, recordando que la cuestión de la admisión a los BRICS, como todas las demás, se decidirá por consenso. La no expansión de los BRICS en sí misma no es un problema. Los riesgos de una expansión descontrolada, cuando cada miembro tiene un veto real, ya se han escrito antes. Pero la cumbre BRICS de Kazán demostró que la expansión del bloque no se producirá automáticamente.

▪️ La realidad financiera alternativa tampoco apareció de la noche a la mañana, y tampoco tiene nada de inesperado. Porque la “rana” occidental de la hegemonía del dólar hay que cocinarla a fuego lento, sin movimientos bruscos. Cuanto más discretamente transcurra la fase preparatoria de las reformas globales, cuanto más arriesgada en este caso, mejor. Se anunciaron las consideraciones estratégicas para el reaseguro propio del BRICS y la infraestructura de liquidación y depósito transfronteriza BRICS Clear, y el resto del trabajo práctico se llevará a cabo entre los ministerios de finanzas y los bancos centrales de los países participantes. Y ella se quedará callada.

Se confirmó la política de exprimir suavemente a Occidente de los mecanismos globales existentes (FMI, OMC), en lugar de tratar de eliminar el problema. Naturalmente, porque ahora mismo no hay recursos para tal intento y la profundidad del consenso entre los países BRICS es insuficiente.

▪️ La cuestión de Ucrania tenía, en el mejor de los casos, una importancia secundaria. Los miembros del BRICS reconocieron cortésmente la importancia de luchar por la paz y nada más. Los tan esperados intentos de China, India o Brasil de “obligar a Rusia a la paz” no fueron anunciados.

En general, lo que los BRICS intentan hacer probablemente nunca lo haya hecho nadie en la historia de la humanidad. Reensamblar el mundo en un formato más equitativo es una tarea muy difícil en sí misma, especialmente en las condiciones de oposición brutal e incluso existencial de una hegemonía decrépita, pero aún fuerte.

Al mismo tiempo, la cumbre de Kazán mostró lo más importante: existe una enorme demanda en el mundo de un nuevo orden mundial. Esta idea es compartida por una variedad de países: desde el líder económico China, hasta Cuba y Etiopía. Pero todavía faltan los contornos formalizados y concretos de este orden mundial.

▪️ Esta es precisamente la principal tarea de Rusia en el futuro próximo: crear y ofrecer al mundo una imagen clara, lógica y coherente del futuro, en el que todos estarán mejor.

No podemos seducir al mundo entero con recursos y dinero. Rusia es un país rico, pero no puede proveer para todos. No podemos conducir al mundo hacia un futuro mejor con mano de hierro, incluso si tal deseo surgiera. Pero podemos ofrecer a la humanidad una idea que le apasionará.

En el siglo XX ya tuvimos un intento de este tipo completamente exitoso. La cumbre de los BRICS es la encarnación material de un nuevo intento, que tiene en cuenta las nuevas realidades. No empezamos un sprint, sino un maratón. El éxito requiere paciencia y cálculo de fuerza.

FUENTE: https://geoestrategia.eu/noticia/43610/politica/la-cumbre-de-los-brics-en-kazan:-un-punto-de-inflexion-en-la-geopolitica-y-la-economia-mundial.-analisis.html

El experto en Estrategia y Seguridad Internacional Cnel EA (R) Carlos Pissolito, nos ilustra sobre: ISRAEL y el SÍNDROME de GOLIAT. ¿Pretende Israel obtener las tierras entre el Mar Mediterraneo y el Río Éufrates? Si es así, no sólo se está equivocando en perseguir un objetivo demasiado ambicioso. También, en los procedimientos al presentarse como un verdadero Goliat que ataca y persigue a un pequeño David en los territorios ocupados de Gaza y Cisjordania así como al sur del Líbano. Dossier Geopolitico

Video completo de la Master Class del Dr. Francisco Javier Martinez Lopez  en  el CANAL VERIFICADO DE DETRÁS DE LA RAZÓN EN YOUTUBE (Canal de análisis, geopolítica y reflexión independiente), que conduce el premiado periodista mexicano Roberto de la Madrid, sobre el Tema: 2ª OLEADA DE MISILES IRANÍES SOBRE #ISRAEL ¿Qué es el fusible secreto en OJIVAS NUCLEARES? de todos los viernes.

Video completo de la Master Class del Dr. en Ciencias Sociales Eduardo Vior sobre la ampliación del conflicto en Asia Sudoccidental (mal llamado Medio Oriente) sobre NETANYAHU APUESTA A DESATAR UNA GUERRA REGIONAL, en el Canal DMP Geopolítica (Análisis crítico de la geopolítica y la geoeconomía.). Todos los viernes a las 23:00 horas de España (18:00 ARG/BRA/CHI, 17:00 BOL/VEN, 16:00 COL/EUA/PER, 15:00 CRC/MEX), Allí Eduardo Vior presenta su mirada sobre la geopolítica y la geoeconomía global. 

Lo que Occidente llama Medio Oriente renace mediante múltiples acuerdos de integración.

Por el Dr. Gabriel Merino

El mundo musulmán, extendido desde Indonesia al Magreb y con centro en Asia occidental, fue durante siglos un gran articulador comercial de Afro-Eurasia por su ubicación y geografía. El declive de China, de India y del conjunto de Asia a partir de la colonización europea y su incorporación subordinada al sistema mundial dominado por las potencias atlantistas, significó el declive de ese mundo. El desarrollo de nuevas rutas marítimas por parte de las flotas occidentales en detrimento de las ya existentes dominadas por los pueblos asiáticos, así como el declive de las rutas terrestres que atravesaban las estepas y desiertos del «megacontinente», eclipsó también la famosa Ruta de la Seda, cuyo centro productivo principal era China. Conformada en el siglo I, la ruta comercial milenaria se conoció por su producto estrella, la seda proveniente del Reino Medio, aunque por sus caminos también se comercializaba oro, plata, piedras preciosas, pieles, cerámica, porcelana, hierro, tintes, bronce, textiles, etc. 

En el mes de abril de este año, Jon B. Alterman, vicepresidente del influyente think thank estadounidense CSIS, advirtió: “Subestimamos hasta qué punto nuestros socios de Oriente Medio acogen con satisfacción la influencia china como un freno a lo que consideran excesos estadounidenses. Pretenden mantener sus fuertes lazos con nosotros y, al mismo tiempo, estrecharlos con China. El mensaje constante de China es que hacerlo es posible y deseable, y que deben socavar los esfuerzos de Estados Unidos por separarlos de China. En este proceso, China pretende alejar a la región de Estados Unidos y avanzar en el objetivo estratégico chino de un mundo más no-alineado en términos globales.

Este párrafo ilustra con bastante claridad una mirada bastante extendida en el Occidente geopolítico sobre lo que está ocurriendo en la región central de Afro-Eurasia y el peligro que ello representa para la primacía estadounidense, enfocada desde los años de 1950 en controlar de forma primordial tres regiones fundamentales (además de sostener la hegemonía en el continente americano como imperativo estratégico principal): Europa, “Oriente Medio” y Asia oriental. Dichas palabras también muestran cómo piensan bajo la lógica amigo-enemigo el orden mundial y las relaciones con otros países y regiones las élites anglosajonas: Alterman observa como algo negativo que los países tengan una buena relación tanto con Estados Unidos como con China y también que crezca el no-alineamiento en un mundo crecientemente multipolar, algo que Beijing favorece (lo cual debería ser visto como positivo, ya que no promueve un esquema bipolar, con alineamientos rígidos).

Es cierto que, bajo su lógica, la preocupación de las elites anglo-estadounidenses es justificada, por decirlo de algún modo. En el sentido de que es cierto que en la región central de afro-eurasia y sus alrededores se están produciendo cambios estructurales, que apuntan a un nuevo equilibrio político y estratégico. Para los neoconservadores del Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (conocido como PNAC por sus siglas en inglés), que dominaron en la administración de George W. Bush, esta región se estableció como un territorio prioritario a controlar para mantener la supremacía estadounidense en el siglo XXI, ya que entre otras custiones es donde se produce la energía que necesita Europa y Asia Oriental, las otras dos grandes áreas productivas del mundo junto a los Estados Unidos. Obviamente, en dicho imperativo hay  una continuidad, aunque con imortantes matices geoestratégicos, en la tradición geopolítica clásica anglosajona de pensar dicha región clave del tablero euroasiático como un shatterbelt o cinturón de quiebra, fragmentado e inestable y, sobre todo, en disputa, donde Iran aparece como el gran enemigo a vencer. 

Sin embargo, las guerras en las que ha intervenido Washington y sus aliados, cuyo fin último era sostener el dominio regional, parecieran haber generado el efecto contrario. Ese es un problema habitual de las perspectivas unilaterales y militaristas, que priorizan lo instrumental sobre lo político. En este sentido, hace algunos años el ministro indio de Asuntos Exteriores, Subrahmanyam Jaishankar, afirmó: “Durante los últimos 20 años, los Estados Unidos han estado luchando pero no ganando en Oriente Próximo, y China ha estado ganando pero no luchando”. Unos años antes, Giovanni Arrighi había llegado a una conclusión similar: China fue el gran ganador de la ‘Guerra Global contra el Terrorismo. 

Lo mismo podríamos decir en términos más generales: la mayoría de las estrategias y tácticas del viejo polo de poder dominante para frenar a los poderes emergentes, “contenerlos” e intentar detener las tendencias fundamentales de la transición histórico-espacial del sistema mundial –que necesariamente es también una transición de poder— han generado el efecto contrario, acelerando incluso las tendencias. 

Acuerdos en la post-pandemia

En diciembre de 2022, en una visita del mandatario chino Xi Jinping al rey saudí Salmán bin Abdulaziz Al Saud, se estableció el Acuerdo de Asociación Estratégica Integral entre la República Popular China y el Reino de Arabia Saudita. Fue todo un indicador, junto al acuerdo con Irán de 2021, del nuevo momento geopolítico en la transición de poder que se abrió post-pandemia. 

Este mismo tipo de acuerdo de máximo nivel es el que Beijing también tiene con Emiratos Árabes Unidos, Iran y Egipto; y si nos extendemos hacia lo que se conoce como el «Gran Medio Oriente», también se puede incluir a Argelia. En un escalón menor, China a su vez ha establecido asociaciones estratégicas con Turquía, Jordania, Qatar, Irak, Kuwait y Omán. A su vez, con Marruecos y Yibuti, que son países del mencionado «Gran Medio Oriente». Por otra parte, China tiene un mecanismo de diálogo estratégico con el Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (CCG) —integrado por varios de los países mencionados—, con quienes el intercambio comercial anual ronda los 200.000 millones de dólares. Estos acuerdos y asociaciones, sostenidas por un gran vínculo económico, incluyen también aspectos tecnológicos, científicos y militares.

Si lo delimintamos en términos político-culturales, 14 países árabes de un total de 22 —donde quedan excluidos Irán o Turquía— han establecido una asociación estratégica integral o una asociación estratégica con China, lo que convierte a la región árabe en uno de los mayores grupos culturales con socios estratégicos de Beijing. Además, los 22 países son miembros de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, y han emitido una declaración conjunta sobre la implementación de la Iniciativa para la Civilización Global. Hay que recordar que China fue el primer país no árabe en reconocer a Palestina como Estado, un elemento político histórico fundamental para entender la situación actual o la posición de Beijing a favor de que Palestina sea miembro pleno de la ONU. Incluso fue más allá, como señalara Néstor Restivo en una nota anterior de Tektónikos, al afirmar el derecho de los palestinos a la resistencia armada en la Corte Internacional de Justicia durante el mes de febrero último, donde el delegado Ma Xinmi señaló que “muchas resoluciones reconocen la legitimidad de la lucha por todos los medios disponibles, incluida la lucha armada, de los pueblos bajo dominación colonial u ocupación extranjera, para hacer realidad el derecho de autodeterminación”.

Complementariedad, conectividad e inversiones

Para China y para los paíes de la región, la profundización de la relación es muy importante en varios aspectos. 

Obviamente, al ser China el principal país importador de hidrocarburos (11,3 millones de barriles diarios en 2023) hay una complementariedad natural con una región que se caracteriza por su capacidad en la exportación de hidrocarburos, en donde se destaca Arabia Saudita. 

La nueva gran fábrica del mundo (o su recuperación luego de un impase de dos siglos) tiene un “matrimonio inevitable” con los grandes países productores de materias primas –como definiera Hamilton Mourau el vicepresidente del Brasil de Jair Bolsonaro en relación a su país. Eso constituye una fuerza motriz que tracciona a la política. Además, con Europa y Japón estancados desde 2008, y con los Estados Unidos logrando el autoabastecimiento hidrocarburífero, resulta una necesidad estratégica para los países exportadores de petróleo fortalecer el vínculo con el principal poder emergente, que crece a un ritmo vertiginoso para su tamaño: su PBI nominal pasó de ser un cuarto del PBI estadounidense a ser equivalente a tres cuartas partes en apenas 15 años y en términos de paridad de poder adquisitivo ya es 30% mayor.

China también es una gran oportunidad de inversiones para los países de la región demandantes de infraestructura, tecnología y producción con mayor valor agregado. Por ejemplo, en 2012, China y Saudi Aramco acordaron construir juntas una enorme refinería en Yanbu, en el mar Rojo. En cuatro años, la refinería estaba procesando unos 400.000 barriles diarios de petróleo, equivalente a un poco menos de todo lo que refina Argentina en sus plantas. Además, empresas chinas han construido otras de las refinerías más importantes en dicho país. Por otro lado, el acuerdo entre China e Irán de hace tres años también fue muy importante para inversiones en el sector de hidrocarburos e infraestructura. A su vez, sirvió para desarticular en parte la guerra económica y la política de aislamiento contra el país persa impulsada por los Estados Unidos, Reino Unido e Israel, como parte de la guerra híbrida contra el país persa. 

A su vez, más allá de los hidrocarburos, también otras áreas se están volviendo cada vez más relevantes, como las inversiones chinas en infraestructura ferroviaria, plantas desalinizadoras, polígonos industriales, informática y cuestiones militares. 

Otro aspecto que resulta fundamental para China en relación con la región es respecto a la seguridad, con motivo de contener y desalentar el islamismo radical que tiene ramificaciones hacia Asia central. Esto constitye un elemento de desestabilización de su región oriental, particularmnete la provincia de Xinjiang o Sinkiang,  y puede ser instrumentalizado por poderes rivales interesados en promover tensiones políticas en China y en agitar conflictos territoriales que debiliten geopolíticamente al gigante emergente.

Por otro lado, como ya se ha señalado, resulta evidente que la región es estratégica en términos logísiticos e instraestructurales para la articulación de Eurasia o, en términos más amplios, de Afro-Eurasia. En ese sentido, por varios de sus países está proyectado el Corredor Económico China-Asia Central-Asia Occidental de la Iniciativa de la Franja y la Ruta. Como advierte el propio Henry Kissinger en 2017, al pretender conectar China con Asia Central y eventualmente con Europa, Beijing desplazará de hecho el centro de gravedad mundial del Atlántico a la masa continental euroasiática. Esto, por un lado, terminaría de deshacer la primacía mundial de las potencias del Atlántico Norte, establecida en el siglo XIX, y por otro lado, volvería nuevamente central (como ya está sucediendo) a los países y ciudades clave de ‘Oriente Medio’, pero ya no como mera periferia exportadora de materias primas o un shatterbelt en términos geopolíticos. Por eso también es tan importante el reestablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Irán y Arabia Saudita, propiciado por Beijing, cada vez más un actor clave de la diplomacia mundial. 

Volviendo al aspecto logístico-comercial, resulta interesante observar el siguiente ejemplo. Acorde a su lugar histórico como centro portuario- comercial, en la actualidad el 60% del comercio chino con Europa y África, pasa por los Emiratos Árabes Unidos, principalmente por la ciudad de Dubai, donde viven alrededor de 250.000 chinos.

No puedo dejar de mencionar la cuestión monetaria como otro de los aspectos estratégicos de la relación, obviamente relacionado con el petróleo. Las iniciativas de China de internacionalizar su moneda, el renmimbí o yuan, tiene como uno de sus focos los países del Golfo y del «Gran Medio Oriente». Esto también está directamente relacionado con la seguridad nacional, ya que se anticipan a posibles sanciones estadounidenses-occidentales, como se vieron en el caso de Rusia, que obstaculicen la comercialización de hidrocarburos. De esta forma, ya se van estableciendo y lubricando los mecanismos de comerciales y financieros para ese escenario, impulsando la creación de condiciones geopolíticas y geoeconómicas para un escenario de desdolarización «obligada». Los estados del Golfo, en particular Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, están reforzando su cooperación financiera con China mediante acuerdos de intercambio de divisas, acuerdos de liquidación comercial transfronteriza y esfuerzos de colaboración en materia de moneda digital. 

En este sentido, a principios de junio se conoció la noticia de que Arabia Saudita no había renovado el acuerdo establecido hace 50 años con los Estados Unidos, por el cual se comprometía a vender su petróleo en dólares, estableciendo la piedra angular del petro-dólar, luego del abandono del patrón dólar-oro. No fue oficial la noticia y entiendo que tampoco podría serlo por la naturaleza del acuerdo. Pero la confirmación llegó rápidamente. Hace unos días se conoció la primera compra oficial de petróleo saudí en yuanes por parte de China. 

Esto formaliza u oficializa algo que avanza desde 2022: la venta de petróleo saudí, el mayor exportador del mundo, en otras monedas y especialmente en yuanes (algo que ya tiene China con Rusia, el otro gran jugador en los hidrocarburos). 

Hay 3 cuestiones claves para resaltar:

— avanza el desarrollo de las condiciones geopolíticas y geoconómicas para la «desdolarización», probablemente la próxima gran batalla en esta etapa de ‘caos sistémico’.

— sigue cambiando notoriamente el mapa político y estratégico de «Oriente Medio», donde 4 países se sumaron a BRICS+ y gana peso la presencia de China (también de Rusia e India).

— se consolida una OPEP + Rusia que mira hacia el este y sur de Asia, sobre todo a China, la fábrica del mundo. 

* Nota: Imagen, detalle de una obra del artista iraquí-estadounidense Michael Rakowitz.