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La sorpresiva ofensiva de la Resistencia demuestra que nadie puede vencer militarmente al otro. Si se limita el conflicto, por primera vez puede haber negociaciones en serio

Por Eduardo J. Vior – analista internacional para TELAM que autoriza su publicacion en Dossier Geopolitico

En una sorprendente conjunción de incapacidad de la inteligencia israelí con una excelente coordinación de la resistencia palestina, las brigadas al Qassam del Movimiento de Resistencia Islámico Hamas y las al Quds (Jerusalén) de la Jihad Islámica propinaron este sábado la más estruendosa derrota que haya sufrido Israel en su historia. Los milicianos ocuparon numerosas localidades del sur, tomaron rehenes y demostraron que pueden golpear a la potencia ocupante, sin que ésta lo pueda evitar. Por primera vez se confirmó que los palestinos no pueden derrotar militarmente a Israel, pero éste tampoco a ellos. Puede ser que el primer ministro Benyamin Netanyahu se beneficie coyunturalmente de algún tiempo de guerra, pero, si ésta no se desborda, será la oportunidad para iniciar una negociación amplia y abarcadora.

Este sábado a las 6 de la mañana (hora local) Hamas y la Jihad Islámica iniciaron contra Israel la operación “Batalla del Diluvio de Al Aqsa”, lanzando más de 5.000 cohetes contra los asentamientos israelíes fronterizos con la Franja de Gaza y contra algunos suburbios de Tel Aviv. Fue una operación simultánea que incluyó el bombardeo con cohetes, la ruptura de la barrera fronteriza y el ingreso de patrullas motorizadas con milicianos armados que asaltaron una veintena de puestos militares (también varios comandos operacionales) capturaron personal y vehículos. También realizaron nunca vistos asaltos aéreos con parapentes ultralivianos y drones. Siempre hay francotiradores israelíes en una colina a menos de un kilómetro de la frontera. Esta vez no estaban. Llamativamente, los milicianos atacaron usando, entre otras, armas norteamericanas e israelíes que habían sido enviadas a Ucrania.

En su operación los palestinos ejecutaron con precisión a algunos altos oficiales de la inteligencia militar israelí, pero también sembraron el terror disparando a mansalva en las calles de los asentamientos atacados. Asaltaron una fiesta electrónica, mataron a varios participantes y se retiraron a la Franja llevándose a unos 150 rehenes.

El gobierno israelí decretó inmediatamente el estado de guerra y llamó a 300.000 reservistas a filas, decretó el bloqueo total de la Franja de Gaza (no entran agua, alimentos ni medicamentos) y comenzó a bombardearla masivamente. Según cifras que varían permanentemente, los ataques habrían matado a unos 800 israelíes. Por su parte, la Media Luna Roja da cuenta de la muerte de 2.400 civiles en la Franja de Gaza. No se sabe cuántos combatientes palestinos murieron.

Las milicias salidas el sábado a la mañana de la Franja de Gaza atacaron el sur de Israel en un amplio frente

Probablemente, la ofensiva de las milicias islámicas haya tenido como objetivo, primero, impedir el acuerdo de paz en ciernes entre Israel y Arabia Saudita, en segundo lugar poner al descubierto la incapacidad de la inteligencia israelí para prevenir el ataque, agudizando así la crisis política que paraliza al país desde hace meses. Tercero, es parte también de la disputa con la Autoridad Palestina (sólo presente en Cisjordania) por el liderazgo sobre el conjunto de los palestinos, en la Franja de Gaza, en Cisjordania, dentro de Israel y en la diáspora. Finalmente, la operación intenta asimismo involucrar a Irán, a EE.UU., a Rusia y a China en la búsqueda de un gran acuerdo regional de paz.

Hamás, junto con otras milicias que pueden unirse a la lucha, como Hezbolá en el Líbano, no están ni cerca de ser un rival militar para Israel. No obstante, el gobierno deBenyamin Netanyahu enfrenta ahora la crisis de seguridad más severa que ha vivido Israel en décadas,con la perspectiva potencial de tener que combatir a la vez en Líbano y Gaza y afrontar un levantamiento en Cisjordania.

En Israel las imágenes del extraordinario asalto de Hamás han provocado un terremoto. Ha sido asombroso el colosal fracasode la tan renombrada inteligencia, que no evitó que Hamas planificara y se armara para esta operación durante meses. Junto con la inteligencia de los agentes sobre el terreno, las comunicaciones en Gaza son monitoreadas, al igual que los movimientos de personas y vehículos en la frontera, con los sensores más avanzados del mundo. Israel lleva a cabo ataques aéreos regulares sobre el territorio de la Franja, para garantizar, dice su gobierno, que Hamás y la Jihad Islámica no acumulen armamento. Una campaña de asesinato selectivo de figuras militantes de alto rango supuestamente detectaría el mando y el control. No fue el caso.

Habrá que esperar, para tener serios análisis de inteligencia y saber qué falló en Israel y Estados Unidos. Las primeras evaluaciones creíbles, empero, apuntan a dos aspectos: la burocratización del análisis de inteligencia israelí y la confianza ciega de los responsables estratégicos norteamericanos en la seriedad de su aliado.

A partir de la experiencia del último enfrentamiento con Hamás en 2021, el relevamiento de información israelí sobre la Franja de Gaza habría reposado casi exclusivamente en la Inteligencia Artificial (IA). El servicio de inteligencia habría organizado un gigantesco banco de datos que monitorea todas las comunicaciones de la Franja, pero la Resistencia Palestina engañó a la IA: habría mantenido una apariencia de comunicaciones, como para que los técnicos enemigos creyeran que estaban captando toda la información intercambiada allí, mientras que por otras vías (¿cuáles?) habría trasmitido a sus cuadros las informaciones necesarias. Las operaciones engañosas como táctica militar tienen un sello típicamente ruso, pero no son los únicos. La capacidad técnica, en tanto, es de indudable cuño iraní. Pero lo más grave es la burocratización de la inteligencia: como la IA sirvió en 2021, reposaron casi exclusivamente en ella. Esta falla revela la falta de inteligencia político-estratégica o –hipótesis de politólogo- quizás que la fractura político-ideológico-cultural de Israel dañó la comunicación entre la conducción política y los técnicos de la inteligencia. Cuando la conducción superior va por un lado y los conductores tácticos por el otro, nada puede funcionar bien.

Mucho peor es la confianza ciega que los planificadores de la estrategia mundial de Estados Unidos depositaron en la inteligencia israelí. “Medio Oriente es la región del mundo que menos trabajo me depara”, dijo hace apenas dos semanas Jake Sullivan, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca que a primera hora de cada mañana se reúne con el presidente para interiorizarlo de la situación de seguridad en todo el mundo. Se puede repetir el argumento politológico: la burocratización no es un defecto, sino el síntoma de una crisis profunda que no se manifiesta en la superficie. Después de décadas de rivalidad, desde hace unos tres lustros la inteligencia norteamericana se confía totalmente en la israelí, para evaluar qué pasa en Asia Occidental suponiendo que lo que durante 15 años funcionó bien debe seguir haciéndolo para siempre. Pero no es así.

¿Qué pasa ahora? El gobierno israelí declaró formalmente que está en guerra. Netanyahu amenazó con reducir Gaza a escombros y dijo a sus habitantes que se vayan inmediatamente, aunque no está claro a dónde. Hay especulaciones de que Israel lanzará una ofensiva terrestre a gran escala contra la Franja. Pero ¿cuán efectivo será esto y cuál es el propósito final? La presencia en Gaza de tantos rehenes hace que un ataque terrestre total sea esta vez muy complejo. Siempre existe el peligro de que resulten heridos o muertos, si sus captores se ven sin salida. Por otra parte, las operaciones de fuerzas especiales representan una tarea sumamente desafiante, ya que los rehenes pueden estar retenidos en instalaciones sensibles como hospitales. Y, suponiendo que Israel arrasa la Franja, ¿después qué? No habrá vencido a los milicianos y éstos volverán a  atacar con cada vez más apoyo de la población palestina.

Los palestinos no tienen ninguna posibilidad de derrotar militarmente a Israel, pero éste tampoco puede aniquilar a la resistencia palestina. Además, una ofensiva masiva de Israel en Gaza podría desbordar rápidamente en una guerra regional, incluyendo a Irán, y tentaría a Israel a usar sus armas atómicas.

La fractura sociocultural de la sociedad israelí condicionará las decisiones bélicas del gobierno. La actual coalición es mucho más violenta y expansionista que cualquier otra anterior y puede tender más fácilmente a ampliar la guerra. Sin embargo, Netanyahu ya se ha mostrado antes prudente en sus apuestas militares y propenso a aplicar un enfoque más táctico y matizado con el respaldo de la jerarquía militar y de inteligencia que está muy alarmada por los desvaríos de ministros como el de Policía, Itamar Ben-Gvir.

El objetivo de Hamás no es ganar militarmente, sino involucrar a EE.UU. e Irán, pero también a Turquía, Arabia Saudita, China y Rusia en la búsqueda de una solución política. Ante la eventualidad de que el primer ministro quiera salvar el pellejo ampliando el escenario del conflicto, Egipto y Siria han movilizado a sus fuerzas armadas. No obstante, además de por el sentido de realidad del jefe del Likud, más allá de algunas escaramuzas con Hezbolá en la frontera libanesa, es improbable que la potencia protectora de Israel (EE.UU.) y su mejor interlocutor internacional (Rusia) le permitan avanzar más allá. La campaña para arrasar Gaza puede durar todavía dos semanas y causar decenas de miles de muertes, pero nadie cree que pueda acabar con los milicianos. En algún momento deberá detenerse y dar lugar a la política. En ese entonces Netanyahu deberá rendir cuentas y no es fácil que zafe de un voto parlamentario en su contra.

Como en todas las guerras, finalmente triunfa la voluntad colectiva mejor organizada. Como enseñó el General Perón, “organizar es unir voluntades conscientes para un objetivo común”. En esta coyuntura, la Resistencia palestina ha demostrado mayor voluntad de combate, claridad de objetivos y unidad de acción. Está mejor organizada, aunque con menos plata y menos aparato.

En esta crisis quedó demostrado que ninguno de los contrincantes puede vencer militarmente al otro. El camino para que inicien negociaciones de paz en serio, involucrando a todas las potencias regionales y extrarregionales, pero con autonomía de decisión para israelíes y palestinos, está expedito. Queda por superar el escollo de una eventual ampliación de la guerra. Esperemos que se logre pronto.

Dossier Geopolitico difunde dos trabajos del Dr. Eduardo Vior sobre la misma problemática EL LITIO que en vez de ser una posibilidad de solución económica para el llamado triángulo del Litio (Argentina Bolivia Chile) Puede ser parte de nuevas penas para toda la región como ha sido para muchos Países poseedores el Petróleo en el S XX

Decíamos 2 trabajos uno: un artículo publicado en Télam titulado: «La ley anti inflación de EE.UU. agudiza la lucha por el litio» y otro una entrevista que se le realizó junto al destacado analista español Francisco Fernadez-Cruz Sequera en el Programa del destacado periodista mexicano Roberto de la Madrid en el Programa «Detrás de la razón» titulado: USD $750 000 000 000 ¿Qué esconde LA IRA DE BIDEN..? Carlos Pereyra Mele Director de dossier Geopolitico

UNO:

La ley antiinflación de EE.UU. agudiza la lucha por el litio

Si las fábricas automotrices quieren recibir subsidios, deben completar su producción dentro del país, romper las cadenas internacionales y llevar una puja por el mineral que afectará a Argentina. POR EDUARDO J. VIOR 17-08-2022 | 20:22

Biden firm promulg su ley contra la inflacin
Biden firmó promulgó su ley contra la inflación.

Tan desprestigiado está el el presidente Joe Biden que este miércoles 17 hasta la propia prensa demócrata sólo publicó en líneas inferiores la promulgación de la nueva ley sobre el clima, la atención sanitaria y los impuestos (IRA, por su nombre en inglés) que prevé una inversión de 370 mil millones de dólares para la reconversión ecológica de la economía norteamericana. Con una combinación de incentivos fiscales y castigos la medida intenta relanzar la producción y el consumo reorientándolos hacia tecnologías sostenibles. Sin embargo, no podía faltar la mano subrepticia de los estrategas de la guerra ininterrumpida: la norma contiene disposiciones proteccionistas que quiebran las cadenas transnacionales de producción –especialmente las de la industria automotriz- cerrando el mercado a las baterías de litio chinas. La lucha entre las potencias por la apropiación del oro blanco se incentivará, con consecuencias mundiales que afectarán seriamente a Argentina.

El presidente Joe Biden sancionó el martes 16 la ley de lucha contra la inflación, conocida como IRA.

«Con esta ley, el pueblo estadounidense ganó y los intereses especiales perdieron», dijo Biden este martes 16 durante la ceremonia en la Casa Blanca en la que sancionó la IRA. El rpesidente presentó la nueva ley como una oportunidad histórica para combatir el cambio climático y mejorar la vida de los estadounidenses. Enumeró una lista de disposiciones que, según él, acelerarían el impulso de las energías limpias en el país, reducirían los costes sanitarios y recuperarían la economía.

El paquete limita los precios de los medicamentos con receta e impone un nuevo impuesto a las grandes empresas. También se prevé que la legislación reduzca el déficit federal, como una medida que los demócratas presentaron como clave para frenar la inflación. La Cámara de Representantes aprobó el proyecto de ley el viernes en una votación de 220-207, días después de que el Senado lo votara 51-50 gracias a que la vicepresidenta Kamala Harris desempató. La aprobación de la ley marcó uno de los mayores éxitos legislativos de los demócratas en este período de sesiones, justo  antes de las elecciones de noviembre próximo.

La Ley de Reducción de la Inflación introduce incentivos para que las empresas privadas produzcan más energía renovable y los hogares transformen su consumo de energía. La norma también permite a Medicare negociar el precio de los medicamentos recetados y amplía los subsidios a los seguros de salud para millones de habitantes. Para financiar estas medidas, se crearon nuevos impuestos sobre las mayores empresas del país. También otorga al Servicio de Impuestos Internos (muy desfinanciado) el mayor aumento presupuestario de su historia, lo que le permitiría cumplir efectivamente su misión de vigilancia.

La nueva ley incluye créditos fiscales para el desarrollo de energías limpias, créditos para promover la eficiencia energética de las viviendas y los edificios y una serie de medidas para limitar la liberación de metano en las explotaciones de petróleo y gas. No obstante, el texto vincula el desarrollo de energías limpias en tierras y aguas de propiedad pública con la continuación de la extracción de combustibles fósiles y exige al Departamento de Interior que subaste más parcelas en el Golfo de México para la perforación. Estas disposiciones se introdujeron, para conseguir el apoyo del senador Joe Manchin (demócrata), de Virginia Occidental (una zona de gran producción de carbón), quien ya antes restó su apoyo a un proyecto más ambicioso que así fracasó.

Como se sabe, el diablo se esconde en los detalles. Según la IRA, para tener derecho a la desgravación fiscal, los fabricantes de nuevos vehículos eléctricos (NEV, por su nombre en inglés) deben completar el montaje de los mismos en Estados Unidos y obtener un porcentaje significativo de los principales componentes de las baterías, incluidos metales como el litio, el níquel y el cobalto, en el país o en países con los que éste tenga acuerdos de libre comercio. Ahora bien, China, el mayor productor mundial de esos componentes vitales, no tiene ese tipo de contrato con Estados Unidos.

«La mayoría de las condiciones vinculadas a las subvenciones para los fabricantes de automóviles estipulan los lugares de ensamblaje de los nuevos vehículos eléctricos, pero es raro que también se mencionen los lugares donde deben procesarse los minerales y las unidades de las baterías. Esta extralimitación deja al descubierto la intención de suprimir toda la cadena industrial de alta tecnología en China», denuncó el martes al Global Times Feng Shiming, analista de la industria automotriz en la consultora Menutor, de Shanghai. Feng afirmó que la ofensiva de EE.UU. contrasta con la política industrial china, según la cual todos los fabricantes de vehículos eléctricos nuevos, independientemente de su origen, como Tesla, tienen derecho a recibir subvenciones industriales siempre que cumplan las normas legales.

China teme que EE.UU. repita con los productores de celdas y baterías de litio la represión que ejerció contra los fabricantes de paneles solares en la región autónoma de Xinjiang, en el noreste del país, a quienes Washington acusó de someter a sus trabajadores a «trabajos forzados» como excusa para excluirlos del mercado norteamericano, dijo el martes al Global Times Lin Bochiang, director del Centro de Investigación de Economía Energética de la Universidad de Xiamen. Por su parte, Gao Lingyun, de la Academia China de Ciencias Sociales en Pekín, declaró también el martes al órgano oficioso del gobierno chino que tras la consigna de “lucha contra la inflación” la nueva ley expresa el consenso entre demócratas y republicanos para ahogar el ascenso tecnológico chino. Sin embargo, “las normas discriminatorias también ponen a EE.UU. en riesgo de violar las normas de la OMC», dijo Gao.

Por el contrario, en una declaración tras la aprobación de la IRA en el Senado el viernes la Representante de Comercio de EE.UU., Katherine Tai, manifestó que «con esta legislación, la Ley CHIPS, la Ley de Ciencia y una serie de acciones ejecutivas EE.UU. está en una posición más fuerte para mantener nuestra ventaja competitiva global en los próximos años».

Haiku, en la provincia de Hainan, en el sur de China, acogió el viernes pasado la feria de vehículos de nueva energía (NEV). En la feria se exponen cerca de 300 vehículos de nueva energía y vehículos inteligentes interconectados. Las autoridades dijeron que China aumentará la proporción del sector de los NEV al 20% del total de las ventas de automóviles nuevos para 2025.

Auto de wwwautosinnovateorg
Auto de www.autosinnovate.org

En realidad, los observadores de la industria no son tan optimistas. Según algunos de ellos, la nueva ley podría infligir un gran daño a EE.UU. así como a la industria mundial de los NEV y aumentar aún más su inflación, mientras que su potencia para afectar a los fabricantes chinos de NEV es «insignificante y está dentro de control». De acuerdo a un informe del sitio web del sector, autosinnovate.org, actualmente el 70 por ciento de los 72 modelos de vehículos eléctricos a la venta en el mercado estadounidense no podría optar a las subvenciones. Prácticamente ninguno podría acceder al incentivo financiero, porque incluyen un alto porcentaje de partes importadas. «Es una oportunidad perdida en un momento crucial que pondrá en peligro nuestro objetivo colectivo de alcanzar un 40-50% de ventas de vehículos eléctricos para 2030», dijo John Bozzella, presidente y director general de la Alianza para la Innovación en la Automoción, en un blog publicado en la web oficial de la alianza el 5 de agosto pasado.

Coincidentemente, en un informe de Fortune que cita a Simon Moores, director ejecutivo del analista del mercado del litio Benchmark se lee que «es casi imposible que algún país de la Alianza pueda llenar de aquí a 2024 el vacío de materia prima de China para la demanda de NEV en EE.UU.». Los principales fabricantes chinos de baterías, como CATL y BYD, representan conjuntamente cerca de la mitad de la cuota de mercado mundial. Para los fabricantes de automóviles de EE.UU., Europa, Japón y Corea del Sur, como Tesla, BMW, Toyota, Kia y Hyundai, cortar los lazos con los proveedores chinos implica aumentar los costos en «un porcentaje significativo», explicó Feng. Y, aunque EE.UU. ha ejercido una fuerte presión sobre sus aliados, para unirlos y excluir a China de la cadena de suministro global, los analistas también predicen que pocas empresas se sumarían a ese plan, teniendo en cuenta el aumento de costos que implicará.

Por su parte, un representante de un fabricante de paneles solares líder en el mundo declaró el martes al Global Times que «todavía no tenemos planes de construir una fábrica en Estados Unidos. Aparte de las subvenciones, tenemos que evaluar la situación del mercado y la dotación de recursos», dijo, indicando que la empresa tiene que sopesar si estos supuestos incentivos pueden compensar el costo de construir una nueva cadena industrial en el país del norte. «La relocalización siempre conlleva un enorme gasto inicial. Por ejemplo, el rendimiento es clave para la fabricación de baterías y pueden ser necesarios años de ajuste y adaptación para lograr una tasa de rendimiento relativamente alta, por no hablar de la construcción de una cadena de suministro de NEV desde cero», dijo Feng, al tiempo que cuestionó que el mercado norteamericano sea «suficientemente grande» como para atraer a los fabricantes de NEV. «Es innegable que si los fabricantes de coches extranjeros se alejan de los proveedores chinos, las ventas de éstos caerán, pero esa pérdida podría compensarse pronto por las dimensiones y dinámica del mercado interior chino», advirtió Feng.

Es también dudoso que estas medidas proteccionistas puedan aplicarse, dada la gran dependencia de EE.UU. de los componentes chinos, su enorme deuda externa y los graves problemas económicos internos. Además, Washington se caracteriza por la discontinuidad de sus políticas por causa de la competencia entre los partidos.

Todo indica que, al menos en este aspecto de la IRA, han metido la mano los estrategas de la confrontación con China. Los antiguos campeones del globalismo (los clanes Clinton, Obama y cia.) de repente han decidido romper las cadenas productivas que enlazan al mundo y están aplicando una política proteccionista intempestiva que daña más al propio país que al pretendido objetivo.

Ha estallado la guerra del litio entre las grandes potencias. Estados Unidos carece del oro blanco y China tiene sólo 20% del mineral relevado en el planeta, pero el triángulo que forman Argentina, Bolivia y Chile concentra las mayores reservas mundiales. Por las buenas o por las malas vendrán por él. Sin la integración de los procesos productivos entre los tres países y el desarrollo de tecnologías propias que permitan avanzar en las cadenas productivas de celdas y baterías, seremos impunemente saqueados. Un pasaje secundario en una ley antiinflacionaria de Estados Unidos basta para afectar seriamente nuestro futuro.

DOS: Programa «Detrás de la razón»

Después de veinte años de discusiones en 2023 se iniciará la construcción del ramal del sur de la ruta terrestre de la seda conectando Xinjiang con Kirguistán y Uzbekistán

Especial para Dossier Geopolitico por Eduardo J. Vior

Con la guerra en Ucrania y las sanciones contra Rusia, EE.UU. y el Reino Unido bloquearon los enlaces terrestres y aéreos entre Europa y China. De ese modo esperan someter duraderamente a los países de la UE y limitar la influencia de la Ruta de la Seda y la Franja (BRI, por su nombre en inglés) sobre la integración y desarrollo de Eurasia. No obstante, China no se rinde y acaba de decidir que el año próximo comenzará la construcción del ferrocarril China-Kirguistán-Uzbequistán. Los 523 kilómetros de esta línea no sólo impulsarán el desarrollo de la región occidental de Xinjiang, sino que conectarán estas dos naciones de Asia Central entre sí y con China por un extremo, con el Cáucaso, Turquía y Europa en una dirección y con Irán e India en la otra. Este nodo se vincula con otros proyectos ferroviarios y marítimos. Eurasia se une contra la dominación atlántica.

Sólo para atravesar las montañas de Kirguistán deberán construirse 90 puentes

El ferrocarril CKU creará importantes oportunidades comerciales para Kirguistán y Uzbequistán, a la vez que conectará directamente a China por ferrocarril con Oriente Medio, con beneficios derivados en toda la región.

Como anunció la semana pasada el Presidente de Kirguistán, Sadyr Yaparov, China ha decidido por fin iniciar en 2023 la construcción del tan esperado ferrocarril China-Kirguistán-Uzbequistán (CKU). Los retrasos se han debido a las enormes dificultades logísticas y técnicas, así como al elevado costo. Kirguistán es montañoso y la línea requerirá la perforación de más de 90 túneles, mientras que las condiciones climáticas del invierno también son difíciles.  El acceso a China se hará desde la terminal ferroviaria de Kashgar, en la provincia de Xinjiang Occidental, ya conectada a la red nacional china.

La ruta CKU unirá China, Kirguistán y Uzbequistán con Europa Central y Oriental a través de Irán y Turquía. Según los planes propuestos, la longitud total de la misma será de unos 523 kilómetros, incluyendo 213 kilómetros en China, 260 kilómetros en Kirguistán y unos 50 kilómetros en Uzbequistán.

Desde Uzbequistán puede conectarse con el ferrocarril Uzbequistán-Turkmenistán hasta el puerto de Turkmenbashi, en el mar Caspio, para allí enlazar con el puerto de Bakú, en Azerbaiyán, y llegar a los mercados de Georgia, Turquía y las naciones de la UE del mar Negro (Bulgaria y Rumanía) o dirigirse hacia el sur hasta los puertos iraníes del Caspio, como el de Anzali, y seguir hacia el sur por el ferrocarril que también se completará en 2023 a través del Corredor Internacional de Transporte Norte-Sur (INSTC, por su nombre en inglés) hasta el puerto meridional iraní de Chabahar. Este tramo marítimo conduce a Oriente Medio, África Oriental e India.

Funcionarios uzbecos han dicho que, cuando esté terminado, el ferrocarril será la ruta más corta para transportar mercancías desde China a Europa y Oriente Medio, reduciendo el trayecto de carga en 900 kilómetros y ahorrando los envíos entre siete u ocho días. Las autoridades de Uzbequistán y Turkmenistán ya han planificado la conectividad bilateral en su tramo de la ruta CKU, mientras que Turkmenistán e Irán han hecho lo mismo. Irán también ha discutido la conectividad del INSTC con Catar.

Kirguistán es un pequeño país montañoso de Asia Central

La economía kirguisa es relativamente pequeña, con un PIB de algo menos de 8.000 millones de dólares y una población de apenas 6,5 millones. Se calcula que las exportaciones ascienden a unos 2.000 millones de dólares e incluyen oro, algodón, lana, prendas de vestir, carne, mercurio, uranio, electricidad, maquinaria y calzado. Importa bienes por valor de unos 4.500 millones de dólares, entre ellos petróleo y gas, maquinaria y equipos, productos químicos y alimentos. Sin embargo, la ubicación de Kirguistán lo hace ideal como centro de servicios de Asia Central, ya que también tiene frontera con Afganistán y se están proyectando enlaces ferroviarios con y a través de este país. El comercio exterior de Kirguistán aumentó un 19,5% en 2021 y cabe esperar que el país se convierta en un centro de fabricación y procesamiento ligero para el comercio entre China y Asia Central. Viendo la oportunidad, la plataforma rusa de comercio electrónico Wildberries acaba de establecer operaciones en el país.

La economía uzbeca se está abriendo en todas las direcciones

Uzbequistán, por su parte, es una de las principales apuestas de la CKU: el país está llevando a cabo importantes reformas y ha abierto su economía. Ello se ha traducido en la entrada en vigor de importantes acuerdos comerciales con el Reino Unido y la Unión Europea que incluyen a miles de productos que ahora pueden exportarse libres de impuestos. Esta evolución también se ha hecho patente en los mercados de capitales, donde el gobierno uzbeco emitió su primer eurobono en 2020, que ya fue sobresuscrito ocho veces. En agosto del año pasado Uzbequistán fue uno de los primeros países de la región en emitir un bono soberano de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), mientras que 15 de las principales empresas públicas y bancos uzbecos se preparan para una futura privatización, adelantándose a otras miles de empresas locales que buscan hacerlo.

Cabe esperar que los acuerdos comerciales de Uzbequistán sean un imán para los inversores chinos y rusos que buscan instalaciones uzbecas para la fabricación de productos de exportación. Uzbequistán no tiene salida al mar, pero cuenta con conexiones regionales hacia el norte, con Kazajistán y Rusia, y hacia el oeste, con Turkmenistán y el INSTC.

Desde Uzbequistán la CKU puede conectar con Kazajistán y Rusia. Hay que tener en cuenta que Uzbequistán es miembro observador de la Unión Económica Euroasiática (UEEA), que incluye a Armenia, Bielorrusia, Kirguistán, Kazajistán y Rusia, y es probable que se incorpore a ella en un futuro próximo. El país también tiene acuerdos de libre comercio con Irán y Vietnam y está en negociaciones con Egipto, los EAU, India y otras numerosas naciones de la ASEAN y algunas africanas.

La conectividad ferroviaria hacia el oeste vía Bakú, a través de Georgia y Turquía, sigue presentando cuellos de botella, aunque deberían resolverse en el transcurso de los próximos meses y, sin dudas, a mediados de 2023. Esta ruta del sur de China a Europa es cada vez más importante, dado que la ruta del norte a través de Rusia ha sido cerrada por la guerra y las sanciones occidentales.

En cuanto a Oriente Medio se trata de la ruta INSTC, que conectaría el puerto del Mar Caspio de Turkmenistán con el puerto del Caspio de Anzali, en Irán. La distancia marítima es de 304 millas náuticas. Desde allí, las mercancías pueden acceder a los importantes mercados iraníes, así como transitar hacia el sur a través de Irán hasta el puerto de Chabahar, en el Golfo de Omán. Está previsto que los tramos ferroviarios faltantes se completen durante 2023. El puerto de Chabahar ha sido objeto de una importante inversión por parte de India y en un principio iba a ser el principal corredor comercial entre Irán e India sin pasar por Paquistán. Sin embargo, esta ruta ha adquirido una mayor importancia estratégica por su acceso a Oriente Medio, África Oriental y el Sudeste Asiático.

Hay otros proyectos ferroviarios en marcha o en fase de planificación que también aumentarán el potencial de la CKU. Recientemente se ha reabierto la línea ferroviaria de carga Paquistán-Irán-Turquía, mientras que –con dificultades por el reciente golpe de estado prooccidental en Islamabad- se está construyendo la vía que une Paquistán con China, creando un bucle ferroviario total en Asia Central.

Toda Asia Central desea que Afganistán se rehabilite y el país ha firmado un memorando de entendimiento con Uzbequistán y Paquistán para construir un ferrocarril transafgano que lo atravesaría de norte a sur y conectaría Uzbequistán con el puerto paquistaní de Karachi. Turkmenistán también ha estado construyendo un ferrocarril hasta la frontera occidental de Afganistán y se está discutiendo un enlace con Herat, el centro industrial de este último país. Irán, en tanto, que también tiene frontera con Afganistán, participa en discusiones similares, con rutas previstas entre Irán y Afganistán que también conectarían con China. Como se puede ver, el ferrocarril CKU cambiará completamente el juego y la función de Asia Central. De ser un agujero, pasará a convertirse en el centro de la integración y el desarrollo de Eurasia.

Las potencias occidentales pretenden impedir este proceso desatando guerras en su periferia, pero, quebrada la dominación colonial (sobre todo en las cabezas de sus pueblos), ya nadie podrá impedir el restablecimiento de la unidad e interconexión entre el Mar Oriental de China y el Océano Atlántico, entre la estepa siberiana y el Océano Índico, que entre principios de nuestra era y el siglo XVIII tanto influyó sobre la historia del mundo. La periferia atlántica se está autoexcluyendo.