El Porqué de las Noticias: Venezuela: campaña electoral. Macri ante tribunales. Tensión sobre Taiwán

Carlos Pereyra Mele Director de Dossier Geopolitico, entrevistado en HispanTv. Por Juan Carlos Rozo, para el Programa: El Porqué de las Noticias: ¿Por qué EEUU busca lazos militares con Taiwán?. Minuto 17,33 FF.AA. chinas, listas para defender su territorio ante posibles lazos militares entre EE.UU. y Taiwán. China exige a la Casa Blanca dejar de inmiscuirse en sus asuntos internos.

Por Claudio Mutti

La geografía de Europa del Este tenía un aspecto muy diferente al actual a finales de los siglos XIII y XIV, ya que el panorama político era extremadamente fragmentado y las fuerzas que iban a ser decisivas en los siglos siguientes apenas se estaban formando. Rusia no era más que un conjunto de principados, entre los cuales el pequeño Ducado de Moscovia aún no se había alzado como el futuro Estado ruso. Por otro lado, el Reino de Polonia, que un siglo antes se había fragmentado en una gran cantidad de principados, no incluía ni Silesia ni los territorios bálticos de Pomerania, entre tanto, las fronteras polacas a penas llegaban hasta Galitzia. La Orden de los Caballeros Teutónicos dominaba todo el Báltico entre las desembocaduras del Vístula y del Neva. Por su parte, Lituania estaba aprisionada entre los rusos y Polonia. Mientras tanto, los kanes tártaros reinaban sobre todo el Sur de Ucrania, incluida la península de Crimea.

No obstante, Lituania comienza a extender sus fronteras hacia el Este, sin encontrar mayores obstáculos, a partir de las últimas décadas del siglo XIII y tal proceso durara casi un siglo y medio. Cuando a mediados del siglo XIV Lituania derrota a los ejércitos de la Orden Teutónica y amplia sus territorios hacia el Norte, termina por convertirse en “un poderoso Estado” [1] que se extiende desde el mar Báltico hasta casi llegar al mar Negro.

El Gran Duque lituano Jogaila (cuyo nombre sería conocido en Europa en la forma polaco-latina de Jagiello, es decir, Jagellon) decidió bautizarse en 1386 con la intención de casarse con la reina polaca de once años Jadwiga (que se convertiría en Santa Eduviges, patrona de las reinas, Polonia y la Unión Europea) y de ese modo ser coronado como el rey de Polonia Ladislao (1386-1434). Lituania siguió siendo un gran ducado que existía bajo la soberanía lituana. Los acuerdos preliminares que Jogaila, fundador de la dinastía jagellónica, celebró con la aristocracia polaca consistían en unir sus posesiones lituanas y rusas a la corona polaca, hacerle la guerra a los Caballeros Teutónicos y apoyar y respaldar los esfuerzos de los misioneros alemanes y polacos con tal de convertir a los paganos lituanos al catolicismo.

Los ejércitos del rey polaco Ladislao y de su primo lituano Vitautas (1350-1430) derrotaron a los Caballeros Teutónicos en Grunwald el 15 de julio de 1410 y con ello le pusieron fin al dominio de esta Orden sobre el Báltico. El Gran Ducado de Lituania, bajo el mando de Vitautas, continuó su política de expansión hacia el Sur y el Este, con lo que llegó a conquistar grandes porciones del territorio ruso e incluso consiguió que los tártaros de Crimea cayeran bajo su influencia. Fue así que Lituania “alcanzó su máxima extensión territorial, llegando incluso hasta el Mar Negro y contando con una superficie de alrededor de 1.000.000 de kilómetros cuadrados, más de tres veces el tamaño de la actual Italia” [2].

Durante el siglo siguiente, en específico el 10 de enero de 1569, una dieta conjunta lituano-polaca ratificó la unión de estos dos reinos en Lublin y fue así como nació la República de las Dos Naciones (pol. Rczeczpospolita Obojga Narodów), convirtiendo a este reino en el mayor Estado de Europa Oriental hasta el siglo XVII. La voluntad de poder de la aristocracia polaca reavivó el mito del origen sármata de su sangre y con ello crearon una especie de mesianismo político que expresaron con la consigna: “¡Polonia caput ac regina totius Sarmatiae!”. En otras palabras, “a Polonia le corresponde ponerse a la cabeza de una formación eslava que unificaría a casi todos los pueblos de Europa central y oriental” [3] convirtiéndose con ello en una especie de “Sarmacia europea”.

No obstante, estas ambiciones fueron frustradas por las luchas internas provocadas por el sistema de patronazgo y los ataques de potencias periféricas emergentes como Rusia (la “Sarmacia asiática”) y Prusia que causaron que el sistema geopolítico unitario creado por los Jagellon terminara por desaparecer con las sucesivas particiones de Polonia que acontecieron en 1772, 1793 y 1795.

La idea de revivir la República de las Dos Naciones fue propuesta por el príncipe Adam Jerzy Czartoryski (1770-1861), que se encontraba exiliado en París, un “aristócrata que era para sus seguidores el ‘rey sin corona’ de Polonia” [4] y que creía que con el apoyo de Gran Bretaña, Francia y Turquía sería posible resucitar su reino mediante la incorporación de las regiones orientales de Prusia y la reconstrucción de un Estado polaco-lituano federado que estuviera formado por estonios, letones, ucranianos, checos, eslovacos, húngaros, rumanos y eslavos del sur, de tal forma que con ello el poder prusiano se vería enormemente reducido y Rusia habría sido obligada a abandonar sus ambiciones en Europa Oriental. Pero el proyecto de Czartoryski, cuyos partidarios debieron considerar bastante factible durante el periodo de levantamientos anti-imperiales de 1848-49, fracasó debido al poco interés que tenían en él las potencias de Europa Occidental, sin hablar de la intransigencia húngara hacia los checos, eslovacos y rumanos, y la hostilidad de Rusia y Prusia ante semejantes planes.

Sin embargo, este proyecto reapareció después de la Primera Guerra Mundial tras las derrotas militares de Rusia, Alemania y Austria-Hungría, seguidas por la Revolución de Octubre en Rusia. Después de que acabó la guerra polaco-rusa con la firma del Tratado de Paz de Riga del 18 de marzo de 1921, el mariscal Józef Piłsudski (1867-1935), jefe provisional del nuevo Estado polaco, propuso la idea de formar una federación de Estados que se extendiera “del Mar Báltico hasta el Mar Negro” y que se llamaría en polaco Międzymorze, en lituano Tarpjūris y en latín Intermarium, neologismo que simplemente no estaba a la altura de la tradición humanista polaca. Esta federación sería la heredera histórica de la antigua entidad política polaco-lituana. EL proyecto de Piłsudski (1919-1921) incluía en un principio no solo a Polonia como fuerza hegemónica, sino también a Lituania, Bielorrusia y Ucrania. Por supuesto, el Intermarium iba dirigido tanto contra Alemania, buscando impedir que volviera a convertirse en una potencia imperial, como contra Rusia. El mariscal Piłsudski propuso otro proyecto complementario conocido como “Prometeo” que desmembraría a Rusia en una serie de Estados étnicos independientes.

Francia apoyo este proyecto, ya que de haber triunfado le permitiría separar a Alemania y a Rusia mediante la aparición de un bloque europeo centro-oriental encabezado por Polonia. Pero el apoyo francés fue insuficiente a la hora de impulsarlo y fue sustituido por un frágil sistema de alianzas que terminaron desencadenando la Segunda Guerra Mundial.

El mariscal Piłsudski propuso una versión incluso más audaz de su proyecto Intermarium en los años de 1921 y 1935. En esta versión renunciaba a los territorios de Ucrania y Bielorrusia, pero los sustituía con la inclusión de Noruega, Suecia, Dinamarca, Estonia, Letonia, Checoslovaquia, Hungría, Rumanía, Bulgaria, Grecia, Yugoslavia e Italia, por lo que los dos mares se convertían en cuatro, ya que al Mar Báltico y al Mar Negro se sumaban el Ártico y el Mediterráneo. Pero tal proyecto también fracasó y su único logro fue la formación de una de Polonia con Rumanía.

Józef Beck (1894-1944), colaborador de Piłsudski, retomó en 1932 la idea de crear una entidad geopolítica centroeuropea entre el Mar Báltico y el Mar Negro con el nombre de “Tercera Europa”, llevando a cabo sus planes cuando asumió la dirección de la política exterior polaca, lo cual culminó en una alianza con Rumanía y Hungría.

Posteriormente, el gobierno polaco de Władisław Sikorski (1881-1943) – exiliado primero en París y luego en Londres – presentó durante la Segunda Guerra Mundial a los gobiernos de Checoslovaquia, Grecia y Yugoslavia la idea de crear una unión centroeuropea entre el Mar Báltico, el Mar Negro, el Egeo y el Adriático durante la Segunda Guerra Mundial; pero debido a la oposición soviética y a la negativa de Checoslovaquia de federarse con Polonia, tal plan termino por ser archivado.

La idea del Intermarium fue desempolvada después de la caída de la URSS y la disolución del Pacto de Varsovia y desde entonces a adoptado diferentes formas como el Consejo de Cooperación del Mar Negro, la Asociación Oriental y el Grupo de Visegrád, que son versiones menos ambiciosas y más pequeñas del mismo proyecto ya “clásico”.

De todos modos, el sistema de alianzas que más se parece al proyecto del Intermarium es el teorizado por el Instituto Stratfor, un centro de estudios estadounidense fundado por George Friedman debido al estallido de la crisis ucraniana. El general Frederick Benjamin «Ben» Hodges, comandante del ejército estadounidense en Europa (condecorado con la Orden del Mérito de la República de Polonia y la Orden de la Estrella de Rumanía), anunció el “posicionamiento” de tropas de la OTAN en todas las fronteras occidentales de Rusia, lo cual incluye los Estados bálticos, Polonia, Ucrania, Rumanía y Bulgaria, es decir, una ofensiva que va del Báltico hasta el Mar Negro, tal y como lo propuso en su momento Piłsudski.

El presidente polaco Andrzej Duda presagió el nacimiento de una alianza regional inspirada explícitamente en el modelo de Intermarium el 6 de agosto de 2015. Un año después, entre el 2 y el 3 de julio de 2016, tuvo lugar la conferencia inaugural del Grupo de Asistencia Intermarium en las instalaciones del Hotel Radisson Blue de Kiev, en presencia del presidente de la Rada ucraniana, Andriy Paruby, y del presidente del Instituto Nacional de Investigación Estratégica, Vladimir Gorbulin, así como de otras personalidades políticas y militares provenientes de varias partes de Europa entre las cuales se presentó el proyecto de crear una unión de todos los Estados entre el Mar Báltico y el Mar Negro.

Pero al mes siguiente la idea de los dos mares se convirtió en tres: el 25 y 26 de agosto de 2016 el Foro de Dubrovnik sobre “El Fortalecimiento de Europa – Conectando el Norte y el Sur” emitió un comunicado conjunto donde se promovía la Iniciativa de los Tres Mares, un plan cuyo objetivo era “conectar las economías e infraestructuras de Europa Central y Oriental y que iba desde el Norte hasta el Sur, con la intención de ampliar la cooperación en los ámbitos energéticos, de transporte, las comunicaciones digitales y, en general, de la economía”. Esta Iniciativa de los Tres Mares, que en un primer momento fue promovida por la administración Obama, luego fue abiertamente defendida por Donald Trump el 6 de julio de 2017 durante su visita a Varsovia. El presidente Duda dijo que esta iniciativa busca crear “un nuevo concepto que promueva la unidad europea” y reúne en su interior a doce países entre los mares Báltico, Negro y Adriático, además de que casi todos sus miembros pertenecen a la Alianza Atlántica: Estonia, Letonia, Lituania, Polonia, Eslovaquia, República Checa, Austria, Eslovenia, Croacia, Hungría, Rumanía y Bulgaria.

El objetivo económico de la Iniciativa de los Tres Mares es golpear las exportaciones de gas ruso a Europa favoreciendo los envíos de gas natural licuado desde Estados Unidos: “Una terminal en el puerto báltico de Świnoujście, con un coste de unos mil millones de dólares, permitirá a Polonia importar hasta 5.000 millones de metros cúbicos de GNL estadounidense al año, que pronto llegaran a los 7,5 millones. A través de esta y otras terminales, incluida una prevista en Croacia, el gas procedente de Estados Unidos, o de otros países que pertenezca a empresas estadounidenses, se distribuirá por gasoductos a toda la región de los tres mares” [5].

Por lo tanto, la macrorregión de los Tres Mares se encuentra vinculada tanto energética como militarmente a Washington y no a Bruselas o Berlín, por lo que podemos decir que todo esto terminará por romper, tarde o temprano, a la Unión Europea, especialmente cuando a ella se sume Ucrania, y únicamente reforzará el cordón sanitario que ya ha sido construido alrededor de las fronteras occidentales de Rusia.

Notas:

[1] Josef Macek, L’Europa orientale nei secoli XIV e XV, Sansoni, Firenze 1974, p. 16.

[2] Beruta Žindžiūtė Michelini, Lituania, NED, Milano 1990, p. 50.

[3] Francis Conte, Gli Slavi. Le civiltà dell’Europa centrale e orientale, Einaudi, Torino 1990, p. 293.

[4] Oscar Halecki, I Polacchi, in Il mondo degli Slavi, a cura di Hans Kohn, Cappelli editore, Bologna 1970, p. 115.

[5] Manlio Dinucci, Sui Tre mari dell’Europa bandiera Usa, Rete Voltaire, Roma, 10 luglio 2017 http://www.voltairenet.org/article197081.htm

FUENTE GEOPOLITICA.RU

Leonid Savin

Daniel Kawczynski, asesor del Parlamento británico sobre Polonia, presentó un informe titulado “La iniciativa de los tres mares y las oportunidades para la Gran Bretaña global” en septiembre del 2021. Él, junto con otros tres coautores que son ciudadanos británicos de ascendencia polaca, abogan por una mayor cooperación entre Polonia y Gran Bretaña. Daniel Kawczynski es un personaje bastante pintoresco y algo odioso, empezando por el hecho de pertenecer al Partido Conservador del Reino Unido y ser uno de los más activos defensores del Brexit. Kawczynski dijo en el 2017 que Londres “debería ayudar a otros países a defender su soberanía política frente a Bruselas” (1). en septiembre de 2019, Kawczynski escribió una carta a Donald Trump rogándole que ayudara a Polonia a pedir una indemnización a Alemania por la destrucción que esta causó durante la Segunda Guerra Mundial (2).

Kawczynski es católico, pero no se adscribe a la moral cristiana tradicional: se divorció de su mujer, con la que tiene un hijo, y en noviembre de 2019 contrajo “matrimonio” formal con un hombre de origen brasileño que ha amado durante toda su vida (3).

Kawczynski ha sido uno de los principales partidarios de la Iniciativa de los tres mares y recuerda constantemente que Estados Unidos es uno de sus principales impulsores. Por ejemplo, en una publicación estadounidense este año escribió lo siguiente: “Los beneficios económicos siempre tiene un trasfondo geopolítico. En primer lugar, el suministro de energía estadounidense es un contrapeso frente al dominio ruso en este campo, además de que le proporcionan a Europa Central y Oriental una alternativa estratégica para conservar su independencia energética. En segundo lugar, Washington utiliza la asociación 3SI (Three Seas InitiativeIniciativa de los tres mares) como un instrumento para contrarrestar la creciente influencia china en los Balcanes. Esto también se hace evidente en el ámbito de las telecomunicaciones, especialmente con la implementación del ‘Plan de Seguridad de Redes Limpias 5G’ al que Estonia se ha unido recientemente y la promoción del proyecto Conectividad Inteligente que pretende conectar digitalmente todas las fronteras del 3SI. Casi todas las capitales de Europa Central y Oriental, al igual que Londres, desconfían cada vez más de Pekín y de su creciente influencia en la zona” (4). En ese entonces también pidió que Gran Bretaña se sumara a las sanciones en contra del Nord Stream 2.

Lo cual nos lleva a la conclusión de que Kawczynski es sin lugar a dudas uno de los más acérrimos defensores de los intereses de Washington.

Ahora bien, el informe que presento al Parlamento Británico se centra antes que nada en los intereses del Reino Unido en el proyecto 3SI, aunque Estados Unidos juega un papel importante en toda esta iniciativa (oficialmente no es más que un observador). No obstante, Londres también tiene sus propias razones para involucrarse en este proyecto y el documento presentado por el gobierno lo deja más que claro. El Ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido intervino en la cumbre del 3SI en Sofía en julio de 2021 y reconoció la importancia económica y geoestratégica que tenía esta Iniciativa para toda la región (5).

Hasta este momento, la Iniciativa de la 3SI ha celebrado 5 grandes cumbres y ha creado un Fondo de Inversión de los Tres Mares que esta invirtiendo en grandes proyectos de infraestructura, energía y conectividad. Hasta ahora se han invertido más de 300 millones de dólares en energía, pero los planes prevén que pronto se alcanzaran más de mil millones. La 3SI representa aproximadamente el 30% de la UE y abarca un total de 12 países y 112 millones de habitantes. Hungría, Lituania, Polonia, Rumanía y Estonia son sus principales lideres.

Kawczynski escribe que: “La declaración anterior fue un tema recurrente de los 12 embajadores de los países que participan en la Iniciativa de los Tres Mares. Para que la nueva Gran Bretaña post-Brexit demuestre efectivamente sus ambiciones globales, debe reafirmar sus compromisos con Europa. Las dimensiones económicas y políticas del bloque abren al sector público y privado del Reino Unido a más de 157 proyectos energéticos, de infraestructuras y digitales donde nosotros podemos ser una alternativa al marco de cooperación con la UE y trabajar junto con nuestros aliados más cercano de Europa Central y Oriental. La iniciativa de los Tres Mares no solo es un proyecto que podría dar cabida a la nueva estrategia global post-Brexit del Reino Unido, sino que también actúa como un eje estratégico de 12 capitales que comparten la visión de Londres de crear una alianza transatlántica más fuerte basada en la cooperación y el desarrollo económicos multilateral con tal de crear un orden internacional más sólido en el futuro”.

Según el informe presentado por Kawczynski y sus colegas: “Los doce embajadores de los países consultados subrayaron que la Iniciativa de los Tres Mares no es una alternativa a la UE, ni tampoco un intento de reestructurar o crear un sistema político europeo paralelo. La Iniciativa de los Tres Mares sirve principalmente para intensificar la cooperación e interconexión regionales. Sin embargo, varios embajadores también describieron las implicaciones geopolíticas de la Iniciativa, especialmente para Rusia y China. En cuanto a la primera, el aumento de los suministros de gas natural licuado (GNL) desde Estados Unidos para los países del 3SI es importante a un nivel estratégico, ya que los suministros de Estados Unidos contrarrestan la creciente dependencia energética europea de Rusia como queda constatado con proyectos de infraestructura tales como el gasoducto Nord Stream 2. Con respecto a este último punto, tanto Washington como Tokio pueden ser un contrapeso frente a la creciente influencia de Pekín en los Balcanes, teniendo en cuenta que Estados Unidos y Japón preparan la creación de fondos de inversión alternativos conocidos como la Iniciativa 17+1. Por lo tanto, la Iniciativa 3SI ha desarrollado naturalmente un ala geoestratégica y, desde de la perspectiva de S.E. Intelmann y de muchos otros expertos, es posible decir que se han creado varios ‘mecanismo de equilibrio’ que permiten superar los retos geopolíticos que enfrenta el continente europeo y la comunidad transatlántica” (6).

El 32% de los 77 proyectos prioritarios que ha lanzado la 3SI están relacionados con la energía. Uno de ellos es la terminal de gas natural licuado construida en Croacia, la cual fue terminada en el 2020. Existen otros proyectos como el gasoducto Polonia-Lituania (GIPL) que conectará Lituania, Letonia y Estonia y ampliará el acceso de los países bálticos a la red energética europea que ya opera en Polonia, o el gasoducto Bulgaria-Rumanía-Hungría (BRUA) que permitirá la comercialización del gas del Mar Negro en toda la región.

En cuanto a la influencia china, los funcionarios occidentales han subrayado constantemente la amenaza estratégica que esta representa para el foro 17+1 y por eso se busca frenar las inversiones chinas en Europa Central y Oriental. En marzo de 2021, Lituania dijo que se retiraría del bloque 17+1 y pidió a otros miembros de la UE que hicieran lo mismo. Por supuesto, los países de la 3SI dan prioridad a las inversiones que provienen de naciones “occidentales” como Alemania, Japón, Corea del Sur y Estados Unidos. Obviamente, nada de esto se hace sin la aprobación de EE.UU., ya que su principal intención es bloquear la influencia de China en los países balcánicos.

Ahora bien, existe también un cierto legado histórico: es sabido que Gran Bretaña apoyo activamente, después de la Primera Guerra Mundial, la creación de un cordón sanitario contra Rusia en todos los países de Europa del Este, por lo que ahora lo único que desea es continuar esta labor bloqueando la participación de fuerzas externas. Como muy bien señala uno de los coautores del informe, George Byczynski, alto asesor del parlamento británico, “parte de la estrategia global del Reino Unido tras el Brexit es encontrar la forma de afianzar nuestra posición en Europa en lugar de permitir que posibles adversarios alteren el mapa europeo. Los embajadores de los 12 países de la 3SI comparten la idea de Londres de crear una alianza económica transatlántica mucho más fuerte y han acogido con satisfacción el apoyo del Reino Unido, como atestigua el caluroso saludo del ex Secretario de Estado Dominic Raab durante la última cumbre de la 3SI en Sofía. Además, el invertir en todos los proyectos de la 3SI podría darle a Londres unos grandes ingresos que beneficiarán sin duda a las generaciones futuras. Participar en iniciativas internacionales como la 3SI demostraría que, aunque el Reino Unido ha abandonado la UE, no ha dejado Europa y el intensificar nuestra cooperación con estos países podría contribuir a garantizar unas condiciones comerciales más favorables para el Reino Unido. Por lo que impulsar la Iniciativa de la 3SI ayudará a profundizar nuestra relación con nuestros aliados más cercanos y garantizando la capacidad de nuestro país para responder con rapidez, solidez y eficacia a los retos y crisis que se presenten” (7).

Por lo tanto, la 3SI, además de la OTAN y los otros acuerdos bilaterales, es una plataforma para ampliar la influencia transatlántica en Europa Oriental, haciendo que los principales actores de Europa Occidental – Francia y Alemania – continúen siendo periféricos, mientras que Gran Bretaña se beneficia de las actuales circunstancias. La Iniciativa del 3SI busca eliminar la competencia que representan Rusia y China mediante la promoción artificial de la rusofobia (y la sinofobia) en toda Europa del Este.

Notas:

1. https://danielkawczynski.pl/2017/12/30/daniel-kawczynski-after-we-escape…

2. https://danielkawczynski.pl/2019/09/05/daniel-writes-a-letter-to-the-us-…

3. https://twitter.com/DKShrewsbury/status/1192904874104631296

4. https://capx.co/global-britain-must-seize-the-opportunities-of-the-three…

5. https://3seas.eu/

6. https://emerging-europe.com/wp-content/uploads/2021/09/Report-on-the-Three-Seas-Initiative.pdf

7. https://rusi.org/explore-our-research/publications/commentary/strengthening-european-unity-three-seas-initiative

FUENTE: GEOPOLITICA.RU

Pepe Escobar

Se están formando los bandos en torno a la disputa entre Irán y Azerbaiyán. Pero esta lucha no tiene que ver con el origen étnico, la religión o la tribu, sino con quién va a forjar las nuevas rutas de transporte de la región.

Lo último que necesita en este momento el complejo impulso de la integración euroasiática es este complicado asunto entre Irán y Azerbaiyán en el sur del Cáucaso.

Empecemos por los Conquistadores de Khaybar, el mayor ejercicio militar iraní en dos décadas, realizado en su frontera noroccidental con Azerbaiyán.

Entre los militares iraníes desplegados y las unidades del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) hay algunos jugadores serios, como la 21ª División de Infantería de Tabriz, el batallón Ashura 31 del CGRI, la 65ª Brigada de Fuerzas Especiales Aerotransportadas y un conjunto de sistemas de misiles, incluidos los misiles balísticos Fateh-313 y Zulfiqar con un alcance de hasta 700 kilómetros.

La explicación oficial es que los simulacros son una advertencia para los enemigos que traman algo contra la República Islámica.

El Líder Supremo de Irán, el ayatolá Jamenei, tuiteó de forma contundente que «aquellos que se hacen la ilusión de depender de otros, piensan que pueden proporcionar su propia seguridad, deben saber que pronto recibirán una bofetada, se arrepentirán.»

El mensaje era inequívoco: se trataba de que Azerbaiyán dependía de Turquía y, especialmente, de Israel para su seguridad, y de que Tel Aviv instrumentalizaba a Bakú para una campaña de inteligencia que conducía a la injerencia en el norte de Irán.

Los expertos iraníes llegaron a decir que Israel podría utilizar bases militares en Azerbaiyán para atacar las instalaciones nucleares iraníes.

La reacción al ejercicio militar iraní hasta ahora es una respuesta previsible de Turquía y Azerbaiyán: están realizando un simulacro conjunto en Najchivan durante toda esta semana.

Pero, ¿estaban las preocupaciones de Irán fuera de lugar? Desde hace años se está desarrollando una estrecha colaboración en materia de seguridad entre Bakú y Tel Aviv. Azerbaiyán posee hoy en día aviones no tripulados israelíes y mantiene una estrecha relación con la CIA y el ejército turco. Si a esto le añadimos los recientes ejercicios militares trilaterales en los que participan Azerbaiyán, Turquía y Pakistán, estos acontecimientos están destinados a hacer saltar las alarmas en Teherán.

Bakú, por supuesto, lo hace de manera diferente: Nuestras asociaciones no se dirigen a terceros países.

Así que, esencialmente, mientras Teherán acusa al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, de facilitar la vida a los terroristas takfiríes y a los sionistas, Bakú acusa a Teherán de apoyar ciegamente a Armenia. Sí, los fantasmas de la reciente guerra del Karabaj están por todas partes.

Por una cuestión de seguridad nacional, Teherán no puede tolerar que empresas israelíes participen en la reconstrucción de las regiones ganadas en la guerra cerca de la frontera iraní: Fuzuli, Jabrayil y Zangilan.

El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hossein Amir-Abdullahian, ha intentado jugar con la diplomacia: «Las cuestiones geopolíticas en torno a nuestras fronteras son importantes para nosotros. Azerbaiyán es un vecino muy querido por Irán y por eso no queremos que quede atrapado entre terroristas extranjeros que están convirtiendo su suelo en un caldo de cultivo.»

Por si esto no fuera lo suficientemente complicado, el meollo de la cuestión -como todo en Eurasia- gira en realidad en torno a la conectividad económica.

Un desorden interconectado

Los sueños geoeconómicos de Bakú son grandes: la capital aspira a situarse en la encrucijada clave de dos de los corredores euroasiáticos más importantes: Norte-Sur y Este-Oeste.

Y ahí es donde entra en juego el Corredor de Zangezur, posiblemente esencial para que Bakú predomine sobre las rutas de conectividad Este-Oeste de Irán.

El corredor pretende conectar el oeste de Azerbaiyán con la República Autónoma de Nakhchivan a través de Armenia, con carreteras y ferrocarriles que pasen por la región de Zangezur.

Zangezur también es esencial para que Irán se conecte con Armenia, Rusia y, más adelante, con Europa.

China e India también confiarán en Zangezur para el comercio, ya que el corredor supone un importante atajo en la distancia. Teniendo en cuenta que los grandes cargueros asiáticos no pueden navegar por el Mar Caspio, suelen perder preciosas semanas para llegar a Rusia.

Un problema adicional es que Bakú ha comenzado recientemente a acosar a los camioneros iraníes que transitan por estas nuevas regiones anexionadas en su camino hacia Armenia.

No tenía por qué ser así. Este detallado ensayo muestra cómo Azerbaiyán e Irán están vinculados por «profundos lazos históricos, culturales, religiosos y etnolingüísticos», y cómo las cuatro provincias del noroeste de Irán -Gilán, Ardabil, Azerbaiyán Oriental y Azerbaiyán Occidental- tienen «fronteras geográficas comunes tanto con la parte principal de Azerbaiyán como con su exclave, la República Autónoma de Najcheván; también tienen profundos y estrechos puntos en común basados en el islam y el chiismo, además de compartir la cultura y la lengua azerbaiyanas. Todo ello ha propiciado la cercanía entre los ciudadanos de las regiones de ambos lados de la frontera».

Durante los años de Rouhani, las relaciones con Aliyev fueron en realidad bastante buenas, incluyendo la cooperación trilateral Irán-Azerbaiyán-Rusia e Irán-Azerbaiyán-Turquía.

Una conectividad clave en juego es el proyecto de unir el ferrocarril Qazvin-Rasht-Astara en Irán con Azerbaiyán: forma parte del importantísimo Corredor Internacional de Transporte Norte-Sur (INSTC – International North‑South Transport Corridor).

Desde el punto de vista geoeconómico, Azerbaiyán es esencial para el ferrocarril principal que eventualmente irá de la India a Rusia. No sólo eso; la cooperación trilateral Irán-Azerbaiyán-Rusia abre una vía directa para que Irán se conecte plenamente con la Unión Económica Euroasiática (UEE).

En un escenario óptimo, Bakú puede incluso ayudar a los puertos iraníes del Golfo Pérsico y del Mar de Omán a conectarse con los puertos georgianos del Mar Negro.

Occidente ignora que prácticamente todos los tramos del INSTC ya están funcionando. Por ejemplo, el ferrocarril Astara-Astara, exquisitamente bautizado, que conecta ciudades iraníes y azerbaiyanas que comparten el mismo nombre. O el ferrocarril Rasht-Qazvin.

Sin embargo, un importante tramo de 130 km entre Astara y Rasht, situado en la orilla sur del Caspio y próximo a la frontera entre Irán y Azerbaiyán, no se ha construido. ¿La razón? Las sanciones de la era Trump. Este es un ejemplo gráfico de lo mucho que depende, en términos prácticos de la vida real, de la conclusión satisfactoria de las conversaciones del JCPOA en Viena.

¿A quién pertenece Zangezur?

Irán se encuentra en una zona algo complicada en la periferia sur del Cáucaso Sur. Los tres principales actores de esa zona son, por supuesto, Irán, Rusia y Turquía. Irán limita con las antiguas regiones armenias -ahora azeríes- adyacentes a Karabaj, como Zangilan, Jabrayil y Fuzuli.

Estaba claro que la flexibilidad de Irán en su frontera norte estaría ligada al resultado de la segunda guerra del Karabaj. La frontera noroeste era una fuente de gran preocupación, ya que afectaba a las provincias de Ardabil y al este de Azerbaiyán, lo que hace aún más confusa la posición oficial de Teherán de apoyar las reivindicaciones azeríes frente a las armenias.

Es esencial recordar que, incluso en la crisis del Karabaj a principios de los años 90, Teherán reconoció a Nagorno-Karabaj y a las regiones que lo rodean como partes integrantes de Azerbaiyán.

Aunque tanto la CIA como el Mossad parecen ajenos a esta reciente historia regional, ello no les impedirá saltar a la palestra para enfrentar a Bakú y Teherán.

Un factor que complica aún más las cosas es que Zangezur también es apetecible desde el punto de vista de Ankara.

Podría decirse que el presidente neo-otomano de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que nunca rehúye una oportunidad para ampliar su profundidad estratégica turco-musulmana, está tratando de utilizar la conexión azerí en Zangezur para llegar al Caspio, luego a Turkmenistán, hasta Xinjiang, el territorio occidental de China poblado por musulmanes uigures. Esto, en teoría, podría convertirse en una especie de Ruta de la Seda turca que pasara por encima de Irán, con la ominosa posibilidad de ser utilizada también como línea de ratas para exportar takfiris desde Idlib hasta Afganistán.

Teherán, por su parte, está totalmente orientado al INSTC, centrándose en dos líneas ferroviarias que se rehabilitarán y mejorarán desde la época soviética. Una es la Sur-Norte, desde Jolfa hasta Najchivan y luego hasta Ereván y Tblisi. La otra es Oeste-Este, de nuevo desde Jolfa a Najchivan, atravesando el sur de Armenia, la parte continental de Azerbaiyán, hasta Bakú y luego hasta Rusia.

Y ahí está el problema. Los azeríes interpretan que el documento tripartito que resuelve la guerra del Karabaj les da derecho a establecer el corredor de Zangezur. Los armenios, por su parte, discuten exactamente qué «corredor» se aplica a cada región en particular. Antes de que aclaren estas ambigüedades, todos esos elaborados planes de conectividad iraníes y turcos quedan efectivamente suspendidos.

Sin embargo, el hecho es que Azerbaiyán está destinado a convertirse en una encrucijada clave de conectividad trans-regional tan pronto como Armenia desbloquee la construcción de estos corredores de transporte.

Entonces, ¿cuál es el «win-win»?

¿Ganará la diplomacia en el Cáucaso Sur? Debe hacerlo. El problema es que tanto Bakú como Teherán lo plantean en términos de ejercicio de su soberanía, y no parecen especialmente predispuestos a ofrecer concesiones.

Mientras tanto, los sospechosos habituales se divierten explotando esas diferencias. Sin embargo, la guerra está descartada, tanto entre Azerbaiyán y Armenia como entre Azerbaiyán e Irán. Teherán es más que consciente de que en este caso tanto Ankara como Tel Aviv apoyarían a Bakú. Es fácil ver quién se beneficiaría de ello.

Ya en abril, en una conferencia en Bakú, Aliyev destacó que «Azerbaiyán, Turquía, Rusia e Irán comparten el mismo enfoque de la cooperación regional. La principal área de concentración ahora es el transporte, porque es una situación que se llama «win-win». Todos ganan con ello».

Y eso nos lleva al hecho de que si el actual estancamiento persiste, la principal víctima será el INSTC. De hecho, todo el mundo pierde en términos de integración euroasiática, incluidos India y Rusia.

El punto de vista pakistaní, que algunos han hecho circular en secreto, es totalmente inverosímil. No hay pruebas de que Teherán apoye una campaña anti-talibán en Afganistán sólo para socavar los lazos de Pakistán con Azerbaiyán y Turquía.

La asociación estratégica entre Rusia y China considera la actual coyuntura del Cáucaso Meridional como un problema innecesario, especialmente tras la reciente cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS). Esto perjudica gravemente sus estrategias complementarias de integración euroasiática: la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI – Belt and Road Initiative) y la Gran Asociación Euroasiática.

El INSTC podría, por supuesto, seguir el camino transcaspiano y cortar por completo a Azerbaiyán. Sin embargo, esto no es probable. La reacción de China, una vez más, será el factor decisivo. Podría hacer más hincapié en el corredor persa, desde Xinjiang, pasando por Pakistán y Afganistán, hasta Irán. O Pekín podría apostar igualmente por ambos corredores Este-Oeste, es decir, apostar tanto por Azerbaiyán como por Irán.

La conclusión es que ni Moscú ni Pekín quieren que esto se encone. Habrá movimientos diplomáticos serios por delante, ya que ambos saben que los únicos que se beneficiarán serán los sospechosos habituales centrados en la OTAN, y los perdedores serán todos los actores que están seriamente invertidos en la integración euroasiática.

FUENTES:

Traducido al español para Geopolitica.ru
Fuente original: https://thecradle.co/

Beijing ha puesto en marcha una serie de iniciativas para reducir la brecha entre la región occidental del país, híper desarrollada en las últimas décadas, y la oriental, que no participó plenamente de ese crecimiento exponencial. Argentina quiere participar en los planes de impulso a la zona, por donde pasa la Iniciativa de la Franja y de la Ruta.

Por Gustavo Ng*

i los chinos pagaron la igualdad del comunismo de la mano de Mao con pobreza, el precio del ulterior formidable desarrollo económico de la mano de Deng Xiaoping fue un regreso a la desigualdad. Ciertamente, no fue la desigualdad brutal anterior a la revolución socialista, pero la disparidad entre la zona este del país y la zona oeste condenaba a los habitantes de esta última como pobres o ciudadanos de segunda categoría, o los obligaba a migrar hacia las zonas costeras del este. Se calcula que, en 2017, 500 millones de chinos, que vivían casi todos en ciudades, eran migrantes internos, la mayoría llegados del oeste (entre 1978 y 1985 la población urbana había crecido de 172 a 251 millones de personas).

La zona oeste, donde la población es básicamente rural, está conformada por las provincias de Gansu, Guizhou, Qinghai, Shaanxi, Sichuan y Yunnan, y las regiones autónomas de Guangxi, Mongolia Interior, Ningxia, Tíbet y Xinjiang, a la que se suma el municipio de Chongqing. Ocupa el 71,4% de toda la superficie de China y apenas tiene el 28% de su población.

Planificación. Cuando Deng lanzó el trepidante desarrollo a principio de los años 1980, la brecha entre el oeste y el este perjudicó al primero, por ejemplo, manteniendo un costo del 33% para la radicación de inversiones extranjeras, mientras en las zonas especiales, que empezaron en las provincias costeras de Guangdong y Fujian, y se extendieron a 14 ciudades, era del 15%. Por otra parte, la autonomía para flexibilizar las normas que existía en las ciudades costeras para inversiones no era permitida en el oeste.

La desigualdad entre el este y el oeste no fue sorpresiva, ni siquiera fue una consecuencia no buscada, sino que fue planificada. Deng Xiaoping sabía que el desarrollo implicaría, por lo menos en una primera etapa, que una parte se desarrollaría más que el resto, como si fuera una locomotora. Si se quiere, la riqueza en China se ha estado distribuyendo con la lógica del derrame; ahora bien, si el derrame no funciona en el capitalismo, China trata de hacerlo funcionar controlándolo, forzando que aquello que rebasa vaya a los niveles inferiores y no se quede arriba.

En el primer año de este siglo China lanzó el Plan de Desarrollo del oeste, basado en una portentosa activación de la infraestructura, la promoción de la inversión extranjera, la retención de la población y el repoblamiento a través de la urbanización y los programas focales para terminar con la pobreza. Todo esto, asociado a un empeño ecológico, que tiene un carácter reparador, desde que el oeste se extiende sobre desiertos eternos o zonas extenuadas por la incesante agricultura que se hunde en la noche de los tiempos. Una estrategia central de la preservación ambiental ha sido la conversión de tierras agrícolas en bosques, cuya velocidad ha sido reconocido por organismos internacionales.

Entre 2000 y 2016, con inversiones en su zona oeste de cerca de 914.000 millones de dólares y el desarrollo de más de 300 grandes proyectos, China consiguió que participación de la región en el PBI creciera del 17% al 21%. El desequilibrio comienza a aliviarse. 

Compensación. El desarrollo del oeste que se ha planteado a principios de este siglo y que va a cobrando aceleración busca volver a la igualdad que instaló Mao, y también atiende los problemas fronterizos y los conflictos con las minorías étnicas que están todos en esa China postergada. Asimismo, allí están las mayores reservas de energía.

Por otro lado, cuando se empiezan a avizorar problemas económicos relacionados con el superdesarrollo de China, esos problemas están todos radicados en el este. El desarrollo del oeste puede significar el establecimiento de indispensables mecanismos de compensación a las dificultades del este.

El Global Times indica que “las empresas exportadoras en las regiones orientales de China han estado sufriendo las consecuencias de la pandemia, mientras que las provincias y regiones occidentales, por el contrario, han mostrado una fuerte resistencia y han informado de un crecimiento del PIB superior al nivel nacional en el primer trimestre”.

Finalmente, el medio evalúa que “la campaña de desarrollo occidental, a corto plazo, puede ofrecer un punto de apoyo favorable para los esfuerzos actuales de China de estabilizar el empleo y el mercado del país, entre otras. A largo plazo, también ofrece un nuevo punto de crecimiento para la economía de China en medio del complejo entorno económico mundial tras el brote de Covid19.”

Finalmente, está la BRI, la Iniciativa de la Franja y la Ruta. La dirección física de este proyecto participa sobre todo al oeste. No es si no por y desde el oeste que China se conectará con la Rusia que está al norte, Asia central y Europa que están al oeste, los países de Asia Menor, los países que conforma la Asean y, futuro del futuro, con la India. Si la reforma y apertura fue un segundo momento de la historia del socialismo de China, el desarrollo del este puede significar un movimiento de expansión interna, que a través de la BRI se proyecte hacia la comunidad internacional.

Argentina. Entre los argentinos que parecen estar más al tanto de esta situación, desde hace algunos años en la teoría y en este momento en el terreno, figura el embajador argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, que en estos días habló sobre la inserción de Argentina en el desarrollo del oeste chino en el programa “Diálogos” del canal en español de la red china de televisión CGTN.

Vaca Narvaja explica que en el año que lleva de gestión, ha recorrido 16 provincias poniendo foco en la zona oeste. “Me ha impactado su rica diversidad cultural, en los alimentos, las idiosincrasias, las lenguas”, y explicó que China ha sabido integrar esa riqueza. También destacó la importancia de la ecología en la región, puntualizando el énfasis que pone China en la tecnología para su manejo del medio ambiente.

El embajador habló de la posibilidad de que Argentina instale un consulado en la ciudad de Chengdu, capital de la provincia de Sichuan, que de algún modo es el centro de toda la región del oeste. 

“Lo instalaríamos acompañando la estrategia china de hacer foco en el oeste, explicó. Y no seríamos los únicos: hay 14 consulados abiertos de diferentes países, incluido Chile en Chengdu”,  así como en la vecina ciudad de Chongqing hay un consulado de Uruguay”. 

Agregó el embajador que “por otra parte, la provincia de Sichuan está hermanada con la provincia de Buenos Aires, de manera que viabilizaríamos la relación entre las dos provincias. Además, Chengdu está inserta es un punto clave de la Ruta de la Seda y ofrece perspectivas para el turismo, el intercambio universitario y es un hub logístico. Nuestra intención es que en la visita presidencial que hará Alberto Fernández el año que viene a China, inaugure el consulado en Chengu”.

 Exportaciones. Vaca Narvaja destacó la importancia de Chengdu como hub logístico para las posibilidades exportadoras de las empresas argentinas. El consulado facilitaría la participación en ferias regionales, lo cual va ganando relevancia en la medida en que “China está cambiando sus pautas de consumo, demandando productos no tradicionales que nosotros podemos producir muy bien y en gran escala, como café, lácteos, carnes y otros”, un horizonte que plantea la necesidad de “desarrollar con las provincias una búsqueda inteligente, en el nivel subnacional, de diferentes perfiles de complementariedad”.

También mencionó que “es clave desarrollar una línea aérea directa entre Argentina y China, para lo cual podemos empezar con códigos compartidos. La pandemia nos dejó como experiencia los vuelos directos, entre Buenos Aires, Beijing y Shanghái, con escala en Nueva Zelanda. Chengu entraría en esa ruta como uno de los destinos. Se trata de un trabajo integral, no sólo en el aspecto del tráfico. Podríamos recibir mucho más turismo chino en Argentina y tendríamos un incremento importante en el comercio bilateral.”

Finalmente, Vaca Narvaja recordó que, ante la BRI (Iniciativa de la Franja y la Ruta), la Argentina “ya tomó la decisión de ingresar a esta iniciativa”, a la que calificó como “el plan de infraestructura más grande de la humanidad” y del cual destacó como características la cooperación mutua, la propuesta de un mundo multipolar y el hecho de que ampliará nuestra capacidad exportadora, potenciando así el desarrollo económico.

* Editor de la revista DangDai

Publicado en Perfil:

https://www.perfil.com/noticias/opinion/oeste-de-china-llega-el-futuro-del-gigante-asiatico.phtml

Oeste de China

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios) 

AUDIO:

El director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, presenta la columna de geopolítica del Club de La Pluma, tratando los siguientes temas: -Las recientes elecciones en Alemania. -La proliferación de las armas nucleares. -Su conferencia en el III Congreso Internacional de Seguridad en la Universidad Nacional de Villa María (Arg.) y el -Narcotráfico y Crimen Organizado. 

Y comienza analizando el virtual empate electoral en Alemania, que obliga a forzosas alianzas electorales, con el riesgo cierto de una parálisis del gobierno, sobre todo en las decisiones estratégicas que debe tomar Alemania como motor de la Unión Europea y ante la postura estadounidense de relegar, al priorizar su frente del Pacífico (Anti China), con Inglaterra y socios de la Commonwealth. 

Luego aborda el tema del armamento nuclear global, que alcanza ya la cifra catastrófica de 14.000 explosivos nucleares en manos de las potencias, lo cual aseguraría la destrucción completa de la humanidad si estallase un conflicto. Y pone en tela de juicio los discursos de las grandes potencias sobre limitar sus arsenales y frenar una carrera armamentística, como lo demuestra el tratado AUKUS sobre submarinos nucleares entre EEUU, RU y Australia o el lanzamiento de un misil hipersónico por parte de Corea del Norte. Un panorama mucho más complicado que cuando se disolvió la Unión Soviética, por el reverdecer de conflictos entre las superpotencias, mientras dirimen el poder en el mundo.

A continuación, nuestro director hace una síntesis de su reciente conferencia en el Tercer Congreso de Seguridad de la Universidad Nacional de Villa María -Argentina- sobre Seguridad y Geopolítica. Una disertación que fue más allá de los aparatos represivos del estado y que abarcó la seguridad alimentaria, la seguridad económica, la seguridad industrial, la seguridad informática, y otras múltiples variantes que incluyen la  transcendental problemática del narcotráfico, mientras nos invita a “Conocer al Enemigo”  lo que significa investigar, profundizar y analizar todos los puntos de tan importante cuestión. 

Y para “Conocer al Enemigo”, Carlos rescata un informe suyo del año 2011 sobre la Geopolítica del Narcotráfico, con la desclasificación de 8.000 documentos norteamericanos reservados, sobre la utilidad de las drogas en sus operaciones internacionales, como  en “Las Contras Nicaragüense – Iraní” y nos recuerda que los mismos aviones que llevaban armas y tropas desde EEUU al sitio del conflicto, regresaban cargados de droga. La Mafia y el Crimen Organizado de hoy existe porque los criminales entendieron que era mejor trabajar bajo la protección de las autoridades corruptas.

A continuación nos hace viajar por la historia, con datos y argumentos de cuando Inglaterra desencadenó la Guerra del Opio contra China por el fabuloso negocio de imponer la droga en ese país, y como forma de control, de invasión y de dominio geopolítico. Y la Mafia se empoderó hace 100 años -1920 “Ley seca”- Y También de la coordinación con la mafia con la OSS la futura CIA para controlar los Puertos, los Sindicatos de los mismos para evitar, Huelgas, atentados, sabotajes y espionaje de parte del EJE durante la segunda guerra mundial y el apoyo “Aliado” a la invasión a Sicilia con el guiño de “los capos” locales. También de cómo potenció el cultivo de amapola en México para sus soldados, que se prolongó hasta las guerras de Corea y Vietnam y del traslado de esa producción a Tailandia, Laos y Birmania. (Triángulo de Oro). Y la invasión del mayor productor de Opio del mundo (85%) Afganistán en 2001, donde había 70.000 hectáreas dedicadas a la producción del opio, contra las 250.000 que hay ahora. 

Para finalizar, Pereyra Mele habla de las consecuencias del asunto sobre Latinoamérica, con el 8 % de la población mundial y siendo la región más desigual y más violenta del planeta, con el mayor número de asesinatos por el narcotráfico y del crimen organizado, mientras detalla el drama de cada uno de los países más afectados. 

Y se despide con algunas reflexiones, como que: -El problema está donde se lava el dinero y en los grupos financieros internacionales que lo permiten; -Que “El Enemigo” ha encontrado el modo de operar dentro de una cobertura estatal, -Y que la corrupción es el alma de toda esta espurrea criminalidad organizada, entre otras problemáticas. 

Eduardo Bonugli (Madrid, 03/10//21)

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios, con gran division entre ellos) y los Continentalistas (China y sus socios) 

AUDIO:

La columna semanal del Club de Pluma, que presenta el director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele se inicia con la 6ª edición de la cumbre del CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe) formada por 33 países de la región, y que se celebra en México con la presencia de jefes de estado y cancilleres, y con una estrategia de autonomía y de cambio en la relación de poder entre Latinoamérica y EEUU, alejándose de su tutela y alentado la colaboración, el desarrollo y la armonía entre “los pueblos de las Américas” en igualdad de condiciones y en contraposición a la muy cuestionada OEA. Un organismo al servicio de Washington bajo la doctrina de “América para los norteamericanos”, y que es el brazo comunicante que impone sus intereses en lo que llaman su “patio trasero”. La CELAC fue impulsada en 2011 por el presidente Hugo Chávez, y actualmente la preside México, hasta fin de año, que será cuando Argentina tome el relevo. La cumbre tiene como temas de trabajo a la lucha contra la pandemia y a la recuperación económica. 

A continuación, Pereyra Mele viaja a las antípodas de nuestra región, precisamente al Indo-Pacífico, para abordar un acontecimiento de profunda importancia geoestratégica en el mundo, como lo es el Tratado AUKUS, firmado este 15 de septiembre, por Australia, Reino Unido de la Gran Bretaña y Estados Unidos de Norteamérica , sobre cooperación militar, seguridad y defensa, en su obsesión por frenar la expansión Geopolitica y Comercial de China con estructuras militares y amenazas bélicas. 

Un acuerdo que quiebra la frágil unidad del bloque atlantista porque hunde a Europa en el desprecio, expulsándola del primer nivel internacional, que echa por tierra un contrato de 60 mil millones de dólares entre Francia y Australia para la fabricación de 12 submarinos, y que impone el suyo de 9 submarinos nucleares. Y así, mientras Francia denuncia a los cuatro vientos «la puñalada en la espalda», Europa va entendiendo cómo EEUU abandona a sus socios históricos y también a los de Medio Oriente, cómo quedó demostrado con el desastre de Afganistán. Lo que pone encima de  la mesa la frase de Henry Kissinger de que «PUEDE SER PELIGROSO SER ENEMIGO DE EEUU, PERO ES FATAL SER SU SOCIO». Y cómo en una película de la mafia, donde la premisa es que «NEGOCIOS SON NEGOCIOS», le dice al viejo continente que, desde Obama para aquí, ya no le importa al Imperio y que la deja fuera del «Plan Pacífico».  

Y Pereyra Mele nos recuerda que aparte de este AUKUS, EEUU también tiene el acuerdo del QUAD, una estructura que comparte con Australia, India y Japón y que define la lista exclusiva de sus socios importantes mientras ignora a todos los miembros de la UE, que despiertan así del sueño de volver a tener la importancia de antaño con la llegada de Biden, que se arrepienten por haber congelado el acuerdo de Cooperación con China de 2020 y de postergar su refuerzo militar por fuera de la OTAN con la no creación de un ejército europeo.

Henry Kissinger : «PUEDE SER PELIGROSO SER ENEMIGO DE EEUU, PERO ES FATAL SER SU SOCIO»

Y entonces, nuestro director analiza el proceso del gasoducto Nord Stream 2, entre Rusia y Alemania, recientemente terminado a pesar de la feroz oposición norteamericana, donde al final se impuso el criterio prudente y estratégico de Merkel para la seguridad energética de Alemania, precisamente cuando el precio de la  electricidad en Europa está por las nubes, gracias a “Los Mercados”, a la especulación del monopolio empresarial y a la escasez de gas. 

Y por último, en otra clase de geografía política nos explica que China no se ha sorprendido con este acuerdo, a pesar de sus protestas por la inseguridad que provoca, que Australia ya está padeciendo las consecuencias con la caída de sus exportaciones al gigante asiático, y nos muestra con detalles su respuesta con el “COLLAR DE PERLAS”, una configuración de puertos y bases navales estratégicos que evitan los controles de pasos y estrechos marítimos en manos de EEUU,  para seguir con su proyecto global de comunicación y búsqueda de rutas hacia Europa, África y América del Sur. 

Eduardo Bonugli (Madrid, 19/09/21)

Las Nuevas rutas: 1ra. por Myanmar (la ex Birmania) hacia el Índico y la 2da. la del  corredor China-Pakistán comienza en la ciudad china de Kashgar, en la región autónoma de Xinjiang-Uigur, y se enlaza con el corredor hacia Asia Central, a través de los puertos de Pakistán en el Océano índico. Evitando los cuellos de botella del estrecho de Malaca que es un largo estrecho de mar del sudeste de Asia localizado entre la costa occidental de la península malaya y la isla indonesa de Sumatra, un importante corredor marítimo que une, al norte, el mar de Andamán, mar marginal del océano Índico, y al sur el estrecho de Singapur. Y el Istmo de Kra es una zona estrecha de tierra que conecta la península de Malaca con el continente asiático del sur. La parte este pertenece a Tailandia, mientras que la zona oeste del mismo pertenece a la región de Tanintharyi, Birmania. Al oeste del istmo atopa al mar de Andamán, ente que al este está el golfo de Tailandia.
VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), Palacio Nacional MEXICO D.F.

AUKUS, la nueva asociación militar entre Estados Unidos, Australia y el Reino Unido ha demostrado que lo que le importa a la geopolítica estadounidense ahora ya no es Europa, sino la región del Indopacífico.

El 15 de septiembre, Joe Biden de Estados Unidos, Scott Morrison de Australia y Boris Johnson del Reino Unido celebraron una cumbre trilateral virtual en la que firmaron un nuevo acuerdo para intensificar la cooperación militar entre ellos: AUKUS.Con el acuerdo, entre otras cosas, Estados Unidos pasa a compartir su tecnología submarina de propulsión nuclear con Australia. El objetivo de la medida es intensificar los intentos de contener militarmente a China, aunque los tres países no lo dijeron directamente, señala el analista británico Tom Fowdy.El pacto submarino, sin embargo, implicó que Australia cancelara abruptamente un acuerdo de 43.000 millones de dólares con Francia para la construcción de 12 submarinos nucleares. La decisión provocó la indignación de los altos funcionarios galos, quienes acusaron a Estados Unidos de traición.»Es una verdadera puñalada por la espalda. Hemos entablado relaciones de confianza con Australia. Esta confianza ha sido traicionada. Hoy, estoy enojado por la ruptura de este contrato», declaró el ministro de Exteriores galo, Jean-Yves Le Drian.

El alto cargo consideró que la «decisión unilateral, brutal e impredecible es muy similar a lo que estaba haciendo [el expresidente de EEUU, Donald] Trump».»Las naciones de la Unión Europea no deberían sorprenderse en absoluto de que Estados Unidos las haya engañado de manera tan escandalosa en la búsqueda de sus objetivos geopolíticos y ganancias para su propio complejo industrial militar», considera Fowdy en su columna para RT.Cuando Biden llegó a la Casa Blanca prometió reconstruir los lazos con Europa, recuerda el autor. Se creía ampliamente que «todo lo que había salido mal con los lazos entre la UE y EEUU en los cuatro años anteriores había sido obra personal del errático, peligroso e insufrible presidente anterior». Sin embargo, Fowdy considera que ha sido un error de los políticos europeos creer que la salida de Trump de la Presidencia haría que las cosas volvieran a la «normalidad».Inicialmente, Biden presionó para que Europa se volviera más compatible con su visión contra China, fomentando los lazos transatlánticos. El presidente incluso obtuvo algunos resultados. Semanas antes de que el demócrata asumiera la Presidencia, la UE y China alcanzaron un principio de acuerdo sobre inversión, el cual debería ampliar el acceso de las empresas europeas al mercado chino.

Pekín destaca que la alianza militar AUKUS socava la paz y estabilidad regional

Estados Unidos se opuso al acuerdo en nombre de la «solidaridad transatlántica». Luego, el país norteamericano persuadió a la UE para que impusiera sanciones a funcionarios chinos por supuestas violaciones de los derechos humanos en la región autónoma Uigur de Xinjiang. La medida provocó una respuesta de Pekín, lo que llevó a los parlamentarios de la UE a congelar el acuerdo inversionista con el país asiático.

«¿Qué sucedió? Simplemente que Estados Unidos saboteó los intereses de Europa en pro de los suyos. La UE quizás supuso que las consecuencias repararían los lazos rotos con EEUU, pero no fue así. ¿Por qué? Debido a que el problema no era simplemente Trump, es Estados Unidos en general. Considera que Europa es una herramienta útil para cumplir sus órdenes, pero por lo demás no respeta sus intereses, y menos ahora que la responsabilidad recae en el Indo-Pacífico», escribió Fowdy.Para el analista, el error estratégico de Europa fue creer que, pese a los desacuerdos, Estados Unidos trabajaría activamente con ellos en la cuestión china. El autor considera que la UE no vio lo que era obvio: después de haber tratado de reducir las tensiones con Rusia, EEUU ya no ve al continente como una prioridad.»La minimización de Trump de la OTAN no se debió simplemente a su propia naturaleza errática, sino a una expresión de que los intereses estratégicos de Estados Unidos estaban cambiando y ya no se centrarían en Europa», escribió el columnista.

Zajárova le recuerda a Francia los Mistrales en medio de la ruptura de un acuerdo con Australia

El incidente con los submarinos australianos es «un rudo despertar» que revela que todo ha cambiado y que Estados Unidos ahora ve al llamado Quad —Australia, Japón e India— como sus socios más importantes y mantiene también una «relación especial» con el Reino Unido.»​Europa ya no es estratégicamente relevante para EEUU como lo fue durante décadas, no solo en lo que respecta a Rusia sino también a Oriente Medio. Esta es una nueva era, y la nueva guerra fría no es como la anterior porque el centro de gravedad no está en Europa, está en Asia», consideró Fowdy.El analista sostuvo que si Francia se toma en serio la «autonomía estratégica» europea, entonces debería ponerla en práctica y dejar de inclinarse ante Estados Unidos en la cuestión China. Fowdy pone de relieve que «es claramente obvio que hacer lo que Washington quiere solo beneficia a Estados Unidos a expensas de Europa».

«Si la UE no se organiza y resucita el acuerdo inversionista con China a la luz de esto, y refuerza sus propias capacidades de seguridad, entonces son realmente unos imbéciles«, concluyó Fowdy.

FUENTE Sputnik: https://mundo.sputniknews.com/20210916/eeuu-traiciona-a-francia-con-aukus-y-revela-un-cambio-en-su-estrategia-geopolitica-1116138790.html?utm_source=push&utm_medium=browser_notification&utm_campaign=sputnik_inter_es

16 años promoviendo semanalmente la Geopolitica; Análisis Radial Semanal de Geopolitica de Carlos Pereyra Mele para el Programa: el Club de la Pluma, que conduce el periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo. 

Eje Central:

Sigue profundizandose el conflicto entre Atlantistas (EEUU y socios) y Continentalistas (China y sus socios) conflicto que conduce a un mundo Bipolar nuevamente

AUDIO:

En la columna semanal del Club de la Pluma, el director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, comienza su relato por Brasil, analizando las manifestaciones de Bolsonaro, en su desafío a la Corte de Justicia, avisando que no acataría sus decisiones y promoviendo acciones que evocan el asalto al Capitolio de Washington por las turbas de Trump. 

Luego sigue por Perú, donde sus poderes históricos continúan tratando de eliminar al presidente Castillo con argucias legales y amenazas de juicio político, y con una Constitución creada a medida de ese poder y desde un parlamento que no refleja los votos reales del electorado.

Mientras que desde Venezuela trae datos alentadores por el avance de las negociaciones entre Gobierno y oposición bajo el auspicio de México, y nos habla de los puntos posibles de acuerdos  y de que se podrían suavizar las crueles sanciones de EEUU y la UE, que tanto dolor injusto provoca al pueblo de ese país.

Y termina con la región resaltando las tensiones en el Mercosur por el anuncio del  presidente Lacalle Pou de sus gestiones unilaterales para un Tratado de Libre Comercio China – Uruguay por fuera del organismo. Mientras que China ha propuesto que Argentina ingrese en el grupo BRICS (las potencias emergentes). Dos hechos profundos que darán mucho que hablar. 

Sobre la actualidad internacional, nuestro director se refiere a la noticia de la ocupación íntegra del territorio Afganistán por el poder Talibán, con la toma del Valle del Panshir, y la formación de un gobierno provisional en ese país, recientemente abandonado por EEUU. También nos señala que tres iglesias cristianas (Católica, Ortodoxa y Anglicana) se han unido en un mensaje, con motivo de la cumbre en Glasgow sobre la Protección del Medio Ambiente, pidiendo «LA PROTECCIÓN DE LA CREACIÓN». 

Y entrando en materia de Geopolítica, Pereyra Mele nos ofrece un profundo análisis de LA GUERRA DEL YEMEN, (“una guerra ignorada y olvidada que casi nadie conoce”), empezando por su posición geográfica clave, mientras nos ilustra de los primeros brotes de violencia interna por sus enfrentamientos tribales y religiosos, de los hutíes en el contexto de la disputa entre suníes y chiitas, de la gasolina que echaron las Primaveras Árabes y como la injerencia Saudita la convirtió en una guerra mayor, cruel, terrible. Una guerra que la Petromonarquía y Occidente la imaginaban rápida y fácil y que ahora negocian la paz porque las bazas están virando. Lo que demuestra que el poderío armado, la alta tecnología y los mercenarios contratados, no son garantía de victoria. Y Afganistán es la prueba de esa realidad. 

Y desde esa perspectiva, el politólogo desentraña la estrategia geopolítica de las potencias anglosajonas con el Yemen. Un punto neurálgico y en disputa permanente, ya que sus costas son bañadas por el mar Arábigo, el Golfo de Adén y el Mar Rojo, por el cual fluye gran parte del tráfico marítimo internacional, que condiciona el comercio mundial y el paso de los petroleros del Golfo Pérsico hacia el Mediterráneo. Y por eso menciona al estrecho de Bab el-Mandeb, en el golfo de Adén, como un paso tan importante como el canal de Suez o el estrecho de Gibraltar y que depende del Yemen. Y de allí surgen los motivos de este conflicto que ya es otra GUERRA PROXY, tal cual las definió en el programa anterior. 

Entretanto nos confirma que corren mejores aires para  Siria, Irán y el Líbano luego de guerras impuestas, del sembrado de terroristas y de bloqueos sangrantes para sus pueblos. Todo por parte del imperio anglosajón. Lo que da paso a un cambio sustancial en las relaciones del poder en la región, donde Irán se confirma como potencia regional, que en Siria la guerra va llegando a su fin y que se neutraliza el hostigamiento al Líbano ante la rotura del embargo impuesto por Occidente. Unas realidades que dejan de ser propicias para los intereses de Washington y sus aliados.

Y termina reflexionando que: “El desafío geopolítico mundial se juega también en la península arábiga y con la guerra de Yemen.” 

Eduardo Bonugli (Madrid, 12/09/21)

Yemen entre Mar Rojo y Mar Arabigo: Tres Pasos claves: 1 Ormuz -Golfo Persico/Mar Arabigo – 2 Estrecho de Bab Al-Mandeb Mar Arabigo/Mar Rojo –3 Canal de Suez Mar Rojo/Mar Mediterraneo
Bab al Mandeb es una pieza importante en la disputa geopolítica regional. Por un lado, da acceso a los recursos minerales de África oriental, codiciados por economías occidentales, árabes y asiáticas. El continente africano reúne el 57% del cobalto del mundo y su suelo representa el 24% del terreno cultivable del planeta. Por otro lado, el estrecho es un chokepoint, un cuello de botella fundamental en el comercio global: alrededor del 10% del petróleo mundial que se transporta por mar pasa por aquí. Cualquier incidente en estas latitudes tiene consecuencias directas en los mercados internacionales.

El nuevo mundo que se está configurando, con un orden internacional cambiante y complejo, que nos está brindando oportunidades impensadas a la Argentina. Si nuestras dirigencias no perciben y entienden este momento del mundo y tratan de insertar a nuestro país en él inteligentemente para evitar que se nos caiga encima, habremos perdido una oportunidad histórica que no estará disponible para siempre. No es posible pensar hoy un modelo de país, si no pensamos dentro de este nuevo mundo que está emergiendo. Perón maestro y estadista nos enseñaba que la política internacional es la política en grande, seria y que la política nacional son asuntos de entrecasa; tan invertido esta esté orden de la cosa hoy, que prácticamente la política ha desaparecido sepultada por la anti política que es el reino de la no idea y su práctica es el vuelo gallináceo y gana el que mejor lo practica. Los argentinos debemos darnos a la tarea de recuperar la política como la más alta expresión de la ética humana puesta al servicio del bien común. como un acto de servicio hacia los demás, para superar nuestra viciosa «politización» y conquistar una «cultura política» como nos enseñaba Perón. Laboriosa empresa, pero necesaria para poder volver a pensar en grande y poder recuperar la grandeza. Dr. Antonio Mitre Colaborador de Dossier Geopolitico

POLITICA INTERNACIONAL

Los EEUU luego de su retiro y abandono de Afganistán y del Asia Central, está reformulando su presencia y su rol en el Asia Occidental para preocupación de sus aliados regionales, en particular Israel. Los estados de la región deberán readaptarse a esta nueva situación. Con el telón de fondo de la debilidad y decadencia progresiva, la nueva administración estadounidense, se enfoca en los intereses vitales de los EEUU.

EEUU está buscando un nuevo lugar en el mundo que emerge, tratará de adaptarse a él y para ello hará los cambios necesarios y posibles. Entre otras cosas no se empantanará en conflictos abiertos en ninguna región.

APARECE LA DOCTRINA BIDEN EL GOLFO PÉRSICO

Por M.K.Bhadrakumar 13 de setiembre

Los signos incipientes de una reducción de Estados Unidos en Arabia Saudita han aparecido en una serie de movimientos en las últimas dos o tres semanas. En una vía paralela, la Administración Biden tiene en cuenta que el nuevo gobierno iraní está regresando a la mesa de negociaciones en Viena sobre cuestiones nucleares.

Las maniobras interconectadas se basan, indirectamente al menos en este punto, en un alivio esperado de las tensiones entre Estados Unidos e Irán en un futuro concebible.

Sin duda, la Administración Biden acaba de hacer una gran declaración en sus estrategias regionales en Asia occidental al eliminar el sistema de defensa antimisiles más avanzado de EE. UU. y las baterías Patriot desplegadas en Arabia Saudita para contrarrestar a Irán y enfrentar los ataques aéreos de los rebeldes hutíes de Yemen. 

Riad ya mostró su disgusto al cancelar abruptamente una visita programada al reino del secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin. 

El Pentágono citó «problemas de programación» como la razón, pero el aplazamiento se produjo cuando Austin ya estaba en la región en ruta a Arabia Saudita después de visitar Qatar, Bahrein y Kuwait. 

La agencia de noticias oficial de Irán, IRNA, se ha apresurado a concentrarse en nuevos movimientos de Estados Unidos en Arabia Saudita. Un comentario de IRNA el domingo se titula ¿Tiene la intención de EE.UU. retirar 20 mil soldados de Arabia Saudita? 

Mientras tanto , en una intrigante coincidencia el viernes, la Administración Biden desclasificó un informe del FBI de 16 páginas que vinculaba a los secuestradores del 11 de septiembre con ciudadanos saudíes que vivían en Estados Unidos. La NPR ha comentado: 

«El informe parcialmente redactado muestra una relación más estrecha de la que se conocía anteriormente entre dos saudíes en particular, incluido uno con estatus diplomático, y algunos de los secuestradores … Si bien la Comisión fue en gran medida incapaz de vincular a los hombres saudíes con los secuestradores, el documento del FBI describe múltiples conexiones y llamadas telefónicas   Aunque el documento del FBI no establece ningún vínculo directo entre los secuestradores del 11 de septiembre y el gobierno de Arabia Saudita en su conjunto, valida los argumentos en esa dirección y, junto con la evidencia pública recopilada hasta la fecha, proporciona un modelo de cómo Al Qaeda operaba dentro de los EE. UU. con el apoyo activo y consciente del gobierno saudí. Lee mas

Curiosamente, secciones muy influyentes de los medios de comunicación iraníes también han informado que Estados Unidos ha evacuado tres de las 13 bases militares estadounidenses en Siria en las últimas semanas.

Por supuesto, estos son los primeros días, pero si la retirada de las tropas continúa, los principales perdedores serán los kurdos sirios, pero los estados regionales también serán llamados a adaptarse a las nuevas realidades en Siria. 

Teherán seguirá de cerca los desarrollos posteriores. En pocas palabras, en este complejo telón de fondo regional, el nuevo gobierno del presidente Ebrahim Raisi ha demostrado una notable flexibilidad para resolver el desacuerdo sobre el retraso en el mantenimiento del equipo de monitoreo en el sitio nuclear de Natanz por parte del Organismo Internacional de Energía Atómica [OIEA]. 

La declaración conjunta emitida en Teherán el domingo después de una visita del Director General del OIEA, Rafael Grossi, dice: “Los inspectores del OIEA pueden reparar el equipo identificado y reemplazar sus medios de almacenamiento que se mantendrán bajo los sellos conjuntos del OIEA y AEOI en la República Islámica. de Irán. La forma y el momento los acuerdan las dos partes «. 

Esto puede parecer un paso de bebé incipiente, pero la discordia amenazó con convertirse en una bola de nieve en un enfrentamiento en la Junta de Gobernadores de 35 naciones de la AIEA esta semana en el que las potencias occidentales amenazaban con buscar una resolución que criticara a Irán por obstaculizar al organismo de control de la ONU. (El tono optimista de los comentarios públicos de Grossi en Teherán fue evidente).

De hecho, también tiene un significado más profundo, ya que no solo es la primera decisión importante de política nuclear adoptada por Raisi, sino que transmite una actitud constructiva. De hecho, Teherán se está preparando para la demorada séptima ronda de negociaciones nucleares en Viena. 

Lo que hace que esto sea aún más significativo es que Rusia se está coordinando con Estados Unidos para instar a Irán a avanzar en esta dirección. El viceministro de Relaciones Exteriores, Sergey Ryabkov, dijo en Moscú el jueves que las formas de reanudar las negociaciones en Viena se discutieron durante las conversaciones con el enviado especial de Estados Unidos para Irán, Robert Malley, del 8 al 9 de septiembre. Él dijo,

«Es importante destacar que compartimos con los estadounidenses un entendimiento sobre la necesidad de seguir avanzando en las negociaciones, que deben reanudarse desde el punto en que las partes se detuvieron en junio, cuando se interrumpieron las negociaciones».  

Rusia, por supuesto, va a la liga extra para navegar las conversaciones nucleares. En un gesto significativo hacia el gobierno de Raisi, Rusia ha asignado un préstamo de $ 5 mil millones a Irán para el desarrollo de la planta de energía nuclear de Bushehr y algunos otros proyectos. 

Curiosamente, estos proyectos incluyen la implementación del ferrocarril Incheboron-Zahedan, que se espera que conecte la red ferroviaria rusa con los puertos iraníes de Bandar Abbas y Chabahar. 

Sin duda, Rusia está ayudando a que los planes de Irán emerjan como un centro de conectividad regional entre el Golfo Pérsico, África y Asia del Sur con Afganistán y Asia Central y Eurasia en general.  

Es una estimación realista de que Moscú está en el proceso de mejorar la trayectoria de la cooperación económica ruso-iraní a la espera del levantamiento de las sanciones contra Irán.  El presidente Putin no aspirará a ser el nuevo alguacil en Asia occidental ni se complacerá con la grandilocuencia, pero Moscú tampoco dejará de notar que la retirada de Estados Unidos de Arabia Saudita y un acuerdo nuclear entre Estados Unidos e Irán pueden abrir nuevas vías para promover los intereses rusos. . 

Por lo tanto, si bien una forma de ver el nuevo acuerdo de cooperación militar ruso-saudí firmado en Moscú el 24 de agosto podría ser que Riad está mostrando su voluntad de diversificar sus relaciones de defensa más allá de su enfoque desde hace mucho tiempo en los EE. UU., Sin lugar a dudas, también sirve como un signo de crecimiento entre el Kremlin y el reino.

El acuerdo fue firmado por el viceministro de Defensa de Arabia Saudita, el príncipe Khalid Bin Salman, que también es el hermano menor del poderoso príncipe heredero Mohammed bin Salman.   

Todos estos sucesos sucesivos a lo largo de las últimas dos semanas «posteriores a Afganistán», tomados en conjunto, presagian vientos de cambio que soplan en la región del Golfo. 

Parece que la Doctrina Biden está fuera de la mesa de dibujo, una característica clave es el enfoque en los intereses nacionales vitales de Estados Unidos. 

Fundamentalmente, el patrón que está surgiendo en el llamado Gran Medio Oriente es que Estados Unidos está buscando un nuevo lugar en el mundo y no se empantanará en conflictos abiertos en ninguna región. 

Dicho de otra manera, aparte de las perspectivas para la conclusión de un acuerdo entre Estados Unidos e Irán sobre el tema nuclear claramente mirando hacia arriba, está apareciendo en el horizonte todo un espectro de opciones estratégicas. 

Los informes de Teherán sugieren que el nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir-Abdollahian, planea visitar Nueva York a finales de este mes para asistir a la Asamblea General anual de la ONU. Tradicionalmente, es una ocasión en la que la diplomacia de Irán dispara todos los cilindros.

Amir-Abdollahian no es ajeno a los funcionarios estadounidenses.  Es un diplomático experimentado que trabajó para el Ministerio de Relaciones Exteriores de 2005 a 2016. Había participado en las conversaciones con Estados Unidos en 2007 en Bagdad, lo que lo llevó a uno de esos raros momentos en los que las dos partes pudieron desarrollar un terreno común y una relación de trabajo pragmática en Irak basada en la convergencia de intereses.