El director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele, analizó en ‘GPS Internacional’ el trasfondo de la caída de importantes acuerdos de contención sobre misiles y los nuevos actores del panorama global.

AUDIO:
https://video.img.ria.ru/Out/MP3/20190420/2019_04_20_GPSINTERNACIONALdone_tiijtlxh.tpz.mp3

«Es evidente que todas las estructuras y organismos que se han creado pos Segunda Guerra Mundial y durante la Guerra Fría ya son hoy papel mojado porque las realidades geopolíticas son distintas», consideró Pereyra Mele.

«La caída de los acuerdos firmados durante los últimos momentos de lo que era la Unión Soviética hoy en día ya carecen de valor y todo esto se enmarca además en el crecimiento de potencias que no estaban en la lista de los que podía alcanzar esos niveles como China», agregó.

«Por supuesto que no se puede dejar de lado a la India, a Irán y las nuevas estructuras regionales que juegan influencia. Otro país que tiende a crecer fuertemente es Corea del Sur que luego de los acuerdos con el Norte se va a incorporar más temprano que tarde a los grandes jugadores globales», sostuvo el analista.

Más información: El G7 y los BRICS se enzarzan en una pelea mortal

«Egipto no va a participar de la creación de esa especie de «OTAN árabe» bajo tutela de EEUU, lo cual es un golpe casi de muerte a esa estructura, porque si no participa Egipto a Arabia Saudí no le alcanza para ser el hegemón de ese grupo», subrayó Pereyra Mele. «Europa es un gigante económico y un enano político. Su política exterior fue determinada siempre por EEUU y fue a la zaga de las proyecciones geopolíticas norteamericanas. Todo eso se viene rompiendo y debemos recordar que prácticamente el G7 ha dejado de existir y ha sido por el principal socio que es EEUU», añadió.

«Este mundo que hoy vivimos no tiene absolutamente nada que ver ni se lo puede medir o analizar con conceptos de principios del siglo XXI y mucho menos de la década del ’90», dijo Pereyra Mele en entrevista con Sputnik y radio M24.

Además en ‘GPS Internacional’, nos adentramos en los temas que se trataron durante la VI Conferencia Global sobre Agricultura Familiar en el marco del Foro Rural Mundial que tuvo lugar en la ciudad española de Bilbao durante el mes de marzo. «En el evento se congregaron organizaciones de productores familiares de carácter nacional o regional. Es parte del proceso preparatorio del lanzamiento de la Década de la Agricultura Familiar que será en mayo en Roma por parte de FAO y el FIDA que Naciones Unidas indicó como responsables de instrumentarlo», explicó Fernando López, directivo de la Comisión de Fomento Rural de Uruguay. «Hay temas como el acceso a la tierra, las oportunidades para los jóvenes y el derecho de las mujeres en el medio rural, la formación y capacitación no solo productiva sino para incidencia política y la necesidad que los países implementen políticas públicas a favor de la agricultura familiar», agregó.

«Esto sirve para visibilizar el aporte que hace la agricultura familiar a la producción sostenible y a la soberanía alimentaria en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible», dijo López.

En el cierre, repasamos el diálogo con el historiador argentino Aldo Duzdevich, exmilitante del grupo Montoneros durante la década del ’70, que es el autor del libro «Salvados por Francisco» y con el diseñador gráfico y fotógrafo uruguayo Alejandro Sequeira acerca de su nuevo trabajo «Hierbas: medicinales y aromáticas del Uruguay».

Y como en cada programa el repaso de las noticias destacadas de América Latina y un informe sobre el panorama mundial.

Análisis semanal de Geopolitica por Carlos Pereyra Mele para el equipo del Club de la Pluma, que conduce el Periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo:

Temas:

  • La Geopolitica en el SXXI – Que es?
  • Porque es una Ciencia sin cátedras
  • Historia de la Geopolitica
  • Potencias Continentales Ratzel Haushofer
  • Potencias Marítimas MacKinder – Mahan – Spykman
  • Tendencias en el SXX I y II Guerra Mundial y Guerra Fría
  • 90s Guerras Geopoliticas inter capitalistas
  • Primer cuarto del siglo XXI: Todas guerras por recursos y áreas geopoliticas importantes para el poder del Hegemón decadente: EEUU
  • Como todo esto se refleja en la Guerra híbrida contra Venezuela – Como el petróleo sigue siendo la causa de esta guerra no declarada formalmente – Rol del Petro-Dólar y su crisis
  • Hoy la Geopolitica como la debemos entender

AUDIO:

Temas:

1 Cambios Geoeconómicos que serán Geopoliticos en Eurasia; China y Rusia se alejan del sistema financiero dependiendo del Dólar

2 Turquía es agredida por EEUU e Israel por su nuevo acercamiento con Rusia/Irán/Qatar

3 Ucrania cambios políticos podría perder Poroshenko

4 UE y Gibraltar Europa la Considera «Colonia» y ello beneficia a Argentina por tema de de los archipiélagos de Malvinas

5 Corte de Justicia Internacional de la Haya, declara que el archipiélago de Chagos correspondiente a Mauricio debe ser reintegrado por Inglaterra, que también influye favorablemente a los intereses de argentina con relación al conflicto con Inglaterra por Malvinas

6 La Triple frontera -Argentina, Brasil, Paraguay- vuelve a la palestra por el interés de EEUU e Israel intentando instalar la «idea» de que allí existen grupos Terroristas Internacionales


Análisis semanal de Geopolitica por Carlos Pereyra Mele para el equipo del Club de la Pluma, que conduce el Periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo:

Temas

MI REFLEXIÓN PARA ESTE 2/4/2019

Una recordación de la importancia para entender y recordar cuales son los enemigos históricos de Argentina y la dependencia geopolitica y geoestrategica actual luego de la derrota en la Guerra del Atlántico Sur que desencadenó la Dictadura cívico-militar en 1982. Luego continuaron y profundizados bajo los gobiernos civiles de bajo desarrollo de calidad institucional y representación popular

PORQUE ES IMPORTANTE GEOPOLITICAMENTE Y GEOESTRATÉGICAMENTE LOS ARCHIPIÉLAGOS DEL ATLÁNTICO SUR; ANTÁRTIDA Y MAR ARGENTINO

  1. Italia y la Ruta de la seda, primer país del G7 que firma que firma acuerdo con China
  2. Foro de Gobernanza Global en Francia XI Jinping + Macron y con invitación a Merkel y Junker
  3. EEUU atosiga a China con 5000 combatientes Igures del ISIS (musulmanes de China); y una reunión en Washington el 27/3 de Pompeo con Igures.
  4. La Guerra del 5G

#DossierGeopolitico DG: Desde el 2003 sostenemos en todos nuestros informes, documentos y entrevistas que EEUU inició un periodo de retroceso en su poder global alcanzado a fines del siglo XX, y desde el 2010 desde Dossier Geopolitico como equipo -con un mundo académico y de las “consultoras’ que ignoraban y no transmitían que se había iniciado un periodo de grandes cambios- que se transitaba hacia un periodo de multipolaridad regionales importante -con una China que no aplicará el modelo imperial norteamericano de control y dominio- y de nuevas alianzas totalmente distintas a las que se habían mantenido por casi 60 años, y que los estados-naciones lejos de desaparecer seguirán por un largo periodo dominando la escena de la política internacional, como también teniendo influencia en sus vecinos los países importantes tanto económico como tecnológicos, NO veremos un mundo bipolar, como el que conocimos en la guerra fría. Que sostuvimos y sostenemos.

En Octubre de 2018 el catedrático de Harvard Stephen Walt, en la Revista Foreign Policy, reconoce que hace 15 años pocos analistas sostenian estos cambios que hoy se concretan.  A confesión de partes, relevo de pruebas.

Prof. Lic. Carlos Pereyra Mele Director de DG

¿A qué tipo de mundo nos dirigimos? POR STEPHEN M. WALT                                                                  

El orden mundial liberal nunca existió realmente. La política de competencia entre grandes potencias está aquí para quedarse.

Fuente: https://foreignpolicy.com/2018/10/02/what-sort-of-world-are-we-headed-for/

En general, el mundo de 2025 será uno de «multipolaridad no equilibrada«, el orden de hoy no es liberal (varios actores clave rechazan los ideales liberales), y el de 2025 tampoco lo será. Los Estados Unidos seguirán siendo el actor más importante del planeta. Pero su margen de superioridad será más pequeño de lo que solía ser, y el país aún enfrentará problemas fiscales a largo plazo y profundas divisiones políticas. 

China será la potencia número 2 del planeta (y superará a Estados Unidos en algunas dimensiones), seguida por otros jugadores importantes (Alemania, Japón, India, Rusia, etc.), todos ellos considerablemente de menor jerarquía que los otros dos  principales.

En este sistema, los Estados Unidos deberán ser más selectivos al hacer compromisos y utilizar su poder en el extranjero. El deseo central de rehacer el mundo, que caracterizó la era unipolar, se desvaneció mucho antes de que Donald Trump se convirtiera en presidente de los Estados Unidos. No volverá, no importa cuántos neoconservadores nostálgicos intenten rescatarlo.

Como ya está claro, la política exterior y de defensa de los Estados Unidos se centrará principalmente en contrarrestar a China. Además de intentar desacelerar los esfuerzos de China para obtener una ventaja en una serie de tecnologías emergentes, los Estados Unidos también intentarán evitar que Beijing establezca una posición dominante en Asia

En la práctica, esto significará mantener, profundizar y, si es posible, expandir los lazos de la alianza de Estados Unidos allí, incluso cuando China trata de expulsar a los Estados Unidos y traer a sus vecinos a su propia esfera de influencia. Mantener la posición de los Estados Unidos en Asia no será fácil,  los aliados asiáticos de Estados Unidos desean preservar sus lazos económicos actuales con China, y algunos de esos aliados no se agradan mucho entre sí. Mantener esta coalición unida requerirá una hábil diplomacia de los Estados Unidos, que últimamente ha escaseado, y el éxito no es en absoluto seguro.

  • Pero como los teóricos realistas han estado advirtiendo durante más de 15 años, la rivalidad emergente entre los Estados Unidos y China será la característica más importante de la política mundial durante al menos la próxima década y probablemente mucho más allá de eso.

A pesar de los temores alarmistas sobre el resurgimiento de Rusia no representa la misma amenaza para Europa que la Unión Soviética. El caso de un importante compromiso de los Estados Unidos con la región será, por lo tanto, mucho más débil. Lo más revelador es que los miembros europeos de la OTAN gastan entre tres y cuatro veces más de lo que Rusia hace en defensa cada año. Pero manera muy poco efectiva, pero lo que Europa necesita es una reforma de la defensa, no subsidios de los EE. UU y los problemas reales que enfrenta Europa, como defender sus fronteras contra la inmigración no regulada, no son cosas que Estados Unidos pueda resolver.

Además, Europa y la OTAN simplemente no tendrán mucho rol que desempeñar, ya que Washington se centra cada vez más en Asia. Los países europeos no querrán renunciar a los lazos económicos rentables con China y no estarán dispuestos a hacer mucho para equilibrar a Beijing.

Si la competencia chino-estadounidense se calienta, como lo espero, este problema será otro punto de fricción entre los Estados Unidos y sus socios europeos. Trump podría acelerar este proceso si continúa golpeando a Europa en el comercio e imponiendo tontamente sanciones secundarias a los estados europeos que intentan mantener vivo el acuerdo nuclear de Irán por ejemplo, pero incluso si no lo hace, la lenta dilución de las relaciones transatlánticas continuará. No hay nada sorprendente o trágico en esto, por cierto; es simplemente la consecuencia gradual pero inevitable del resurgimiento de Asia.


Andrew Korybko

Enrique J. Refoyo

Entrevista realizada a Andrew Korybko, autor del libro recientemente publicado en español “Guerras Híbridas: Aproximación adaptativa indirecta al cambio de régimen”, por el traductor de dicha obra, Enrique J. Refoyo:

1. Muchas gracias por investigar y escribir el libro “Guerras Híbridas: Aproximación adaptativa indirecta al cambio de régimen”.

Gracias, Enrique, y gracias por traducirlo al español.

2. ¿Cuál fue su inspiración para comenzar el libro? ¿Cómo empezó?

Siempre he estado interesado en las operaciones de cambio de régimen de EEUU por todo el mundo, y según llegaba a la mayoría de edad en los EEUU, empecé a darme cuenta de esta tendencia denominada “Revoluciones de Color”. Estaba fascinado por cómo supuestamente la gente podría fluir a las calles y derrocar a su gobierno, y supe que había más detrás de la historia de lo que estaba siendo públicamente revelado. Aunque los medios de comunicación estadounidenses están fuertemente censurados en términos de lo que ellos informan y no informan, nunca olvidaré la lectura de pasajes muy cortos en los periódicos sobre cómo Rusia oficialmente acusaba a los EEUU de orquestar aquellos acontecimientos para derrocar a gobiernos no-complacientes y alcanzar fines geopolíticos.

Empecé a investigar las revoluciones de color cuando estaba en el instituto y conseguí buen acceso a internet desde los ordenadores de la biblioteca del instituto. En aquel tiempo, la única fuente rusa que pude encontrar fue la versión en inglés de RIA Novosti, ahora por casualidad parte de la marca Sputnik en la que actualmente estoy empleado. No pude encontrar tanta información como me gustaría haber podido encontrar, pero aun así fue una experiencia muy provechosa y reveladora. También, era entonces un chico en el instituto y estaba usando principalmente los ordenadores de la escuela para mi investigación, así que no tenía mucho tiempo para dedicarle a esta actividad de todos modos.

No obstante, estaba profundamente conmovido por la materialización que los servicios de inteligencia de EEUU podían fabrican cambios de régimen “no-violentos” usando masas de personas manipuladas y seleccionando provocadores, y cuando fue mi momento para optar a una universidad y elegir lo que yo quería estudiar, decidí comenzar Estudios Internacionales (enfocándome en Europa oriental) en la Universidad Estatal de Ohio. Más tarde añadí otros estudios, Relaciones Internacionales y Diplomacia, y Lenguaje Ruso, pero estaba principalmente movido a aprender más sobre las estrategias de EEUU hacia Rusia para predecir mejor cómo podrían desarrollarse en el futuro próximo y de este modo algún día estar –con suerte– en una posición para preparar las contramedidas que lo bloqueen.

Siempre tuve este sueño en mi mente de que algún día me mudaría a Rusia y ayudaría al país con el que me siento tan próximo y tan profundamente relacionado, así que me figuré que mí educación en esos ámbitos podría ser útil en mi preparación para dicho sueño. Hablé más en profundidad sobre mis motivaciones personales para mudarme a Rusia como parte de una entrevista exclusiva que di a mi amigo serbio y compañero periodista, Stefan Karganovic la pasada primavera, y le invito a usted y cualquiera de los lectores interesados que la lean en el blog The Saker, donde fue publicada la versión en inglés.

Volviendo a comentar mi inspiración para escribir el libro Guerras Híbridas, aunque, el segundo momento más importante llegó durante los acontecimientos de 2011 conocidos como “primavera árabe”, que inmediatamente reconocí como una serie de revoluciones de color, pero que de manera interesante se convirtieron en unas pocas notorias guerras no-convencionales. Ya era de algún modo familiar con la guerra de guerrillas e insurgencias, habiendo estudiado estos casos de manera independiente en mi tiempo libre cuando la oportunidad lo permitía, no fue hasta 2014 cuando finalmente saqué mis conclusiones y me di cuenta que los EEUU estaban desarrollando una estrategia planificada de convertir las revoluciones de color fallidas en guerras no-convencionales.

La chispa creativa para mi inspiración llegó durante una conversación que estaba teniendo con una de mis cercanas colegas sirias, Hamsa Haddad, en la Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú (IERIM), donde estaba realizando mi máster en Relaciones Internacionales en aquel tiempo. Estuvimos hablando sobre los acontecimientos de cambio de régimen del Euromaidán en aquel tiempo y ella casualmente remarcó que no era una sorpresa para ella el hecho de ver a aquellos “manifestantes” derribando estatuas de Lenin y destruyendo su propia herencia. Tales cosas la recordaban a lo que estaban haciendo los “rebeldes de la oposición moderada” por todo su país.

Y ahí es cuando me alcanzó, pues lo que estaba ocurriendo en Ucrania era esencialmente la estrategia de apertura del mismo tipo exacto de campaña que la precedida en Siria, y que allí había muchas similitudes estructurales estratégicas entre estas dos operaciones estadounidenses de cambio de régimen. Al instante me dispuse a expandir esta conclusión tan profundamente como pudiera, al identificar los elementos comunes ocultos entre ambas para ver si sería posible postular una teoría operativa que pudiera ser usada en el análisis de estos casos y de los casos futuros. Por fortuna, estando en el programa de máster del IERIM, tenía que escribir una tesis antes de graduarme, así que pude persuadir a mi supervisor para que me permitiera dedicarme convenientemente a esta idea.

Mi libro, o en aquel tiempo, tesis, me llevó solamente una semana escribirla físicamente, pero requirió la investigación casi continúa durante un periodo de 6 meses para prepararla mediante la concurrencia de todas las fuentes necesarias y organizarlas en un modo cohesionado. Además, fui enormemente ayudado por el factor de que había estado investigando y analizando las relaciones internacionales durante muchos años en ese sentido, así que ya estaba muy familiarizado con una variedad de conflictos aparentemente separados y con las operaciones de cambio de régimen por todo el mundo, que me ayudaron a conectar más fácilmente los puntos al observar las relaciones ocultas entre aquellos acontecimientos. Por último, me convencí de la veracidad de mi teoría de la guerra híbrida, y trabajé incansablemente día y noche para completar mi trabajo.

Sin embargo, no estaba satisfecho cuando acabé, dado que sabía que escribir una tesis de máster para una universidad de élite no cambiaría nada en absoluto a menos que el público general tuviera una oportunidad para familiarizarse con mi trabajo. Y de este modo me embarqué en una búsqueda para publicar el libro por mí mismo. Inicialmente no tuve éxito, pero nunca perdí la esperanza debido a cuán entusiasmado me sentía por exponer la estrategia de la guerra híbrida de EEUU al resto del mundo. Por un golpe de lo que sinceramente creo que a posteriori es una suerte gracias a Dios, un profesor del IERIM que no conocía de nada, Denis Degterev, me contactó a través de mi universidad para pedirme que contribuyese en su revista académica porque había oído muchas buenas cosas sobre mí entre sus compañeros profesores.

Esto fue en abril de 2015, casi 10 meses o así, que terminé de escribir Guerras híbridas. Respondí que estaba muy interesado en enviarle el texto, y también le envíe unos cuantos enlaces a algunos de los trabajos que ya había publicado en internet por aquel tiempo. Tras echarles un vistazo, el profesor Degterev sugirió que contactase con su colega en la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos (URAP), George Filimonov, que es muy activo en la actividad e investigación anti-maidán (contra-revoluciones de color). Fue a través de George y su Instituto de Investigaciones y Predicciones Estratégicas donde fui capaz finalmente de publicar Guerras Híbridas y de ahí en adelante presentarlo al resto del mundo, y le estaré eternamente agradecido, así como al profesor Degterev por hacer realidad este sueño.

A fin de cuentas, sin embargo, si no hubiera sido por la inspiración de Hamsa, probablemente nunca habría formulado mi teoría en primer lugar, así que también le doy a ella mi más sincero agradecimiento por jugar tan crucial papel en su desarrollo.

3. ¿Cómo definiría “revolución de color” a alguien que no supiera nada al respecto? ¿Cómo de importantes son las “revoluciones de color” para una persona cualquiera? ¿Qué consecuencias existen para la gente corriente?

Las revoluciones de color pueden ser generalmente concebidas como “protestas populares” externamente organizadas o desencadenadas desde el extranjero que apuntan a derrocar al gobierno a través de medios supuestamente “pacíficos”. En realidad, las revoluciones de color tienen una tendencia alarmante de evolucionar hacia el terrorismo urbano y los disturbios, pero la percepción occidental de estos movimientos es que son “pacíficos” y que cualquier violencia por su parte es debida a las “provocaciones” del gobierno. De nuevo, la realidad de la situación refuta esta caracterización, dado que la violencia de la revolución de color es desencadenada por los mismos “manifestantes”, tanto a través de una muchedumbre que se ha formado como resultado de la psicología de masas siendo transformada en el arma que esperaban los organizadores, o a través de unos pocos provocadores en su lado.

Lo que es más aterrador sobre las revoluciones de color es que parecen ser “legítimas protestas populares”, pero esto solo es la narrativa superficial inicialmente promovida por los principales medios de comunicación occidentales. Es un sentimiento muy incómodo pensar que miles, algunas veces cientos de miles de personas puedan tomar parte en un evento que en un modo u otro está organizado por elementos extranjeros. Esto no significa que todo el mundo que levanta una pancarta y marcha a través de una plaza de la ciudad sea un “agente extranjero”, sino solo que están siendo manipulados como “tontos útiles” ayudando a lograr el mismo gran objetivo estratégico hacia el que elementos exteriores están apuntando.

Las revoluciones de color por tanto funcionan mejor cuando hay algún grado de insatisfacción genuina hacia un gobierno objetivo o parte de su agenda, y esto ayuda a atraer “naturalmente” más gente al incipiente movimiento de cambio de régimen al reducir el “coste de entrada” para ganar acceso a la confianza de sus conciudadanos. Si la gente ya está cuestionándose a su gobierno, tanto por sí mismos como debido al precondicionamiento informativo desde elementos anti-gubernamentales (sean extranjeros o nacionales), entonces ya son mucho más receptivos al tipo de retórica lanzada por los organizadores de la revolución de color y sus patrocinadores.

Algunas veces exigen abiertamente el derrocamiento del gobierno mediante su “dimisión”, o llegan progresivamente a ese punto y revelan su verdadera intención hacia el cambio de régimen después de que una provocación planificada de antemano incite a que el Estado responda con la fuerza contra los “manifestantes”. En vista de lo que ellos entonces venden como “violencia y opresión estatal”, siguen argumentando que el gobierno ha “perdido legitimidad” y por tanto debe “dimitir”, aunque cada resultado de dimisión es mucho más fácil de decir que de hacer y es “incentivada” por el terrorismo urbano, por una grieta entre el gobierno y la élite de seguridad, y por supuesto, por la intervención extranjera – sea de tipo convencional militar como en Libia, sea de organización política encubierta como en Ucrania, o sea mediante grupos terroristas como en Siria.

Lo que empieza como una “protesta popular” podría de este modo evolucionar hacia una guerra civil y/o internacional dependiendo de las circunstancias, escenarios, y motivaciones involucradas. Mientras que la guerra total es una consecuencia muy común de las revoluciones de color fallidas en sociedades no-occidentales, las occidentales se enfrentan a riesgos similares, no obstante, de una intensidad menor y principalmente organizadas a lo largo de líneas de conflicto social-racial. En algunos casos, los EEUU pueden intentar el comienzo de desestabilizaciones de revolución de color a pequeña escala en Estados “aliados” tales como Alemania y Francia como presión para que sus gobiernos se alejen de acuerdos pragmáticos con Rusia, o en algunos casos, servir como un pretexto para represiones totalitarias.

Lo que es importante tener en mente, sin embargo, es que no toda protesta es una revolución de color, pero toda revolución de color entraña una protesta. Hay ciertamente muchas protestas legítimas que toman lugar por todo el mundo y no tienen rastro de intermediación extranjera en ellas (sea a través de agencias de inteligencia, “ONG’s”, o de otro modo), pero al mismo tiempo, el momento en que una protesta se conecta a una agenda extranjera, entonces adquiere la tonalidad de una revolución de color, sin importar si es de alcance total (tales desestabilizaciones son empleadas algunas veces como un “examen” para probar la reacción y defensas del Estado).

Aun así, una revolución de color es más fielmente definida como una “revolución popular” preparada por occidente contra un gobierno que apunta a lograr objetivos geopolíticos favorables para los EEUU y sus aliados, como es ciertamente posible en teoría para Rusia, China, e Irán el apoyo a movimientos de protestas exteriores para promover fines multipolares. Algunos han argumentado que el periodo previo a la reunificación de Crimea con Rusia estuvo marcado por algunas tácticas de revolución de color respaldadas por Moscú, al igual que el levantamiento popular en Bahréin estuvo apoyado (pero no ingeniado, que es una distinción importante) por Irán. Escribí sobre esto en un artículo para el blog The Saker en abril de 2016 titulado “La tecnología de la revolución de color no es sólo blanco y negro”, durante el cual denominaba a este posible fenómeno como una “revolución de color inversa”.

Las diferencias clave entre revoluciones de color occidentales / “convencionales” y sus equivalentes multipolares teorizadas es que, las primeras entrañan un apoyo considerable en organización, inteligencia, logística, y algunas veces incluso militar, mientras que las segundas son en su mayoría políticas e informativas. Otro contraste importante entre ambas es que la primera conduce habitual y muy rápidamente a la violencia y al terrorismo urbano, mientras que la segunda evita esas tácticas y se concentra en la protesta pacífica y la resistencia no-violenta.

Es importante apuntar, sin embargo, que también hay “revoluciones de colores inversas” que no involucran a ninguna potencia extranjera multipolar, tales como los movimientos anti-OTAN en Serbia y Montenegro, y las manifestaciones patrióticas en la República de Macedonia que venció los dos intentos consecutivos de revolución de color por EEUU. Estos ejemplos prueban que la tecnología de la revolución de color ahora ha proliferado desde el terreno de los “actores no-estatales” occidentales, a los no-occidentales que están genuinamente fuera del control de cualquier Estado extranjero. También da esperanzas de que algunos de los elementos no-violentos más creativos de la tecnología de la revolución de color pudieran ser usados tanto para socavar los gobiernos unipolares como para fortalecer a los multipolares contra la subversión occidental.

4. En relación con la segunda etapa de las guerras híbridas, ¿Cómo definiría la “guerra no-convencional” para alguien que no está familiarizado con esto? Y de nuevo, ¿Cómo de importante es esto para la gente corriente y qué consecuencias supone para la gente?

La “guerra no-convencional” puede ser fácilmente resumida como la violencia cometida por alguien fuera de un uniforme militar y por fines políticos. En la relevancia práctica sobre el tema que estamos abordando, la guerra no-convencional empieza estallar en el momento que un “manifestante” lanza una roca o un coctel molotov, y se vuelve más extrema cuando hay individuos que recurren a la guerra de guerrillas o al terrorismo. Hablé sobre la propensión de las revoluciones de color patrocinadas por occidente de recurrir a la violencia, y esta etapa del proceso de cambio de régimen es realmente el principio de la guerra no-convencional. Algunas veces, como es el patrón más reciente, los “manifestantes” finalmente se transforman en “rebeldes” o terroristas urbanos, y esto marca la transformación total de los “manifestantes pacíficos” en unos combatientes de sangre fría y la conclusión del proceso de guerra híbrida.

Es cierto que algunos pueden verse envueltos en el momento y cometan un crimen de “pasión política” tal como empujar a un policía o asalten una contra-manifestación, y mientras que eso en principio representa la guerra no-convencional, no va a más allá del umbral de no retorno para el individuo. Solamente una vez que una persona realiza verdaderas actividades de terrorismo o rebelión puede decirse que son “irreversibles” en el sentido del campo de batalla de la guerra híbrida. Puede que un día repudien su antiguo comportamiento y vuelvan a ser un ciudadano respetuoso con las leyes, pero tal eventualidad muy probablemente no es posible para el individuo siempre que la guerra híbrida esté siendo realizada todavía y solamente se vuelva comunicable después de que el conflicto termine finalmente. La guerra no-convencional es la segunda y más lógica etapa de una revolución de color que se convierte en su intensificación “lógica” por el fracaso de una “pacífica revolución popular” para derrocar a un gobierno.

Frente a la derrota en las calles, los organizadores extranjeros puede que no quieran abandonar su objetivo, de ahí el motivo por el que fomenten que sus cohortes tomen parte en la violencia y la guerra no-convencional para intensificar la crisis política y llevarla a un nivel cualitativamente nuevo de emergencia en la seguridad nacional. Si estallara una “rebelión” (como los medios principales de comunicación occidentales regularmente la pintan) o “insurgencia por la libertad” en las zonas rurales sin probar primero el concepto para demostrar públicamente si hay o no algún “apoyo público” para esto (que en sí mismo y objetivamente no importa ya que lo que cuenta es el informe y grabación subjetiva de las manifestaciones de protesta), entonces será menos creíble por la audiencia global que dichos combatientes tengan alguna “legitimidad”.

Sin embargo, este caso sigue tras una revolución de color fracasada que occidente puede vender como que ha sido derrotada solamente debido a “los asesinatos autoritarios tiránicos” de un “dictador”, entonces toma un significado totalmente diferente y se convierte en una “causa” para que el público (occidental) “global” se reúna para dar apoyo. Para ilustrar la diferencia entre una revolución de color y una guerra no-convencional (la segunda etapa de la guerra híbrida), uno necesita recordar solamente que “la revolución de las excavadoras” del año 2000 en Serbia fue una revolución de color, mientras que la guerra del terrorismo en Siria es una guerra no-convencional que creció por el fracaso de la “primavera árabe” en el contexto más amplio de revoluciones de color. Entre estos dos casos está la oleada de terrorismo urbano conocido popularmente como “Euromaidán”, que es desconocido por mucha gente que también incluyó un componente de guerra no-convencional de baja intensidad en las áreas rurales del oeste de Ucrania.

5. ¿Cuál es su breve previsión sobre las guerras híbridas de este año? Vemos una nueva ronda de guerra en Donbass; Siria, Irak, Yemen, y Libia están en llamas; están emergiendo algunos posibles nuevos conflictos en zonas inestables… y por supuesto, la situación en la Unión Europea y el nuevo presidente de los EEUU tienen preocupada a mucha gente.

Ninguno de esos cinco conflictos son guerras híbridas en el sentido de cómo las he definido – esos conflictos ciertamente comenzaron como revoluciones de color fallidas que se convirtieron en guerras no-convencionales, pero la única parte perdurable de este patrón es que todavía están enredadas en el conflicto físico. Hay poca o ninguna interacción entre los dos pilares de la guerra híbrida –revoluciones de color y guerra no-convencional– porque la parte militar de la guerra ha sido intensa durante años en cada caso, en algunos durante más tiempo que en otros. Mientras que es correcto observarlas como países que han sido guerras híbridas, sería erróneo referirse a ellas como parte de este tipo de conflicto, al menos en relación con mi definición. Habiendo dicho eso, en términos de comprensión “convencional” de guerras híbridas, entonces sí, hay todavía una relación complicada entre la guerra económica, informativa, y de otros tipos, aunque debería recordarse que la chispa de revolución de color que dio vida a estos conflictos se desvaneció hace mucho.

Mirando a Europa y los EEUU, ciertamente, hay claros indicios de que las revoluciones de color están siendo organizadas, implementadas, y en algunos casos tales como la República de Macedonia, están en el filo de la guerra no-convencional y de ese modo convirtiéndose en guerras híbridas. En relación con la UE y los EEUU, esta estratagema está siendo desencadenada por fuerzas neoliberales en gran medida conectadas con George Soros para hacer retroceder los logros de diferentes políticos y prevenir la auto-implosión del llamado “nuevo orden mundial”. No está claro hasta qué punto llegará esto, pero es muy posible que pudiera conducir a la guerra identitaria, si por diseño o accidente, se manifestase como enfrentamientos raciales en los EEUU y como enfrentamientos entre cristianos y musulmanes en la UE.

Sin embargo, cuando pronosticamos las guerras híbridas más probables en el futuro, es importante referirse a mi investigación sobre la “Ley de la guerra híbrida”, un concepto que desvelé hace medio año tras la publicación de mi libro. Escribí sobre ello más en detalle para Oriental Review en un artículo del mismo título que más tarde expandí en una serie de artículos, pero la idea general es lo siguiente:

El gran objetivo tras toda guerra híbrida es perturbar, controlar, o influenciar proyectos conectivos transnacionales multipolares a través de conflictos identitarios provocados externamente (étnicos, religiosos, regionales, políticos, etc.) dentro de un Estado de tránsito objetivo.

Con este axioma como lógica rectora, es posible predecir que los países que son parte de los proyectos integrativos de Rusia, tales como la Unión Euroasiática y la OTSC [Organización del Tratado de Seguridad Colectiva], son objetivos potenciales para futuras guerras híbridas, pero incluso más probables que estos Estados, son aquellos Estados que están cooperando con la visión ‘un cinturón, una carretera’ de China en la conectividad de infraestructuras globales, que tiene un alcance global y abarca “el gran Corazón de la Tierra” de Asia Central y Sur, los Balcanes, Indochina (ASEAN continental), el trecho transoceánico de Estados africanos occidentales, centrales y orientales, Suramérica, y Nicaragua. Ya he expandido la mayoría de esos escenarios a través de estudios intensivos por país y región para Oriental Review, que actualmente está publicando la parte africana de mi investigación. Con suerte, Katehon publicará mi próximo libro sobre la geopolítica del siglo XXI en Suramérica, y uno de estos días, espero escribir una continuación que incorpore a América Central, el Caribe, y Méjico.

En resumen, mientras que las revoluciones de color y las guerras no-convencionales, teóricamente, puedan ser desestabilizaciones independientes, a menudo se interconectan entre sí mediante el proceso de transición por fases que denominé como guerras híbridas, y uno de los denominadores más comunes que conectan estos tipos de conflictos es el de sus consecuencias geopolíticas para interrumpir proyectos conectivos de infraestructura transnacional. Siempre que los observadores mantengan estos principios básicos en mente, será posible predecir las siguientes guerras híbridas, e identificar claramente las aparentemente inesperadas una vez que están ocurriendo.

6. Muchísimas gracias por concederme la entrevista, y espero que pueda traducir más artículos y libros suyos, porque cada vez hay más personas interesadas en el tema de las guerras híbridas debido a que son el nuevo modo de hacer la guerra por todo el mundo.

Mil gracias, Enrique, y gracias a todos ustedes, lectores, por interesarse en mis ideas y leer esta entrevista hasta el final. Estoy muy agradecido por su apoyo, y espero que disfruten siguiendo mi trabajo.

Bicentenarios latinoamericanos y pensamiento estratégico en el siglo XXI

Resumen

El siguiente trabajo plantea los grandes desafíos de la agenda internacional en estos tiempos de Bicentenarios latinoamericanos de independencias que exigen un pensar auténticamente estratégico desde nuestra realidad y con una originalidad que nos diferencie de otros modelos  continentales.

La Globalización es inseparable de los procesos de regionalización, para equilibrar sus efectos y para alcanzar un mundo que conduzca a una Comunidad Internacional alejada de todo Unilateralismo. Ello requiere una óptica analítica comprometida y situada en un espacio; el nuestro, el del Continente Suramericano.

Introducción

El mundo está cambiando. La Globalización como fenómeno y proceso histórico tiene una velocidad inédita. Se debe pensar el presente como un tiempo problemático de la experiencia de un mundo en un estado de transición a la multipolaridad. Los limites entre política mundial, regional y nacional son cada vez más difusos. Los límites de sus esferas se tornan débiles conformando una triple relación dialéctica entre lo local, regional y mundial

En este segundo milenio (bajo los parámetros occidentales), están transcurriendo en toda Suramérica los bicentenarios de las distintas declaraciones de independencia,  los pueblos de los Virreinatos españoles vivieron un proceso de balcanización, que de tres Virreinatos y una Capitanía General se vieron transformados en nueve Repúblicas: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela. A diferencia de Brasil, que con un devenir histórico totalmente diferente, incrementó fuertemente, dentro del subcontinente su espacio territorial con su Imperio

Entrado el Siglo XIX se lleva a cabo un proceso  de choques entre “Liberales” y “Conservadores”, que terminará en la sujeción de los nuevos estados en cuasi Neocolonias del principal hegemón de ese siglo: Inglaterra. Es el imperio británico el que nos introduce a “su” mundo, con la División Internacional del Trabajo como  proveedores / productores de Materias Primas y alimentos baratos y compradores de productos manufacturados con alto valor agregado. Introduciendo, a la par de nuestro ingreso al “mercado mundial” con teorías económicas que avalaron ese proceso,  momentáneamente beneficioso para algunos de los nuevos países.

Por otra parte, fue esa misma Potencia, la que fomento los enfrentamientos que terminaron en tremendas Guerras entre sudamericanos  (Guerra de la Triple Alianza: Argentina, Brasil y Uruguay contra Paraguay o la Guerra del Pacífico: Chile contra Bolivia y Perú), por un lado, mientras que por otro, a través de empréstitos financieros y de la División internacional del trabaja que ya indicamos, generó sofisticados mecanismos de control de los países en conflicto.

Pues bien,  la idea fuerza de este trabajo es reconocer que cuando América se libró del yugo Español Siglo XIX y trató de tener un destino distinto como pueblos americanos del Sur, faltó Pensamiento Estratégico en las elites que tomaron el poder en reemplazo de la administración Colonial, y que posteriormente en el Siglo XX, en medio de las dos Guerras Mundiales fue cuando los países de la región ( muy especialmente Argentina y Brasil) iniciaron fuertes procesos de industrialización y sustitución de importaciones aplicando, de forma efectiva un Pensamiento Estratégico y Geopolítico que dio grandes resultados.

Por Ejemplo, es notable mencionar el de Juan Perón quien en una conferencia de carácter reservado en la Escuela Nacional de Guerra, durante  el mes de noviembre de 1953 sostuvo: “tenemos que quebrar la estrategia del arco que va de Río a Santiago y crear una nueva para América del Sur”. Y proponía, a renglón seguido, la creación de un área de unión aduanera y libre comercio entre Argentina, Brasil y Chile denominada ABC.

……En doscientos años de existencia «republicana», Hispanoamérica nunca ha sido completamente independiente. Solo ha sido muy esporádicamente gracias a unos pocos gobiernos y figuras políticas. En el siglo XIX, Gabriel García Moreno (Ecuador), Juan Manuel de Rosas (Argentina), José Manuel Balmaceda (Chile), Porfirio Díaz (México), Francisco Morazán (República Federal de América Central). Y, en el siglo XX: Getúlio Vargas (Brasil), Juan Natalicio González (Paraguay), Luis Alberto de Herrera (Uruguay), Juan José Arévalo (Guatemala), Juan Domingo Perón (Argentina), Carlos Ibáñez del Campo (Chile), Víctor Paz Estenssoro (Bolivia), Eloy Álfaro (Ecuador), Francisco Madero (México), Augusto César Sandino (Nicaragua) y algunos otros. Las fuentes del verdadero poder nunca han estado en nuestros países, sino siempre en el extranjero. Ese es el problema! La gran mayoría de nuestros gobiernos han sido «gobiernos vicarios» o «gobiernos sustitutos». En otras palabras, como en el caso del Papa por Cristo, gobernaron en nombre y en nombre de otro soberano……. (Alberto Buela)

En consecuencia, dado los cambios Geopolíticos y el Nuevo Orden Mundial en conformación que se da causa de los choques entre los  Países que denominamos: Atlantistas contra Continentalistas. Estamos atravesando este primer cuarto del Siglo XXI con una nueva posibilidad de rescatar y redefinir un auténtico Pensamiento Estratégico y Geopolítico para nuestra Isla Continente: Suramérica;  Que es lo que desarrollaremos a continuación:

Desarrollo

Debemos reconocer a partir del 2001, reaparece el criterio de las tensiones geopolíticas y geoestratégicas en los conflictos internacionales

Para ello deberemos romper con estructuras mentales y paradigmas que nos fueron impuestas como verdades reveladas y tener ese pensamiento crítico y práctico, para obtener la suficiente libertad de pensamiento que permita diseñar políticas de estado propias y no ser meros espectadores de los cambios mundiales. Pero para ello deberemos partir de un análisis internacional serio y basados en hipótesis concretas para poder tener ese pensamiento crítico estratégico propio.

Nunca como hoy (S.XXI) fue tan evidente que toda buena política o estrategia nacional y Regional, comienza y depende de un acertado conocimiento y de una sensata interpretación del tablero internacional en que se inserta y vive cada país.
Al respecto, lo primero que se constata es que, desde que existe la vida humana, las relaciones inter pueblos (inter familias, clanes, tribus, feudos, naciones o lo que fuere) se han regido por la fuerza. Y, aun cuando algunos analistas interesados quieran hacernos creer que hay potencias buenas, y potencias malas, o que hablar de imperialismo es una antigualla “populista”, la realidad muestra que, también hoy, en política internacional el más fuerte es el que impone sus intereses y su “derecho”.

Describiendo  brevemente quienes son los actores Geopolíticos y de Política Internacional del Siglo XXI  podremos observar, a prima facie, que todo el modelo de Organización Mundial creado en la posguerra de la segunda guerra mundial está caduco o necesita una fuerte recomposición para seguir estando a la altura de los desafíos de los tiempos que corren.

Tras la caída de la cortina de hierro, el fin de los regímenes comunistas en Europa del Este, la implosión de la Unión Soviética en quince nuevos estados y de Yugoslavia en otros seis, tras un brutal baño de sangre, limpiezas étnicas y masacres vividas en los últimos 30 años, el mundo entró en un breve periodo de dominación hegemónica por parte de Estados Unidos.

La historia ha demostrado, una y otra vez, que el mundo dominado por un hegemón no es sostenible en el tiempo y los ataques terroristas de septiembre 11 de 2001 marcaron, como efectivamente se ha señalado en otros trabajos, el comienzo del fin de la Pax Americana.

Noteśe, en ese sentido, que las dos guerras que libró Estados Unidos contra el terrorismo, en Afganistán e Iraq, las dos las perdió marcando así el final de la era del todopoderoso hegemón americano.

Esto permitió que suban al escenario geopolítico nuevos jugadores que venían pidiendo su espacio como  Rusia y China el primero en los territorios de la ex Unión Soviética y el segundo en el Pacífico y Asia Central, primero  con pretensiones regionales y en la actualidad, con intereses claramente globales.

En este proceso denominado “A New (North) American Century” (un Nuevo Siglo Norteamericano); EE.UU. priorizó su superioridad  en lo militar, para lograr sus objetivos, no por el control del “espacio”, como fue la consecuencia de la segunda guerra mundial, sino por la conquista geopolítica de los “grandes mercados” tanto de los proveedores de materias primas como de los de consumo de los mismos. La Idea siempre fue: “Americanizar el Mundo sin Globalizar a USA».

Esto permitió que durante los diez primeros años posteriores a la implosión de la URSS, los Estados Unidos fueran, en todo el planeta, una superpotencia hegemónica en forma indiscutida al punto de que, en más de una región del mundo, desde Washington se pudo dibujar el mapa de los países que iban a subsistir y de aquellos destinados a desaparecer. El fin de la historia era un hecho real y sin retorno y todo se encaminaba a un nuevo orden mundial.

Esto demandó que  en los Estados Unidos, las distintas administraciones de Republicanos o Demócratas desde la década del 90 en adelante, “no dejaron de incrementar fuertemente el gasto en Defensa para hacer frente a un mundo globalizado y para modernizar sus fuerzas armadas para estar a la altura de este plan estratégico de mantener su supremacía global”. EE.UU. esa “republica de carácter imperial”, pareció alcanzar el cenit de su poder.

Pero “Ningún imperio es eterno” con esa tesis el Historiador Paul Kennedy, en el 2007, publicó un trabajo en donde argumenta que EEUU inició su declive, el tema es cuando se palpara esta declinación y cómo será esa declinación, si será una declinación controlada y ordenada como fue la Inglesa o caótica como algunos imperios que desaparecieron.

Por ello sostenemos, que ese recorte de su pretensión de ser el Hegemón global, obligó a EE.UU. a replegarse de muchos escenarios conflictivos y fortalecerse en su región de influencia directa. La cual no es otra que todo el Continente Americano, por ello no son extraños los movimientos que desde hace una década realiza en este subcontinente para poseer la mayor influencia política, económica y militar.

En ese sentido, es importante estudiar los objetivos que se abroga el Comando Sur para su área de influencia, estableciendo doctrinas militares, sosteniendo a gobiernos leales a Washington y cercando a los hostiles, pues “su” área de Seguridad Nacional la estableció desde Centroamérica y el Caribe hasta una línea que se ubicaría, geográficamente hablando, en el Rio Amazona, delimitando de esta manera un área que no puede estar en manos de sus adversarios económicos, políticos y militares y más ahora con las nuevas directivas de Seguridad Nacional de la administración Trump, que volvieron a imponer que Rusia como enemigo de EEUU ahora sumada China.

Pero ¿cómo interactúan los otros jugadores internacionales de ese tablero en permanente movimientos? analicemos:

China: -Continentalista asiática- Obligatoriamente tiene que expandirse para mantener su nivel de crecimiento y esto la pone definitivamente en el gran tablero mundial como la pieza clave que con sus movimientos desequilibrara, en el corto plazo, las potencias existentes, ya que en ese marco de crecimiento sostenido, uno de sus objetivos internacionales principales es establecerse como un centro de gravedad dentro de un sistema multipolar. Además de asegurarse el suministro de los recursos de los que carece.

Por ello EEUU la considera como el gran peligro para su hegemonía mundial y a pesar de que ya es tarde para deshacerse de ella, económicamente intentará, por todos los medios a su alcance, limitar su avance y desarrollo.

En su afán de diversificar sus fuentes de suministro de materias primas, China ha realizado una fuerte apuesta de inversiones en el “olvidado” continente africano, lo que ha puesto en estado de alerta a USA, más luego del acuerdo de China para desarrollar la zona de Darfur con infraestructura propia para obtener recursos petroleros, a lo que USA respondió incorporando a Sudán en la lista de integrantes del Eje del Mal y para lo cual financia, vale decirlo, a grupos terrorista para derrocar al gobierno de ese País.

Además para la preocupación de los estrategas de USA, China firmó amplios acuerdos con Rusia no sólo energéticos sino tecnológicos y militares, y también está haciendo un acercamiento a la India. En la actualidad establecieron un acuerdo para no interponerse en el área de los recursos energéticos, con lo que se conformaría uno de los Espacios Continentales Económicos más importante en esta era de la globalización.

Por su parte, la doctrina militar de China tiene incorporada como hipótesis de conflicto un enfrentamiento con USA y en un trabajo titulado La Guerra sin restricciones de los coroneles Liang y Xiangsui, analizan ambas culturas estratégicas,  y para no caer en la trampa de la carrera armamentista que hizo colapsar a la URSS prevén ampliar las acciones desde el campo de lo bélico  a todos los ámbitos de la actividad humana “el crack bursátil, un virus informático, un rumor que provoque corridas bancarias, etc.” “En realidad es un asunto viejo: la respuesta del débil al fuerte”, conocida como guerra asimétrica.

Es en consecuencia, vislumbramos la era del despertar con peso propio del Pacífico como el “océano de los negocios” en detrimento del Atlántico, como pronosticaba Kissinger.

En la actualidad, el mayor inversor planetario en África es China, y  socio comercial prioritario en muchos países de América Latina, y lo será en mayor medida aún en el futuro previsible.

China ha avanzado decididamente en tecnología de punta, especialmente en la llamada Revolución Industrial 4.0;  en tecnología aeroespacial, biotecnología, etc. También en el desarrollo de un Banco de Infraestructura y Desarrollo que tiene más capital que el Banco Mundial, por poner solo un ejemplo, y que rápidamente provocó que muchos países asiáticos, y también europeos, se incorporaran al mismo; pero todo comenzó con el acuerdo de Cooperación de Shanghái, que hoy lo posiciona como un país de importancia global y desde el 2013 cuando su presidente Xi Jinping lanzó el mayor proyecto geopolítico de China el “megaproyecto estratégico chino-ruso”, llamado “Cinturón y Ruta de la Seda”, seguramente completará el retroceso norteamericano en Asia.

Rusia: -Continentalista Euroásiatica- La ex superpotencia militar comunista, ha vuelto a reencontrar su destino de la mano de Vladimir Putin. Ha sido él quien la ha puesto de nuevo en el escenario internacional ya no como un poder militar arrollador, tal como en tiempos de la administración soviética, sino como una potencia  económica y tecnológica, al hacer valer su importancia geoestratégica y geopolítica de los recursos energéticos, hoy tan demandados por la Unión Europea y por China fundamentalmente. Es para destacar también la actual actitud soberana y de desafió de Rusia enfrentando a EE.UU. cuando estos han querido instalar el denominado escudo antimisiles en países que fueron satélites de la ex URSS, como son los casos de Polonia y la República Checa, demostrando  el giro que han tomado las relaciones de Poder.

Notese que era una situación inimaginable hace algunos años atrás semejante desafío al hegemonismo estadounidense, es más, el proceso de Ucrania con la anexión de la Península de Crimea,  es una clara demostración de los cambios que observamos.

Debe destacarse en otro plano, que por el accionar de EEUU y sus Socios Occidentales (hoy, ya no tan leales) Rusia inició un profundo acuerdo con China al sumarse al Acuerdo de Cooperación de Shanghái y últimamente al Foro Económico del Este, conocido como Foro de Vladivostok, el cual fue clave en el “acercamiento” entre las dos Coreas, en septiembre del año pasado (2017) y en el entendimiento trascendental logrado entre Rusia y Japón, en el transcurso de 2018; estableciendo un proyecto de desarrollo ferroviario con un tren que desde Japón pasará por las islas en disputa entre ambos países para conectarse con el Transiberiano ruso y de allí llegar al mercado Europeo y a los de Asia central. Algo sumamente importante para el afianzamiento de otra organización regional dirigida por Moscú la Unión Económica Euroasiática (UEE) y que reúne a Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán y Rusia, en un paso de fortalecimiento del proceso de integración en el espacio postsoviético.

Sin perjuicio de lo señalado, la mayor presencia rusa en su retorno al tablero geopolítico global ha sido, por un lado, con la intervención militar de sus Fuerzas Aeroespaciales en el combate contra el Terrorismo Internacional en la República Árabe de Siria, algo que ha sido coordinado con  los Comandos de élite de la República Islámica de Irán en una Guerra claramente impuesta por actores externos. Mientras que por otro lado golpeó a la OTAN con su acuerdo de venta de armas y acuerdos para la región con Turquía, volviendo a competir en el mercado mundial de armas de alta tecnología.

Concluimos que el Tablero Geopolítico inestable Global es hoy Multipolar:

Con tres potencias de primer nivel: China, Estados Unidos y Rusia.

Otros jugadores importantes pero de menor nivel en el ajedrez geopolítico mundial:

INDIA: La India no se transformó en un gran espacio geopolítico que desequilibrara y contuviera a China, (como pretende el hegemón norteamericano). India y China mejoraron sus relaciones a pesar de los diferendos fronterizos en la zona del Tíbet y la región de Cachemira -que reclaman tanto India como Pakistán. Pero India también está en un proceso similar al de China cuyo crecimiento económico provoca también un corrimiento de los intereses de ese País para asegurar el mismo a largo plazo y allí también choca con la idea de unilateralismo.

Su vasta población, que ha pasado ya los 1.200 millones de habitantes y crece a un ritmo mayor que el de China, hace pensar que pronto estará en el podio de las superpotencias mundiales con influencia decisiva. opinamos que ese ascenso no será inmediato, pues la India debe antes solucionar  enormes problemas de desigualdad social, de pobreza extrema, de atraso y abandono en su población (rural).

De igual manera que China, para los  suramericanos, India recién comienza a aparecer en nuestro horizonte. No debemos olvidar que hasta mediados del siglo XIX ambas eran las economías donde los imperios coloniales del momento intentaban conquistar sus mercados, ya que eran los principales del mundo, y hoy vuelven a estar a esa altura, pero como gigantes exportadores.

Unión Europea: -Atlantista- La actual situación de la unión Europea es la de un gigante económico en crisis, estancamiento y de un enanismo político. Tiene limitaciones desde lo estratégico, ya que en lo militar es un peón del juego norteamericano, prueba de ello es su participación en la invasión de Afganistán o su parálisis en la  crisis de los Balcanes que permitió a USA apropiarse por completo de esa jugada geopolítica. Asimismo, la división en la UE por la invasión a Irak demostró su falta de unidad política en los temas internacionales, anulándola como jugadora en el tablero mundial, solo presente por los flujos comerciales de las economías Francesa y Alemana, fundamentalmente.

Extendiéndonos en sus debilidades, la Unión Europea tiene una grave dependencia en el rubro energético, fundamentalmente con Rusia, que la inhabilita  para presentarse como jugador fuera de sus fronteras, a pesar de que la OTAN tenga ahora una política globalista (para la cual no está preparada). En ese sentido, el único miembro que era confiable, y privilegiado con la potencia hegemónica era Inglaterra (hoy luego del BREXIT, fuera de la Unión). La UE deriva de una relación estratégica desde la segunda guerra mundial con EEUU., que esterilizo toda alternativa para conformarse como una potencia Continental con peso global y solo se le permitió ser un gigante económico fronteras adentro. A eso se suma un serio problema demográfico  como es el envejecimiento de sus poblaciones y falta de crecimiento poblacional que la hace dependiente de mano de la obra extranjera, muy a pesar de su resistencia para incorporarla, lo cual ya es un problema que pone en crisis a las estructuras políticas tradicionales con el ascenso de los llamados partidos políticos de extrema derecha

En el plano de lo político, la incorporación de nuevos miembros a la Unión incrementa las dificultades para llegar a consensos, pues por ejemplo a la idea de relanzar la Constitución Europea fue frenada por el voto popular de Francia y Holanda (2005), y ahora se le sumó el rechazo de Polonia. Por ello debieron recurrir al Tratado de Lisboa para hacer una Constitución sin consultar a sus Ciudadanos. Además debemos recordar que tras la crisis de Hipotecas basuras del 2008. Europa en general no pudo recuperarse completamente.

desde lo económico, y por ello, hay dos Europas dentro de la Unión: una Periférica y otra Central (que ya no cuenta con Gran Bretaña), a lo que se suma la fuerte inestabilidad que provoca la aparición de los euroescépticos y la posición que están alcanzando en varios países, lo que hace ver un futuro poco prometedor a la Unión Europea.

Por último el creciente poderío de la región central de Asia y de los Países de la Cuenca del Pacífico marcan un rumbo de decadencia en la presencia de ese bloque en el mediano plazo. Por último ya los integrantes importantes de la UE ya cuestionan las sanciones aplicadas a Rusia a solicitud de EEUU. Italia ya adelantó esa postura y la canciller Alemana Merkel también declaró que no aplicará nuevas sanciones a Rusia, recordando que Alemania es la única real potencia económica de Europa y es su locomotora. La UE es un Atlantismo en franco deterioro.

Japón: -Atlantista- Es el otro Gigante Económico integrantes del denominado sector atlantista, que desde hace varios años viene perdiendo terreno en detrimento de su principal competidor en la región que es China. País con el que no cerró definitivamente las heridas causadas por la ocupación Japonesa en tiempos previos y durante la segunda guerra mundial.

Japón por los tratados firmados luego de su rendición incondicional ante los aliados en 1945, prácticamente no puede participar en política internacional sino es solamente desde el ámbito de la diplomacia y otorgando ayuda financiera para solventar gastos militares como son los casos de las Guerra de Irak y Afganistán. Las últimas administraciones Japonesas han tratando de salir de ese estadio de espantosa derrota (es el único País del globo que fue atacado con armas nucleares) pero su población es reacia a tener un rol internacional más activo que el que tienen las multinacionales niponas.

Al igual  que Europa es dependiente  tanto en Recursos Estratégicos, principalmente  Energéticos, y militarmente depende de su aliado EE.UU. ya que en suelo japonés tiene varias bases militares y que son fundamentales utilizadas para resguardar la seguridad norteamericana, ante la proximidad con Norcorea.

Desde lo económico, Japón ha invertido fuertemente en la región en especial en los Países del Sudeste asiático, los llamados “tigres asiáticos”, y en Asia central para obtener los recursos energéticos necesarios para mantener su alto nivel tecnológico. Es muy posible que la evolución de los acontecimientos internacionales y las nuevas realidades geoeconómicas lleven a Japón a replantearse una nueva geopolítica con China que las repotenciaría por los múltiples aportes de cada Nación a una alianza de esa naturaleza.

Es que para Culturas que son además Civilizaciones como la china y la japonesa, todo es posible, sobre todo por ese pragmatismo creativo de los chinos que llevó a decir a Deng Xiaoping “no me importa que el gato sea negro o blanco sino que cace ratones”. Y ya adelantamos el acuerdo de Japón con Rusia en este 2018 en el Foro de Vladivostok.

Hay evidentemente otros actores regionales, pero este trabajo está direccionado a nuestra posición geopolitica y los principales actores que tienen participación en nuestro espacio del subcontinente suramericano. En Especial los BRICS hoy “extrañamente” desaparecidos de los medios masivos de comunicación de occidentales de los cuales tenemos al gigante suramericano Brasil como integrante principal. (Que si forma parte de nuestro Espacio Geopolítico y con una importancia fundamental en cualquier análisis de escenarios que contemplemos).

Otros actores serían: los Países de La Mancomunidad de Naciones Commonwealth of Nations -Atlantistas-, 53 países soberanos independientes y semi independientes, de los cuales destacó Canadá, Australia y Nueva Zelanda y La Asociación de Naciones del Sureste Asiático -ASEAN- Association of Southeast Asian Nations -Pro Atlantistas-. Pero que no tienen roles globales como los descritos anteriormente.

“Tablero Inestable” y sus consecuencias sobre nuestro Continente Sur Americano

En este tablero inestable, decíamos en un artículo que realizamos en octubre del 2006, que los nuevos escenarios mundiales del presente siglo serían los que emerjan de la lucha por el control de los recursos naturales y que para ello EEUU había desarrollado una serie de ideas fuerza que las administraciones de los años 80 y 90 ejecutaron claramente, y cuyo  eje era establecer una de superioridad militar absoluta y global y para lo que aplicó la geopolítica de control del rimland (borde de eurasia), siguiendo las líneas básicas del geoestratega Spykman, con el establecimiento de bases militares alrededor del mundo pues al ser una potencia marítima debe rodear el corazón euroasiático.

Y de esta forma no solo tener predominio militar sino también para mantener el monitoreo y control económicos “manu militari” de los recursos naturales renovables y no renovables,  asegurándose su provisión e impedimento en el acceso a ellos por parte de sus principales competidores.

La idea de sus estrategas preveían que se consolidarían en el siglo XXI los “Espacios Continentales Económicos e Industriales”, y que serían una fuerte competencia a sus ideas de Hegemonismo, por lo tanto una política clara sería impedir la formación de un bloque de esa naturaleza en su patio trasero así USA se garantizaba “su” seguridad nacional. Es evidente que el surgimiento de los nuevos actores internacionales enfrenta este unilateralismo militar, económico y financiero, en la actualidad.

A este tablero inestable lo sintetizamos hoy en el 2018, así:

  1. Nivel supremo. Multipolaridad con tres centros: Washington, Moscú y Pekín.

  2. Nivel de elevada autodeterminación. Unión Europea, Japón, India.

  3. Nivel de resistencia: Turquía, Sudáfrica, Australia, Canadá, Brasil, Irán que tienen capacidad de limitar la interferencia de la globalización en su propio territorio. O sea tienen autodeterminación interna y muy limitada autodeterminación externa. 

  4. Nivel de dependencia. El resto de los países, prácticamente toda Iberoamérica.

Conclusiones

Las crisis implican oportunidades, como vimos en la descripción anterior, el mundo está en reconfiguración y por ello en crisis. Y recordemos entonces que la historia, tal como en la primera década de del siglo XIX, nos pone de nuevo ante la posibilidad, de alcanzar un nuevo estadio de independencia ya no solamente formal política, sino cultural, económica tecnológica.

Hoy en día, los cambios mundiales vuelven a darnos una oportunidad de consolidar una unidad regional que nos permita tener la capacidad de limitar la interferencia de la globalización en nuestro propio territorio, en un mundo ávido de recursos naturales, Para utilizar los capitales obtenidos para el fortalecimiento de las áreas de Ciencia y Tecnología y poder entrar en el mundo de la revolución industrial 4.0. Se impone entonces el “realismo político”: que nos permite asumir con un cierto escepticismo los proyectos teóricos idealistas, pero no por eso dejar de pensarlos e intentar realizarlos.  

El Realismo Político es el que incorpora la racionalidad para lograr los bienes y satisfacer los intereses de la comunidad o pueblo que mejor despliega su estrategia. En este caso, debemos ver a Suramérica como una “isla continente” con más de 350 millones de habitantes (con solo dos idiomas, además relacionados) 50.000 km. de vías navegables, poseedora del 30% de las reservas de agua dulce del planeta y de todos los minerales estratégicos para el siglo XXI, con un área de 18 millones de km. cuadrados que es el doble de Europa y el doble de los Estados Unidos.

Es por ello que América de Sur tiene que pensarse como una unidad geopolítica con sentido propio y así dar un paso importante para eliminar la actual fragmentación del Continente. De manera que hacer extensiva la propuesta a la totalidad de Suramérica es un acto de prudencia, a la vez que de percepción estratégica.  

Y que por estar en crisis la idea del Siglo Americano, como la venimos detallando hasta ahora, es casi con seguridad que sus estrategas y tanques de ideas, trataran de manejar la declinación afianzándose en zonas que tienen mejor control y allí radica el peligro para nuestro desarrollo como:                                                       

Espacio Continental Industrial Económico autoconcentrado””.  

Así se explican la continuidad de los planes tanto de imponer los Tratados de libre comercio desde lo económico para cerrar el acceso a la región de competidores extracontinentales o el del incremento de bases militares en nuestro continente y para mantener objetivos más cercanos a su territorio y más fáciles de controlar e influenciar a lo que ello despectivamente consideran despectivamente su patio trasero.

Este esquema de Tablero inestable que describimos antes debe ser bien interpretado por los países de Suramérica y Latinoamérica, por su liderazgo político, militar, empresarial, sindical, intelectual, universitario  para no equivocarnos sobre cuáles son nuestros intereses permanente nacionales y regionales, y uno de ellos, es nuestra visión y relación con este nuevo mundo globalizado. Pues la falta de una idea estratégica en los últimos 27 años (1991), nos dejó llevar por los cantos de sirena hacia un hegemonismo arrollador que derivó en crisis socioeconómicas y políticas recurrentes.

Por ello es urgente que los estados suramericanos deban contar con una visión a largo plazo que permita hacer un plan para los próximos 20 o 30 años de este mundo competitivo, que no solo es de Estados sino también de empresas ligadas a los mismos y tener esa visión estratégica constituye un activo valioso para sus economías. En esta cooperación publico/privada se deben establecer los ejes prioritarios para establecer políticas de estado para alcanzar los objetivos estratégicos de un alto desarrollo y crecimiento, que esto se pueda verificar en toda una nación como conjunto y no solo para algunos sectores.

La realidad demuestra que si  Sudamérica e Iberoamérica desean realmente ocupar un lugar digno y razonable en el nuevo mundo emergente, el lugar que se merece por su historia, el que le indica la vocación de grandeza de sus pueblos y el gigantesco espacio territorio continental que posee, indispensablemente debe plantearse una estrategia geopolítica y una política internacional de una gran nación Iberoamericana y Suramerica.

Este Gran Espacio cuenta con la ventaja de no ser una creación ex nihilo, se realiza sobre el antecedente de ALADI, Comunidad Andina y del  Mercosur creación con 27 años de vigencia efectiva (Tratado de Asunción 1991). A lo que se le suma la experiencia del Pacto Andino. Luego UNASUR

Cuatro Países tienen la máxima responsabilidad para alcanzar este objetivo: dos, sobre el océano Pacífico: Colombia y Perú y dos sobre el Océano  Atlántico: Argentina y Brasil.

Y podemos observar con cierta visión de posibilidad que desde el “realismo político”, de los estrategas geopolíticos del Continente hoy tienen un horizonte mayor que los marcados por los de cada Patria Chica para realizarnos en la Patria Grande, única alternativa para progresar en este Siglo XXI, si no como dijera el gran Pensador Brasileño Helio Jaguaribe seremos basura de la historia y habremos perdido otro siglo.

Lic. Carlos Pereyra Mele (*)

Córdoba Argentina

(*) Licenciado en Ciencias Políticas

Director de Dossier Geopolitico DG

https://dossiergeopolitico.com/

Experto en Geopolitica Suramericana

Analista de Política Internacional

Bibliografía y sitios web de información:

Diccionario Latinoamericano de seguridad y Geopolítica

Coautor Director Miguel Barrios y Carlos Pereyra Mele

2009 Editorial Biblos  /978-950-786-737-8 Bs As

Consejo Suramericano De Defensa

2011 Editorial Biblos BsAS de Miguel Ángel Barrios

Hacia una revalorización de lo Militar en la Política Suramericana

https://dossiergeopolitico.com/2018/10/10/hacia-una-revalorizacion-de-lo-militar-en-la-politica-sudamericana/ 

Teoría del Rombo Suramericano Nueva Estrategia suramericana del Prof. Dr. Alberto Buela Lamas

https://es.scribd.com/document/111634896/Teoria-Del-Rombo-25-3-10

Bicentenario y Pensamiento Estratégico Argentino

Carlos Pereyra Mele

http://licpereyramele.blogspot.com/2007/06/

Relaciones Internacionales. Una teoría crítica desde la periferia sudamericana (Biblos, 2018) Marcelo Gullo

Análisis Geopolítico de argentina y América (2005)

https://es.scribd.com/document/117609833/ANALISIS-GEOPOLITICO-DE-ARGENTINA-Y-AMERICA-LIC-CARLOS-ALBERTO-PEREYRA-MELE

Nuevos escenarios mundiales en el siglo XXI

Carlos Pereyra Mele http://licpereyramele.blogspot.com/2006/10/nuevos-escenarios-mundiales-en-el.html

Perón-Vargas, la alianza inconclusa
http://www.clarin.com/suplementos/cultura/2005/11/19/u-01092040.htm

Amérique hispanique : la longue marche vers l’unité (1833-2013) Dr Alberto Buela

http://www.contrelitterature.com/archive/2013/03/05/amerique-hispanique-la-longue-marche-vers-l-unite-1833-2013.html

Qué es la doctrina Monroe que Trump reflotó en la ONU contra la influencia de «potencias extranjeras» en América Latina

https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-45648320?ocid=wsmundo.chat-apps.in-app-msg.whatsapp.trial.link1_.auin

EL Dominio de  EEUU ha terminado – Foro de Davos

https://dossiergeopolitico.com/2018/09/18/el-dominio-de-estados-unidos-ha-terminado/

Gran EURASIA se reúne en el lejano oriente Ruso
https://dossiergeopolitico.com/2018/09/15/gran-eurasia-se-reune-en-el-lejano-oriente-ruso/  

Unión Euroasiática

http://www.eurasiancommission.org/en/Pages/default.aspx

Organización de Cooperación de Shanghái

http://eng.sectsco.org/

Mancomunidad de Naciones

http://thecommonwealth.org/

Unión Europea

https://europa.eu/european-union/index_es

UNASUR

https://www.unasursg.org/

ALADI Asociación Latinoamericana de Integracion

http://www.aladi.org/sitioAladi/index.html

MERCOSUR

https://www.mercosur.int/

Comunidad Andina

http://www.comunidadandina.org/

La Asociación de Naciones del Sureste Asiático -ASEAN-

https://asean.org/

Asociación de Cooperación Asia Pacífico

https://www.apec.org/

 

 

 

*Juan Martin González Cabañas Analista Junior en Dossier Geopolitico

Los profetas en las montañas suizas han hablado

El Foro económico mundial de Davos 2019, conclave polémico y paradójico si los hay, se vio marcado por un contexto muy extraño. Las declaraciones de este año han sido sorprendentes y marcan un verdadero punto de quiebre en el orden mundial imperante y en los discursos y los augurios de sus profetas.

Es evidente que estamos ante un cambio de época. Las estructuras y andamiajes de un antiguo orden mundial parecen temblar, emergen nuevos elementos de un orden nuevo, pero la incertidumbre reina todavía en el escenario actual y futuro sobre la configuración que tomará el mismo, al ser procesos dinámicos que todavía están en pleno desarrollo y con sus piezas reacomodándose de forma constante.

Los profetas en Davos golpean los cimientos doctrinarios de la fe neoliberal en su propia catedral

El propio fundador y directivo del foro, Klaus Schwab reconoció que la globalización y los cambios tecnológicos se han salido de control, sus beneficios no se han repartido de forma equitativa y han sobrepasado la capacidad adaptiva de las poblaciones a nivel mundial, produciendo parálisis social, desigualdad y polarización en las comunidades a nivel mundial.

Las montañas Suizas se hicieron eco de repetidos mantras. Se escucho hablar en los pasillos y en los distintos paneles sobre una revisión, reforma del actual sistema económico mundial. Ideas como “globalización / capitalismo con enfoque inclusivo”, mayor tributación, mundo multipolar y multiconceptual,  realineación de las fuerzas geopolíticas  muerte de la globalización que conocíamos, mantras que hace unos años hubieran sonado como una herejía en este foro, fueron  comunes en esta edición.

La discusión parece ya no ser si se necesitan cambios o no en el orden económico  y geopolítico actual, sino cuando y como estos cambios se llevaran a cabo, y que postura tomaran los actores: negación y transición abrupta o reconocimiento y gestión gradual de los mismos.

Es cada vez más claro que el cambio es necesario. La polarización está en aumento en muchos países. En algunos casos, los contratos sociales que mantienen unidas a las sociedades se están deteriorando. Esta es una era de recursos y avances tecnológicos sin paralelo, pero para muchas personas también es una era de incertidumbre, inseguridad, donde los cambios parecen ocurrir más rápido que nuestra capacidad analítica y adaptativa. 

Perspectiva y Prospectiva

Entonces ¿Cuáles son los posibles “shocks” del futuro que podrían desestabilizar  estructuralmente aún mas al mundo, y qué se puede hacer para prevenirlos?

La compresión del nuevo orden internacional actual debe tener en cuenta los cuatro caracteres distintos que caracterizan la actual globalización en marcha: 

Para empezar, el mundo se está moviendo hacia un sistema multipolar, en el que Estados Unidos ya no es la fuerza internacional dominante (con el traslado del equilibrio de poder hacia las zonas de Eurasia, Lejano Oriente y el Pacifico). Hemos entrado en la época del Antropoceno, en la que la actividad humana es la principal influencia sobre el clima y el medio ambiente. La creciente desigualdad global ha hecho de la inclusión económica y la equidad social una prioridad para muchos votantes y lideres. Finalmente la Cuarta Revolución Industrial, que nos obliga a reconsiderar cómo la tecnología está afectando nuestras vidas y reformando nuestros entornos económico, social.

El Informe de Riesgos Globales 2019                                 

El Informe de Riesgos Globales 2019 se publica en un contexto de tensiones geopolíticas y geoeconómicas. El mundo se enfrenta a un número creciente de desafíos complejos e interconectados, desde la desaceleración del crecimiento mundial y la persistente desigualdad económica hasta el cambio climático y el ritmo acelerado de la Cuarta Revolución Industrial. 

El  Informe que incorpora los resultados de la encuesta anual de percepción de riesgos globales de aproximadamente 1.000 expertos y tomadores de decisiones, señala un deterioro en las condiciones económicas y geopolíticas. El crecimiento en 2019 se verá frenado por las continuas tensiones geoeconómicas, y el 88% de los encuestados espera una mayor erosión de las normas y acuerdos comerciales multilaterales.

El informe analiza los riesgos asociados con lo que describimos como un orden mundial «multiconceptual», en el que las inestabilidades geopolíticas reflejan no solo los cambios en el equilibrio de poder sino también las diferencias en valores.

Los riesgos  ambientales siguen  dominando los resultados de la Encuesta  de Percepción de Riesgos Globales (Global Risks Perception Survey, GRPS) anual. Este año, representaron tres de los cinco principales riesgos por probabilidad y cuatro por impacto. El  clima extremo era el riesgo de mayor preocupación. Las preocupaciones sobre ataques cibernéticos volvieron a ser prominentes en las Encuestas de percepción de riesgo, que también  puso de relieve otras vulnerabilidades tecnológicas: riesgos asociados con las noticias falsas y el robo de identidad .

  • El aumento de las tensiones geopolíticas y geoeconómicas es el riesgo más urgente en 2019, con el 90% de los expertos diciendo que esperan una mayor confrontación económica entre las principales potencias en 2019.

  • La degradación ambiental es el riesgo a largo plazo que define nuestra era, con cuatro de los cinco riesgos globales más impactantes en 2019.

Top 5 Riesgos por Probabilidad

  1. Eventos climáticos extremos (inundaciones, tormentas, etc.)

  2. Fracaso de la mitigación y adaptación al cambio climático.

  3. Grandes desastres naturales (por ejemplo, terremoto, tsunami, erupción volcánica, tormentas geomagnéticas)

  4. fraude / robo de datos

  5. Ciberataques a gran escala

Top 5 riesgos por impacto

  1. Armas de destrucción masiva

  2. Fracaso de la mitigación y adaptación al cambio climático.

  3. Eventos climáticos extremos

  4. Crisis por el agua

  5. Grandes desastres naturales

Top 5 de interconexiones de riesgo

  1. Eventos climáticos extremos + fallo en la mitigación y adaptación al cambio climático
  2. Ataques cibernéticos a gran escala + desglose de redes e infraestructura de información crítica
  3. Alto desempleo estructural o subempleo + consecuencias adversas de los avances tecnológicos.
  4. Alto desempleo estructural o subempleo + profunda inestabilidad social.
  5. Incidente masivo de fraude / robo de datos + ataques cibernéticos a gran escala
  6. Fracaso de la gobernanza regional o global + conflicto interestatal con consecuencias regionales.

Top 5  mayores megatendencias

  1. Clima cambiante
  2. Creciente dependencia y vulnerabilidad cibernética.
  3. Creciente polarización de las sociedades.
  4. Aumento de la disparidad de ingresos y riqueza.
  5. Aumento del sentimiento nacional a nivel global.    

XVI JORNADAS GEOPOLÍTICA Y ESTRATEGIA – LAS ESTRATEGIAS SEGURIDAD DE LOS EEUU conferencia del Coronel Pedro Baños

La reconfiguración del orden mundial

El contexto convulso en el que se desarrolla el siglo XX, con grandes revoluciones y dos guerras mundiales, ve alterados sustancialmente los equilibrios geopolíticos existentes en cada momento, pero es al final de siglo cuando los cambios son vertiginosos. Al fin de las largas dictaduras personales se sumarán cambios en el Islam, especialmente con la revolución Iraní y su posterior extensión. Pero la mayor alteración se produce con el fin de la guerra fría, un sistema altamente peligroso por la amenaza de destrucción mutua segura, pero que aportaba estabilidad basada en enfrentamientos indirectos entre las dos superpotencias, que servían de válvula de escape a las tensiones y crisis generadas.

Este equilibrio desaparece con la disolución de una de sus partes, la URSS, y la desaparición del Pacto de Varsovia, del sistema de economía y organización social de los países integrantes del bloque, y la consiguiente pérdida de influencia a nivel global del nuevo Estado, la Federación Rusa. En menos de una década, toda la construcción teórica de la geopolítica global había quedado anticuada. Se necesitaba un nuevo paradigma capaz de explicar la situación resultante. En 1992, Francis Fukuyama publica en Free Press su obra EL FIN DE LA HISTORIA Y EL ÚLTIMO HOMBRE, en el que anuncia el triunfo global del sistema basado en el capitalismo, y la hegemonía mundial de la potencia vencedora, los EE. UU.

El 26 de febrero de 1993 se produce el primer atentado al World Trade Center de Nueva York, y una Al Qaeda a la que nadie había prestado atención lo reivindica. Aparece un factor que había permanecido aletargado en el mundo de la guerra fría, las identidades culturales, y que se constituye en motor de los principales conflictos con los que acaba el siglo XX y empieza el siglo XXI. Religión, Lengua, Banderas; símbolos nuevos pero con base histórica en un pasado más o menos reciente retornan del baúl de los recuerdos y ocupan las portadas de los medios de comunicación.

En busca de un nuevo paradigma que sirva de marco para la construcción de un corpus teórico, Samuel P. Huntington, profesor de Fukuyama, publica en el verano de 1993 un artículo en la revista Foreign Affairs con el provocador título de The Clash of Civilizations?, en el que presenta un mapa mundial de posibles zonas de conflicto, unas líneas de fractura que delimitan las civilizaciones y los puntos de confluencia/concurrencia/competencia. El éxito del artículo, del que este verano se cumplirán 25 años, animó al autor a desarrollarlo en un texto, publicado tres años después, en el que el título quedó matizado perdiendo el interrogante y siendo complementado: EL CHOQUE DE LAS CIVILIZACIONES Y LA RECONFIGURACIÓN DEL ORDEN MUNDIAL.

Con motivo de la conmemoración de los 25 años de la publicación del artículo original, y con el objetivo de debatir sobre la actualidad u obsolescencia de las teorías de Huntington, se programan las XVI jornadas sobre geopolítica y geoestrategia, en las que, partiendo de una exposición de la situación actual , se tratarán temas relacionados con el renacimiento de la religión como elemento creador de identidades; o la importancia que tuvo el descubrimiento de América como elemento motor de una reconfiguración del orden mundial al inicio de la Edad Moderna, y el uso de la Leyenda Negra como instrumento geopolítico contra España. La segunda jornada se dedica a las potencias emergentes del subcontinente Indio; a Rusia y su esfuerzo por retornar al papel de potencia global, y a China, que busca un posicionamiento acorde con tu potencial demográfico, económico y militar. Esto complementado con un descriptivo estudio de la situación en el Cáucaso, punto de confluencia de los interese geopolíticos de Europa, EE. UU., Rusia, Turquía, e Irán.

La tercera jornada se dedica a la ciberseguridad y su influencia en la geopolítica, y por último, la potencia hegemónica y su estrategia de seguridad y defensa, EE.UU; para terminar con una mesa redonda sobre la teoría de S P. Huntington sobre el choque de las civilizaciones.

 

Análisis semanal de Geopolitica por Carlos Pereyra Mele para el equipo del Club de la Pluma, que conduce el Periodista Norberto Ganci por la Radio Web al Mundo:

Por primera vez iniciamos nuestro análisis desde lo menor para discurrir hacia lo más en Política Internacional y Geopolitica. Por ello expusimos cómo se puede con un personaje menor iniciar una guerra híbrida, como es el caso de Venezuela donde EEUU ha instalado una dicotomía falsa: Maduro-Guaido, para alcanzar sus objetivos que no son otros que alinear a Latinoamérica detrás de ellos, ante la lucha ya desencadenada por el Nuevo Orden Mundial. Y dentro de este esquema nos preguntamos: Dónde está Michel Temer?, el corrupto ex presidente de Brasil y que hace la justicia del Lava jato con ese personaje, con fuertes denuncia y pruebas de corrupción.

Luego entremos de lleno en esa lucha por el dominio Global de los Emergentes:

  1. La decadencia de EEUU se acelera:
  2. EEUU negocia con los Talibanes su retirada tras 18 años de guerra de Afganistán
  3. III Vietnam de EEUU en el Siglo XXI; después de Irak, Siria y ahora Afganistán

Declinación de todos los Organismos Internacionales creados después de la II Guerra Mundial: ONU/FMI/BM/OMC y en nuestra Región OEA.

El Sistema Mundo idílicamente Multipolar en el mundo de la Real Politik es un Mundo: Tripartito: China – EEUU – Rusia.

Trump pelea con el estado profundo yanki, y la herencia de la decadencia y los conflictos que le dejo Obama: una Rusia atacada con las sanciones económicas (que no la afectaron) y una Chica agredida con proyectos económicos que nunca llegaron a consolidarse como es el caso del Tratado Transpacífico (anulado por Trump).

Ello llevó a una Alianza estratégica entre Rusia y China y trump siguiendo los consejos de Kissinger, tratar de separar los socios.

La declinación de los EEUU, no es novedad, solo los dirigentes mal informados de nuestro continentes desconocen las alertas como las del Tanque de Ideas de la globalización de los 90s: Consejo Atlántico ya decía en el 2013 que para el 2050 EEUU y sus socios del ex G7 pasaron de representar el 40% del PBI mundial a solo el 25%.

También el crecimiento de nuevas estructuras como: Asociación de Cooperación de Shanghai; el Foro de Vladivostok y la Unión Económica Euroasiática con su Club Astana.

Y para cerrar en esta última reunión de Davos, el Secretario de Estado de EEUU Mike Pompeo, dio una lapidaria exposición contra todo lo que representó davos para el mundo neoliberal, dándole un certificado de defunción

AUDIO: