EEUU está desesperado. Quiere frenar a como sea la finalización del gasoducto Nord Stream 2 con la única finalidad de imponer su dictadura comercial y vender su gas licuado a Europa. El secretario de Estado, Anthony Blinken, se reunió con su par alemán, Heiko Maas, quemando sus últimos cartuchos para hacer naufragar el proyecto. Entrevista realizada a Carlos Albertos Pereyra Mele Director de Dossier Geopolitico El equipo del programa de Radio sputnik Internacional, está integrado por Javier Benítez, Víctor Sújov, Karen Méndez y Víctor Ternovsky.
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Violación múltiple
EEUU, que grita a los cuatro vientos que Rusia y China no respetan las reglas internacionales– todo sin presentar pruebas–, vuelve a ejercer sus constantes violaciones: con sus amenazas a Alemania y a todos los empresarios que participan del proyecto, viola la soberanía de un país, y las reglas del libre mercado que tanto defiende. De paso, con el gas licuado que quiere venderle a Europa –objetivo final de intentar frenar el Nord Stream 2– viola la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, ya que obtiene ese gas mediante el fracking.Así, los sueños de EEUU de ejercer su dictadura comercial en Europa están ahogándose en el mar Báltico y el tamaño de la pena de Washington supera largamente esos 1200 kilómetros de tendido submarino. Al ver sus manotazos de ahogado, Alemania mira hacia otro lado.
El G7 y los derechos humanos
Los comunicados que emite el G7 luego de las reuniones que mantienen autoridades de sus países miembro, hace rato que tienen más de literatura fantástica, que de anclaje a la realidad. Así, tras el cónclave ministerial de Londres, no resulta extraño que esta logia vuelva a llamar a Rusia y China a respetar los derechos humanos, o que el secretario de Estado, Anthony Blinken, diga que EEUU y sus aliados seguirán presionando al Gobierno venezolano para que el país vuelva a la democracia, mientras ciudadanos de Colombia están sufriendo una brutal represión en las manifestaciones, y donde decenas de personas han perdido la vida. Los llamados ‘líderes occidentales’ no se atreven a tanto, y su main stream tampoco.
En esta suerte de derechos humanos a la carta, el G7, es decir, EEUU, decide quién viola los derechos humanos, quién no, y el resto de la comparsa a callar y a asentir.»El tema de los derechos humanos ha sido una herramienta administrada por los poderes occidentales discrecionalmente. Fundamentalmente por medio de las ONGs, que han sido financiadas por grandes grupos económicos, que han tenido origen y sede en los principales países europeos y en Norteamérica, y de allí se ha utilizado esa vara de los derechos humanos para castigar y favorecer a ciertos elementos que le son afines a sus políticas internacionales», advierte al respecto el director de Dossier Geopolítico, Carlos Pereyra Mele.
Hambre en el mundo: aumenta por la pandemia
Crisis alimentaria. Hambruna. De acuerdo a un informe con datos de más de una docena de agencias, unos 155 millones de personas en 55 países se han visto afectadas por estos problemas. Actualmente en Latinoamérica, un tercio de su población vive en pobreza extrema al subsistir con apenas 1,90 dólares por día.
«Lo que vemos aquí es una situación extremadamente dura, porque se ha combinado las restricciones de movilidad y las restricciones a la actividad económica que han representado la pandemia, con la emergencia o la expansión de la enfermedad, y con toda una serie de crisis interdependientes que estaban también desplegándose en el conjunto del sistema mundial desde hace décadas», expresa al respecto el economista José Luis Carretero Miramar.El equipo del programa está integrado por Javier Benítez, Víctor Sújov, Karen Méndez y Víctor Ternovsky.
Fuente: https://mundo.sputniknews.com/20210506/eeuu-esteril-quema-sus-ultimos-cartuchos-para-frenar-el-nord-stream-2-1111940237.html
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